1. Oviedo
Alfonso II. (El Casto).
Supo frenar los ataques musulmanes sobre
Oviedo y logró expansionarse hasta Galicia y el
Duero.
Con él se inicia este tipo de arquitectura prototipo
del prerrománico asturiano, levantó edificios que
representan el último eco de la pasada grandeza
del mundo clásico.
Instaló su corte en Oviedo.
2.
3. La corte ovetense.
La corte alfonsí se compone de una iglesia
dedicada al Salvador y a los doce
apóstoles, germen de la posterior catedral.
Situada entre el conjunto palaciego, con
su tesorum y el panteón de Santa María,
acompañada además de la iglesia de San
Tirso. Todo ello englobado dentro de una
muralla defensita.
4. Iglesia de San Salvador.
Alfonso II manda construir esta iglesia sobre la
que había levantado su padre Fruela I ( 757-768) ,
que había sido destruida por las invasiones árabes
del 794, manteniendo la misma dedicación.
Este templo fue derruido a finales del siglo XIV,
para levantar la catedral gótica.
El derribo sería progresivo, ya que en el siglo XV
todavía se conservan sus tres naves y el vestíbulo.
6. Sus dependencias se pueden relacionar con el
esquema de la villa romana de Murias de
Beloño, ya que sigue una estructura con
galerías entre torres.
A este cuerpo principal se le añadiría otro
cuerpo lateral precedido por pórtico abierto por
arcos de medio punto.
En el otro extremo se situaba la Cámara Canta,
distribuida como en la actualidad en dos
niveles, que constituía el tesoro de palacio y
albergaba las reliquias traídas de Toledo para
salvarlas del Islam. (Esta parte aunque
reformada es la única que se conserva).
8. Su construcción se atribuye a Alfonso II, se encuentra
dentro del actual recinto catedralicio.
Consta de dos plantas. En la inferior está el panteón de
Santa Leocadia y en la superior se custodiarían las
reliquias del Salvador. Las peregrinaciones al Salvador,
camino de Compostela, convertirían a este recinto en uno
de los santuarios más importantes de la cristiandad.
(En el siglo XII la parte alta sufrió ya importantes
reformas que la convertirán en una de las obras maestras
del Románico español y tiene como actual altar está el
“Arca Santa”, traída por peregrinos cristianos de Tierra
Santa).
9. La cripta constaba de dos espacios uno la nave dedicada
a los enterramientos y el otro separado por un cancel el
presbiterio con el altar rematados por una pequeña
ventana.
Es posible que la parte que queda detrás de las puertas
fuera un añadido para más enterramientos.
10. La nave se
interrumpe por
tres tumbas
excavadas en la
roca a la altura
de las dos puertas
laterales (N-S),
de las que se
conservan estas
dos laudas
decoradas con
motivos
vegetales propios
de los repertorios
de la antigüedad
clásica.
12. Mandada construir por Alfonso II como Panteón Real.
Este templo se mantuvo en pie hasta época barroca, las
excavaciones de Morales permiten diseñar su planta.
Su estructura está formada por tres naves separadas por
pilares, con cámara para los enterramientos que debían estar
separados del espacio religioso. Se remataban con tres
capillas cuadradas, la central más ancha, englobadas por un
muro de testero recto.
Define por tanto la planta modelo del prerrománico de
esquema basilical con tres naves, correspondientes a una
cabecera triple, pero encubierta al exterior por un muro
recto.
13. San Tirso.
Era la iglesia palatina del
monarca Alfonso II,
próxima a la catedral y al
palacio real.
Fue destruida por un
incendio a comienzos del
siglo XVI. Quedan como
únicos restos de arte
asturiano el lienzo oriental
de la Capilla Mayor y las
ventanas que dan a la calle
de la catedral.
14. Constaba de una
única cabecera
rectangular, en la
que se abre un
gran vano de tres
huecos divididos
por dos columnas,
a las que se
añaden las
laterales coronadas
todas por capiteles
corintios que
sujetan arcos de
medio punto de
ladrillo.
16. No se sabe la fecha exacta de su
construcción, pero fue mandada
construir entre el 812-42 en honor a
San Julián y su esposa Santa Basilisa
mártires de Antioquia, por Alfonso II.
Se encuentra en la zona Norte de
Oviedo en un núcleo de comunicación
de origen romano extramuros de la
ciudad.
Se encontraría dentro de un conjunto
áulico hoy desaparecido.
17. Su estructura tiene tres
naves, de tres tramos y
transepto inscrito en la
planta, pero
sobresaliente en altura,
y cabecera triple de
testero recto, cubierta
por bóveda de cañón.
Además, tiene dos
pórticos laterales de
acceso al transepto hoy
tapiados y otro en la
entrada principal.
18. En el interior destaca
el arco de triunfo que
separa la nave central
de transepto con un
gran vano central y
dos huecos laterales a
modo de ventanales.
La nave central y el
transepto están
iluminadas por
amplias ventanas
rectangulares
cubiertas por celosías.
19. Sobre la cabecera se levanta la cámara supra-absidial,
incomunicada con un ventanal de tres vanos al exterior,
configurados con arquitos dispuestos sobre columnas.
Las tres naves están separadas por arcos de medios punto
de ladrillo, que se apoyan en pilares de sección cuadrada.
La decoración escultórica se reduce a ocho capiteles de
orden corintio reutilizados, seguramente de época visigoda,
labrados en mármol, de los que se desconoce su
procedencia, pero se relacionan con ejemplos leoneses y a
las pilastras del ábside mayor.
20. Se tratan de dos pilastras
gemelas de mármol, que
también son piezas
reutilizadas.
Se decoran a base de
octógonos con formas
vegetales inscritas,
entrelazados unos con
otros. Mientras la parte
superior reproduciría la
decoración de hojas de
un capitel.
21. Ramiro I
• Con Ramiro I se crea un segundo entorno
regio en el monte Naranco.
• Se inician algunas novedades
arquitectónicas como el abovedamiento de
todos los espacios principales creando un
sistema basado en elementos activos y
pasivos. Pero teniendo en cuenta también
las proporciones.
23. Se levantó como parte de un complejo arquitectónico construido
como residencia real para los periodos de descanso en un zona
de caza. Está en la ladera del monte Naranco a unos 3 Km de la
ciudad.
Se cree que en este entorno posiblemente existieran también
asentamientos romanos ( se encontró una estela de era época en
esta zona).
Nos encontraríamos con un conjunto suburbano regio del que
sólo se conserva este palacio de recreo y la iglesia palatina hoy
San Miguel de Lillo.
