Una aportación para estudiantes de ministerio juvenil

3. tus primeros
dos años en
el ministerio
juvenil

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5. L
amisión de Editorial Vida es
proporcionar los recursos necesarios
a fin de alcanzar a las personas para
Jesucristo y ayudarlas a crecer en su fe.
©2005 EDITORIALVIDA
Miami, Florida
,Publicado en inglés bajo el título:
Your First Two Years in Youth Ministry
por The Zondervan Corporation
© 2002 por Youth Specialties
Traducción: E1izabeth Fraguela M.
Edición: Lucas Leys
Diseño interior: artserv
Diseño de cubierta: Joshua Dunford / BURNKIT
Impreso en Estados Unidos de América
Printed in the United States of America
Este libro está dedicado a mi increíble familia, Cathy, Torie, Cody y Cassie. Me
encanta ser el esposo y el padre de ustedes. Mi vida es más rica gracias a cada
uno de ustedes. Ustedes me hacen sonreír, reír y ansío estar con ustedes cuando
no lo estoy. Gracias por su entrega al trabajo con los jóvenes apoyándome en
mi ministerio con amor y sacrificio.

6. Nota de los editores [9]
Reconocimientos [10]
Ensayo de reseñas escritas [12]
Antes de comenzar este libro [15]
1. ¿oónde comienzo? Entregarse a lo más esencial [23]
«En 1979 yo era un obrero de jóvenes novato sin idea alguna de lo que estaba haciendo.
Llevé a los adolescentes a películas calificadas R; di una fiesta de Jacuzzi en el bautisterio
porque un muchacho de doce años pensó que eso sería divertido ... Por suerte, mucho
ha cambiado ... »
2. ¿Por qué me siento de esta manera? Lidiar con el desánimo [45]
«Tal vez el desánimo sea el sentimiento más poderoso que tiente a los grandes hombres
y mujeres para abandonar prematuramente el ministerio juvenil».
3. ¿Cómo mantenerme espiritualmente fresco?
Establecer un fundamento de corazón [67]
"Relacionarse con Dios diariamente es más importante que cualquier seminario para el
ministerio juvenil al cual tú asistas o cualquier libro que leas».
«A medida que comiences tu ministerio juvenil, por favor, recuerda que los programas
solo existen para formar y fortalecer las relaciones con Dios y del uno con el otro. ¡Las
relaciones son la clave para un ministerio saludable!»
5. ¿Cómo trabajo con los padres? Hazte amigo de la familia [107]
«Este es un capítulo importante concebido mediante luchas y dolor. Quisiera salvarte de
algunos de los dolores que he causado y sentido».
6. ¿Por qué tantos conflictos? Lidiar con personas difíciles [133]
,.Durante mi años de liderazgo he experimentado suficiente tensión como para llenar todo
un libro. Derramé lágrimas, fui causante de lágrimas, evité conflictos, comencé conflictos,
confronté con amabilidad, confronté a gritos, hice enemigos, gané partidarios. A veces he
tenido razón, pero a menudo me he equivocado» .
••Si tengo luchas en mis relaciones con aquellos que tienen autoridad sobre mí, a menudo
es porque estoy criticando.a otros cuando debiera ser crítico de mí mismo. Necesito
considerar la viga en mi ojo antes de señalar la paja en el ojo de otra persona (¿Has leído
esto en alguna parte?)>>.
8. ¿oónde puedo conseguir ayuda? Trabaja con un equipo de líderes [179]
••M j mayor gozo y la tarea más difícil es formar un equipo de otros adultos que amen a
I()~ estudiantes y los puedan discipular. .. Si tú encuentras, desarrollas y le das poder a los
líderes, serás una persona valiosísima para tu iglesia y te prepararás para lograr el éxito en
1111 futuro ministerio juvenil».
9. ¿Pueden los estudiantes manejar las responsabilidades?
Haz una inversión en los líderes estudiantiles [205]
«Si fwnnites que los estudiantes dirijan, tendrás el privilegio de motivar, confirmar y dar
till'lllól ól su fe».

7. 10. ¿Estás haciendo lo que es correcto?
Evaluaci6n de los programas del ministerio juvenil [225]
«Quizá estés pensando: "¿Por qué evaluar si apenas estoy comenzando mi ministerio?"
Mientras más pronto te habitúes a realizar chequeos regulares, más saludable será tu mi-
nisterio. Tú no quieres esperar hasta que aparezcan grandes decaimientos en tu ministerio
para entonces acruar».
11. ¿Cómo hago los cambios? Navega por las fases del cambio [247]
«El cambio tiene una manera de hacer o quebrantar a los líderes del ministerio juvenil,
especialmente dentro de los primeros dos años ... Tú no tienes una fórmula fácil ni mágica,
ni un procedimiento que funcione todo el tiempo para imp1ementar los cambios, pero
puedes tomar algunas acciones definitivas para minimizar el conflicto».
12. ¿Qué hago ahora?
Definir la descripci6n de un trabajo realista para tus dos primeros años [267]
«Si no sabes qué esperar, estás destinado a fracasar. Las expectativas existen, dichas o no,
y tú tienes que descubrirlas para ser eficiente y permanecer saludable».
Epílogo [289]
Apéndice A: Planilla de las responsabilidades
de los voluntarios del ministerio juvenil [290]
Apéndice B: Diez preguntas frecuentes [292]
Este libro es una excelente herramienta para quienes trabajamos con jóvenes. En
él, Doug Fields plasma una cantidad importante de principios, ideas y concep-
tos prácticos relevantes para quienes estamos en las trincheras de la tarea juvenil.
1)oug escribe desde la experiencia de una iglesia en los Estados Unidos en el
~'Ol1tcxtode un ministerio juvenil profesional, es decir, uno en el que el pastor
dl' jóvenes es pago. Quizás este no sea tu contexto y te sorprendas con algunos
d('I,l!les que Doug menciona, pero te invito a pasar por alto eso y encontrar
lo que es pertinente y apropiado para tu situación ministerial. De seguro será
mucho y es por eso que publicamos este libro.
¡Ricas bendiciones en tu vida y ministerio!
J)r, Lucas Leys
D/reclor .lnternaclonal
www.espectalídadesjuvetliles.com

8. Escribir estelibro tomó dos años, horas incontables y el apoyo inconmensurable
de muchos amigos nuevos y viejos. Estas personas me preguntaban cómo yo
estaba progresando, oraron para que tuviera inspiración y pasaron horas con
mi familia durante el tiempo en que yo escribía. Quiero decirles: Gracias por
su amistad y por el papel benevolente que jugaron en mi vida y en este libro.
Mi agradecimiento va para ...
• Los empleados del ministerio de estudiantes de la Iglesia Saddleback, cuyos nombres son
siempre mi respuesta a la pregunta: «¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?»
• Linda Kaye, Deb Pflieger, Paul Alexander, Andy Brazelton y Susan Pope, mis empleados
en www.dougfields.com que sirven a Dios y a los obreros de los jóvenes convirtiendo mis
libros, cintas grabadas y videos en materiales útiles. ¡Ustedes son un regalo tan grande
para mí y los demás obreros juveniles!
• Lynne Ellis, Gregg Farah y Matt McGill, que tan fielmente me sirvieron ayudándome a
bosquejar los capítulos y elaborar las palabras que a mí nunca se me ocurrirían. Este es
un mejor libro gracias a ustedes.
• Katie Brazelton, Mary McNeil y Susan Reinhardt, que leyeron cada palabra de mis primeras
pruebas y limpiaron el manuscrito para que los editores creyeran que yo sabía lo que estaba
haciendo. Sus muchas horas de amor me impactaron profundamente.
• Dennis Beckner, mi ayudante, que me ayudó con todo, desde escribir a máquina, inves-
tigar, editar y mantenerme vivo. Gracias por tu actitud que va más allá de tu llamado y
además por el trabajo arduo.
• Dave Ambrose, Kurt Johnston, Billy Fray y Duffy Robbins, que leyeron mis últimas pruebas
y desafiaron mis pensamientos, agregaron comentarios y dieron vida a cada capítulo. Me
honra la amistad de ustedes y el regalo de tiempo que le concedieron a este libro.
• Vicki Newby, Mark Oestreicher y Dave Urbanski, mis amigos en Especialidades Juveniles
que acogieron mis ideas y aplicaron sus brillantes mentes para hacer que este fuera un
libro mejor que el que yo les entregué. Gracias por creer en este proyecto y en mí.
• Brian Farmer y John-Michael McGinnis, dos amigos obreros juveniles que gentilmente me
dejaron usar material de sus correos electrónicos.
• Deanna Davis, Jeanette Fatigati, Chris Garten, Cynthia Hammork, Brad Hartke, Heather
Kaiser, Neely McQueen, Linda Vujnov y Tami Wright, voluntarios del ministerio juvenil que
invirtieron tiempo pensando en ilustraciones y anécdotas para que yo contara.
• Jim Burns, Steve Gerali, Mike Yaconelli, Helen Musick, Chap Clark, Marv Penner, Rick
Warren, Jana Sundene, Bo Boshers, Duffy Robbins, Tony Campolo y Richard Ross son
ministros veteranos y expertos que fueron tan gentiles que agregaron su perspicacia a
este proyecto. Me impactó que ustedes hicieran esto, gracias.
• Kurt Johnston, Cathy Fields, Matt McGill, Andy Brazelton, Kathleen Hamer, Lynne Ellis,
Brad Johnson, Jim McNeff, Ryan Holladay, Greg y Linda Vujnov y Jeff Maguire, por ser
algunos de mis favoritos en esta tierra y agregar sus voces a estos capítulos. Me encan-
taron sus contribuciones y creo que también le gustará a los lectores.
• Glen Kreun, mi amigo y «jefe» en la Iglesia Saddleback, quien fielmente ha servido al Señor
durante décadas y me ha modelado lo que representa el servicio y la longevidad. Gracias
por su fe y apoyo.
• y, por último, a los obreros voluntarios de jóvenes en todo el mundo que dan tanto para
amar a los estudiantes y reflejar a Jesús, ustedes me sorprenden con su entrega y me
Inspiran a ser un fiel obrero juvenil.

9. Ensayo de reseñas escritas
Jim Bums (Capítulo 1) es el presidente de YouthBuilders (Formadores de jóvenes), una or-
ganización que brinda materiales para los obreros de jóvenes, personas jóvenes, y padres,
autor de más de 50 libros, incluyendo How to Be a Happy, Healthy Family [Cómo ser una
familia feliz y saludable], como también expastor de jóvenes de Doug Fields en los años
de la escuela superior.
Steve Gerali (Capítulo 2) escribe basándose en la experiencia, durante más de 20 años,
en el ministerio de los jóvenes, con niños y adolescentes. Este autor y orador ahora está
sirviendo en los departamentos de ministerio de jóvenes en la Universidad Judson y en el
Seminario Teológico de los Bautistas del Norte, ambos en lIIinois.
Mike Yaconelli (Capítulo 3) un pionero del ministerio juvenil, fascinante orador, fundador
de Youth Specialties, Inc., pastor de una pequeña iglesia en Yreka, California, y autor de
numerosos libros, incluyendo Messy Spirituality: God's Annoying Love for Imperfect People
[Espiritualidad desordenada: El amor irritante de Dios por las personas imperfectas] y el
Proyecto Discípulo (Especialidades Juveniles)
Helen Musick (Capítulo 4) es una instructora en el ministerio de jóvenes del Seminario
Asbury en Kentucky, coautora del currículo Girls and Guys [Chicas y chicos] (Youth Spe-
cialties), y una miembro del equipo de preparación The CDRE ™ de Youth Specialties.
Chap Clark (Capítulo 5) es profesor asociado de jóvenes, familia y cultura en el Seminario
teológico Fuller, y es un líder de equipo de The Community, un nuevo ministerio de alcance
comunitario en La Crescenta, California. Sus libros incluyen Lecciones Bíblicas Creativas
en Romanos (Especialidades Juveniles)
Marv Penner (Capítulo 6) es directora del departamento del ministerio de jóvenes y familia:
y dirige el Centro Canadiense para Investigación de los adolescentes, en la Universidad
Bíblica Briercrest y el Seminario en Saskatchewan, Canadá. Es autor de Lecciones bíbli-
cas creativas de 1 y 2 Corintios (Especialidades Juveniles) y un miembro del equipo de
entrenamiento de The CORfTM
Youth Specialties.
Rick Warren (Capítulo 7) Es el pastor fundador de la Iglesia Saddleback, una de las congrega-
ciones más grandes de América, y autor del bestseller La iglesia con propósito®. También
fundó pastors.com, una comunidad en la Internet para ministros.
Jana L. Sundene (Capítulo 8) es profesora asistente de Biblia y educación cristiana en la Uni-
versidad de Artes y Ciencias Trinity International. Antes de tomar posesión de su cargo en
Trinity, en 1990, Sundene era directora asáciada de los jóvenes en la Iglesia Willow Creek
Community. Es coautora de Speaking to High School Students [Hablar a los estudiantes de
la escuela superior], con Dan Webster para The Complete Book of Youth Ministry [El libro
completo del ministerio de los jóvenes].
Bo Boshers (Capítulo 9) es director ejecutivo del ministerio de estudiantes en Willow Creek
Association, autor del best-selling Reaching Kids Most Ministries Miss [Alcanzar niños que
pierden la mayoría de los ministerios], Doing Life with God [Haga la vida con Dios] y otros.
También es un orador reconocido mundialmente.
Duffy Robbins (Capítulo 10) es profesor asociado del ministerio de jóvenes en la Universidad
Eastern cerca de Filadelfia, autor de varios libros, incluyendo The Ministry of Nurture [El
ministerio de cuidados] y un miembro de The CORfTM
Youth Specialties.
lany Campolo (Capítulo 11) es un comunicador muy querido y apasionado, profesor de
sociología en la Universidad Eastern en las afueras de Filadelfia, y autor de muchos libros,
Incluyendo It's Friday, but Sunday's Coming [Es viernes pero ya viene el domingo] y Revo-
lution and Renewal [Revolución y renovación].
Rlchard Ross (Capítulo 12) es fundador de El amor verdadero espera y profesor de un
ministerio para jóvenes en el Seminario Bautista Teológico Southwestern. Ha escrito o
compilado 16 libros sobre el ministerio con los jóvenes, muchos de los cuales se han usado
como libros de texto en universidades y seminarios Bautistas del Sur.

