El documento habla sobre el Síndrome de Estrés por Tráfico que experimentan los conductores en los atascos. Este síndrome causa ansiedad, frustración y menor calidad de vida, y aumenta la probabilidad de sufrir accidentes. Cada vez más personas usan motos en las ciudades para reducir los tiempos de viaje y evitar este síndrome, ya que las motos ocupan menos espacio que los coches y se mueven más fácilmente en el tráfico.
1. Dos ruedas contra el estrés
Cuando las distancias son largas para ir a pie y la bici es un peligro, la moto constituye una valiosa
respuesta a los problemas de movilidad
ANA DE SANTOS 28 OCT 2014 - 12:37 CET
La pesadilla de todo conductor es verse envuelto en un atasco de tráfico, sobre todo
cuando hay prisa por llegar a algún lugar. De hecho, se ha llegado a acuñar un nuevo
término: “Síndrome de Estrés por Tráfico”. Básicamente, las personas que tienen que
enfrentarse con frecuencia a estas situaciones muestran una reacción exagerada a los
pocos minutos de haber entrado en un atasco: comienzan a sudarles las manos,
experimentan dolor de cabeza, pierden la capacidad para concentrarse y, obviamente,
sienten ansiedad y frustración.
La Dirección General de Tráfico (DGT) alerta sobre las consecuencias del Síndrome de
Estrés por Tráfico: menor calidad de vida y mayor probabilidad de sufrir accidentes. Según
Miguel Sánchez, marketing manager de GT Motive, compañía experta en la gestión de
siniestros, los embotellamientos aumentan (entre un 12 % y un 18 %) la posibilidad de
sufrir un accidente. El estrés y la fatiga son las principales causas. “El 76 % de los
conductores conduce con estrés y los hombres presentan un mayor riesgo de sufrir un
siniestro en estas condiciones”, afirma Sánchez.
La DGT divide el proceso de estrés al volante en tres fases: reacción de alarma, fase de
resistencia y fase de agotamiento. Cada una de ellas provoca agresividad, hostilidad,
competitividad, impaciencia, menor prudencia, conductas temerarias y menor respeto a las
normas.
2. David Moxon, profesor de psicología del Peterborough Regional College, es pionero en el
análisis del estrés por tráfico y recomienda “realizar respiraciones lentas y profundas,
respirar fragancias agradables y escuchar música de relajación” para liberar este
sufrimiento.
Quien va al trabajo caminando o en bici tiene, según varios estudios, mayor nivel de
bienestar que quien va en coche o transporte público. Pero cuando las distancias son
largas para ir a pie y la bici es un peligro, las motos constituyen una valiosa respuesta a los
problemas de movilidad. Cada vez más ciudadanos utilizan scooters en las ciudades para
reducir los tiempos de viaje (entre un 50 y un 70 % para un mismo recorrido urbano),
evitando así verse atacados por el Síndrome de Estrés por Tráfico.
Su uso evita congestiones en las horas punta y no solo beneficia al conductor sino a la
ciudad. “Ocupan tres veces menos espacio en circulación que un coche y se filtran entre el
tráfico congestionado. Según un estudio de las autoridades de Bruselas, si el 10 % de los
conductores se pasara a la moto se reduciría un 40 % el tiempo de congestión en hora
punta”, afirma Pedro Javier Díez, responsable de Movilidad Segura y Medio Ambiente
de ANESDOR.