2. LA ESCUELA AL CENTRO DEL SISTEMA EDUCATIVO
La escuela se debe concebir como unidad básica de organización, integrada
fundamentalmente por maestros, directivos, estudiantes y padres de familia, que tiene
el conocimiento y la capacidad para lograr que el sistema educativo se oriente al
aprendizaje y desarrollo de todos y cada uno de los estudiantes.
Fortalecer a la comunidad escolar como centro del sistema educativo permite orientar
los recursos y las acciones hacia el objetivo único de brindar una educación de calidad
con equidad. Esto es posible a través de la coordinación de esfuerzos de los actores
involucrados en torno a los propósitos y prioridades educativas planteadas en la Ruta
de Mejora que cada escuela define.
3. HACIA UN ESCUELA QUE FAVOREZCA LA CULTURA DEL APRENDIZAJE
El objetivo es sentar las bases para construir centros escolares que fomenten el trabajo colaborativo y
colegiado, el aprendizaje entre pares y la innovación, en ambientes que promuevan la igualdad de
oportunidades y la convivencia pacífica, democrática e inclusiva en la diversidad. El nuevo enfoque busca
impulsar la planeación estratégica, como también nueva gestión pedagógica busca fortalecer los
liderazgos directivos, las prácticas docentes flexibles, la participación social responsable, y un mejor uso
de los recursos de la escuela, con base en principios de ética, transparencia, eficiencia y rendición de
cuentas.
El Modelo promueve que este espacio de aprendizaje se extienda más allá de la escuela, en la
construcción de redes de aprendizaje, por medio de los Consejos Técnicos de Zona, reuniones de
escuelas, Academias y redes virtuales. La supervisión escolar (supervisor y asesores técnico–
pedagógicos) los estudiantes, como los principales actores, aprenden a aprender como parte activa de
esta comunidad y se comprometen con su aprendizaje.
4. LA ESCUELA COMO UNA COMUNIDAD CON AUTONOMÍA DE GESTIÓN
El nivel básico como en el medio superior, la dirección de la escuela debe ser el engranaje que
articule a la institución con el resto del sistema educativo, y ejerza el liderazgo pedagógico que
conduzca a la conformación de una comunidad escolar con una visión, objetivos y metas
acordadas mediante el trabajo colaborativo.
Por medio de los Consejos Técnicos Escolares en educación básica y las Academias en la
educación media superior, es preciso trabajar para instrumentar el planteamiento pedagógico
que derive en proyectos de enseñanza de los docentes. Con ello es posible lograr que, tanto los
objetivos como los contenidos generales del currículo nacional de educación básica y el Marco
Curricular Común de la educación media superior, se cumplan a cabalidad y sean
contextualizados a cada grupo específico de estudiantes.
5. Ruta de Mejora, los Consejos Técnicos Escolares y las Academias deben orientar sus metas y
acciones como son:
-primero, promover la normalidad mínima escolar para asegurar las condiciones básicas en el
proceso de enseñanza–aprendizaje.
- La segunda prioridad está vinculada al acompañamiento de los estudiantes con la detección y
atención oportuna de aquéllos en rezago para prevenir la deserción escolar.
- En tercer lugar, cada uno de los estudiantes debe adquirir los aprendizajes esperados y
desarrollar la competencia de aprender a aprender.
- Cuarto, cada escuela ha de construirse como un espacio de convivencia pacífico, inclusivo y
participativo, donde niñas, niños y jóvenes aprendan a convivir.
- Quinto, la mejora del trabajo docente en el aula debe basarse en el análisis y la reflexión
compartida.
establecer estrategias para evaluar el aprovechamiento de los estudiantes y combatir
oportunamente los factores que motivan el rezago y el abandono. En la educación obligatoria, el
trabajo colegiado docente —planeado y sistemático— debe consolidarse como un componente
clave para fortalecer y actualizar el conocimiento pedagógico de los contenidos; para mejorar el
desarrollo de interacciones significativas.
6. Asistencia, acompañamiento y supervisión pedagógica
Modelo Educativo y el desarrollo profesional de los docentes, es avanzar en la consolidación de
sistemas de apoyo técnico–pedagógico para atender las necesidades específicas de las escuelas y
los docentes, y acompañar el cumplimiento de su labor de acuerdo con las políticas nacionales.
Supervisión, integrada por el supervisor escolar como su líder pedagógico y los asesores
técnicos–pedagógicos expertos en la nueva pedagogía que debe instalarse paulatinamente en
cada una de las aulas, ha de fortalecerse en sus capacidades técnicas con mejores condiciones
operativas y organizacionales para brindar apoyo, asesoría y acompañamientos cercanos a las
escuelas. Esta asistencia técnica especializada debe responder a las necesidades específicas que
planteen las escuelas y atender de manera prioritaria a los contros escolares con resultados
educativos menos satisfactorios en cada zona escolar.