10. Mientras estaba escribiendo este libro, un amigo me preguntó: «Doug, ¿te
acuerdas de tus primeros dos años de ministerio con los jóvenes?» Me sonreí y
le contesté: «Sí. Pero por suerte este libro no tiene nada que ver con esos dos
primeros años. Si así fuera, sería corto, desalentador y no muy útil».
Tus primeros dos años en el ministerio juvenil no se refiere a copiar los primeros dos
nl'íosde Doug Fields; se refiere a hacer buenas decisiones para que sobrevivas y
lt' conviertas en un obrero saludable para los jóvenes preparado para un largo
rnl11ino,no importa cuál sea tu función, voluntario u obrero principal de los
jównes.
Debido a los muchos años que he empleado en las trincheras del ministe-
I'io de los jóvenes, tengo la confianza de conocer el ministerio de los jóvenes
y los obreros de los jóvenes, pero de seguro no tengo todas las respuestas. Sin
t't11bnrgo, he experimentado suficientes ministerios de jóvenes y he oído tanto
IAH preguntas Como para creer que te puedo ayudar, no importa la posición que
oCll[.,t'1I. Escribí este libro para los voluntarios y para los líderes del ministerio
de j6Vtl1eM(ccm o sin sucldo). He querido dade este tono al libro para reflejar

11. L~~LTUI prlm.r~OI dOI, IRoI en .1 I1Ilnllt.rlo IUVlnll
conversaciones reales que tú y yo podríamos tener, como si nos hubiét~amoll
sentado juntos en un restaurante para hablar acerca del ministerio de los jóvenes.
Ahora bien, reconozco que ningún libro puede contestarte todas las preguntas,
pero como yo he vertido una gran parte de mi vida en estas páginas para ayu-
darte a sobrevivir y prosperar en tu llamado, estoy seguro de que este libro te
preparará a forjar tu propia senda y dirección mientras quieras a los estudiantes
y los dirijas hacia Jesús.
Pero antes de comenzar, aquí hay algunos puntos importantes que quiero
que sepas:
1. Sin una clara comprensión del gran cuadro en el ministerio de los jóvenes,
tus acciones se convertirán en movimientos desesperados, y con facilidad
te derrotarán. Estos capítulos se escribieron para ayudarte a comprender
mejor algunas de las verdades clave, constantes, algunos matices del minis-
terio de los jóvenes y también para darte ideas prácticas acerca de cómo
tener éxito en tu llamado.
2. No te apures en la lectura de este libro. Tómate tu tiempo, relaciónate con
los capítulos y haz de este material uno de tus amigos del ministerio de los
jóvenes. Considera leerlo con un amigo tuyo qu~ sea ministro de jóvenes
y dialoguen en cuanto algunas de las preguntas al final de cada capítulo.
Luego ve a mi sitio de la Internet y escribe tus comentarios acerca de cada
capítulo y lee algunas de las otras respuestas y preguntas que los demás
están haciendo. (www.dougfields.com)
3. La mayoría de 10 aprendido que he atesorado a través de los años, proviene
de los fracasos. Sí, yo me he equivocado muchísimo. Pero tengo una edu-
cación más rica gracias a esos fracasos. En estas páginas procuro protegerte
de algunos errores potenciales, aunque sé que '~xperimentarás muchos de
los tuyos, a pesar de 10 que te sugiero. (¡Solo recuerda que tus fallos deben
ser educativos!)
4. Si eres un voluntario y el líder de tu ministerio te dio una copia de este
libro, considérate un líder bendíto, ¡alguien está interesado en que tú ganes!
Si eres el líder del ministerio, procura poner este libro en las manos de
los voluntarios, porque cuando ellos ganan, tú también ganas. Lo ideal
es procurar leer este libro antes de comenzar tu posición con sueldo o de
voluntario. Pero aunque ya estés «en el juego», de todas formas el libro te
ayudará inmensurablemente.
5. Este libro es muy diferente a mi último libro Ministerio dejóvenes con propósito
(M]CP).CuaJ: ¡¿.nc1o ••te, mucho. amigoll me pl'egul1ta-
ron Acel:CAde 1u c1itmnei••. AI'Al·tC' dl' la cantidad de p{lginas (más de
400 páginas) Tus prlmms d"S IIffos rII el ministerio juvenil tiene el propósito de
~'ol1Vl'rtil't'een un I11l'jol'Obi'l'l'Ode jóvenes mientras que el propósito de
M/CI' es formar un mejor ministerio de jóvenes. MJCP te ayudan a pensar
y ol'ganizar tu ministerio. Aunque en el capítulo diez hago un resumen de
muchos elementos clave de MJCP, Tus primeros dos años en el ministerio juvenil
tI'ata principalmente acerca de cómo sobrevivir emocionalmente para lograr
s"guir vivo durante el tiempo que te tome organizar tu ministerio. Si debes
escoger cuál libro leer primero, te sugiero que comiences con este, y luego
busca MJCP y 1éelo.
(" IIstl' libro es muy diferente a la mayoría de los otros que has visto para el
ministerio de los jóvenes. No es un manual de «cómo hacer. .. » es una con-
wrsación de corazón a corazón. Es contar la historia. Es contar la verdad.
y 110 fui yo el único que abrí mi corazón y lo derramé en estas páginas,
otros también 10hicieron. Encontrarás sus voces, algunas conocidas, otras
dl'sconocidas, en una multitud de cuadros que aparecen en cada capítulo.
l(Kios los contribuyentes ayudaron a hacer de este libro su compañero más
l"l1l11pletopara pasar los primeros dos años del ministerio de los jóvenes.
", Aprender a ser un obrero saludable de los jóvenes no es tan fácil como al-
~UI1()S10hacen ver. Así que disfruta el proceso, aprende durante el camino,
y juntos vamos a dade la gloria a Dios por utilizar a personas defectuosas
C011l0nosotros para llevar a los estudiantes a Jesús.
No pt'esmllO que tú, como lector, estés interesado en saber mi historia. Pero
10MI'¿ilores creen que algunas notas de mi peregrinaje por el ministerio de los
JÓVl'lll'Sayudarán a poner un poco más de carne y huesos en estas páginas y
IIYlldl1r{lI1a hacer un puente entre 10práctico y 10personal. (En serio, por lo que
il mi rl'specta, tú puedes brincar el capítulo 1 y obviar el resto de esto ... o, si
IH"I'll'Ill'CeSal tipo de los curiosos, puedes leerlo y descubrir de dónde provienen
11~IIJ1nscosas de este libro.)
Coml'ncé mi peregrinaje en el ministerio de los jóvenes en el 1979, mien-
U'IIMl'1'i1 solo un estudiante del undécimo grado en la escuela secundaria, en
11/ igll'sia pl'esbiteriana Ol'ange (California). Mi pastor de jóvenes, Jim Burns,
vio 1I1111calidad y un potencial en mí que yo no me veía para elliderazgo. Así
Antu de oomenzar [!7]

12. que me dio la oportunidad de dirigir a un pequeño grupo de estudiantes de
la secundaria en nuestra iglesia. Después me dieron algunas responsabilidades
para enseñar, y eventualmente desarrollé un papel mayor· en el liderazgo del
equipo hasta que me gradué de la secundaria en el 1981. Durante esos dos
años, mis mentores fueron un gran apoyo para mí y sentí que Dios me guiaba
al ministerio de los jóvenes. En aquel momento ni remotamente imaginé que
la jornada que comencé con solo 17 años de edad, un día me llevaría a escribir
un libro para personas que estén comenzando en el ministerio de los jóvenes,
como yo lo estaba.
Yo no tenía preparación, pero sí amaba a Dios, y algunos excelentes adultos
modelos vertieron sus vidas en la mía y me señalaron a Jesús. Yo solo quería
ser como ellos.
Durante los próximos años trabajé como un interno con Jim para comenzar
una iglesia llamada Mariner's Church, al sur de California. Durante este tiempo,
terminé la universidad (Universidad Vanguard, BA) y el seminario (máster en
divinidad, en el Seminario Fuller) para complementar mi experiencia práctica.
Entonces, en 1985, Jim «cortó el cordón umbilical» yme dejó solo para dirigir
el ministerio juvenil luego que él se mudara para comenzar una organización
nacional de ministerio de jóvenes. Aunque yo estaba ansioso por tomar el
mando, no tenía idea alguna de lo mucho que tenía que pasar el líder principal
de un ministerio. Siempre estuve protegido, y ahora la protección se me había
ido; encaré muchos fracasos· (y grandes aprendizajes)'
Fue durante algunos de los años siguientes que desarrollé la mayor parte
de mi filosofía y prácticas de mi ministerio de los jóvenes. Trabajé con algunos
líderes y voluntarios increíbles y experimenté algunas de los recuerdos mayores
de mi vida. Mientras estaba en la Costa del Sur, mi pastor, Tim Tirnmons, me
animó a escribir y hablar. Al igual que Jim, él vio algo en mí que yo no me
veía, la habilidad de comunicar y crear recursos que ayudan a los estudiantes y
a los voluntarios. Él siempre me decía: «Doug,· tienes que crear herramientas.
La gente necesita herramientas. ¿Cómo puedes usar lo que estás haciendo aquí
para ayudar a otras iglesias?» Él me ayudó a desarrollar un corazón por los otros
obreros de jóvenes. Fue también en el 1985 que Especialidades Juveniles me brindó
la oportunidad de preparar a obreros para los jóvenes a un nivel nacional. Yo
no me veía como un capacitador, pero ellos sí. (De nuevo, más personas veían
cosas en mi vida que yo no veía.) ¡Todavía no puedo creer que ellos llevaran a
un joven de veinticuatro años de edad a e1"lsefiara otros obreros de j6venesl
Estar frente a otros obreros de ;6vene. fue lo que ¡:ealmente me forz6 a
pensar y traducir las ideas del ministerio de los jóvenes en algo tangible que
los voluntarios pudieran implementar en todo tipo de ambiente y tamaño del
ministerio juvenil. Mientras escribo este libro continúo relacionándome con
Youth Specialties, una relación de la cual estoy muy agradecido.
En 1992 me convertí en el pastor interino de los jóvenes de la iglesia
Saddleback en Lake Forest, California. Planeaba estar en Saddleback solo el
tiempo suficiente para que ellos buscaran un pastor para los jóvenes que les
trabajara su horario completo, y entonces yo podría volver a enfocar mis pla-
nes para continuar escribiendo y hablando. Había oído grandes cosas acerca
de Saddleback (ya que mi otra iglesia solo estaba a quince millas de distancia),
y sabía que este sería un gran lugar para cualquier persona que Dios planeara
mandar a trabajar en el ministerio juvenil durante su horario completo. Solo
que ni siquiera pensé en lo que Dios me tenía reservado. En unos pocos meses
me enamoré de la iglesia y de los estudiantes, y «la vida en la carretera», como
un orador, perdió su atractivo bastante rápido. El título de interino desapare-
ció con rapidez y desde entonces estoy aquí. Sin embargo, si en 1992 tú me
hubieras preguntado: «¿Tú crees que vas a experimentar un ministerio juvenil
como el que tuviste en South Coast durante la década de los 80?» Yo habría
contestado: «¡De ninguna forma! En mis sueños más increíbles no me imaginé
mejor experiencia de la que tuve en Mariner's».
Bueno, desde entonces he aprendido a soñar un poco más grande, porque
mi presente ministerio de jóvenes es mucho más fUerte de lo que fue el último.
En Saddleback me dieron la oportunidad de comenzar de nuevo, usar todo lo
que aprendí en la primera docena de años y comenzar con más experiencia,
sabiduría y salud espiritual. No puedo imaginar hacer un ministerio de jóvenes
en ninguna otra parte. Quiero a mi iglesia, la comunidad, nUestros líderes vo-
luntarios, los estudiantes, familias y el personal. N o se acerca a la perfección,
pero este es un lugar donde siento la bendición de Dios en mi liderazgo, dones
y fidelidad.
Mientras escribo esto, estoy convencido de que mis mejores años de mi-
rlisterio juvenil están en el futuro, y espero con ansiedad tener muchas más
oportunidades de aprender y crecer. Además, mi pastor y amigo, Rick Warren,
cree en mí tanto que me permite preparar a los líderes de la iglesia de todo el
mtmdo a través de lo que nosotros llamamos las conferencias de Una íglesia con
prop6sito¡ en.estas comentamos las maneras de cumplir los propósitos bíblicos de
.van¡eli.mo, adoraci6n, discipulado, ministerio y compañerismo.
Todo IItO lne lleva Alprellcnte y a elltas palabras qt.te Clt estás leyendo. Por