Construido originariamente con una función civil seguramente
era el aula regia o salón real, el lugar donde se realizaban
diversas actividades de gobierno.
24. Será convertida en el siglo XII en iglesia y puesta entonces bajo la
advocación de Santa María, que era la que tenía originalmente la
iglesia de San Miguel.
Esta confusión fue debida a la inscripción incisa en el ara que hoy
en día se ubica en el mirador oriental del palacio ( una replica la
original está en el museo arqueológico ) y que procedía de la
iglesia de Lillo y que fue trasladada cuando este templo sufrió la
ruina en fechas próximas al siglo XII, pasando con ella también las
funciones eclesiásticas.
Será Luis Menéndez Pidal en el primera mitad del siglo XX, el
encargado de devolverle su estado original derribando la casa
sacerdotal anexa y la sacristía barroca y la escalera central de la
fachada norte, además de la espadaña campanario.
25. El ara también nos
proporciona la fecha
de consagración de la
iglesia el 848
atribuible por tanto
también al palacio al
formar parte del
mismo complejo
constructivo.
26. El palacio tiene una planta rectangular de unos 20 metros de
largo por 6 metros de ancho.
Se compone de dos pisos:
El inferior configurado a modo de cripta, es un
espacio rectangular de escasa altura, cubierto por bóveda
con arcos fajones y flanqueado por dos cámara laterales,
El piso superior dividido en tres espacios, un cuerpo
central y dos miradores, ( teniendo los espacios las mismas
dimensiones que los de la parte baja).
Al piso superior se accede por una escalera exterior de dos
tiros situada en la fachada norte.
27.
28. Las tres estancias de la parte baja se escalonan con un
cierto desnivel y aparecen ceñidas al exterior por un
zócalo, del que arrancan los contrafuertes y todo el
conjunto sirve como basamento a la parte alta.
El cuerpo central con su puerta de acceso es un espacio
abovedado reforzado con arcos fajones y que da paso a
una de las salas laterales mientras a la otra se accede desde
el exterior. Las dos se abren con tres ventanas arqueadas
en el frente y una en cada lateral.
Este espacio se relacionó con una sala de baños al
encontrarse en los año 80 restos de una canalizaciones de
cerámica, pero lo cierto es que estás solo demuestran que
sirven para desaguar pero no hay pruebas de una entrada o
abastecimiento de agua y tampoco se pueden relacionar
con el tipo de baños conocidos en épocas anteriores.
29.
30. En el piso alto el cuerpo central
se cubre con una bóveda de
piedra toba reforzada por arcos
fajones a la ves que los muros
laterales también se decoran con
arquerías ciegas en las que se
abre algún vano.
Dicha arquería también sirve
para dar acceso a los dos
miradores que se abren con arcos
de medio punto en todos sus
lados apoyados en columnas
sogueadas.
31. Encima de los
miradores aparece la
ventana trifora típica
de las iglesia
prerrománicas, que
aquí podría servir para
mantener las
proporciones y el
orden simétrico al
repetir los tres huecos
del piso central y del
inferior.
32. Decoración escultórica.
Destacan los capiteles cúbico prismáticos, enmarcados en
caras trapezoidales por un sogueado y que acogen figuras
de animales y siluetas de personajes.
Además de los de tradición corintia de los miradores
seguramente algunos reutilizados.
33. En las enjutas de las
arquerías aparecen
clípeos, espacios
circulares a modo de
cenefa con
decoraciones vegetales
y que suelen contener
representaciones
animalísticas
fantásticas. De ellos
salen bandas
historiadas, en los que
destacan personajes
bajo arquerías o cruces
y X como
representaciones de
Cristo.
35. Sabemos que existía un templo
anterior que Ramiro II ordena
restaurar y consagra como
demostraba el ara en el 848.
Ha llegado a nuestros días
profundamente alterado,
quedando solamente un tercio
del original, conservando el
cuerpo occidental ( un nártex
tripartito) y el primer tramo de
las tres naves (la central más
alta) , al que se le incorpora un
ábside rectangular que no
guarda relación con la fábrica
prerrománica original.
36. Sobre en
vestíbulo se eleva
una gran tribuna
de piedra a la que
se accede por
doble escalera
simétrica alojada
en sendas
cámaras situadas
en los extremos
del nártex.
Sobre en vestíbulo se eleva una gran tribuna
de piedra a la que se accede por doble
escalera simétrica alojada en sendas cámaras
situadas en los extremos del nártex.
37. El tramo de naves destaca por
su considerable altura, 1o
metros en el cuerpo central. Se
configura a través de arcadas
sobre columnas de gran altura,
dispuestas sobre una basas
historiadas y culminadas por
capiteles de tradición
bizantina.
Esta excesiva altura es la que
debió causar el derrumbe del
edificio. A pesar de que las
bóvedas de las naves laterales
a 8 metros de altura y
dispuestas en sentido contrario
servían de contrarresto de los
38. La escultura.
Destacan las jambas simétricas del
arco de ingreso al vestíbulo, son
piedras monolíticas de
considerable anchura.
Reproduce la escena de un cónsul
viendo una escena circense que
generalmente patrocinaba para
celebrar su nombramiento.
Realiza a través del relieve de tres
escenas enmarcados por cenefas de
decoración vegetal y floral,
además del sogueado que enmarca
las escenas.
39.
40. Las basas representan una arquitectura figurada a través de una
arquerías sogueadas, con cabezas a modo de medallones en las
enjutas, bajo las que se representa a los evangelistas, y sus
representaciones simbólicas, aludiendo a las sagradas
escrituras como base fundamental de la iglesia.
41. Las celosías se convierten en
ventanas divididas por columnas con
un cuerpo superior calado con
motivos florales.
42. Alfonso III. (El Magno).
Con este monarca, el reino supera el marco
geográfico asturiano. Se traspasa la línea del
Duero, se ocupa Zamora y se llega, incluso a
Lisboa.
Aumentan los contactos con el mundo mozárabe y
esto repercute en el trabajo artístico, como la
presencia de arcos de herradura.
Con él se cierra la historia del reino astur al trasladar
sus hijos la capital a León.
43. Foncalada.
Datada a fines del siglo IX,
constituye un importantísimo
elemento urbanístico
altomedieval.
Servía para recoger el agua de
un manantial. Tiene una planta
cuadrada, con inscripciones y
una cruz con el alfa y la omega.
Tiene vínculos con los
monumentos y fuentes de aguas
romanas o helenas.
45. Su origen se relaciona con el complejo palatino de
Alfonso II, o con un posible campanario de la antigua
iglesia del Salvador.
De su primera fase se conserva un primer cuerpo de
sillarejo compacto y cerrado.