La Ley plantea que la asistencia atienda cuatro aspectos fundamentales:
-El desarrollo profesional docente
-El fortalecimiento de la escuela y el ejercicio de la autonomía de gestión,
-Las capacidades de evaluación interna,
-El uso de los resultados de evaluaciones externas.
7. La supervisión y la asesoría pedagógica deben transformarse para acompañar a las escuelas en
la concreción curricular. En particular, la asesoría pedagógica debe orientar a la escuela en la
forma en la que los planes y programas de estudio se imparten y consideran la situación
específica de cada escuela y las características regionales y culturales de la población escolar.
Es importante que las supervisiones visiten las aulas para apoyar a los docentes en el uso
efectivo del tiempo, en la detección de estudiantes en riesgo de abandono, en la atención a sus
problemas de aprendizaje y en la transformación de las prácticas pedagógicas acorde con el
Modelo Educativo. deben brindar asesoría respecto al aprovechamiento del material didáctico
así como el establecimiento de ambientes de aprendizaje y de convivencia escolar
8. PARTICIPACIÓN SOCIAL EN LA EDUCACIÓN
Las familias y las comunidades tienen un papel destacado en el buen funcionamiento de las
escuelas y en generar ambientes propicios para que los estudiantes aprendan.
La colaboración de los padres de familia y las escuelas representa ventajas particularmente
importantes para lograr que la educación sea integral.
Las normas y prácticas que rigen la participación de los padres son muy relevantes para construir
comunidades educativas más sólidas. Se debe trabajar con maestros y directores a fin de que en
los Consejos Técnicos Escolares se tomen decisiones que faciliten la colaboración de los padres
de familia en aquellas tareas que fortalezcan los resultados educativos.
9. Las escuelas el apoyo de instituciones y organizaciones de la sociedad permite aumentar el
capital social y cultural de los miembros de la comunidad escolar, habilitar estrategias asociadas
al desarrollo de planes de vida y desarrollo personal de los estudiantes, así como contar con
información y orientación pertinente y actualizada.
Una estrecha colaboración con los sectores productivos permite asegurar el desarrollo de las
competencias que posibilite a nuestros estudiantes una inserción exitosa, tanto al mundo laboral
como a una carrera universitaria. Se trata de consolidar una vinculación capaz de contribuir a la
formación de los ciudadanos del siglo XXI que nuestro país requiere.
10. INFRAESTRUCTURA, EQUIPAMIENTO Y CONECTIVIDAD
Para cumplir su función como espacios en los que se aprende, escuelas y planteles deben contar con las medidas de
seguridad necesarias; mejorar las condiciones de accesibilidad para todos sus estudiantes; y disponer de los
servicios de luz, agua y sanitarios para que la comunidad escolar tenga condiciones adecuadas para el aprendizaje.
De igual manera, es importante que las escuelas cuenten con el mobiliario suficiente y adecuado para todos los
estudiantes.
Otros componentes importantes para acompañar el desarrollo de habilidades del siglo XXI son la conectividad y el
acceso a las Tecnologías de la Información y la Comunicación incorporadas a los procesos de aprendizaje.
Con un enfoque centrado en el aprendizaje de los estudiantes, y con el acompañamiento del docente, las TIC
pueden contribuir, al incorporarse gradualmente con pertinencia, a estimular una mayor autonomía en los
estudiantes así como a desarrollar competencias para la investigación, la comprensión y el análisis crítico de la
información.
11. Las TIC son clave para garantizar la equidad en el acceso a recursos educativos diversos y de
calidad. a través del intercambio de experiencias a distancia, los estudiantes pueden tomar
conciencia del papel que desempeñan en su comunidad y el impacto que tienen sus acciones en
el ámbito local, nacional y global.
En la formación docente, el fortalecimiento de competencias digitales es fundamental porque las
TIC son una herramienta que permiten el desarrollo profesional mediante el intercambio de
información y de experiencias, así como la innovación de las estrategias didácticas. De manera
general, las TIC pueden ser de amplia utilidad para apoyar la gestión de los procesos de mejora y
facilitar la colaboración en las escuelas y planteles.
@prende 2.0 es una estrategia transversal que tiene como objetivo potenciar el uso de las TIC en
las escuelas, para que docentes y estudiantes desarrollen las habilidades digitales y el
pensamiento computacional necesario para participar activamente en la sociedad del siglo XXI.