Este documento describe la cirugía espiritual que Dios realiza en el corazón humano. Explica que Dios examina el corazón para diagnosticar las raíces de amargura, odio y rencor. Luego, usa su Palabra como un bisturí para cortar esquemas mentales dañinos y sanar el corazón, dando frutos de paz, gozo y equilibrio. El proceso implica reconocer los problemas del corazón, arrepentirse y entregar la vida a Dios para recibir su transformación.
1. LA CIRUGIA AL CORAZON
Por Alexander Dorado
Cuál es la realidad en su corazón, así es el. Proverbios 23:7
La gente del mundo, dice: “por los zapatos, conoces el carácter de un
hombre”, puede que haya algo de verdad en eso, pero la única manera de
conocer a un hombre, es por lo que hay en su corazón.
Si una persona ha abrigado amargura en su corazón, ¿cómo es esa persona?
Amargada. Muchos han tenido experiencias desafortunadas, que han dejado
un corazón roto. Si una persona tiene el corazón arrugado, y esas arrugas
traspasan su piel.
Cuando era pequeño, en varias ocasiones, mi abuela que gozaba de una
excelente puntería me descalabró; afortunadamente, ese dolor, nunca bajó a
mi corazón, de lo contrario, habría abrigado hacia mi abuela, sentimientos de
odio y rencor.
Cuando uno permite, que en el corazón se anide la amargura, si uno convietrte
en el corazón en un nido, donde se empolla el odio y el rencor, el corazón se
va endurecer; y en caso de romperse, solo destilará odio y amargura.
Muchos convierten su corazón en un baúl de recuerdos, y se hacen daño. No
solo guardan sus recuerdos, sino que los están revisando o repasando. Hay
dos causas de una vida amargada: vivir del pasado y alimentar los recuerdos
amargos.
Dame hijo mío tu corazón. Proverbios 23:26
La única demanda que nos hace Dios es que le entreguemos el corazón, para
traer sanidad y medicina. El limpia, sana, libera y restaura. El nos da un
nuevo corazón; cambia ese corazón de piedra y nos da un corazón de carne.
De eso se trata la cirugía del corazón.
Por los frutos los conoceréis. Mateo 7
¿Cuáles son esos frutos?
Mi vida. Vengo de una vana manera de vivir, y el me lleva a una vida
de equilibrio.
Mi familia. Hay padres que sus hijos ni siquiera quieren saber de ellos.
Mi negocio
Mi ministerio
2. El árbol malo, por mucho que se esfuerce, no puede dar buenos frutos. Esa es
su condición, su naturaleza. ¿Cómo se identifica la condición del corazón? Por
los frutos.
Quien tiene problemas con todo el mundo
Quien se la pasa endeudado, desempleado
Quien las cosas no se le dan
La palabra de Dios es viva y eficaz. Hebreos 4:12
El Señor usa su palabra, cual bisturí de su amor, para intervenir nuestra vida;
para operar una cirugía en nuestro corazón. La palabra de Dios es viva, eficaz,
y no vuelve a él vacía; sino que es prosperada en todo aquello para lo cual ha
sido enviada. La teoterapia es de adentro hacia afuera.
El corta y rompe:
Esquemas mentales, paradigmas
Recuerdos, imágenes mentales
Raíces de amargura
Ataduras
Nos lleva a discernir los pensamientos y las intenciones del corazón.
El hacha está puesta en la raíz. Mateo 3:10
No consiste en cortar solo el árbol por el tallo, sino por la raíz. El médico del
alma, el terapista divino, no ataca los síntomas, sino que va a la causa raíz, a
lo que origina el problema. “Como está las raíces, asin están las ramas.”
Examíname, oh Dios, conoce mi corazón. Salmo 139:23-24
Todo tratamiento comienza con un examen, con un diagnostico. Debemos
estar dispuestos a que Dios nos examine. Lo maravilloso, es que en la
intimidad con él, y por la acción sobrenatural de su Espíritu, el nos muestra la
causa del problema. Lo que causó la raíz de amargura
Nos lleva al momento en el cual, alguien sembró en el corazón una semilla de
discordia. (dis=dividir; cardios=corazón) Alguien que partió nuestra confianza.
Dios no opera sin involucrarnos, el nos hace parte activa, porque es necesario
que seamos conscientes, tanto del problema como de la solución.
Hay personas que no son conscientes de sus actos, y hay que entrarlos en
consciencia, “concientizarlos.” Si una persona no reconoce sus errores o
3. pecados, como sale de ellos; como se arrepiente y renuncia a seguir haciendo
lo mismo.
La condición del corazón, influye en la salud mental y física:
El corazón alegre hermosea el rostro; mas por el dolor del corazón el
espíritu se abate. (Proverbios 15:13)
El corazón alegre constituye buen remedio; Mas el espíritu triste
seca los huesos. (Proverbios 17:22)
Proceso hacia la sanidad del corazón
1. Reconocer que estamos enfermos, que necesitamos ayuda
2. Identifica la causa del problema,
3. Dimensionar el daño hacia sí mismo, o hacia otros
4. Comprender las consecuencias de seguir así (situaciones destructivas, y
en algunos casos, irreparables)
5. Estar dispuesto a recibir la teoterapia, a recibir la consejería.
6. Entregar la vida al Señor
7. Disponerse y animarse con el cambio de vida
Una parte fundamental del proceso, es la confesión, limpieza, arrepentimiento
y perdón. Estar dispuestos a pedir perdón, y si es necesario, restituir o
reparar el daño causado; aborrecer el mal y seguir el bien.
Quítense de vosotros toda ira. Efesios 4:12
El proceso implica, acciones específicas; hay que extirpar, como a un tumor,
aquellas actitudes negativas, que pueden estar siendo alimentadas por raíces
de amargura; que se originan en experiencias de dolor, que han dejado
heridas, que no han sido sanadas.
Si alguno está en Cristo, nueva criatura es. 2 Corintios 5:17
Es un proceso que toma tiempo, el cambio puede ser lento, pero siempre será
progresivo. Al Señor le tomó tres años, discipular a Simón Pedro; pero al final
se logró el objetivo, cuando este hombre se dejó moldear por el Señor y entró
en la dimensión de la vida llena y controlada por el Espíritu Santo.