En época románica se levantan otros dos pisos, abiertos y
con función de campanario.
Su aparejo es de sillares regulares bien escuadrados, el
primer cuerpo se abre con un vano bajo guardapolvo,
prolongado con línea de imposta. El alto presenta dos
arcos por cara apoyados sobre columnas con capiteles de
origen corintio. A este se accede desde el bajo a través de
una trampilla.
El piso bajo se cubre con una bóveda de arista.
46. El cuerpo alto se
cubre con una bóveda
apuntada reforzada
por arcos que parten
del centro de cada
lado y que se apoyan
en columnas y al
exterior introducen
contrafuertes
mensulados,
decorados con
modillones de figuras
animales.
47. San Isidoro de Oviedo.
En el Oviedo antiguo,
concretamente en la plaza del
Paraguas, había hasta los años
veinte del siglo pasado, una iglesia
románica, la de San Isidoro.
Fue derruida para construir la
plaza.
La parroquia pasó a ocupar el
antiguo templo del colegio de los
jesuitas de la plaza del
Ayuntamiento y como recuerdo un
arco se repuso en el centro del
campo de San Francisco.
48. La Muralla de Oviedo.
Como importante ciudad
que era en la época,
Alfonso IX mandó
construir un recinto
amurallado en el siglo
XIII. Recorría unos 1.400
metros y se conserva en un
tramo importante en la
calle Paraíso, así como en
la calle Argüelles, en el
entorno de la Librería
Ojanguren y en algunos
puntos del Postigo.
49. Cámara santa.
Si bien la planta baja es
prerrománica, hay autores
que fijan la superior como
plenamente románica, del
siglo XII, es la antigua
capilla de San Miguel,
profundamente renovada.
Se sustituye la cubierta por
una bóveda de cañón
reforzada por arcos
fajones.
50. Se remodeló el muro exterior dándole mayor
altura, apareciendo los arcos ciegos y la
decoración de los canecillos.
51. En ella se esculpieron los doce apóstoles
emparejados dos a dos, en las columnas que
soportan los arcos de la bóveda, representando
las santas conversaciones. Se apoyan sobre un
repertorio de hojas y figuras animales.
52. En los capiteles dobles se
representan escenas.
Representación de la virgen
con el niño y
San José y
la
hospitalidad
de
Abraham.
En la parte alta se representa el
descenso al infierno y una
cacería.
53. Sobre la puerta de ingreso se dispuso un calvario, con las
cabezas en relieve y el cuerpo pintado, la pintura ha
desaparecido como en el resto del recinto.
54. El Claustro Románico.
En el claustro gótico de la
catedral se conservan
algunos restos del anterior
claustro de época románica,
son piezas
descontextualizadas de
cornisas, capiteles, pilastras,
que aparecen carecer de
temática y técnica común,
por lo que su cronología es
imposible de establecer.
55. Resto de las
arquerías.
Ejemplo de
capitel con
decoración
vegetal.
57. Además aparece
un segundo
conjunto de
relieves que
presentan algunas
características
románica pero
también otras
propias del
cambio de estilo.
Se trata de seis
figuras de santos/
as.
59. Se inician las obras alrededor del 1385 avanzando con
rapidez la cabecera, formada por triple ábside.
Sin embargo, al entrar en el siglo XIV las obras se
ralentizan bastante durante 70 años hasta que de la mano de
Alonso de Palanzuela se da un importante impulso al
edificio.
En 1500 tras finalizar la estructura fundamental del templo
el cabildo decide la construcción del pórtico y las torres.
Lo resultante de tan largo proceso constructivo de esta
catedral es un edificio básicamente edificado en el siglo XV
de estilo conservador, estructurado en tres naves y capillas
laterales, largo crucero y cabecera tripartita (los absidiolos
laterales se eliminaron para construir la girola del siglo
XVII).
61. Se debió empezar a construir poco antes del 1300,
terminándose hacia el 1314, inscrita dentro de la
tradición constructiva del siglo XII. Era la sala donde se
realizaba la reunión del capítulo, pero aquí se convierte
también en un lugar de enterramientos preferentes.
Destaca por su cubierta una bóveda aquitanoespañola sin
apoyos intermedios, se traza con 8 nervios que se cruzan
en la calve central, creando las trompas que rellenan el
espacio de la planta cuadrada en las esquinas.
La bóveda se apoya directamente en los muros en los que
se abre sepulcros bajo arcosolio. En ellos aun se pueden
apreciar las armas de los Quirós y los Argüelles dos de
las familias más importantes de este momento.
62.
63.
64.
65. El Claustro.
Tiene una planta rectangular que ocupa el sector sureste
del la catedral.
Toma como modelo el claustro de la catedral de León.
Se compone de cuatro pandas desarrolladas en tres y
cuatro tramos, que se desarrollan a lo largo un extenso
periodo de tiempo iniciándose ya en un desfasado estilo
gótico.
Se empieza a ejecutar por esa sala capitular a la que dará
acceso, sustituyendo paulatinamente al claustro románico
anterior.
66.
67.
68. • El lado norte se levanta antes del 1345 y los
dos tramos del oeste dentro con un estilo
gotico clásico. Dicho lado se completa y se
realiza el sur hacia en un estilo de
manierismo gótico,ambos se terminaran
antes de finales del siglo XIV, mientras que
el tramo final ( este) se completa entre el
1412-1441 en un estilo gótico flamígero.
69.
70.
71. La
decoración
escultórica
es la que
relaciona la
obra con el
claustro de
León.
Angulo noroeste Epifanía
principios del siglo segunda mitad
XIV del siglo XIV
72.
73. La primera cabecera.
Paulatinamente se llevó a acabo la demolición de la
primitiva iglesia del Salvador, partiendo de la cabecera
y avanzando hacia los pies.
Antes incluso de iniciar la capilla mayor, el obispo que
impulsa la obra Gutiérrez de Toledo erige la capilla
para su enterramiento, justo al lado, por lo que sería
derribada al hacer la girola barroca.
La nueva iglesia se planeo con una cabecera poligonal
precedida de un tramo recto, crucero sobresaliente y
tres naves, más alta la central rodeada de capillas entre
contrafuertes.
74.
75. La incorporación de las capillas funerarias es
una fuente de canalización de una iniciativa
privada contribuyendo a la financiación de las
obras.
Originalmente estos espacios no tenían está
función sino que se cierran con posterioridad,
en la Catedral de Oviedo se constata que las
capillas entre contrafuertes ya se cierran con
rejas a partir de 1492 creando así espacios
privados para dicha función a la que acceden
miembros de la iglesia y también familias de
la nobleza de la época.