13. favor, quiero que sepas que yo he estado orando por ti, oro por el corazón de
cada persona que lea. este libro. Mi oración específica es que recibas ayuda,
ánimo y te refresques a medida que progreses por el maravilloso peregrinaje del
ministerio juveniL Comienza, lee el capítulo 1, Yluego en oración considera los
compromisos para la salud que yo he señalado. Espero oír de ti, y si nuestros
caminos alguna vez se llegaran a cruzar, regocijémonos en la bondad de Dios
y en su habilidad para permanecer durante mucho más que dos años en esta
profesión.
Tu amigoy compañero en el ministerio juvenil,
Doug Fields

14. ¿Dónde comienzo?
En t r e g a r s e a 10m a s e s e n c i a 1
«En 1979 yo era un obrero novato de jóvenes sin idea alguna de 10 que estaba
haciendo. Llevé a los adolescentes a películas clasificadas R; di una fiesta de
jacuzzi en el bautisterio porque un muchacho de doce años pensó que eso sería
divertido; le grité a un grupo de padres; enseñé a un joven de quince años a
manejar usando el van de la iglesia, y casi me arrestan por tener a estudiantes
menores en un club para personas mayores de veintiún años. Por suerte, mucho
ha cambiado pero desde entonces ha sido un viaje lleno de acontecimientos.
Mientras escribo esto todavía estoy trabajando con estudiantes en la iglesia
y me encanta hablar del ministerio con los jóvenes, especialmente con los nuevos
obreros juveniles. Todos los días que he trabajado con este libro, he pensado
y orado especialmente por ti. Si ahora eres un principiante, tú eres el tipo de
obrero juvenil que mas me gusta ayudar. (Si has estado en la trinchera durante
algunos o muchos años, a ti también te quiero de todo corazón, y tengo la con-
fianza de que en estas paginas encontraras ayuda y ánimo.) Me es maravilloso
jugar un papel en tu peregrinaje con el ministerio juvenil. Ya seas una persona
asalariada o un voluntario, los principios e ideas en este libro se escribieron para
ayudar te a sobrevivir y prosperar en tu trabajo con los adolescentes.

15. Ministerio de jóvenes como un maratón
Una de las metas de mi vida (que todavía no he alcanzado) es correr en un
maratón. He corrido en competencias cortas, pero el monstruo de los 42.2
kilómetros me ha eludido hasta aquí. Veo los maratones en la televisión, anti-
cipando con ansiedad el día que yo termine uno.
¿Alguna vez has visto un maratón? Son inspiradores. Cuando miro a los
ojos de los corredores, veo dos tipos de expresiones. Parados ante la línea de
comienzo, los maratonianos experimentados están concentrados, preparándose
mentalmente para la tarea que tienen por delante. Saben 10 que representa com-
pletar una carrera de este calibre, así que se estiran para preparar sus cuerpos,
corren en el lugar para calentar los músculos y cierran sus ojos para visualizar la
loma de la carrera y los marcadores de kilómetros. Los veteranos saben 10 que
está por delante. N o es una fiesta, es abusivo.Y como tienen que soportar el
dolor durante las próximas horas, la tarea es correr con eficiencia.Sus cuerpos
han instruido sus caras para no sonreír ni expresar ningún tipo de gozo. Los
corredores veteranos saben 10 que están haciendo.
Los demás corredores son novatos. Es divertido ver a este grupo. Por 10
general se mantienen juntos, disfrutando de todas las actividades desde las
camisetas gratis de las carreras, los vendedores que venden equipos para correr
y hasta los mapas que localizan los inodoros portátiles que están en la ruta.
Los novatos están muy entusiasmados, se sienten bien, sonríen, bromeando con
otros, disfrutando el entusiasmo pre carrera. Poco saben que están gastando su
valiosa adrenalina mucho antes de llegar a la marca de un kilómetro. Después de
todo, esto es de esperar ya que este es un tiempo emoocionanteaunque también
engañoso.
¿Cómo es esto?
Observe la carrera desde un lugar elevado. Al comienzo, una masa de hu-
manidad se mueve al frente como un grupo, agrupándose con otros, parecen
inseparables hasta el segundo o cuarto kilómetro cuando la multitud comienza
a hacerse más delgada. A los quince kilómetros, algunos han decidido caminar
y sienten la tentación de pararse e irse a la matiné. A los 24 kilómetros muchos
están comiéndose un temprano almuerzo. Después de 30 kilómetros solo los que
están más preparados tienen una oportunidad realista de terminar bien.Terminar
no es solo un asunto del cuerpo, sino de las emociones y de la mente.
Correr un maratón es un cuadro semejante al ministerio de los jóvenes.No
es una tarea fácil Q,entrode la iglesia. Si así fuera, tendríamos más obreros de
jóvenes que ujíe~••• El ministerio de jóvenes está lleno de experiencias largas,
cansonas, a menudo mal recompensadas, complejas, únicas, intensas, cómica"
llenas de gozo y dolor. Muchos dentro del cuerpo de Cristo han entrado al
maratón del.mini~~erio juvenil, pero muchos se van enseguida, perdiendo el
gozo y la satlsfacclOn.Están heridos y agotados.
La carrera ante nosotros
Quiero con desesperación que permanezcas en tu ministerio para los jóvenes
La.lo~~evidad en nuestros campos es poco común. Esto es lamentable par~
el ,1ll~lVlduoque ~e va y a la vez trágico para la salud de la iglesia. Mientras
m~s.tlem~o trabajes e~ el ministerio de los jóvenes, más fácil se hará y mejor
mllllstra~~sa.los estudlantes. Las salidas rápidas tienen mucho que ver con la
preparaclOn llladecuada y las expectativas que no son realistas. Pero, al igual
que la carrera, establecer el paso apropiado asegura resultados de largo plaz
su habilidad para terminar can fortaleza. o y
Mientras escribía este libro, mantuve dos versículos pegados a mi compu-
tadora que me sirvieron como el fundamento para escribir, quiero dejártelos
saber.
y corramos con perseverancia la carrera que tenemos por delante (Hebreos 12: 1).
~l min~sterio juv~nil, c~mo la vida cristiana, es una carrera que requiere en-
ttena~lento y reslstenCla.Por suerte, nuestra resistencia y fortaleza aumenta
a medlda que cor~e~os la carrera y seguimos el curso que Dios nos tiene por
delante. Nuestro eXltoen,la carrera ~el ministerio juvenil tiene mucho que Ver
COn desarrollar una ampha perspectlva. Examina el segundo versículo:
Poreso lloraréy gritaré de dolor, y andaré descalzo y desnudo. Aullaré como chacal
y gemiré como avestruz (Miqueas 1:8).
Ah, espérate..• ese no es el versículo correcto. Es este otro:
SIn embergo, no los desalojaré en un solo año, no sea que, al quedarse desolada la
t/srrs, sumente el número de animales salvajes y te ataquen. Los desalojaré poco
, poco, hasta que seas lo bastante fuerte para tomar posesión de la tierra (Éxodo
23:29·30).
La referencia a los animales salvajes no debe verse como un sinónimo de los
..tudíante. de 1:. grupo, pero este versículo retrata con precisión el mundo de
l.,~obrero. de los jóvenes. El pasaje de Éxodo describe el plan de Dios para la
...,ql.lt.tl,miuICl de CanaAn.Dio. no queda .Qbr'lbt'umarh~I8raeldá1'lclol,.

16. en un día la Tierra Prometida. Además, sabiendo que Israel no estaba com-
pletamente lista, Dios les preparó un viaje que les permitió desarrollar su fe y
confianza a medida que ellos aprendían a depender de él.
Este principio bíblico se aplica alministerio de los jóvenes. Dios no te dará
todo a la vez. El fundamento de tu ministerio se fortalece a medida que desa-
rrollas tu fe, habilidades, liderazgo, experiencia, carácter, disClplina y pasión.
¿Dónde comienzo?
Me encantaría que te imaginaras, cada: vez que tomes este libro para leer un
capítulo, que tú y yo estamos en tu restaurante informal favorito, reuniéndonos
de nuevo para hablar acerca de ti y del ministerio de los jóvenes. La meta de
la reunión es que yo te entrene durante tus primeros años de obrero juvenil.
Tú estás lleno de preguntas, entusiasmo, ideas, esperanzas, temores, sueños y
oraciones para tu nuevo ministerio. Yo estoy aquí porque oí que sientes una
pasión por Dios, un corazón humilde, un amor por los estudiantes, un anhelo
de aprender y... óyeme, seamos honestos, porque te ofrecieron un sueldo. Pero,
¿quién se preocupa realmente por la comida? Este es un gran escenario para unos
comentarios, de corazón a corazón, acerca del ministerio juvenil.
Las preguntas que me estás haciendo durante nuestra reunión son las pre-
guntas que con más frecuencia me han hecho los obreros de jóvenes durante
años. La número uno que me hacen después que enseño en un se-
minario o después que alguien termina de leer mi libro Ministerio de jóvenes con
propósito® es «¿Dónde comienzo?»
Aunque a muchos ministros juveniles, principiantes, les encantaría que yo
~es die~a una lista de los pasos exactos que se deben tomar, esto es una petición
impOSible. Ya que cada iglesia es única, y que cada obrero juvenil es un ser com-
plejo y que todos los estudiantes son diferentes, los pasos que son necesarios
tomar no serán los mismos para el próximo obrero juvenil.
A pesar de la variedad de los obreros juveniles que leerán este libro, algunos
compromisos son importantes para todos los. obreros juveniles no importa la
~eno~inació~, tamaño de la iglesia ni el país donde vivan. En este capítulo yo he
identificado diez compromisos que me gustaría que tú, como un nuevo obrero
de jóvenes, consideres tomar en oración. Te pueden servir como un fundamento
para tu eficiencia, salud y felicidad en el ministerio juvenil. Copia el resumen
en las pp. 41 Y 42, pégalos en un lugar visible y permite que los compromisos
influyan en ti durante los próximos meses en las trincheras.
Los diez compromisos máximos de Doug
para el ministerio de los jóvenes
//1. Me moveré despacio
Con frecuencia la rapidez nos lleva al dolor. Recién mudados a nuestra casa, yo
bl'Omeaba con mi esposa acerca de las precauciones en cuanto a sus hábitos de
estacionamiento. Aunque el espacio en nuestro garaje era: algo estrecho, parecía
CJ,llC a ella le tomaba una cantidad de tiempo absurdo colocarse en dicho espa-
CIO. Un día en que yo estaba estacionando su auto, confiada y arrogantemente
entré al garaje mucho más rápido que ella (estoy seguro que ahorré de 10-15
.egundos de su tiempo ), pero también causé daños por más de $250 al romper
tIno ~e lo,s espejos del costado. Mis bromas se detuvieron de inmediato, y esta
experiencia me llevó a un principio de enseñanza ... desde luego, para mis hijos:
In r.]lle parece ser rápido y fácil tal· vez necesite que se aborde despacio y con
euidado. Este principio también se aplica al ministerio para los jóvenes.
Es seguro asumir que tú quieras hacer algunos cambios en la iglesia durante
10. primeros uno o dos afíos. ¡Magnífico! Pero es probable que estos cambios
no necesiten implementarse enseguida. Te garantizo, confiadamente, que hasta
lo. cambios que parecen obvios causan dolor a algunos. Si eres un voluntario,
''''I.rir cambios inmediatos puede comunicar una actitud divisiva o crítica para
,1 ol"rero principal ele101jóvenell, Si erel el obl'ero pl'incipal de 101 jóvene., 1011

