El documento describe la fuga de cerebros que afecta a América Latina, donde casi 6 de cada 10 empleados mexicanos, la mitad de los colombianos y dos quintos de los brasileños y peruanos están dispuestos a emigrar en busca de mejores oportunidades laborales. También habla sobre un científico uruguayo llamado Mauro Costa-Mattioli que descubrió dos sustancias que mejoran la memoria mientras trabajaba en Estados Unidos, y sobre los esfuerzos del gobierno uruguayo para

1. FUGA DE CEREBROS.
AMÉRICA LATINA, EL MAS AFECTADO:
no es de extrañar que los resultados indiquen que América central y del sur sean los mas afectados
dentro de los marcados evaluados. Casi 6de 10 empleados mexicanos(57%), la mitad de la fuerza
laboral de Colombia (52%) y de dos quintos de los empleados en Brasil y Perú (4 y 38 %
respectivamente)están preparados para ir mas allá de las fronteras en busca de mejoras en sus
carreras. Pero la tendencia esta lejos de ser limitada a los mercados en desarrollo. Otros mercados se
ubican entre los 17 países encuestados acerca de su deseo de emigrar
a otros países en busca de mejoras laborales incluyen:Turquía en tercer lugar con el 46%, Hungría
en séptimo lugar con el 33%, seguido de Rusia 21 % y compartiendo en el noveno lugar
:Portugal y Reino unido con el 27%cada uno.
Incluso estados unidos y Canadá, países tradicionalmente estereotipados por su relativo desinterés
de vivir en el exterior, presentan un quinto de sus trabajadores afirmando que están dispuestos a
emigrar a otros países en busca de mejores empleos, con el 21% y 20 % respectivamente.
Así como los países necesitan protegerse de la fuga de cerebros a través de las fronteras, existe una
advertencia para las empresas también, ya que uno de cada 4 empleados tiene la intención de
abandonar a su empleador en los próximos 12 meses.
De ellos,uno de tres ya se encuentra en la búsqueda activa de otro empleo(35%) y uno de cinco
(18%) busca cambiar en los próximos seis meses. Solo un 8% de los empleados desea esperara
hasta que la economía sea mas segura.
Las situaciones son particularmente preocupante para Colombia y EE.UU, en donde al rededor de la
mitad de sus trabajadores (55%) se encuentra buscando activamente cambiar de empleo. Del otro
lado de la escala, Brasil y Bélgica se enfrentan a un clima mas estable de retención laboral,con un
solo 15% de los empleados en la búsqueda activa de un nuevo empleo(55% y 47%
respectivamente).
EL MERCADO LABORAL GLOBALIZADO Y FLUIDO DE HOY EN DIA:
“Los resultados señalan lo globalizado y fluido que se ah vuelto el mercado laboral en muchos
países”.La verdad es que para muchos empleados mudarse de país no es mas desalentador que
cambiar de empresa. Las empresas que se encuentran en proceso de selección y retención del
personal deben competir no solo con rivales en su propio mercado si no también en el resto del
mundo.
La investigación también revela que los empleados y organizaciones multinacionales son los que
buscan en mayor proporción en otros horizontes. Esto nos sugiere que permitirle al empleado
migrar al exterior puede no solo resultar un incentivo, sino también una herramienta valiosa de
retención.
“FUGA DE CEREBROS” QUE SUFRE URUGUAY:
Un objeto es reducir la “fuga de cerebros” que sufre Uruguay, ofreciendo a jóvenes científicos o
empresarios una oferta para demostrar su talento sin irse del país. Además de atraer a científicos que
trabajan afuera, en lo que hay logros y se espera que hayan mas. Si bien se desconoce cuantos
científicos es posible retener y cuantos recuperar, se a adelantado en las noticias que se sabrán a fin
de año y que están llegando técnicos desde países como Argentina y Chile.
Uno de cada cuatro Uruguayos esta devuelta en su país: según la encuesta Nacional de Hogares
ampliada del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de 2006, los migrantes de retorno constituyen
el 3,7% del total de la población Urugaya, es decir unas 122.000 personas. En 1996, los emigrantes
charrúas eran el 14 % de la población recordó el politólogo Martín Koalas. “Podemos decir que ha
retornado uno de cada cuatro ciudadanos que se habían ido, y no es poca caso”, dijo.
MAURO COSTA-MATTIOLI, (CIENTIFICO URUGUAYO)
Radicado en EE.UU, descubrió dos pruebas que aumentan la memoria. La sustancia se basa en una
proteína que suele faltar en personas con enfermedades como el Alzheimer. Dio resultado entre

2. animales.
Mauro Costa M. Nació en Tala, departamento de Canelones. Cuando llego el momento de comenzar
facultad viajo a Montevideo a estudiar en la facultad de Ciencias. En segundo año conoció a Juan
Cristina, (hoy decano de la facultad) y se ofreció para trabajar en sus laboratorios.
Cristina acepto y unos años después le aconsejo que se presentara a una beca para estudiar en la
Universidad de Nantes (Francia). En tierras galas conoció a un científico Argentino y, a traves suyo,
a investigadores de la Universidad McGill en Canadá.
Antes de cruzar el océano paso por Uruguay, volvió a su pueblo, se caso y entonces si comenzó una
nueva vida en América del Norte. La aventura dio sus frutos cuando, en 2007, en New York Times y
los principales diarios del mundo dieron cuenta del “Interruptor de la memoria”, la molécula que la
detiene o activa. Costas Mattioli era el autor principal.
El periplo del científico uruguayo continuo y lo llevo al Baylor College of Medicine, centro medico
de referencia en Texas, Estados Unidos. Allí, con 37 años, trabaja hoy como profesores asitente del
departamento de Neuro Ciencias.
Experto en temas vinculados con la memoria, sus trabajos hacen poco en procesos microscópicos
desencadenados en el cerebro. En este campo se enmarca su nuevo hallazgo.
Memoria: Una de las claves de que un hecho puntual se vuelva un recuerdo permanente esta en la
solides de las conexiones dentro y entre las neuronas. Desde hace 50 años se sabe que existen
proteínas involucradas en este proceso, pero poco mas se sabia de ellas.
El trabajo de Costas Mattioli aporto en esta linea.
El científico hallo la función de una proteína concreta, la “mEORC2”, y fue un paso mas allá:
Diseño dos drogas que lograron aumentar la memoria en animales sanos y enfermos.
“La memoria consiste en guardad recuerdos por mucho tiempo” es como si yo juntara mis dos
dedos índices. Mi pregunta fue cómo hacer para que esa conexión no se rompa”, ilustro Costa
Mattioli en dialogo con El País.
Si hacemos un paralelismo con las manos, dijo el científico, la forma en que los dedos no se separen
es que hayan músculos y fibras fuertes. “En la cabeza no hay fibras musculares pero si hay otras
formadas por otras moléculas que se llaman Actina”, agregó.
Cuando el desgaste del envejecimiento, el alcohol, las drogas o las enfermedades mentales “tiran”
de esas fibras, si su estructura es fuerte, las conexiones entre las neuronas perduran y los recuerdos
permanecen a lo largo del tiempo.