Esto explica que cada espacio sea diferente.
76.
77. En altura, la articulación es la propia del
gótico francés:
- arcadas de separación de naves ( con
arcos apuntados que recaen sobre grandes
apoyos),
- triforio ( es un cuerpo abierto a la
nave pero no al muro exterior del edificio)
- claristorio o cuerpo de ventanales,
donde se desarrollan las vidrieras góticas.
78.
79. Todo el sistema se contrarrestas en el exterior con un
cuerpo de arbotantes, sobre las naves laterales, que
desplazan los empujes a los contrafuertes.
80. A partir de la cabecera, en el lazo izquierdo del
crucero, se documenta la intervención a mediados
del siglo XV de dos maestros extranjeros, Nicolás
de Bar y Nicolás de Bruselas.
Las tracerías del triforio de este lado del crucero
adoptan diseño flamígeros.
Puede suponerse que estos introdujeron alteraciones
decorativas más acordes a la época pero aplicadas a
las estructuras constructivas trazadas a finales del
siglo anterior.
82. Esta capilla se comunica directamente con el transepto,
fue realizada igualmente por lo arquitectos flamencos
Nicolás de Bar y de Bruselas en la mitad del siglo XV.
El arco apuntado de entrada cuenta con un tímpano calado,
dividido en dos nuevos arcos apuntados bajo los que
aparecen don ángeles arrodillados portando los
instrumentos de la pasión, y un cuerpo central donde se
dispone el Salvador.
Las molduras de los arcos exteriores se recubren con
apóstoles y evangelistas, destacando las cuatro imágenes
de cuerpo entero situadas de pie de San Pedro, San Pablo,
San Andrés y Santiago.
Este tímpano se apoya en dos arcos rebajados, con un
parteluz al que se adosa la imagen de la denominada
Virgen del Pilar.
83. La Virgen del Pilar.
Está realizada en piedra
caliza, policromada y
dorada.
Se la representa de pie,
coronada y amamantando
al niño.
84. Después se hace cargo de la obra Juan de Candamo, entre el
1458-89, levantando el brazo derecho del crucero y tres
tramos del cuerpo de naves, parece que se basa en lo ejecutado
por los arquitectos anteriores confiriendo al diseño
catedralicio coherencia.
Candamo debió agradar al cabildo porque consigue de sus
miembros un enterramiento en el lado derecho del crucero.
A su muerte toma el relevo Bartolomé de Solórzano en 1492
que remata las naves en el 1498, continuando el trazado
anterior, por lo que hasta el pórtico a pesar de los años no se
cambiará la estructuración de la fábrica.
86. El maestro Badajoz también ideo el pórtico con tres
tramos abiertos al exterior mediante sus
correspondientes arcadas.
Atendiendo a la configuración estilística de las
cubiertas podríamos hablar de diferentes fases de
ejecución.
En el lado que sirve de base a la torre aparece una
doble estrella de lados rectos, lo mismo que en el
cuerpo central aunque de manera más compleja, ya que
se tiene que adaptar a un espacio rectangular, solucione
propias del primer tercio del siglo XVI.
Mientras la otra aparece un motivo cuadrifolio con
lados curvos, inscrito en la estrella, por lo que se
supone algo posterior.
90. La casa de la Rúa o casa del Marqués de Santa Cruz de
Marcenado de Oviedo es uno de los edificios civiles más
antiguos de la ciudad. Datado en el siglo XV se trata de
uno de los pocos edificios que sobrevivieron al gran
incendio de la ciudad, en la Nochebuena de 1521.
Edificada en el último cuarto del siglo XV perteneció al
contador del los Reyes católicos, Rodrigo de la Rua
En el siglo XVII pasó a manos del Marquesado de Santa
Cruz de Marcenado.
Se trata de un ejemplo claro de arquitectura de la Edad
Media, con vanos dispuestos de forma desordenada en la
fachada patio con jardín interior. El punto original del que
parte las construcción fue una torre, hoy incluida en el
edificio, del siglo XIV. En 1928 se reconstruyó parte de la
casa añadiendo un jardín interior.
92. Este claustro se construyó en el siglo XVI. Es muy probable que
el original del monasterio hubiese sido destruido por el gran
incendio que asoló la ciudad de Oviedo el año 1512.
El piso bajo es gótico-renacentista y algunos, por su semejanza
con otras de sus obras, lo atribuyen a Juan de Badajoz. Es de
planta cuadrada, con 15 metros de lado, y construido en dos
tiempos.
Está compuesto por 20 arcos de medio punto y con bóvedas de
cañón de nervios que parten de ménsulas bellamente decoradas.
Entre los arcos, aparecen gruesos contrafuertes exteriores que
rematan en pináculos, puestos tras la construcción del piso alto.
Una fuente barroca, que el Museo adquirió al Convento de San
Pelayo, se coloca en el centro del claustro.
93. En la fachada norte del patio hay dos inscripciones del antiguo
Monasterio de San Vicente. En una de ellas se lee: “Fundose
este monasterio año de Jesucristo de 761”. En la otra:
“Reedificase año de 1493 zerrose su claustro el de 1775”.
La parte superior es posterior. Fue proyectada por Juan de
Cerecedo a mitad del siglo XVII.
Ésta, de estilo plateresco y barroco, duplica el número de
arquerías que, a la vez, se reducen en tamaño. Parece que en un
principio era una galería abierta pero, dadas las inclemencias
del tiempo, se cerró con piedra en 1775, siendo decorado por
José Bernardo de la Meana.
Ambos pisos se comunican por una escalera monumental
datada en el siglo XVII.
El claustro acoge en la actualidad el Museo arqueológico del
principado de Asturias.
95. Es una fundación testamentaria del obispo Fernando
Valdés Salas, que arranca cuando sus testamentarios
recurren a Gil de Hontañón que da sus traza en 1574,
dejando la obra a cargo de Rivero Rada, que a la
muerte de Hontañón es depuesto y sustituido por
Diego Veléz, con el fin de que las obras sean más
decorativas, pero éste no es tan buen maestro y las
obras avanzan poco por lo que se recurre al anterior.
Finalmente la obra será rematada por Domingo de la
Mortera y el edificio inaugurado en 1608.
En conjunto es una obra clasicista influenciada por el
Escorial, que se configura en torno a un patio de dos
pisos sin abovedar.
96. -Galería baja: Se
compone de un
pórtico de arcos de
medio punto sobre
columnas de orden
toscano.
-Galería alta: En
ella se multiplica el
ritmo de las
columnas jonias
que soportan dintel
corrido. Está
protegido por un
petril originalmente
abierto.
