1. Estudios
“El carácter del líder que Dios elige”
Sabiduría de lo alto.
Sabiduría, un concepto que ha llamado la atención del ser humano a lo largo de los siglos, ¿qué
es? ¿cómo se alcanza? ¿cuáles son sus beneficios?
Precisamente el hombre ha intentado dar respuesta a estas preguntas en cada cultura: la
filosofía se alcanza meditando, o divagando en conceptos e ideas morales, a través del
seguimiento de ciertos códigos de ética; la sabiduría está prohibida para ciertos sectores de la
población y reservada sólo para aquellos que pertenecen a una clase o estrato social superior, la
sabiduría sólo puede ser transmitida a los hombres por los dioses…
A Dios también le interesa el concepto de sabiduría, y busca que Sus hijos se conviertan en
personas sabías, pero su Palabra nos advierte que existen ciertas “sabidurías” que no provienen
de él aunque traten de simularlo.
Pero si ustedes tienen envidias amargas y rivalidades en el corazón, dejen de presumir
y de faltar a la verdad. Ésa no es la sabiduría que desciende del cielo, sino que es
terrenal, puramente humana y diabólica.
Porque donde hay envidias y rivalidades, también hay confusión y toda clase de
acciones malvadas. En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura,
y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial
y sincera.
Santiago 3.14-17
De la misma manera que es una contradicción decir que Dios vive en nosotros y no dar algún
fruto en nuestras vidas, el apóstol Santiago dice que no podemos decir -Dios me ha dado
sabiduría- y aun conservar envidia o amargura. Hay una aparente “sabiduría” pero proviene del
mundo, de la carne o del diablo.
Para los hijos de Dios, la sabiduría no es un concepto o reglas morales, sino hechos, acciones;
ser sabio no significa saber qué es lo correcto, más allá, sino hacer lo que es correcto. De nada
nos sirve a Sus hijos saber lo que le agrada a Dios si no lo hacemos.
Su Palabra es una fuente invaluable de sabiduría para nosotros…
Proverbios 1:7
Proverbios 3:5-7
Proverbios 3:13-18
Efesios 1:17-19
1Corintios 3:1-3
1Corintios 2:1-13
Santiago 1:5-6
Colosenses 1:9-10
Colosenses 2:2-4
Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de
Dios, para que entendamos lo que Dios nos ha dado, de lo cual también hablamos,
pero no con palabras aprendidas de la sabiduría humana, sino con las que enseña el
Espíritu, que explican las cosas espirituales con términos espirituales.
1Corintios 2.12-13