17. cambios rápidos pueden parecer arrogantes o revelar una personalidad incon-
formista para la iglesia.
En lugar de hacer cambios inmediatos, mantén un informe de todos los
cambios potenciales tan pronto como se te ocurran. Esto te permitirá conside-
rarlos en oración. Agárrate de esa lista. Continúa siendo un pensador crítico en
la arena a la que Dios te llamó, pero reconoce que no tienes que aplicar todas las
ideas (o ninguna) de las que te lleguen. No te apures. Si estás en esto para una
larga trayectoria, ¿cuál es el apuro? Los cambios apurados a menudo se perciben
como faltos de planeamiento. (He dedicado un capítulo completo para hacer
que el proceso del cambio sea un éxito. Ver el capítulo 11.)
Cuando llegué a la Iglesia Saddleback, en 1992, le dije a mi pastor que nos
llevaría por 10 menos cinco años comenzar a ver un ministerio saludable, equi-
librado, lleno de voluntarios y vibrante. Esta no fue una cifra arbitraria. Yo vine
a la Iglesia Saddleback después de trabajar durante once años en el ministerio
juvenil de otra iglesia. Sabía que no existía un método instantáneo.
Recuerda, Dios no llevó a los israelitas hasta la Tierra Prometida de la
noche a la mañana, ni tampoco espera que tú cambies la iglesia durante los
primeros dos años. Relájate. Prepara tu corazón antes de cambiar tu iglesia.
Recuerda, Jesús empleó treinta años preparándose para tres años de ministerio
(yeso que tenía al factor Dios de sUparte).
//2. Con regularidad revisaré mis motivos y evaluaré mi corazón
Dios honra los motivos puros, y mientras más revises los tuyos, más fuerte será
tuliderazgo y las decisiones qu~ hagas. Si tus motivos son puros, perseverarás,
reproducirás estudiantes ministros, serás ptoduct~vo y contribuirás enciente-
mente, todo esto mientras te diviertes. La mayoría de los conflictOs surgen por
causa de motivos que no son claros, están mezclados o son impuros. Si perso-
nalmente no evaltÍastus motivos, otros 10 harán, y si no son puros, la impureza
será evidente.
Yo he aprendido esto al r~visar mis motivos, continuamente debo hacerme
estas preguntas acerca de mí mismo:
• ¿Por qué quiero dirigir este ministerio?
• ¿Por qué quiero enseñar este material?
• ¿Cuáles son mis motivos para decir sí a esta petición?
• ¿Por qué realmente quiero cambiar este programa?
• ¿Cuándo dejo que las personas sepan que no tengo ni idea de 10 qu~
estoy haciendo?
Tal vez pienses en otras pre-
guntas que necesites hacer-
te. Es bueno que evalúes tus
motivos para así dirigir con
integridad.
Al principio de mi mi-
nisterio yo quería suprimir
una noche de adoración y
alabanza que organizaban los
estudiantes. No había ningún
problema con este programa,
y la mayoría de las personas
10 hubiera considerado una
noche de bastante éxito para
los estudiantes. Le dije a la
gente que 10 quería suprimir
porque no estaba creciendo
y a los estudiantes le consu-
mía otra noche de la semana
(ambas eran buenas razones).
Cuando me miré al espejo
para examinar mis motivos,
VI que 10 que me motivaba
Cl'n que se njaran en mí, desa-
rrollar mi credibilidad y resal-
tlU' mis dones de orador (los
cuales no se estaban viendo
porque los estudiantes eran
lo. que dirigían el programa).
Utilicé las excusas como una
pantalla ahumada para cubrir
verdadera agenda. Todo
plan olía a malos motivos.
.uerte, no cancelé el pro-
pero vi mi fealdad, el lado oscuro que estaba muy cerca a la superficie
muy verdadero,
ParA mantener bien tul motivos, sométete a una evaluación honesta y regu-

18. lar de tu corazón, la fuente de tu crecimiento y liderazgo espiritual. (Escribí un
capítulo completo acerca de la condición de tu corazón. Ver el capítulo 3.)
Me juré a mí mismo nunca dar un curso de preparación si no hablaba
acerca de la vida espiritual de un líder. Por desgracia, empleé varios de mis años
iniciales en el ministerio para jóvenes creando programas elaborados, inven-
tando juegos salvajes y fomentando el crecimiento del grupo para lograr cifras
asombrosas basándome en mi propio poder. Era la antítesis de Juan 15 donde
Jesús nos dice que para dar frutos, permanezcamos en relación con el Padre.
Por el contrario, yo permanecía relacionándome a los libros y revistas para el
ministerio juvenil en lugar de estarlo COnDios y su Palabra. Créame, ahora soy
un hombre diferente y un obrero juvenil mucho mejor debido a la relación de
mi corazón con Dios. No tengo la energía que tenía en el 1979, pero mi iglesia
no tiene al líder falto de madurez espiritual que una vez tuvo mi iglesia previa,
desde entonces he aprendido a darme chequeos regulares del corazón.
//3. Me alejaré del juego de los números
No es necesario estar en un ministerio de jóvenes durante mucho tiempo antes de
oír esta famosa pregunta: «¿Cuántos muchachos tiene en su grupo?» He oído esta
pregunta más veces de las que quiero admitir. Ahora me averguenzan las personas
que hacen esta pregunta. Esto alimenta elmito de que mientras mayor sea el grupo,
mejor es y que el valor de su líder se basa en cuántos estudiantes tenga. Aquí está
mi respuesta carnal a esta pregunta de la carne: «¿A quién le importa?»
Por favor, durante tus primeros años comprométete a no entrar en el juego
de los números. No te Unas al grupo de los obreros jóvenes que erróneamente
basan su valor en cuántos estudiantes asisten a un~¡actividad en particular. Esta
no es una base para determinar los valores.
Carol era una gran voluntaria que trabajaba como obrera de los jóvenes y
dejó el equipo de este mmisterio porque estaba «cansada». Más tarde, cuando
le pedí una entrevista antes de que se fuera, ella admitió que la verdadera razón
era que se sentía ineficiente. Solo tenía tres muchachitas en su grupo mientras
que las otras líderes femeninas tenían por 10 menos el doble que ella. Incluso
como una voluntaria de líder de un grupo pequeño, ella sintió la presión para
aumentar el número de su grupo.
Sinceramente, Carol era una magnífica líder de grupo pequeño, y de haber
tenido más estudiantes en su grupo no habría tenido suficiente tiempo para·.
atenderlas adecuadamente. Ella jugó el juego de los números y al final del juego, i
nuestro ministerio perdió, Carol perdió y las tres niñas también perdiero11. ¡El
juego de los números es un juego que da pérdidas! ¡No seas tonto convirtiéndote
en un perdedor!
Tirar números puede ser emocionante o debilitador dependiendo de con
qui~n e~tés hablando. Mayor no es mejor; más. saludable es mejor. Aléjate de
las iglesias y obreros juveniles que se están dejando manejar por los números,
y ro~éate de los que están motivados para servir a Dios fielmente y de los que
petslguen la salud espiritual.
¿Qué hago si los números son realmente
importantes para mi supervisor?
Primero que nada me gustaría decirte: «Lo siento». Comprendo la presión de
los números y los odio. Por suerte, algunas iglesias usan los números como
herramientas, digamos, para planear y hacer el presupuesto, pero no están
obsesionados con estos. Tener un ministerio saludable les preocupa más que
la asistencia. Pero entiendo que este no es el caso en todas las iglesias, y tal
vez tú estés sintiendo la presión de más ... mayor. .. mejor. No es una cultura
divertida con la cual trabajar.
Paraescribirhonestamente, necesito decir que son pocas las probabi-
lidades, durante un corto período, de cambiar una cultura obsesionada por
los números. Aunque las personas e iglesias pueden cambiar, por lo general
esto no sucede con rapidez. Entonces, ¿qué puedes hacer? Aquí te presento
algunas ideas:
1. Entiende de dónde proviene la presión de los números.
En muchas iglesias, las personas que toman decisiones se sienten mental-
mente cómodas con una mentalidad de ganancias y perdidas. Muchos líderes
de iglesias provienen del mercado, y quieren saber si están recibiendo «el
valor de su dinero». Esa mentalidad se cuela en la iglesia y se convierte en
«¿se justifica el sueldo de los obreros de los jóvenes según la cantidad de
estudiantes que tenemos?» La respuesta a esto no siempre es objetiva, y es
l!Isr que esto se hace feo. La asistencia puede ser una forma de evaluación ,
pero no debe ser la única forma.
Ll!I presión de los números tiene más historia en el pensamiento secular
que lo que tiene en los modelos bíblicos. Pero ya que la iglesia está compues-
t. de personas, y las personas son falibles, este tipo de pensamiento no debe
.orprender ElnEldie.Estés de acuerdo o no con esto, es bueno saber de dónde
vl.n.n 8111 Ide.s.

19. 2. Entiende a tu supervisor.
Procura tener una reunión con tu supervisor para preguntarle cuáles son sus
expectativas. (Lo ideal es que esto suceda antes de comenzar a trabajar. Ver
el capítulo 12.) Una vez que sepas las expectativas, te sugiero que sigas estos
tres pasos:
1. Escribe tus expectativas. Revísalas con el supervisor para asegurarte de
entenderlas correctamente.
2. Si las expectativas no incluyen números, (y es probable que no los
incluya), pregunta si los números de la asistencia están relacionados a las
expectativas, y, si es así, ¿cuáles son las expectativas de los números?
3. Si existe una expectativa numérica, pregunta: «¿Quépasará si esos
números no se alcanzan?»
3. Aprende a comunicarte en palabras de salud en vez de númer~s.
No alimentes el apetito por los números de los demás haciendo declaracIones
de números ((Anoche tuvimos tantos estudiantes».) Por el contrario, esco-
ge declaraciones que reflejen salud ((Entusiasma ver cómo los estudiantes
reaccionan al estudio de la Biblia cuando traen a sus amigos».) Aquí hay otras
acciones que tomar:
• Cuenta historias de vidas cambiadas. Habla sobre el buen trabajo que Dios
está haciendo en las vidas de las personas.
• Usa palabras como salud en lugar de crecimiento.
• Comunica pensamientos progresivos usando términos como alcance,
edificar, aumentar, visión y cambio.
• Prepara a los demás líderes del ministerio juvenil para que se preocupen
más por la salud que por los números. Mientras más personas se interesen
en la salud, mejor será.
/
Por favor, no caigas en la tentación de inflar las cantidades para seguirle
cayendo bien a tu supervisor. Si lo haces, comprometerás tu integridad. Si
tu ministerio está en las manos de Dios, si tú sigues su dirección, si estás
brindando tus mejores esfuerzos, eso es todo lo que puedes hacer. Debes con·
centrarte en hacer lo posible de la mejor manera que sepas hacerlo y confiar
en Dios para lo que está fuera de tu control.
Si eso no es lo suficiéntemente bueno para tu supervisor, tal vez sea la
hora de pedirle a Dios que te lleve en una nueva dirección. No te desanimes.
Existen muchas iglesias saludables y tu próxima oportunidad de ministerio
puede estar en una de ellas.
//4. No criticaré el pasado
Es tentador denigrar el pasado con el fin de hacerte ver mejor en el presente
o como una excusa para justificar un cambio. ¡No 10 hagas! Honra a los que
pasaron antes que tú por el ministerio. Algunos estudiantes desean que tú seas
como el obrero juvenil anterior. Pero Dios no te hizo como esa última persona.
Con el tiempo, los estudiantes seguirán adelante.
Quizá pienses que la crítica del pasado apoya tu credibilidad. Pero si es-
tás trabajando con personas sinceras, estudiantes o adultos, ellos captarán de
inmediato tus verdaderos motivos. Solo los de carácter débil se ganan con el
negativismo. Tus esperanzas de credibilidad solo se verán como una señal de
inmadurez ante los ojos de las personas auténticas.
No caigas en la tentación de hacer que tu predecesor parezca malo al
destacar los problemas que tú tienes por causa de los errores que esa persona
cometió. Quédate callado, toma notas de 10 que las personas valoran acerca
del pasado, y aprende de los que han estado en tu iglesia durante más tiempo
que tú. Al hacerla así, sobrevivirás sus críticas, realzarás tu carácter y modelarás
integridad ante los estudiantes.
Criticar es fácil, pero el carácter descubre la virtud y llama la atención a este.
Propónte fortalecer tu carácter haciendo que los demás se vean bien.
//5. Evitaré la trampa de la comparación
Esta entrega tiene un resultado similar a la del juego de los números, ya que no
te pueden llevar a ningún lado bueno. Tú pierdes cuando te comparas o te llenas
de orgullo por ser mejor que otra persona, o te desanimas porque no das la talla.
Ambas actitudes son erróneas y destructivas. La comparación hace ver 10 que tú
I.bes acerca de ti mismo (o tu ministerio) en contra de 10 que no sabes acerca
ele otro obrero de jóvenes (o su ministerio ). Esta no es una evaluación justa.
I.'lriasveces, durante los primeros dos años, sentirás la tentación de compa-
rarte con otros y te preguntarás si lograrás el éxito ya que no eres como ese otro.
H••ta este día, cuando me comparo con otra persona, me veo dudando de mis
dones y oportunidades en el ministerio. Qué posición tan deprimente es esta.
~tol'aci6n es que desde temprano y continuamente te mantengas fuera de esta
IÍftclción.
Sn nuestro lninisterio tenemos a una maravillosa voluntaria que se llama Li
~CJ,U"uiaba el juego d.ela comparaci6n antes de que incluso se uniera a nues-
. .,quipo de voluntarios. Era la madre de un estudiante y abría su casa todos
i1l'Üircole. por 11noche pa!:',l. rec:ibil'a varios grl.tpos pequefios en distintas