97. Al exterior tiene dos
fachadas realizadas en
sallar con escasos
vanos y dos portadas de
inspiración italiana.
Gran portada
adintelada, flanqueada
por pilastras sobre
plintos, que sostiene un
arquitrabe decorado
con metopas, sobre el
que se abre un vano
rematado por frontón
flanqueado por los La parte superior de todo el
escudos. edifico es recorrido por un friso
decorado.
98. Acueducto de los Pilares.
Situado en el
barrio del
Naranco (c/
Roberto S.
Velázquez-Los
Pilares), fue
declarado
Monumento
Histórico-
Artístico en
1915.
100. Fue consagrado como templo de San Matías para el colegio de la
Compañía de Jesús de Oviedo.
El colegio de San Matías se verificó en 1570 después de
una serie de intentos de Vázquez de Prada, no prosperan las
negociaciones hasta que Magdalena de Ulloa fue la mecenas de
la obra (1582).
Las obras del Colegio fueron las primeras que se hicieron, como
colegio entendemos el claustro del convento y las dependencias.
La Compañía estuvo hasta 1768 en que le quitaron sus poderes,
vuelven después de la Restauración monárquica en 1870 pero sus
inmuebles fueron nacionalizados.
En 1788 su templo se convirtió en parroquia y su colegio en
cuartel; con el tiempo el colegio se demolió para dejar paso el
“mercado de la carne” (Fontán).
101. El templo se inicia en 1616, aunque se comienza de nuevo
el templo después de un parón de varios años a causa de la
peste. Aunque la construcción fue tortuosa, en 1681 logra
consagrarse y darse por finalizada.
La planta deriva de León Battista Alberti. Fue muy típica
llegando a ser conocida como planta jesuítica debido a que
la emplearon muchísimo.
El templo tiene una nave, con capillas, consta de con cuatro
tramos, transepto y cabecera. Tiene proyección basilical,
ya que las capillas parecen naves laterales porque se genera
continuidad en el espacio. El crucero se cierra con bóveda
baída, capilla mayor grande con dos dependencias laterales
que sirvieron de sacristía (una de ellas desde el siglo XVIII
se convirtió en capilla funeraria de los duques del Parque).
102. En la portada se supone que trabaja Francisco Menéndez
Camina.
De la mitad hacia abajo tiene un aspecto clasicista. La
puerta adintelada se cobija bajo un gran arco de medio
punto que es flanqueada por dos pares de columnas que
sostiene el entablamento.
Las obras se reanudaron a partir de aquí en 1673 eso
explica que las formas se vuelvan más sinuosas con
volutas, entre las que aparecen dos pilastras que flanquean
una hornacina que cobija al santo y placas decoradas con
metopas y jarrones, bajo la ventana del piso alto.
La torre ya del siglo XVIII es rematada por Francisco de
la Riva Ladrón de Guevara, además debería de tener dos.
104. Fue diseñado en 1622 por el arquitecto cantabro Juan de
Naveda, aunque sería Marcos Velasco el que lo remataría
a partir de 1659, siguiendo el proyecto.
Se disponía fuera del recinto amurallado siendo la nueva
fachada de la ciudad, estaba destinado a presidir e
impulsar la ampliación barroca junto con la iglesia de San
Isidoro entorno a una nueva plaza.
El proyecto estaba condicionado por el mantenimiento de
la entrada a la ciudad a través del arco de Cimadevilla,
para lo que trazó un cuerpo central perforado con un gran
arco y dos cuerpos laterales.
105. Sobre el arco central dispuso el balcón de honor, con
tres vanos a la serliana, dintel-arco-dintel. Ambos pisos
aparecen flanqueados por fajas con un leve
rehundimiento central, las cuales sostienen el frontón
triangular. Sobre las fajas y este aparecen los emblemas
heráldicos de la ciudad y de la corona.
Los cuerpos laterales son porticados con arcos de
medio punto sobre piarles, que se adaptan al desnivel
del terreno. Casa uno se corresponde con un balcón en
el primer piso, para romper la monotonía, los tres
centrales presentan el mismo saledizo, mientras que el
resto mantiene una concepción independiente.
El resto son añadidos posteriores.
107. Fue diseñada por Ignacio de Cajigal en 1666,
quedando la obra en manos de pablo de Cubas
Ceballos, Diego González de Gajano y Juan de
Estrada. Siendo el último el responsable de su
conclusión en 1671.
Solo se conserva la fachada que actualmente
pertenece a la biblioteca pública.
En su interior además del patio de comedias
albergaba un mesón y un hospital para niños
abandonados.
Se realizó dentro del desarrollo barroco de la nueva
plaza del Fontán, que ya contaba con los edificios
del arco de los zapatos trazados en 1660 por
Marcos Velasco.
108. La fachada es un muro de aspecto plano, reticulado a
través de fajas lisas verticales y línea de imposta
horizontal, que enmarcan los vanos.
La planta baja ha de adaptarse al terreno irregular, se
abre con puertas adinteladas, decoradas con unas
leves molduras y con un vano rectangular sobre
ellas. En este piso solo destaca la puerta central por
su mayor tamaño.
Mientras que en en el primer piso se abren una serie
de balcones correspondientes a los vanos y que
carecen de voladizo y se decoran con la misma
moldura.
110. Fue construido por Gregorio de la Roza, entre 1673-75, para la
familia Malleza, pasando posteriormente a la familia de los
condes de Toreno.
De la Roza se había casado con la viuda de Cajigal heredando
arte de sus clientes.
El palacio se sitúa en un emplazamiento privilegiado, en el
interior del recinto amurallado y dispuesto hacia una plaza.
Pudo tratarse de un emplazamiento anterior reconstruido en este
momento.
Reitera la formulación habitacional en torno a un patio porticado
de planta rectangular, pero al encontrarse entre medianeras solo
pudo disponer de una fachada, pero en la zona posterior tenía un
jardín, que se pondrá de moda en las residencias nobiliarias
urbanas de la época.
111. Al interior destaca la monumentalidad del patio compuesto
por grandes comunas de orden toscano.
Mientras que al exterior la fachada resulta hoy en día de
extrañas proporciones al haber dejado a la luz parte de sus
cimientos al hacer la plaza en el siglo XX.
Se compone de sillería perfectamente escuadrada dividida
en dos pisos por línea de imposta aunque en realidad consta
de tres, puesto que el nivel inferior alberga un semisótano y
el entresuelo.
Los vanos se ordenan verticalmente componiendo calles,
saeteras abocinadas con remate de venera para el sótano,
ventanas enmarcadas por una moldura de orejas en el
entresuelo y el piso principal con balcones apoyados en la
línea de imposta de vanos decorados con molduras.
