1. UNIVERSIDAD VERACRUZANA
FACULTAD DE BIOLOGIA
QUIMICA INÓRGANICA
ENSAYO DEL TEMA: SANGRE
PROF. BERTHA MARIA ROCIO
FECHA DE ENTREGA: 23 DE OCTUBRE DE 2012
TABAL CORTÉS MARCOS ALEJANDRO
2. La Sangre.
La sangre es una sustancia líquida que circula por las venas y arterias del cuerpo.
Tiene un color rojo brillante, llegando a un escarlata cuando ha sido oxigenada por
los pulmones y pasa a las arterias; adquiere una tonalidad más azulada
cuando ha cedido oxígeno para nutrir a los tejidos del organismo y regresa a
los pulmones a través de las venas y de los pequeños vasos denominados
capilares. En los pulmones, la sangre cede el dióxido de carbono que ha
captado procedente de los tejidos, recibe un nuevo aporte de oxígeno e
inicia un nuevo ciclo. Este movimiento circulatorio de sangre tiene lugar
gracias a la actividad coordinada del corazón, los pulmones y las paredes de los vasos
sanguíneos.1 Este se conocer por ser un movimiento de peristalsis ya que es un movimiento
que el cuerpo no puede controlar, por lo tanto es involuntario.2
Composición de la sangre.
La sangre está formada por un líquido amarillento denominado plasma, en el que
se encuentran en suspensión millones de células que suponen cerca del 45% del
1
Maestri Leila.
2
Perea Sandoval Salvador.
3. volumen desangre total. Tiene un olor característico y una densidad relativa que
oscila entre 1,056 y 1,066. En el adulto sano el volumen de la sangre es una
onceava parte del peso corporal, de 4,5 a 6 litros. Una gran parte del plasma es
agua, medio que facilita la circulación de muchos factores indispensables que
forman la sangre. Un milímetro cúbico de sangre humana contiene unos cinco
millones de corpúsculos o glóbulos rojos, llamados eritrocitos o hematíes; entre
5.000 y 10.000 corpúsculos o glóbulos blancos que reciben el nombre de
leucocitos, y entre 200.000 y 300.000 plaquetas, denominadas trombocitos. La
sangre también transporta muchas sales y sustancias orgánicas disueltas.
Eritrocitos.
Los glóbulos rojos, o células rojas de la sangre, tienen forma de discos
redondeados, bicóncavos y con un diámetro aproximado de 7,5 micras. En el ser
humano y la mayoría de los mamíferos los eritrocitos maduros carecen de núcleo.
En algunos vertebrados son ovales y nucleados. La hemoglobina, una proteína de
las células rojas de la sangre, es el pigmento sanguíneo especial más importante y
su función es el transporte de oxígeno desde los pulmones a las células del
organismo, donde capta dióxido de carbono que conduce a los pulmones para ser
eliminado hacia el exterior.
Leucocitos.
Las células o glóbulos blancos de la sangre son de dos tipos principales: los
granulosos, con núcleo multilobulado, y los no granulosos, que tienen un núcleo
redondeado. Los leucocitos granulosos o granulocitos incluyen los neutrófilos, que
fagocitan y destruyen bacterias; los eosinófilos, que aumentan su número y se
activan en presencia de ciertas infecciones y alergias, y los basófilos, que
segregan sustancias como la heparina, de propiedades anticoagulantes, y la
histamina que estimula el proceso de la inflamación. Los leucocitos no granulosos
están formados por linfocitos y un número más reducido de monocitos, asociados
con el sistema inmunológico. Los linfocitos desempeñan un papel importante en la
4. producción de anticuerpos y en la inmunidad celular. Los monocitos digieren
sustancias extrañas no bacterianas, por lo general durante el transcurso de
infecciones crónicas.
Plaquetas
Las plaquetas de la sangre son cuerpos pequeños, ovoideos, sin núcleo, con un
diámetro mucho menor que el de los eritrocitos. Los trombocitos o plaquetas se
adhieren a la superficie interna de la pared de los vasos sanguíneos en el lugar de
la lesión y ocluyen el defecto de la pared vascular. Conforme se destruyen, liberan
agentes coagulantes que conducen a la formación local de trombina que ayuda a
formar un coágulo, el primer paso en la cicatrización de una herida.