20. ¡Es tan fácil caer en una trampa, y tan difícil salir
de esta! En el ministerio de los jóvenes vivimos en
un mundo que constantemente está midiéndonos:
¿Tienes suficiente talento? ¿Es tu grupo suficiente-
mente grande? ¿Eres lo suficientemente enérgico?
Ojalá que los ministros de jóvenes nos protegieran de
la trampa de la comparación, pero esta se encuentra
por dondequiera, hasta en la iglesia. Y con frecuencia
me veo acercándome a ella, y lo detesto. Por
suerte, tengo amigos como Doug que me quieren lo
suficiente como para recordarme que el amor de Dios
por mí no se basó en la comparación que otros me
están haciendo (ni tampoco con lo que yo mismo me
comparo) yeso me libera en gran manera.
-Kurt Johnston
//6. Me concentraré en las prioridades
Las muchas demandas del ministerio de los jóvenes te mantendrán ocupado •
Pero si te extiendes excesivamente, igual que
una. liga, eventualmente te reventarás. Tie-
nes que hacerte el propósito de manejar tu
habitaciones de la casa. Cuan-
do necesitábamos otro líder de
grupo pequeño, yo me acercaba
a Li para que en oración consi-
derara su papel. Ella me dijo que
no se sentía 10 suficientemente
joven cuando se comparaba a
los líderes que andaban por los
veinte o treinta años de edad.
Tenía miedo que ninguno de los
estudiantes quisiera dejar a los
líderes más jóvenes para estar en
un grupo pequeño con una mamá que estaba por los cincuenta. .
Se comprometió a orar acerca de esta oportunidad. Algunos de los adoles-
centes se le acercaron y le dijeron: «Nos gustaría estar en un grupo pequeño con
una mujer mayor que Seamadre de adolescentes. Necesitamos alguna sabiduría
pata comprender mejor a nuestros padres».
Li se quedó asombrada y con ansiedad saltó a la oportunidad de influir en
estas niñas. Luego me dijo: «No puedo creer que casi perdiera esta oportunidad
increíble de ministrar por estarme comparando con las que tienen veinte años.
Aprendí una gran lección». .
Les puedo decir por experiencia propia que nunca nada es tan atractlvo
como parece a distancia. Desde el espacio, la Tierra se ve como un lugar pací-
fico, sin tensiones, pero en la cercanía es caótica y peligrosa. Cuando te sientas
tentado a compararte con otro voluntario, líder, o tJ;laestrode la Biblia, deténte
y concéntrate en el amor de Dios por ti en ese momento. El amor de Dios
no se basa en cómo das la talla. Él te ama por 10 que eres, no por 10 que tú,
piensas que debías ser. Tus valores como un obrero de jóvenes deben .venir del
amor incondicional de Dios por ti, o de 10 contrario te verás buscando Slempre la
aprobación de los demás y procurando a toda costa ganar algo que otra persona
recibió de Dios en abundancia.
• 1 ,
¡Yo no quiebro estos rn<lndilIO"
tanto corno el obrero de los ¡ov,'
nes al final de la callel ',
,,,
tiempo limitado para llegar lejos. Para hacer esto, necesitas una comprensión
saludable de tus prioridades basadas en los valores y expectativas de la iglesia.
(En el capítulo 12 procesaremos esta idea desde el comienzo hasta el final.)
Para ayudar con tus prioridades debes aprender con rapidez cómo y cuándo
decir no. Sin un sentido de prioridad, dirás sí a cosas que merecen un no, y
habrás perdido tiempo para estas áreas importantes que requieren tu sí. (Ver la
página 32 para ideas en cuanto a la administración del tiempo.)
Una realidad que pronto aprenderás es que el ministerio para jóvenes nunca
se termina. Siempre hay más esperando por hacerse, y te verás queriendo hacer
más. Las decisiones más difíciles que tal vez encares son las que requieren decir
no a más actividades, reuniones con más personas, hacer más.
Hacer más no es necesariamente bueno para el ministerio de los jóvenes.
Hacer las cosas correctas, basándote en tus prioridades, es tener un buen mi-
nisterio de jóvenes a pesar del tiempo que tengas disponible. Yo prefiero tener
a un obrero de jóvenes que conozca sus prioridades y haga las cosas debidas
durante treinta minutos en una semana que tener dos obreros de jóvenes que
tengan horas para emplear y sean inútiles con su tiempo. Los obreros de jóvenes
más eficientes san los que conocen cómo concentrarse en 10 que se espera de
dIos. Las personas que intentan hacer demasiado estarán ocupadas, pero estar
ocupadas no es sinónimo de eficiencia.
No. No. No. ¡Sigue practicando esta palabra!

21. Desarrolla la habilidad de administrar el tiempo
Ha~lo que sea necesario para aprender ahora la habilidad de administrar el
tiempo. Tu eficiencia en esta área contribuirá a tu éxito, otu fracaso, en esta
área, te atormentará durante años.
Aquí hay cuatro realidades que confrontan a todos los obreros de jóvenes
que he conocido:
• ¡Estarás ocupado!
• Solo tienes 86,400 segundos que vivir cada día.
• Lucharás en tu ministerio de jóvenes si no sabes administrar el tiempo.
• Planea tu tiempo o la gente te lo planeará.
Es imposible agregar más horas, así que tú necesitas controlar las horas
que tienes. Si eres el obrero principal de los jóvenes y trabajas parte del
tiempo o el tiempo completo, considera mirar cada día como si tuviera tres
bloques de tiempo (21 bloques en una semana). Por ejemplo, puedes hacer un
bloque detiempo como este:
9 a.m. - 1 p.m.
1 p.m.• 5 p.m.
5 p.m.. 9 p.m.
La manera en que administres estos bloques de tiempo influirá directa-
mente en tu éxito como un obrero de jóvenes. ¿Cuándo estás en tu mejor
momento espiritual, mental., emocional, físico? ¿Cuándo eres menos producti-
vo? Completa tus tareas más importantes durante las horas más productivas
para ti.
Yo estoy más alerta y soy más productivo durante el bloque de tiempo de
la mañana, así que reservo las horas de 9 a 1 p.m. para mis pensamientos y
preparativos más cruciales. Uso las horas de la tarde para las personas y las
reuniones, ya que la interacción me obligan a estar alerta cuando estoy m~s
cansado.
A medida que consideres tus 21 bloques de tiempo a la semana, asegúrate
de reservar tiempo para tu persona, tu familia y otros asunto·s importantes
de la vida fuera del ministerio. Y si eres un obrero de tiempo completo en el
ministerio de los jóvenes, muy raramente deberás trabajar durante los tres
bloques completos todos los días. Si, por ejemplo, los miércoles trabajas los
bloques 2 y 3, el jueves toma el bloque 1 para tu persona. Cuando te habitúes
a ver tu tiempo en bloques, una semana a la ve~, podrás evaluar cómo usar
mejor tu tiempo y hacer planes más eficientemente.
Hay muchos libros buenos y seminarios disponibles en cuanto a la adminis.
tración del tiempo. Pregúntale a las personas de negocio de la iglesia cuál es
el favorito de ellos en la actualidad.
Espero que estés en el ministerio de los jóvenes para unmaratón, no para una
carrera corta. Enseguida debes aprender cómo mantenerte en forma. Ya que el
ministerio para jóvenes nunca termina, y siempre se puede hacer más, aprende a
estirarte a diario, hacer pausas a través de tu día y semana para poderte refrescar.
Descubre lugares, momentos y personas que te brinden un receso del ocupado
ministerio de los jóvenes y te hagan alejar la mente de todas las necesidades
que hay que hacer.
Como soy ministro de jóvenes a tiempo completo, procuro estirarme dia-
riamente para aclarar mi mente del ministerio de los jóvenes. No tiene que ser
largo, pero es necesario que sea refrescante. Mis escapes suceden cuando yo...
• Entreno a los equipos de deportes de mis hijos
• Tomo una Pepsi de dieta y leo el periódico en el Taco Bell
• Juego racquetball
• Corro con un amigo
• Levanto pesas
• Me relajo en la jacuzzi con mi esposa (o en el bautisterio de la
iglesia .... ¡estoy bromeando!)
EHtas actividades me relajan. Cuando me siento fuera de control y creo que
necesito más tiempo en mi día, me siento fuera de la voluntad de Dios. Sé que
Dios no planea para mí más de lo que puedo hacer durante el tiempo que él me
da. Esta misma regla se aplica para ti. Haz una lista de tus métodos particulares
pAI~1lJ:efrescarte. (¡Te recomiendo mucho la cafeína!)
Tal vez esta obligación no te impresione como un buen consejo para el minis-
~io de los jóvenes, pero es crucial para tu eficiencia a largo plazo como líder.
ientras más tiempo estés en tu ministerio para jóvenes, más seguro estarás en
tciones donde tú guías y otros siguen. Eso está bien, es bueno, maravilloso y
ti motivador. Pero Jesús le dio a la iglesia un modelo único de liderazgo que
quiere servicio..Si quieres ser un gran obrero de jóvenes, sirve. Si quieres ser
,timero, sé el (lItitno. Si no puedes servir, no puedes guiar, por lo menos no
O Cristo it1tenc6 que fuera. Cuand~ sirves, tú eres un ejemplo increíble de

22. Cristo para los líderes de la iglesia, miembros y estudiantes. Realmente, nunca
serás más semejante a Jesús que cuando sirves.
Esta es la parte del ministerio para jóvenes en la cual obtendrás la bendición
de Dios por no obtener el reconocimiento humano. Es cuando tú haces un es-
fuerzo extra para recoger la basura en el salón de la Escuela Dominical, ayudar
a alguien en la oficina de la iglesia, cargar cajas hasta el auto de la secretaria,
limitar tus bromas con el pastor acerca de su peluca, dar una hora para ayudar
a doblar los boletines de la iglesia, y ofrecer transporte a un anciano santo.
Estas son las tareas que probablemente no aparecen escritas en la descrip-
ción de tu trabajo pero que se deben escribir en tu corazón. Salta cada vez que
tengas la oportunidad de servir de maneras pequeñas y tu ministerio de jóvenes
se beneficiará debido a tu carácter. Si sirves, no puedes perder.
//9. Seré un aprendiz
Yo vivo un axioma que es popular en mi iglesia: «Todos los líderes son aprendi-
ces. Un líder que deje de aprender, es un líder que deja de dirigir». Aunque esta
actitud requiere una inversión constante de tiempo y sacrificio, sin mencionar
una dieta de humildad, ha aumentado mis habilidades de liderazgo como un
obrero para jóvenes. Solo puedo enseñar lo que sé, y esta verdad requiere que
yo siga creciendo. Este hábito es especialmente importante para mantener una
autoestima decente, ya que muchos de los adolescentes en mi iglesia piensan
que yo no sé nada.
Todos los años me entristecen las convenciones para los ministros de jóve-
nes cuando noto que los ministros de jóvenes veteranos deciden no asistir a las
sesiones de los talleres porque el material no lo traen los oradores con nombres
grandes de la sesión generaL En mi experiencia, algunos de los líderes brillantes,
jóvenes, desconocidos, son los portadores de los métodos más frescos y las ideas
más nuevas, el que ofrece fuertes oportunidades de aprendizaje a aquellos de
nosotros que nos estamos arrugando y perdiendo el pelo.
Hazte hoy el propósito de ser un aprendiz dispuesto y a largo término.
Lee. Escucha cintas grabadas. Comenta ideas con las personas con las cuales
no estás de acuerdo. Siéntate a los pies de los maestros que son más jóvenes y
más viejos que tú. Aprenderás de sus errores, pero un líder sabio es pro activo y
también aprende de los demás. El que tú estés leyendo este libro te demuestra
que valoras este principio.
// 10. Procuraré estar contento
Uno de los temas comunes que oigo de los nuevos obreros de jóvenes tiene que
ver coula inconformidad. Parla general, quieren ver más frutos de su labor y
verlo más rápido. Quieren grandes resultados y recompensas instantáneas y se
sienten abandonados cuando nada de esto se materializa.
Aprendí esto cuando me sentí disconforme con la situación de mi mi-
nisterio, cualquier posición fuera de la iglesia me parecía mejor. La iglesia de
la esquina era invitadora, esa invitación para dar una conferencia me parecía
tentadora, la oportunidad a la cual me negué el mes pasado ahora me parecía
que valía la pena. Todo esto es un síntoma de inconformidad.
El ministerio no es fáciLTal vez los primeros dos años sean los más difíciles
que se experimentan, y a nuestro enemigo le encantaría ver su ineficiencia y que
tú vivieras en la tierra del descontento. Uno de los resultados más frecuentes
del descontento es abandonar su ministerio. Dejar el ministerio para jóvenes
demasiado temprano después de empezarlo, representa hacerle daño a la iglesia.
Los estudiantes dejan de ser francos cuando los adultos rotan a través de sus
vidas. El próximo líder tiene que lidiar con una reacción negativa.
Anika, mi vecina, es una niña que está en el duodécimo grado y en su iglesia
ha tenido cinco líderes diferentes .degrupo pequeño. Anika me dijo que ya ella
!'lO tiene la confianza de hablarle a los líderes de su grupo pequeño. No está