112. La portada se encuentra algo desplazada, del eje de simetría
se compone de una gran puerta dintelada flanqueada por
sendas columnas toscanas de fuste estriado, dispuestas sobre
pedestales y que sostienen un entablamento con frontón
triangular roto para acoger el balcón del piso principal.
Situado entre sendas pilastras jónicas que sujetan un
entablamento de sección convexa, a ambos lados aparecen los
escudos familiares dispuestos sobre pedestales.
Este modelo es así algo novedoso al no tener torres se aleja
de la estética defensiva de las etapas anteriores y la
configuración de elementos clásicos sin cierto orden,
incluyendo las columnas en una fachada civil avanzan ya
hacia las propuestas más barrocas alejándose del clasicismo.
113. Miranda-Valdecarzana-Heredia.
Se halla en el
lateral norte de
la plaza de
Alfonso II el
Casto, conocida
como plaza de
la Catedral.
114. Palacio muy particular porque
tiene dos fachadas separadas por
ciento veinte años en su
construcción.
El originario frente principal
estaría flanqueado por dos torres,
de las que una sola sobrevive,
aunque es probable que se quisiese
construir una fachada de tramo
central entre dos torres pero la de
la derecha no se llegó a construir.
Diego de Miranda lo había
mandado realizar entre 1627-9 y se
atribuye a Juan de Naveda y
Gonzalo Güemes Braamonte, el
diseño es bastante purista, el único
elemento decorativo es el escudo.
115. En él pasan a residir los marqueses de Heredia, José Froilán
Heredia, en el siglo XVIII, y posteriormente su sobrino
Antonio Heredia Velarde, alcalde de la ciudad, quien
proyectó, junto con el arquitecto Manuel Reguera, la
fachada que se asoma a la plaza.
Las obras se inician en 1768, el contrato de compra obliga a
mantener las tres fachadas antiguas y sus escudos.
Por lo que el resultado es un palacio configurado en torno a
un patio central con columnas toscanas y se amplía creando
una nueva en la que originalmente daba al jardín.
La cual se articula por medio de tres niveles de vanos
ordenados regularmente, ( ventanas adinteladas, balcones
con voladizo y balcones), los del piso intermedio se
convierten en balcones y se decoran con molduras donde
aparecen veneras y mascaras.
116. Llaman la
atención este
gran escudo
de armas de
los Heredia,
del que
sobresale la
figura de
Hércules
realizando
uno de sus
trabajos
matando al
león.
Durante el siglo XIX y hasta 1931 fue casino, y después,
Audiencia Territorial de Asturias.
118. A la izquierda y retranqueada, aparece la iglesia realizada entre
1592-1601, obra de Bernardo de la Cajigal y Diego de Villa.
La fachada del cenobio (1704-1709) exhibe un par de escudos de
su orden y otro pétreo con las armas reales de España.
El complejo conventual realizado en su conjunto sobre un gran
zócalo realza su hermosura con la extraordinaria fachada del
contiguo edificio de la Vicaría, del barroco asturiano, trazado por
el benedictino Pedro Martínez de Cardeña en 1703.
El edifico se compone de tres pisos realizados en piedra y al el se
accede a través de una escalera de doble tiro.
La fachada principal la constituye un frontispicio columnado, en
respuesta a un propósito nítidamente ornamental, creando una
retícula donde se abren.
119.
Tres arcos de medio punto se corresponden con tres vanos
moldurados con orejas en el primer piso y de formas más
modesta en el segundo, se remata con una peineta que
contiene el escudo bajo un frontón curvo.
Los laterales se abren con vanos y se recorren con línea
de imposta.
121. Este palacio que se localiza en la plaza el Fontán fue promovido
pro el Duque del Parque, y diseñado por Francisco de la Riva
ladrón de Guevara entre 1723-30, siguiendo ya el modelo del
palacio de Malleza.
Por lo cual es un palacio urbano carente de torres lo que le da un
carácter más apaisado, se reticula con pilastras cajeadas y línea
de imposta en dos cuerpos, aunque en realidad el inferior acoge
dos plantas, se levanta sobre un zócalo y las esquenas se decoran
con al habitual almohadillado.
La calle central más ancha tiene una portada adintelada decorada
con moldura de oreja y dos columnas que sustentan el voladizo
del balcón superior, a los lados de cuyo vanos aparecen los
escudos, entre sendas pilastras.
123. Antes de su construcción hay dos proyectos
previos el de finales del siglo XVII de Francisco
Menéndez Camina, del que no se hace nada y el
de 1720 de Francisco de la Riva Ladrón de
Guevara, del que se realizan tan solo los
cimientos.
La obra continúa con un nuevo proyecto entre
1744- 52, ejecutado por Pedro Antonio Menéndez
bajo el patrocinio de la Familia Bernardo Quirós,
que estaba remodelando todas sus edificaciones en
estos momentos.
Su arquitecto vuelve a desarrollar el modelo del
palacio de Malleza.
124. Es un gran bloque
cúbico exento con
cuatro crujías en
torno a un patios de
dos pisos que sobre
columnas de orden
toscano dispone
arcos rebajados
decreciendo hacia
las esquinas y dintel
en el piso alto
manteniendo la
misma proporción.
125. La fachada se estructura en dos pisos, auque el inferior
tiene en realidad dos plantas sobre un basamento de
distribuye el muro abierto por pequeñas ventanas
abocinadas y ventanas cuadradas decoradas con molduras.
El piso superior se retícula a base de pilastras cajeadas de
orden jónico en los que se abren balcones decorados con
una caprichosa moldura que incorpora máscaras femeninas
o masculinas.
En el tramo centran destaca la puerta adintelada decorada
con moldura de oreja, que se corresponde con el balcón
superior y sobre este se dispone un escudo que obliga a
doblar el entablamento superior.
Además las esquenas mantienen el ya habitual
almohadillado.
129. El Palacio de Velarde de Oviedo es un palacio fechado en
el año 1765 y obra del arquitecto candasino Manuel
Reguera, uno de los más destacados arquitectos asturianos
de todos los tiempos. La edificación estaba destinada a D.
Pedro Velarde, regidor de Oviedo.
Ya copia el modelo de Camposagrado de Oviedo. Es el
último palacio barroco construido íntegramente de nueva
planta en Oviedo.
De esta edificación cabe destacar sobre todo su fachada
principal a la calle Santa Ana, su espléndido jardín y su
patio interior de sección cuadrada con dos arcos por cada
lado sujetos por columnas toscanas que sustentan arcos
carpaneles. En el segundo piso se abría una galería con
barandilla de madera. Actualmente está modificada y
cubierta.
