2024-EL CAMBIO CLIMATICO Y SUS EFECTOS EN EL PERÚ Y EL MUNDO.pdf
10 mentiras con las que siempre engañan a los diseñadores gráficos por John Dani
1.
2. Una de las profesiones más gratificantes y satisfactorias es la del diseño gráfico.
El trabajo consiste en pasar el día creando, diagramando, transformando, combinando,
mezclando, dibujando, en fin, llevando al papel o a la web todas tus ideas y sobre
todo las de los clientes. Mmm… ¿Clientes dije? Si, los clientes. Porque desgraciada
o afortunadamente no diseñamos para nosotros mismos todo el tiempo, lo hacemos
principalmente para nuestros clientes.
Y la verdad es que no es igual en ambos casos. Cuando creamos cualquier forma
de arte para nosotros, no nos presionamos, no nos limitamos, no nos pedimos
firmar contratos, de hecho, ni siquiera nos pagamos.
Por eso es que tratar con el cliente es algo bien diferente y por cierto no muy fácil.
Y si estás en este negocio entre otras cosas para hacer algo de dinero,
indiscutiblemente debes lidiar con los clientes. De hecho, el éxito aquí es saber
cómo tratar con ellos. Son la sangre del negocio, la parte más importante y delicada.
Sin embargo, no todos los clientes son iguales. Hay personas que son muy buenos
clientes. Saben lo que quieren, cómo y cuando lo quieren. Están dispuestos a pagar
por la calidad del trabajo y muestran una actitud de cooperación.
Otros por el contrario, son personas con intenciones de aprovecharse, de sacar
ventaja, o simplemente de engañar. Comerciantes que quieren usar técnicas de
moralidad dudosa para conseguir tu talento de forma barata, o incluso gratis.
Personas que no les importas en lo más mínimo, que no tendrán consideración por
tu talento ni por tu persona. En este e-book encontrarás una recopilación de las 10
mentiras más comunes que te dirán estas personas para lograr sus objetivos.
Estúdialas, toma conciencia, abre los ojos y sigue hacia delante.
2
3. Ningún profesional o negociante regala su trabajo, su tiempo o su
mercancía con la esperanza de ganar o "empatar" después con otro
trabajo. ¿Te imaginas que diría un plomero si le dices "ven a instalar
este baño gratis y la próxima vez te pago bien cuando necesitemos otro
baño"? Probablemente se ría en tu cara.
Sin embargo, hay ocasiones en las que es conveniente ofrecerse de
voluntario para ciertos tipos de trabajo. Por ejemplo, si estás iniciando
en la carrera de diseñador, y no tienes ningún trabajo comercial para
mostrar en tu portafolio, es una excelente idea hacer diseños a muy bajo
costo (o gratis) a instituciones sin fines de lucro, iglesias, movimientos
sociales, e instituciones con fines educativos. Estos diseños te ayudarán
a crear un portafolio con trabajos REALES y obtienes el beneficio de
que esas mismas instituciones te podrán recomendar para sus clientes o
contratarte para otros proyectos de muy buena remuneración.
3
4. Esto es una clara señal de que el cliente no confía en ti o en la calidad
de tu trabajo. Prácticamente todas las profesiones requieren un depósito
inicial o pago incremental durante cualquier proyecto, por más pequeño
que este sea. También un pago inicial compromete tanto al cliente como
a ti a tomar el proyecto con la seriedad que amerita, he visto casos en
los que el cliente, al no comprometerse, descarta la labor realizada por
el diseñador sin importarle los gastos que éste haya hecho.
Ahora bien, después de haber establecido una buena relación de trabajo,
puedes hacer ciertos arreglos con tu cliente y darle facilidades de pago.
Pero nunca un nuevo cliente puede pretender ponerte a trabajar sin la
garantía de un pago inicial. Esto es muy riesgoso, porque puedes invertir
tu tiempo, tu dinero, tu talento y todos tus recursos y repentinamente el
cliente decide no tomar tu trabajo y no pagarte un solo centavo.
4
5. Falso. Volvemos al ejemplo del plomero. Si le dices "instala este baño
y cuando mis amigos lo vean obtendrás miles de pedidos". Nuestro amigo
plomero diría "¿Significa que si hago un buen trabajo tengo que regalártelo
para darme a conocer?". También existe el riesgo de que el cliente le
diga a todo el mundo, burlándose, de que obtuvo un gran trabajo
completamente gratis. Así que las referencias que te lleguen de ese
cliente, probablemente también quieran tu trabajo gratis, o a muy bajo
precio.
Por eso recuerda solamente hacer este tipo de acuerdos con instituciones
benéficas o iglesias, principalmente cuando estés comenzando. Luego
que estableces una reputación, debes limitar este tipo de acuerdos.
5
6. Puedes estar seguro que después de 20 minutos de haber salido de la
oficina, tu "cliente" estará llamando a otros diseñadores, ahora con
conceptos e ideas en mano, preguntando por precios. Cuando llamas
después, te informarán que tus precios eran muy altos y que otra firma
de diseño (o diseñador) estará haciendo el trabajo. Por supuesto que ellos
harán el trabajo más barato, pues NO TUVIERON QUE HACER LOS
CONCEPTOS, ni diagramas, ni propuestas, ni bocetos. Ya tienen la idea
que tú les regalaste, y no recibirás ni las gracias.
Así que nunca dejes nada concreto en las manos del cliente hasta que no
tengas negociado un acuerdo definido claramente.
6
7. Estos casos ocurren con más frecuencia de lo que uno desearía. Por miles
de factores, un proyecto se puede ver estancado, ya sea que el cliente no
consigue la información, se le acabó el presupuesto, está indeciso…etc.