23. segura de que se queden en su puesto. He tratado de invitarla a asistir a uno de
nuestros grupos pequeños, pero no confía en que los nuestros sean diferentes.
Las responsabilidades de corto plazo pueden ser beneficiosas para los adul-
tos, pero perjudican a los estudiantes.
Si quieres sobrevivir, procura estar contento con el lugar al cual Dios te
destinó y los dones que te dio. Deja de mirar del otro lado de la cerca al patio
de tu vecino, y da1egracias a Dios por usarte en donde estás. ¿Has oído el dicho:
«La yerba de tu vecino siempre se ve más verde»? La verdad es que la yerba está
más verde cuando se riega. Así que comienza a regar tu propia yerba.
La inconformidad y el desánimo son parientes de sangre. Si uno se siente
inconforme, casi siempre también se siente desanimado. Ya que esto se muestra
con tanta frecuencia, he dedicado el próximo capítulo a lidiar con el problema.
Y si tú Y tu iglesia todavía están de luna de miel, puedes volver a este tema más
adelante.
La recompeQsa
Esta entrega, y cualquier otra que se te ocu-
rra, forma el fundamento del cual el mi-
nisterio saludable para jóvenes se puede de-
sarrollar. Cuando nosotros, como obreros
de jóvenes, nos comprometemos con estos,
honramos a nuestro Señor, a nuestra iglesia y a nuestros jóvenes. Por favor,
considera en oración el entregarte a estas acciones y deja que ejerzan influencia
en ti a medida que trabajes con los estudiantes, los padres, los empleados de la
iglesia y los voluntarios.
Me alegra que hayas decidido leer este libró. Tengo esperanzas para ti y
para los miles de hombres y mujeres que aman a Dios y a los estudiantes y que
están deseando aprender más acerca del ministerio para los jóvenes. Gracias por
dejarte entrenar por un veterano obrero de jóvenes que todavía está corriendo el
maratón y se preocupa por los que están entrando a la carrera. Por ir un poco
más adelante que tú, quiero que sepas que, desde donde estoy, la vista es mejor,
el terreno es más claro, y la compañía es increíble. Vive según los diez compro-
misos de este capítulo, manténte· corriendo y experimentarás 10 mismo.
Cuando tlJ cambias de ministerios,
lo que con frecuencia estás hacien-
do es simplemente intercambiar
un grupo de problemas por otros.
El ingenuo cree todo lo que le dicen; el prudente se fija por dónde va. El sabio
teme al Señor y se aparta del mal. pero el necio es arrogante y se pasa de
confiado (Proverbios 14: 15-16).
2. Revisaré mis motivos con regularidad y evaluaré mi corazón.
Cuando el rey se sienta en el tribunal. con su sola mirada barre toda maldad.
¿Quién puede afirmar: ((Tengopuro el corazón; estoy limpio de pecado»? Pesas
falsas y medidas engañosas: ivaya pareja que el Señor detesta! Por sus hechos
el niño deja entrever si su conducta será pura y recta. Los oídos para oír y los
ojos para ver: ihermosa pareja que el Señor ha creado! (Proverbios 20:8-12).
Si un hombre tiene cien ovejas y se le extravía una de el/as, ¿no dejará las no-
venta y nueve en las colinas para ir en busca de la extraviada? (Mateo 18:12).
Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien. una cosa
hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está
delante, sigo avanzando (Filipenses 3: 13).
Cada cual examine su propia conducta; y si tiene algo de qué presumir, que no
se compare con nadie (Gálatas 6:4).
-Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante de la ley?
-'11ma al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda
tu mente" -le respondió Jesús-. Éste es el primero y el más importante
de los mandamientos. El segundo se parece a éste: ':4ma a tu prójimo como
a ti mismo. " De estos dos mandamientos dependen toda la leyy los profetas
(Mateo 22:36-40).
7. Marcaré mi paso.
Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la volun-
tad de Dios, reciban lo que él ha prometido (Hebreos 10:36).

24. Pero entre ustedes no debe seresí. Al contrario, el que quiera hacerse grande
entre ustedes deberá ser su servidor, y el que quiera ser el primero deberá ser
esclavo de los demás; así como el Hijodel hombre no vinopara que le sirvan,
sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos (Mateo20:26-28).
9. Seré un aprendiz.
Adquiere sabiduría, adquiere inteligencia; no olvides mis palabras ni te apartes
de ellas. Elque con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios sejunta,
saldrá mal parado (Proverbios 4:5; 13:20).
10. Procuraré estar contento
No digo esto porque esté necesitado, pues he aprendido a estar satisfecho en
cualquier situación en que me encuentre (Filipenses 4:11).
La preguntas al final del capítulo
// Para comentar en el grupo
• ¿Cuál mandamiento será el más difícil para ti?
• ¿Cuál mandamiento te ofrece más ánimo?
// Para reflexión· individual
• ¿Tengo una mentalidad de carrera veloz y corta o una mentalidad de
maratón en lo que se refiere al ministerio de los jóvenes?
• Si renuncio deÍnasiado pronto, ¿cómo afectará esto a la iglesia y/o al
ministerio para los jóvenes?
• ¿Cuál es mi plan personal para evaluar mis motivos?
• ¿Cómo puedo comenzar una conversación honesta con mi supervisor
acerca del «juego de las cantidades»?
• ¿Qué puedo hacer para mejorar el compromiso con el cual tengo que
esforzarme más?
// Acciones a considerar
• Haz una fotocopia de las páginas 39 y 40 Ymanténlas en un lugar
donde las vea todos los días durante el próximo mes.
• Identifica a una persona en tu equipo de ministerio que personifique el
mandamiento con el que más tienes que luchar y escríbele a esa persona
una carta de ánimo diciéndole que él o ella es un modelo para ti.
• Si tu equipo ministerial no está leyendo este libro en grupo, busca a una
persona en tu equipo que lo lea contigo y comenten cada capítulo.

25. ¿Por qué me siento de esta manera7
Lidiar con el desánimo
Tal vez el desánimo sea el sentimiento más poderoso que tiente a los grandes
hombres y mujeres para abandonar prematuramente el ministerio juvenil. Si
puedes aprender cómo navegar entre los altibajos y la corriente del desánimo,
se podrán enumerar muchos años de un ministerio eficiente para jóvenes bajo
tu currículum de la vida.
Algunos de mis amigos del ministerio de los jóvenes que leyeron ensayos de
este libro dijeron: «Después de leer el Capítulo 1 estoy tan entusiasmado que
ya no quiero pensar en el desánimo. Parece tan abrupto». ¡Exactamente! Esa es
la naturaleza del desánimo. En una semana tú puedes pasar del sentimiento de
ser el más eficiente obrero juvenil sobre el planeta a planear tu carta de renuncia
la próxima semana y preguntarte: «¿Por qué me siento así?» Puedes reemplazar
con rapidez «¿Dónde comienzo?» con «¿Será siempre así tan malo?»
Si nos estuviéramos reuniendo cara a cara, podría verlq en tu cuerpo mien-
tras entras en el restaurante: tus hombros caídos, tu personalidad sojúzgada,
tus labios apretados, tus ojos bajos. (En otras palabras, estás esperando que yo
pague la comida.) No te preocupes, ya he visto esto antes, tanto en el espejo
¿Por qué me siento de esta manera? ~

26. como en las caras de muchos otros obreros juveniles. Cuando tú trabajas con
adolescentes, no llevamucho tiempo descubrir estos sentimientos y verte de la
misma manera.
Vamos a reconocer que la tarea del ministro de jóvenes es difícil, las horas
son largas y el ánimo es mínimo. El desánimo es una respuesta razonablemente
natural cuando se pone en esa perspectiva. Los motivos del desánimo pudieran
ser cualquiera de estos:
• Falta de respeto
• Muchas llamadas y correo electrónico que contestar
• Basura en la alfombra de la iglesia
• Falta de comunicación y malos entendidos
• Falta de sueño debido al nuevo bebé
• Conflictos
• Devolver el van de la iglesia con un golpe ... motivado por entrar al
garaje demasiado rápido
• Devolver el van de la iglesia con un golpe ... que causó un muchacho
de 15 años a quien le permitiste manejado
• Críticas
• Expectativas equivocadas
• Falta de apoyo del pastor principal
• Apoyo mínimo de los padres, empleomanía y voluntarios de la iglesia
• Incapacidad para complacer a todos
• Incapacidad para complacer ni siquiera a una persona
• Partes del cuerpo regadas por el salón de jóvenes
((¿Quién va a limpiar este reguero?»)
• Abuso verbal
• Estudiantes que no nos agradan con facilidad
• Luchas financieras
• Cónyuge que no apoya
• Un programa malo
• Tu cheque del sueldo
• Lunes por la mañana
• 24 horas de encierro en tu almanaque
• Un ministerio para jóvenes sin un valor tan alto como otros
ministerios de la iglesia
¿Mencioné el tuyo?Yo he experimentado todos estos. Algunos me han dejado
huellas mientras que otros solo han sido un aguijón. Si los sumo pueden ejerCi':1'
influencia en cómo te sientes acerca de los estudiantes, el ministerio, la iglesiay
hasta Dios. Te sorprenderás pensando: «Dios, si me amas, ¿por qué ese muchacho
está en mi grupo pequeño?»
Lo que causa estar desanimado puede ser diferente a 10 que a mí me de-
rrota. Tus necesidades personales combinadas COntu experiencia única en el
ministerio y el contexto de la iglesia, tanto como las personas de tu mundo,
todo obra junto para formar una poción de desánimo.que no se puede duplicar
en otros obreros de jóvenes. Si existiera una causa universal del desánimo, sería
fácil de identificarla y atacar con pasos de acciones comunes. Pero, ya que somos
tan maravillosamente complejos y diferentes, no puedo presentar un remedio
universal. El desánimo es único para cada obrero juvenil. Básicamente todos
estamos fastidiados de manera única. (No te rindas. ¡Todavía hay esperanzas!)
Tres sentimientos que te desanimarán
en tu peregrinaje espiritual
• No tengo valor: Comparar tu espiritualidad con alguien más no beneficia
a nadie. Juzgar a la otra persona como menos madura que tú, hincha tu
orgullo. Pensar que otro es más maduro te desanima y te deja sintiéndote
inmerecedor del amor y la atención de Dios. Acercarse a Dios es importan-
te, no tu posición con relación a los demás. Sigue adelante y sé «egoísta»
en este tópico enfocándote en tu peregrinaje espiritual y olvidándote de
evaluarte en comparación con otros.
• Me siento culpable: Es común sentirse culpable por perder momentos qe
meditación. El propósito de la culpa es causar arrepentimiento y acercarse
a Dios, sin embargo, la culpa mal guiada con frecuencia aumenta la distan-
cia. Todos los cristianos fallan y la culpa es el murmullo del Espíritu Santo
invitándote a la cruz para bañarte en la gracia de Dios. Cuando te aflojes del
plan de tu crecimiento espiritual, no te vuelvas loco ni trates de ponerte al
día. Simplemente sigue adelante, descansa en la presencia de Dios y pien-
sa que Dios te ama aunque pierdas la cita con él. Su amor no tiene igual.
• Me siento solo: No hay un cristiano maduro vivo que no haya experimen-
tado un surco espiritual. En todo momento, una cantidad importante de
obreros juveniles está cansada, quemada y sintiéndose desconectada de
Dios. Todos los cristianos que tú conoces y todos los héroes espirituales
que admiras han sentido alguna vez la depresión espiritual. Elproblema no
1I limita a las personas que conoces y admiras; sucede desde el principio
y continuar. hasta el fin. Definitivamente no estás solo. No permitas que