130. Tiene, además, una escalera
de estilo imperial realizada
en sillería y con grandes
óculos en los muros de su
caja, que da paso a la galería
del primer piso desde dónde
se accede al corredor que se
abre sobre el patio inferior.
131. La fachada principal se construye en sillería hacia la calle
principal y los volados mixtilíneos de los balcones se trabajan de
tal manera que puedan ser exhibidos en una vía tan estrecha de
por si. Sobre la puerta principal enmarcada por dos columnas
dóricas romanas y abierta a través de un arco rebajado se yergue
el vano adintelado con dos columnas jónicas que soportan un
entablamento rematado con frontón triangular. En el piso
superior añade el escudo familiar que puede definirse como un
ejemplo de manifestación artística abigarrada. La fachada está
divida en tres pisos con siete vanos que se distribuyen
rítmicamente y actuando de eje de simetría la puerta de acceso y
el balcón principal. Orden, ritmo, armonía, sucesión de frontones
triangulares y circulares, son ejemplos del aire clasicista que
inspira la obra. La decoración queda reducida a las potentes
columnas, a la manifestación heráldica y a los voladizos de los
balcones.
132. En la fachada sur se sigue un esquema
similar pero menos exhibicionista que la
fachada este, la norte prácticamente ha
desaparecido y solamente quedan restos de
algunos vanos y la oeste se abre hacia un
callejón de San Tirso y en ella prima la
regularidad y ordenación de vanos.
El hecho de labrar mejor las fachadas que
se ven desde la calle constituye un ejemplo
del carácter ostentoso que tiene la ciudad
históricamente en la cultura cristiana, lo
que se ve tiene que mostrar la posición
política, social, económica de quien vive o
es titular de esa vivienda.
134. Las obras se inician en 1752, con un diseño de Pedro
Antonio Menéndez, bajo la iniciativa del Regente de la
Audiencia de Oviedo Gil de Jaz, con el apoyo del Marqués
de la Ensenada (provisionalmente funcionaba el hospicio de
la casa de la comedia).
Se crea por la necesidad que hay en estos momentos de
acoger a todos los niños, huérfanos abandonados por que sus
padres y tienen recursos o por ser ilegítimos.
Dentro de las ideas reformistas ilustradas es necesario crear
un nuevo espacio en la ciudad para acogerlos pero también
donde se le eduque de forma laboral para facilitar su
integración ciudadana. Con esta función además de la de
hospital y la de atención a los mendigos nace este nuevo
espacio. Se concibe como una sucesión de patios basándose
en el modelo de hospital renacentista.
135. El primero tiene un
tamaño intermedio y se
encuentra tras la fachada
principal, se relacionaba
con las funciones
administrativas.
El segundo de mayor
tamaño era el que
integraba en conjunto con
el anterior a un lado y en
el otro la capilla.
La cual quedaba
flanqueada por otros dos
de pequeño tamaño uno
para cada sexo.
136. Todos ellos tenían columnas toscanas de piedra con
zapatas de madera, que sostiene dinteles del mismo
material, creando dos pisos.
La fachada realizada en 1758 se ejecutó bajo la
dirección de Manuel Reguera. Se realiza en sillería y
toma la forma de un cuerpo porticado adelantado al
resto del muro que recuerda al de las casas
consistoriales, correspondiendo cada arco de medio
punto con el balcón el en el piso superior.
La calle central queda remarcada por las columnas el
frontón roto y el escudo realizado por José Bernardo
de la Meana, que es una espadaña escultórica que
queda flanqueada por la balaustrada.
138. Se distribuye con varios niveles de arcos
escárzanos separados por monumentales pilastras
cajeadas de orden jónico, que llega hasta el friso,
que sujeta el tambor abierto con grandes
ventanas, visto al exterior y rematado con cúpula.
La decoración solo destaca en los casetones de la
cúpula que se forman a a través de arcos
entrecruzados las cabezas aladas de los ángeles
de las enjutas de las ventanas de medio punto.
Así como en los bustos de cristo y la Virgen
enfrentados, identificados con el sol y la luna, y
la decoración del friso con triglifos y metopas
decoradas con jarrones y motivos florales.
140. Obra realizada en 1759 por Manuel Reguera para don
Álvaro José de Inclán Valdés.
Continúa los modelos barrocos pero con mucha
menos ambición. Tipo palaciego de cuatro crujías en
trono a un patio central compuesto por ocho columnas
toscanas que sostienen dintel.
Aunque en realidad no presenta planta cuadrada sino
trapezoidal debido al desnivel del terreno. Todas las
fachadas son diferentes pero todas ellas mantiene el
muro plano carentes de elementos reticuladores en los
que se abren vanos carentes de decoración.
El desnivel hace que las fachadas laterales tengan tres
pisos mientras que la principal muestra solamente dos.
141. La entrada se hace precisamente por tanto al segundo piso
real, por lo cual se tuvo que disponer de otra entrada en la
calle oscura que si estaba al nivel de la calle, para la entrada
de los carruajes.
Además, la portada principal queda movida del eje de
simetría central del edificio y no tiene ninguna decoración
especial. Es solamente una muerta adintelada con un balcón
en en voladizo el piso superior, también con un vano
adintelado.
En la actualidad en inmueble está restaurado.
143. Un colosal pórtico ya de estilo neoclásico,
fue añadido en a partir del 1767 a la iglesia,
por Manuel Reguera a modo de arco de
triunfo, con tres grandes arcos de medio
punto, el central de mayores dimensiones,
que se adelanta a la portada (plateresca).
Cuatro columnas de orden gigante con basa
sustentan un arquitrabe completo y movido,
ya que tiene un retranqueo central, decorado
con triglifos y rematado por una balaustrada.
Nos hay más elementos decorativos que unas
molduras que aparecen en el trozo de muro
que queda sobre los arcos.
145. Fue el primer monumento público erigido en
España para honrar a un particular.
Financiado por el principado de Asturias, se
fecha en 1798 y su diseño fue remitido desde
Madrid por Juan de Villanueva.
El monumento original era de mayores
proporciones.
En 1823 es parcialmente destruido,
reconstruyéndose 13 años después.En 1853 es
desmontado y trasladado de lugar para ser
finalmente retirado de la calzada y adosado al
muro del convento de San Pelayo.
148. Este pequeño mercado del
pescado era un edificio situado en
el interior de una manzana de
edificios trasformados
posteriormente.