Lo más recomendable en estos casos es simplemente presentar una factura
por el trabajo que se haya hecho hasta ese momento. Es una solución
justa para las dos partes. Cuando el cliente continúe el proyecto, solo
cobraras la parte restante.
De no hacerlo de esta forma, corres el riesgo de que asignen a otra
persona, o lo peor, que ni siquiera te recuerden a ti ni al proyecto después
de un tiempo.
7
8. Si, claro que lo son, hasta que algo sale mal o surge algún mal entendido,
entonces él es el serio ejecutivo y tú eres otro tonto diseñador. Por esto
es vital el uso de contratos, si asegurar tu pago es importante para ti.
En cualquier tipo de negocios o industria, las relaciones de trabajo se
definen con contratos legales, facturas y otros documentos. Así que tú
no eres la excepción a esta regla.
8
9. Si tu diseño va a ser impreso, y la impresión no es tu responsabilidad,
no tienes que esperar hasta que éste se imprima. Cuando entregues tu
diseño y este sea aprobado, inmediatamente cóbralo. Hay factores que
no están a tu control cuando tu diseño pasa por algún proceso fuera de
tu responsabilidad. Si algo pasa, el cliente puede argumentar que va a
reducir tu pago, o no pagarte, porque tuvo que corregir o cambiar durante
el proceso.
No vale la pena pasar por este riesgo innecesario. Desde que aprueben
tu diseño, hazle llegar tu factura al cliente. Tu trabajo está listo, y si hay
que hacer algún cambio necesario, adelante, hazlo, pero no esperes hasta
que el trabajo se imprima para cobrarlo.
9
10. Esto es totalmente irrelevante. Si el "último diseñador" hubiese sido tan
bueno, no estarían buscando otro. La cantidad que otra persona haya
cobrado no significa nada para ti. Las personas que cobran muy poco
para conseguir más clientes o para conseguirlos más rápidos, generalmente
se auto-destruyen financieramente, o tienen que cambiar de ocupación.
Así que cuando presentes tu precio, olvídate de cuanto haya cobrado la
persona anterior. Tus precios te ayudan a mantenerte en el mercado y a
ofrecer un buen servicio. No lo varíes por lo que otro cobre.
10
11. Es sorprendente que este mismo cliente se compra un carro nuevo y no
sabe exactamente cuánto va a gastar, pero sí quiere hacerlo con tu trabajo.
En estos casos hay que estar concientes de que cierta cantidad de dinero,
significa cierta cantidad de trabajo. Si vas a tomar el proyecto de todos
modos, debes aclararle al cliente que vas a hacer menos trabajo del que
tenias estimado al principio, debido a su limitado presupuesto.
Aún así, debes siempre entregar un trabajo de calidad, ajustado a las
posibilidades económicas de tu cliente.
11
12. Si, muy simple, excepto cuando el dinero llega. Puedes estar seguro que
estarás en lo último de la lista de espera para los pagos. Siempre tendrán
otros pagos que hacer mas urgentes que el tuyo.
Cuando una compañía llega al punto de admitir que tiene problemas
financieros, generalmente está peor de lo que admite. Como tu no eres
un banco, ni un contador, no estas en capacidad de revisar sus estados
financieros o de confirmar su situación real. Por lo tanto, una vez que
les entregas el trabajo, no tienes ninguna garantía de recibir el pago.
Aunque tengas nobles intenciones, y te mueva a compasión la situación,
debes estar claro en que es casi seguro que no cobres ese proyecto durante
un buen tiempo. Y ya que vas a tener que esperar, puedes cobrar algo
extra por este concepto, es totalmente legal y aceptable, lo hacen los
bancos y otras entidades de financiamiento.
12
13. Esta lista no está hecha para que te pongas intransigente ni paranoico,
está escrita para inyectar realidad dentro de la fantasía de un mundo
llamado diseño gráfico.
En el mundo comercial del diseño, tratarás con personas que no son
como tú. Sus motivaciones son orientadas al dinero (para sí mismos) y
sus actitudes a veces un poco ásperas o muy exigentes.
Demasiadas veces se han visto casos en los que un diseñador bien
intencionado termina desencantado o herido por haberse tomado de
forma muy personal un proyecto o haberse emocionado demasiado con
alguna idea, concepto o diseño, y ser rechazado.
La dura verdad es que a la hora de tomar el diseño desde una perspectiva
comercial, ser alguien altamente creativo y talentoso ocupa solamente
el 30% del proyecto total. Lo demás es saber venderse, manejar bien los
proyectos, darle feliz culminación y ganarse la confianza del cliente para
futuros proyectos. Por sorprendente que te parezca, hay diseñadores que
saben todos estos elementos y tienen muy poco talento en realidad, pero
consiguen una mayor cantidad de proyectos que aquéllos altamente
talentosos y creativos pero que carecen de estas habilidades comerciales.
Ahora no te parecerá extraño si te recomiendo leer libros sobre ventas,
manejo de proyectos, imagen profesional y cómo hablar en público.
13
14. Todas estas habilidades son indispensables para mercadear, manejar y
presentar tu creatividad y talento como diseñador y poder ganar dinero
de forma constante en tu carrera.
Si elegiste el diseño huyéndole a todo lo antes mencionado, te aseguro
que será inútil evitarlas. Para avanzar como seres humanos, una de las
mejores decisiones que podemos tomar es enfrentarnos a las cosas que
nos desagradan, superarlas, y convertirlas en algo provechoso para
nuestras vidas.
14