27. solo el sentimiento te arrastre más abajo. Toma acción usando las sugeren-
cias de este capítulo.
Cuando yo era un adolescente, desarrollé el hábito de escribir un diario. Tí-
picamente yo escribo mis oraciones y sentimientos. Aquí está algo que escribí
durante mi primer año en el ministerio de los jóvenes:
15 de septiembre de 19 79
Me siento tan solo.Las cosasmarchan bien, excepto que todos losdías me cuestiono mi llama-
do al ministerio ... hasta varias vecesal día. ¿Debiera hacera~odiferente? ¿O simplemente
estoy buscando un escape cuando las cosas se ponen difíciles? Jim me dice que es natural
experimentar corifusión e incertidumbre en losprimeros años del ministerio. Pero,¿valdrá la
pena esta inversión? ¿Quiero emplear mi vida con estos estudiantes? ¿Lo deseo?¿Es sabio?
¿Lo lograré? Quiero estar aquí si es donde Dios me quiere, pero, cry. .. no sabía que tan
pronto se iba a volver tan oscuro. Estoy cansado, solo, corifundido, dolido y necesito a~o de
Dios queyo o no puedo identijicar o estoy demasiado cansadopara preocuparme por eso.
Me molesta admitir esto, pero el diario que sigue a continuación no es muy
diferente, y se escribió casi 23 años más tarde.
4 defebrero de 2002
Hoy me siento mejor, pero talparece que han pasado varias semanas desdeque me hesentido
tan deprimido. Todavía me pregunto si sigo siendo la persona para este trabajo. ¿Todavía
tengo los requisitos necesarios?¿Necesita nuestra iglesiaa a~uien diferente? ¿Mejor? ¿Más
joven? ¿Con más energía? ¿Menos como un padre y más como un amigo? ¿Todavía puedo
dar lo que es necesario? Mi paciencia parece estar desapareciendo en lugar defortalecerse.
Todavía me molestan las cosasque debiera obviary noparece que esté desarrollando una piel
más gruesa. Esta semana me hizo pensar por qué me metí en el ministerio. ¿Fue el llamado
de Dios? Espero que sí. Ahora necesito la respuestay la seguridad de Dios.
Pensé que hojear mi viejo diario sería divertido. Ambiciollaba encontrar páginas
con manchas de Pepsi de dieta, informe de mi peso, sesiones de intercambio de
ideas, oraciones escritas a Dios, nombres de estudiantes que podrían disparar
recuerdos positivos y algunos que yo quería matar (teóricamente, por supuesto).
Las encontré, pero también encontré palabras de dolor personal, y muchas.
Leer las páginas de mi diario me causó volver a vivir esas experiencias. Para ser
honestos, me asustó. Es fácil, o por lo menos lo parece, mantener algunos de es-
tos recuerdos en el pasado distante. Algunos de esos momentos fueron difíciles,
solitarios y temerosos. Cuando comencé, inocente y sin experiencia y derrotado
con facilidad, los recuerdos eran calientes y frescos y mayores que la vida.
En lugar de confrontar mis emociones, me escondí de ellas. Si estaba en públi-
co, me ponía una máscara y pretendía ser el líder santo,· divertido, cuidadoso,
resistente que todos esperaban. Pero, cuando estaba solo temía la quietud, me
cuestionaba mis habilidades y buscaba respuestas. En ocasiones hasta investigué
los anuncios de los clasificados. Con la seguridad de que habría otro trabajo
para mí, algo más fácil, menos doloroso y libre de conflictos (como ser el pastor
principal).
Como todos, seguí batallando las emociones negativas de hoy, pero las batallas
son menos frecuentes, aunque todavía están llenas de fuertes emociones. En
todas las guerras la inteligencia es la clave
para ganar las batallas, así que vamos a ver
la verdad objetiva acerca del desánimo.
iNo te rindasl Todavía la esperanza
sigue llegando.
El desánimo es una realidad en todo ministerio, no solo el ministerio de los jóve-
nes. Dondequiera que vivan personas, existe el pecado. Donde existe el pecado,
abundan los problemas. Donde abunden los problemas, aparecerá el desánimo.
¡Cuenta con esto! Cuando aceptas ministrar, también aceptas experimentar
períodos de desánimo. Cualquiera que no admita temporadas ocasionales de
desánimo es codueño de una casa en la Isla de la Fantasía. Aqui están algunas
realidades ásperas.
// El desánimo es doloroso
Los cristianos pueden ser magníficos escondiendo sus sentimientos. ¿Alguna
vez has experimentado esta pregunta y respuesta?:
«¿Cómo le va?»
«Bien. Alabado sea el Señor. ¡No podría irme mejor!»
¡Vamos! ¿Realmente? O es esa tu respuesta cristiana socialmente condicio-
nada? ,Cómo puedes estar bien cuando ese estudiante por el que has estado
preocupado te acaba de enseñar su dedo del medio y te insultó con palabras
¡toseras para ti y tu mamá? Tú no estás bien.
Muchas iglesias se han convertido en lugares en donde es imposible revelar
tu. interioridad.es cUal1doestás dolido, especialmente si ocupas una posición de
lLClerazio.Pero que otros líd.eres 110sean transparentes no quiere decir que no
••t'n c4oHdo••El de.ánimo duele. Puede. echarle un cubo de hielo a tu ánilno,

28. causar cicatrices a tu corazón, enojarte con relación a Dios, afectar tus objetivos
e impedir tus relaciones con los demás.
Recuerdo estar tan desanimado luego de una reunión con los voluntarios
que tomé una semana por enfermedad inmediatamente después. Estaba enfer-
mo, dolido hasta los huesos. N o podía hacer que mis líderes se comprometieran
con algo, y su apatía parecía ser una declaración acerca de mi liderazgo. Tomé
su rechazo tan personalmente que sentí que cada uno de ellos, con sus acciones,
me estaba diciendo: «Doug, no eres un líder, eres un perdedor» y que luego me
pegaban por el estómago. Y; por si eso no me desanimara 10 suficiente, después
que regresé nadie notó que yo había estado ausente.
// El desánimo siempre es inoportuno
He descubierto que la frecuencia del desánimo es la verdad más humillante y
aleccionadora acerca del ministerio de los jóvenes. En mi experiencia, el de-
sánimo aparece luego del éxito: un retiro poderoso, un programa de alcance
dinámico, un viaje misionero que cambia vidas. A menudo las altas espirituales
están seguidas de las bajasdesanimantes.
Esta cadena impredecible de hechos es el motivo por el cual me encanta
leer acerca del profeta Elías. Yo me relaciono a él. Después de estar junto a sus
enemigos y experimentar un increíble retiro durante un fin de semana cuando
Dios destruyó a 450 profetas de Baal, Elíasexperimentó una baja desesperada.
Entonces ... ¿Quién es la
Jezabel de tu vida?
La reina Jezabello intimidó, y él corrió para salvar
su vida. Él quería morirse.
¿No crees que Elías podría estar en un alta espi-
ritual? ¡Yo sí!Yo estaría bailando por las calles sacudiendo mi espada sangrienta
y hablando acerca de 10 perfecto que es el tiempo de Dios. Pero por alguna
razón Elías no podía ver más allá de las amenazas de la reina al poder de Dios.
¡Por favor! ¿El poder de Dios contra el poder de Jezabel? No se puede igualar.
Pero en medio de su desánimo, agarraron a Elías desprevenido por causa de sus
emociones y no pensó correctamente.
// El desánimo es egoísta
La verdad más repulsiva es que el desánimo es el enfoque de mí mismo. Me
desanimo por causa de mi situación, por 10 que alguien me dijo, por causa de
la manera en que me trató un estudiante, por la manera en que unos padres me
avergonzaron, porque el equipo de liderazgo no confía en mí, porque el pastor
cuestiona mi liderazgo. Es todo auto centrado, feo y equivocado.
A las personas desanimadas les gusta revolcarse en su desánimo. Dicen así:
«Estoy desanimado. Vaya estar desanimado. Y nadie va a cambiar la manera
l'l1 que me siento. Déjenme solo. Ayyy.El desánimo continúa mientras que me
l'stén enfocando».
Vamos a dejar esto y seguir adelante.
Creo que algunos días (o semanas arneses) de desánimo son un tiempo oscuro.
El desánimo da a luz: desespero, rechazo, falta de esperanza y depresión. Todos
!lereúnen para entorpecerme. Estos sentimientos no me animan a hacer una
fiesta y relacionarme con las personas.
Cuando estamos desanimados es más fácil evitar la gente que invitarlos
I nl1estro dolor. Nos engañan las mentiras como estas: «No puedo dejar que
me vean de esta manera», «Otros no
me l}uerrán ver así», y «Yo solo con-
tl:ollll'é esto». Estoy solitario porque
evito a los hermanos y hermanas en
Cri.to, eSl)Sson los que más necesito
y 1011 más capaces de ayudarme. Lo
;ue tnlÍe necesito, 5011 los que más
',ncio a evitat',

29. ¿Estás deprimido ahora? Antes de contemplar el suicidio ministerial o algo
peor (como dejar este libro a un. lado ), vamos a descubrir algunas esperanzas
en el medio del desánimo.
Esperanza en medio del desánimo
Hay esperanza, y, debido a que el Dios del universo está invo1ucrado, esa esperan-
za es abundante. La luz está allí para ti. No pierdas la visión de la eterna luz en
medio de la oscuridad temporal. Cuando el desánimo te ataque, cuenta con Dios
para usar esa temporada en tu vida que aumenta la eficiencia de tu ministerio.
Aunque mi visita al diario no fue divertida, me dio una perspectiva, fue
emotiva y eventualmente me animó. El ánimo vino cuando reconocí que Dios
ha sido fiel durante tres décadas en el ministerio juvenil, continuamente com-
probando su carácter y formando el mío. No soy la misma persona que era
cuando comencé en el ministerio para los jóvenes. (Y por suerte ya no me visto
con los trajes típicos de la década de los 70.)
Personalmente, desearía que Dios usara un método más fácil de madurar-
nos, pero por alguna razón espiritual, el desánimo parece preceder la eficiencia.
Tal vez Dios use períodos de desánimo para llevar tu vida y tu ministerio a
lugares más profundos y mejores.
Pasos prácticos para batallar con el desánimo
Como revelami diario, los primeros meses en el ministerio fueron una tempora-
da. de la vida aplastante y desalentadora. Me encantaría decir te que yo solo tuve
que salir adelante simplemente soportando ese ataque inicial con el desánimo ..•
luego experimenté 20. años más de un. ministerio sin dolor alguno. No puedo
escribir eso con integridad. De vez en cuando las ideas desalentadoras vienen ~
mi vida y ministerio, pero hoy estoy mejor preparado para reaccionar ante esos
momentos, días y hasta semanas.
Aquí hay algunas verdades que aprendí. Considéralas y personalízalas en
Clraci6ncuando tu peregrinaje te lleve a la tierra del desánimo.
11Ten la confianza de saber que no estás solo
redos pasamos ciertas luchas, algunos asuntos, algunas ".ergüenzas, algunos
reto., Así que identifica los asuntos específicos con los cuales estás luchando, o
Umtealos a los roo principales, y reconoce que tú simplemente eres una parte
•••1,rIZa humana. Tllt10 eres el único que lucha con estos asuntos, no impor-
qcu.ale •• e.~,Aunque quizá sea~'1dolorosos, no son ltnicos para tu iglesia o

30. Estoy considerando cambiar mi sitio
de la Internet de www.dougfields.
com a www.otrodesastredoug.com
tu ministerio con los jóvenes. Todos nos
animamos luego de reconocer que no es-
tamos solos en nuestras luchas.
Todos los meses me rect,lerdanel poder de esta verdad cuando envío un breve
devocional a los obreros de los jóvenes en mi lista del sitio de la Internet para el
carteo electrónico. Lo típico es que yo escribo acerca de algún problema, tensión
o temor que he experimentado durante el mes. Sin excepción, cuando comento
alguna experiencia dolorosa, inmediatamente me inundan las respuestas de obre-
ros jóvenes que están emocionados al escuchar acerca de mi dolor porque ellos
también 10 están experimentando. Si la miseria amara la compañía, entonces debe
haber una fuerte comunidad entre los obreros juveniles de la actualidad.
// Busca a un mentor experimentado, pero neutral
En Tito 2, Pablo motiva a las mujeres y a los hombres viejos para que sean ins-
tructores, ayudantes y mentores para las mujeres y los hombres más jóvenes.
¿Has identificado a un mentor que te ame y te motive? La persona ideal
tiene experiencia ministerial y comprende el mundo del ministerio juvenil en el
que vives.Busca a alguien mayor y más sabio, que se preocupe por ti y se interese
en que logres éxito. Tal vez prefieras que esta persona no sea de tu iglesia para
que así puedas contarle con libertad tus experiencias y sentimientos. Deja que
pase un tiempo para que esta relaci6n se desarrolle.
Cómo encontrar a un mentor
Quisiera que las siguientes cinco ideas para encontrar un mentor se llamaran
«Func;ionatodo el tiempo». Pero no es así. Obtener la relación con un mentor
no se puede limitar a cinco pasos fáciles. Estas ideas te ayudarán a dirigirte
en la dirección correcta. Estos parecen ser los pasos más comunes que mis
colegas han tomado para encontrar y mantener mentores.
Orar
No subestimes el poder de orar y seguir la dirección del Espíritu Santo. Pídele
a Dios que te guíe a un mentor. Cuando lo encuentres, asegúrate de decirle
a la persona: «He estado orando a Dios para que me guiara hasta ti». Espera
hasta después que la persona acuerde ser tu mentor antes de decirle que Dios
lo escogió para que fuera tu mentor.
Buscar
Busca personas dentro y fuera de la iglesia. Pregúntate:
• ¿Quién me impresiona como una persona madura espiritualmente?
• ¿Quién me inspira?
• ¿Quién me anima?
• ¿Quién me confronta con cariño?
• ¿Quién cree en mí?
• ¿Quién me reta?
• ¿Quién me intriga?
• ¿A quién yo respeto?
• ¿Quién ha alcanzado alguna de las metas que yo me he establecido?
• ¿oe quién hablan bien los demás?
• ¿A quién va la gente para buscar consejo?
Cuando reúnas varios nombres basándote en las preguntas anteriores,
observa sus vidas con la idea de que uno de ellos se convierta en tu mentor.
Mientras los observas, dale prioridad a tu lista: primera elección, segunda ...
Pedir
Después de seguir a Dios en oración y observar sus vidas, es hora de pedir. Yo
sé por experiencia propia lo atemorizante que esto puede ser. Pero cuando tú
quieres crecer y ser retado, pedir es bueno, quizá hasta transformador para tu
vida, Es un honor que a uno le pidan ser un mentor, tú lo estás pidiendo por-
que respetas a esa persona y la vida que vive. Escoge el nombre que tengas
In primer lugar y sigue adelante.