El proyecto inicial que era un
espacio sin apoyos intermedios es
modificado por Cándido
González en 1865, que introduce
pies derechos de fundición que
permiten elevar la parte central
del edificio mejorando la
iluminación y la ventilación. Así
mismo se sustituye el tejado de
teja por uno de hierro
galvanizado.
150. El edificio fue diseñado por el arquitecto Javier
Aguirre en 1882, finalizando su construcción en
1885.
Creo una planta trapezoidal en la que la
distribución de los apoyos de la cubierta que eran
columnillas de fundición de capitel jonico
distinguían tres espacios: dos avenidas que
cruzaban en un eje donde se disponía una fuente,
con dos puertas principales, con cuatro es de
puestos y otros cuatro pasillos exteriores, con sus
correspondientes adosados a los muros del
recinto.
En el año 1994 se produce la rehabilitación
integral.
151. Se sobreelevaba la techumbre del espacio
central dispuesta a cuatro aguas, sobresaliendo
de el un lucernario de ventilación.
Al exterior destacan los arcos de herradura,
acristalados, que se asientan sobre el zócalo de
piedra y los tres escarzanos monumentales de
las dos entras.
153. Datan de 1904, es obra de De La Guardia.
Da a tres calles, soluciona las dos esquinas con
chaflán redondeado abierto en mirador, muy
común en sus edificios.
El eclecticismo domina por doquier en el
esquema de las tres calles las articulas a través de
tres tipos de pilastras monumentales, los vanos se
abren en dintel y en arco escarzanoa usa el
almohadillado de el piso bajo y los flancos de las
esquinas. Ejemplos de la influencia francesa son
las cubiertas.
Aquí introduce una decoración menuda con
cierto deje modernista, debajo de la cornisa en
los chaflanes hay estilizaciones vegetales
menudas que no se inspiran en lo anterior..
155. Las obras se iniciaron en 1905, y se terminaron en
1915, con plano de Luis Bellido, cuando este ya
estaba en Madrid.
En la fachada destaca una reelaboración libre de
elementos medievales, que también se repiten en
la planta sobre todo en la configuración triple a
modo de trébol de la cabecera o en el uso de
contrafuertes exteriores.
Pero también incluye elementos neobarrocos
destacados en las cubiertas de las torres y en la
cúpula sobre crucero, que tiene un tambos con
ventanas y una pequeña linterna de remate.
156. A los pies se le añadía
la capilla de las animas
que reproduce la planta
de la iglesia sin los
tramos rectos, se
destinó a osario de las
familias con derecho a
enterramiento en el
antiguo convento de
San Francisco.
157. Diputación.
• Sus trazas fueron encomendadas al arquitecto provincial
Nicolás G. Rivero, que elige ese modelo clasicoitaliano
con influencias francesas. Además, destaca el
emplazamiento, un nuevo espacio ganado tras la
desaparición del convento de San Francisco, en una zona
lujosa donde se estaban abriendo las principales calles de
la ciudad ( 1905-1912). El edificio estará terminado en
1910.
• El arquitecto también se encarga de los principales
espacios interiores, vestíbulo, sala de quintas, contaduría,
el museo, el salón de sesiones.
160. Un deán es uno de los cargos del cabildo que se ocupa de
la economía. Payarinos tenía mucho dinero, estaba en
conflicto con el obispo Vigil, rivaliza con él y erige una
casa al lado de la catedral, es como un desafío.
Obra de Miguel de la Guardia, fechada entrono a 1905.
Adapta estilo ecléctico con recursos del segundo imperio y
poco a poco la variante que hace es introducir decoración
menuda modernista.
Exteriormente presenta un esquema apaisado para servir al
lugar en el que está, no mucha altura para no competir con
edificio vecinos. Realce en la parte central. Recurre al
Renacimiento y Manierismo mezclándolos entre sí. El piso
bajo almohadillado, frontones curvos, arcos de medio punto
Habitada por los descendientes, acaba siendo comprada
para el conservatorio de música.
161. La casa Blanca.
Manuel del Busto toma si inspiración de la visita a la
Quinta Avenida de Nueva York. En su composición en
altura, las formas arquitectónicas exteriores se inspiran en
edificios religiosos y funerarios a medio camino entre un
zigurat sumerio y la pirámide.
En el entorno de los años 29-30, recién terminado, sin
casas alrededor y rodeado de viviendas unifamiliares con
jardín, poseía un dominio señorial sobre toda la calle Uría.
Rascacielos con sólo cinco pisos, entonces las ordenanzas
municipales no permitían otras alturas, pero su torre era un
elemento más que acentuaba esa intención.
164. Era un rascacielos de nueve plantas y torre que se sitúa
en la esquina de las calle Fruela y San Francisco. A la
acusada verticalidad y a su apuesta curva y acristalada
para la esquina debe la denominación popular de Casa
del Termómetro.
Lo diseñó Vidal Saiz Heres para su tía Concha Heres en
1936, pero debido a la guerra civil y a irregularidades del
proyecto no terminó de construirse hasta 1943.
Es un ejemplo de la corriente racionalista imperante por
entonces en la capital, aunque para algunos es una
mezcla entre el cubismo y el futurismo, en el que Heres
saca partido a su emplazamiento privilegiado, en el
corazón del Oviedo moderno, con el recurso de la
fachada que dejaba ver su interior, con una planimetría
impensable sin la estructura de hormigón armado.
165. El edificio
original tenía
bandas
horizontales de
mármol en dos
colores que,
unidos a la
carpintería,
resaltaban la
fuerza del
elemento curvo
acristalado. Tiene
una forma
decreciente hacia
Abajo, se remataba con una puerta giratoria, la
arriba que estiliza
cual desapareció cuando el Banco Popular,
el edificio.
antiguo ocupante de los bajos del edificio,
reformó sus oficinas.
166. La Jirafa.
Oviedo.
Edifico construido a finales
de los 50 principio de los 60
por Fernando Cavanilles,
Joaquín Suárez, Gabriel de
la Torriente.
167. Fue concebido como un edificio multiusos, dotado
de Hotel, Oficinas, Correros, Caja Postal y Tiendas.
La parcela triangular que ocupaba el mercado del
progreso fue dividida en sectores, la base se dedicó
a sede de correos y Caja postal. El cuerpo
intermedio acogía oficinas y tiendas en la calle San
Pelayo y dependencias del hotel en la calle opuesta,
estas continuaban en toda la torre que contaban en
total con 21 pisos de altura. El rascacielos como tal
tiene forma de T y queda precedido por un zaguán
cubierto.
Las parte baja además se configuraba en torno a dos
patios que daban servicio a las zonas de carga,
despachos, oficinas, atención al público y cuatro
viviendas para empleados.