31. La persona que tú quieras para que sea tu mentor, puede ser tu ideal, pero
tal vez esté demasiado ocupada para este tipo de relación. Al pedírselo, piensa
que es posible enfrentar algunos rechazos, por esto, o por cualquier otra razón.
(pero no permitas que esto te detenga. Deja que tu mentor potencial sea quien
lo decida.)
Que a uno le pidan ser un mentor puede parecer como una responsabilidad
abrumadora. Tú puedes medir el tamaño de tu petición si sabes exactamente
lo que estás buscando. (Ver el próximo punto.)
Aclarar
Cuando le pidas a alguien que invierta tiempo contigo, asegúrate de haber
pensado lo que estás pidiendo. ¿Qué ambicionas obtener durante el tiempo en
que se reúnan? He quieres reunir con esa persona una vez a la semana o una
vez al mes? ¿Le quieres hacer preguntas a tu mentor o prefieres que tu mentor
te instruya? ¿Quieres leer un libro juntos para luego comentario? Mientras
más específico seas, más seguro será que recibas una respuesta realista. Haz
pedidos específicos y espera ver qué sucede.
Respetar
Cuando te reúnas con tu mentor, respeta el tiempo que esa persona te conceda.
• No llegues tarde.
• Ofrécele pagar si se reúnen para comer.
• De vez en cuando envíale una carta de agradecimiento.
Las personas se sienten más deseosas de dar su tiempo si saben que el
recipiente lo valora.
// Busca a un amigo optimista fuera de tu ministerio juvenil
De la misma manera que es crítico relacionarse con otras personas que también
sientan la pasión por el ministerio de los jóvenes, es igualmente importante
tener amigos fuera del ministerio. Pasa tiempo con un amigo que te haga reír,
pensar, que te rete. Alguien que, además, te dé algo que hacer. Ese tiempo juntos
10 pueden pasar en el gimnasio, comentando libros o películas mientras toman
una taza de café, desempeñan un hobby, cualquier cosa que no sea el ministerio
para j6venes. ¿Por qué? Porque tú necesitas un día de descanso, tanto como
necesitas una relación de descanso sabático, lejos de las tareas del ministerio.
En mi vida, cuando todo mi mundo es
el ministerio para los jóvenes, no solo me
desanimo sino que a veces descubro que no
, ,
,
<<Í¿Será posible tener amigos qUl'
no sean adolescentes?l"
i Un ministro jllViJI1/1 !lesnnlllla!lo
I
me importa para nada. No digo: «No me importa», pero mis acciones, o la falta
de ellas, deja ver este mensaje con claridad. Una vez un estudiante me llamó por
teléfono llorando, queriendo hablar y, sin embargo, le dije a la recepcionista que
tomara el mensaje. (Esto realmente le dolió a mi hija.) Una madre vino muy
asustada a mi oficina para hablar acerca del problema de drogas de sUhijo, y yo
me escondí para evitar la discusión. (Eso realmente le dolió a mi esposa.) He
permitido que mi mente divague durante las reuniones, soñar despierto acerca
de pintar la furgoneta de la iglesia y renovarla por dentro y por fuera.
Aunque quizá tú consideres mis acciones inapropiadas, estas revelan un
verdadero retrato de 10 que abunda en un corazón desanimado. De vez en
cuando todos actuamos igual. La apatía es la respuesta protectora de un líder
desanimado.
Cuando salgo y juego, hablo, viajo, juego apuestas (estoy bromeando, quería
. saber si habías seguido leyendo, realmente yo no viajo) o socializo con amigos
que no hablan conmigo acerca del ministerio juvenil, de nuevo me siento dis-
puesto a trabajar. Es asombroso lo que pueden hacer unos amigos, únicos, fuera
del ministerio juvenil, para vitalizar mi espíritu.
// Reconoce que no todos te entenderán a ti y a tu ministerio
Una lista de quejosos en potencia puede durar por un buen tiempo: padres, es-
tudiantes, líderes de la iglesia, el administrador, el conserje, personas que no van
a la iglesia, la persona que te pinta las uñas, la esposa del pastor. Todos tienen
>lIgoque decir, ideas que aportar, una crítica que hacer y una nueva visión que
tú debes oír. Aunque es importante escuchar y aprender, a veces necesitas algo
más que soportar esa audición. Sé amable. Sonríe. Asiente con la cabeza. Sigue
adelante sin pena. Básicamente es difícil para los demás entender por completo
el mundo del ministerio juvenil hasta que 10 viven.
Lisha es una mujer maravillosa de nuestra iglesia aunque ahora «ella 10
experimentó». Durante años me causó mucho dolor por causa de mi pobre
habilidad para la contabilidad y por las faltas cometidas al no seguir los pro-
eedimientos financieros. Lisha tiene la difícil tarea de coleccionar los recibos
de las personas desorganizadas como yo, (Me lo ha dicho cientos de veces.) Sé
que debo mantener mis recibos, pero en el medio de acorralar a los estudiantes
p.ra el campamento y manejar las pequeñas crisis del ministerio, se me olvida
p.didos O los pierdo. Cuando regreso a la iglesia me espera una de esas repri-
mendas vergol1:tosas dOl1dese me acusa de ser irresponsable.
Recientemente U.ha fue aun viaje misiol1ero COl1110sotl'OS.Ella estaba

32. No, no terminó todo hoy, ni la semana pasada, ni el mes pasado. '{, sin embargo,
estás realmente, realmente atrasado. ¡Está bien! Es obvio que si estás atrasado por
dejar de ir al trabajo semana tras semana, es un problema. Pero si estás molesto
porque se te han perdido algunos detalles, ¡bienvenido al ministerio! Nunca vas a
lograr hacerlo todo. Y si crees que lo has logrado, solo es porque descuidaste algo.
Así que sacúdete la culpa y piensa que todos estamos atrasados en el trabajo. Si
quieres durar más de seis. a dieciocho meses en el ministerio, debes reconocer la
importancia del mandamiento de Dios para tomar el descanso sabático.
Algunos días luché con esto y me robé solo unos momentos para escribir
un correo electrónico o contestar una llamada durante mi día libre. Fui a
oficina con la idea de estar treinta minutos y con rapidez se convirtieron en
tres horas. Algunos días soy tan arrogante que digo:
«Estoy muy ocupado para tomar un día libre».
Agradezco mucho el que esos días hayan pa8'fl-
do. Con la ayuda de mi esposa descubrí que no valía la pena dejar el descanso
sabático.Al final, ¿a quién le importa si una carta paralos padres
en lugar del lunes? Tú serás sabio si buscas a un amigo que te fUerce a
día libre que no se pueda negociar. ¡No te 10 pierdas! Mientras más demores
sin tomar un receso, más te durará el desánimo.
¡Sí... esto también se
aplica a los voluntarios!
recargarte. Si eres un voluntario,
Mientrasintentabaagregarideasallibrode mi
escápate de vez en cuando de un esposo,me sentí sobreabrumada,ineficienteydesa-
programa del ministerio juvenil nimada.Despuésde undíaincreíblementeocupado,
fl estoycansadaytodavía atrasada. Confrecuenciame
para re exionar, reagrupar y re- .
sientocbmosi me quedaracorta. Soyunamadreque
cargarte (pero no emplees el día se quedaen lacasa, conregularidadsientocomosi
libre para ver laTV o ponerte al una bombahubieraexplotadoen micasa yloúltimo
que quierohaceres quedarmeen ella.Cuandonome
día con el lavado de la ropa). quedoen lacasa, mividaes andarcon mishijosy
Durante los días del minis- repetir«Tequiero»mientrassalencorriendodelauto.
terio de Jesús, el tiempo a solas y comounaobrerajuvenilvoluntaria,porlogeneral
me sientosinpreparaciónalgunae ineficiente.
era una parte íntegra del vaivén Yaestá llegandolafechaen quetengoquellevar
de la vida a medida que se dirigía a Méjicoa unosestudiantes,y noestoypreparada.
d E Nohe hechounbuentrabajocuidandoa losestudian-a to as partes. . n vista de que
tes duranteestos viajesmisionerosynomesiento
viajar de un lugar a otro del mi- espiritualmentepreparada.Noobstante,sé quedebo
nisterio con frecuencia consistía seguiradelante,ningunade estas circunstanciasvaa
d
cambiar,porlomenosnode inmediato.Sí,heestado
en un ía de viajOe, esto le daba
aquíantes. Dougyyohemosministradojuntosdurante
más que tiempo suficiente para muchosaños.Yporsuerteveoque Dougcumplelos
l'star a solas, forjar sueños acer- principiosde loscualesescribeaquí.ADouglocritican
ea del futuro, evaluar su minis- abiertamenteportodo,muchomásquea mí.Asíque
éltomatiempolibrede su ocupadavidaparaestar
t"erio y sencillamente disfrutar la quietoy escribiry pensaren loqueDiosestá haciendo
belleza de la creación. Caminar ensu tiempode desánimodelministerio.iYeso
realmentemeanima!
debe haberle dado el tiempo Asíqueahoramismosé quedeboseguiradelante:
para recargar su cuerpo. Amedidaqueclamoa Diosenmediode misdesáni-
Muchos de nosotros no ca- mas,élcambiamisgemidosenacciónde graciasy
yorecuerdoquesoyimportanteparaél,y quea él no
minamos a nuestros destinos, leimportalolimpiaqueesté micasa, nilobienque
Mlll'stra manera de viajar es el «sirvodetaxista})niinclusolobienqueministroa los
Automóvil. Si no estamos co~ estudiantes.Estaverdadmeda laesperanzay laforta-
lezade mantenermeen lamarchaycontinuarsiendola
1~l'il'ndo como un ejercicio ante mejorCathyquepuedaser paraél.
11 próxima luz del semáforo, a -Cathy FíeldsL- ~ ~
n'1el1udo estamos enfrascados en una llamada mediante un celular, escuchando
1'01' radio un programa fascinante de llamadas telefónicas, afeitándonos, pre-
la lección de la Escuela Dominical, o comiendo apurado un tardío
t!ntLtH~rZcJ.El viaje actual no provee mucha oportunidad para reflexionar, así que
ocasiones tenemos que planear un tiempo extendido para estar a solas.
encargada del dinero para el viaje y se le perdieron la mitad de los recibos.
(Estoy exagerando solo un poco.) Cambió de opinión. Sé que no debiera ni
siquiera sonreír en cuanto a esto, pero tengo que disfrutar la ironía hasta que ella
encuentre otra área de mi ministerio por la cual reprimirme. Ahora Lisha se ha
convertido en un maravilloso apoyo para mí, reconoce el caos que sucede y me
acepta mucho mejor lo que hago, o dejo de hacer, porque ahora lo entiende.
No todos van a ser como Lisha. Algunos no comprenderán. Lo único que
tú puedes hacer es darles tus responsabilidades durante un año y luego obsér-
valos sufrir. Ya que es difícil que eso suceda, prepárate para la incomprensión.
// Planea un tiempo para estar a solas
Un día libre con frecuencia incluye responsabilidades que no son del ministerio
como lavar, ir a la consulta del médico, limpiar la casa, pasar tiempo con
familia, visitar a un amigo, tener una lobotomía frontal. Por otra parte, un
solas, es un día de ministerio que se enfoca entu corazón y en tu mente. Silaiglesia
te paga, tómate un día libre de trabajo al mes para reflexionar, reagruparte y
11Aclara el montón
C01"1'I'1I. dgunos sacos de basura y limpia por 10 menos tres veces al año. Bota
lIe. montones de papeles que planeas leel' algún dfa, las 75 notas adhesivas