Plasma
El plasma es una sustancia compleja; su componente principal es el agua.
También contiene proteínas plasmáticas, sustancias inorgánicas (como sodio,
potasio, cloruro de calcio, carbonato y bicarbonato), azúcares, hormonas,
enzimas, lípidos, aminoácidos y productos de degradación como urea y creatinina.
Todas estas sustancias aparecen en pequeñas cantidades. Entre las proteínas
plasmáticas se encuentran la albúmina, principal agente responsable del
mantenimiento de la presión osmótica sanguínea y, por consiguiente, controla su
tendencia a difundirse a través de las paredes de los vasos sanguíneos; una
docena o más de proteínas, como el fibrinógeno y la protrombina, que participan
en la coagulación; aglutininas, que producen las reacciones de aglutinación entre
muestras de sangre de tipos distintos y la reacción conocida como anafilaxis, una
forma de shock alérgico, y globulinas de muchos tipos, incluyendo los anticuerpos,
que proporcionan inmunidad frente a muchas enfermedades. Otras proteínas
plasmáticas importantes actúan como transportadores hasta los tejidos de
nutrientes esenciales como el cobre, el hierro, otros metales y diversas hormonas.
Neutrófilos
5. También llamados granulocitos porque contienen gránulos con enzimas, forman el
tipo de glóbulos blancos más numeroso. Ayudan a proteger al cuerpo de las
infecciones bacterianas y fúngicas y fagocitan partículas extrañas. Se dividen en
dos tipos: neutrófilos en banda o cayados (inmaduros) y neutrófilos segmentados
(maduros).
Linfocitos
Se dividen en dos grupos principales: los linfocitos T, que permiten al organismo
defenderse contra las infecciones víricas, pero que también pueden detectar y
destruir algunas células cancerosas, y los linfocitos B, que se transforman en
células plasmáticas que producen anticuerpos. Los monocitos ingieren las células
muertas o dañadas y eliminan agentes infecciosos, proporcionando así las
defensas inmunológicas necesarias al organismo.
Eosinófilos
Se encargan de matar algunos parásitos y de destruir algunas células cancerosas
y también participan en ciertas respuestas alérgicas, al igual que los basófilos. Las
plaquetas (trombocitos), partículas parecidas a las células (no son realmente
células), son más pequeñas que los glóbulos rojos o blancos y forman parte de los
mecanismos necesarios para detener una hemorragia a nivel de un punto
sangrante donde se acumulan y se activan.33
Circulación sanguínea.
Todo en el cuerpo humano está conectado a través de la circulación sanguínea,
que está formada por tres grandes partes, el corazón, las vías que los conectan
(venas y arterias) y la misma sangre.
Se trata de un circuito cerrado, como una pista de coches de carreras que dan una
vuelta y otra, llegando siempre a la misma salida y salen de la misma entrada.
3
Maestri Leila.
6. A esta “pista” se le da el nombre de “sistema cardiovascular” que es mucho más
complejo que una pista de coches de carreras. En éstas el objetivo es claro y
único llegar a la meta en primer lugar. En el caso del sistema cardiovascular, hay
varios objetivos que dependen de las situaciones que se desarrollan en el
organismo.
La circulación consta de cuatro partes esenciales, a saber el corazón; las arterias,
que son los primeros conductos que llevan la sangre oxigenada a todo el
organismo; los capilares, donde se lleva a cabo el intercambio de oxígeno y
bióxido de carbono entre las células del cuerpo y las de la sangre; las venas que
recogen la sangre sin oxígeno y cargada de bióxido de carbono y que regresan la
sangre al corazón y pulmones para “reoxigenar” la sangre e iniciar el ciclo otra
vez.
Corazón.
El corazón es “la bomba” que impulsa a la sangre a través de este circuito. De
forma mejor explicada, el corazón trabaja enviando sangre en dos direcciones,
hacia los pulmones para oxigenar la sangre, de donde regresa al otro lado del
corazón, el izquierdo, desde donde en su turno envía la sangre ya oxigenada
hacia todo el organismo.
El corazón se vale de cuatro cavidades para poder enviar la sangre hacia todo el
cuerpo: aurículas derecha e izquierda y ventrículos izquierdo y derecho. La sangre
entra al corazón por la aurícula derecha de donde pasa al ventrículo del mismo
lado desde donde envía la sangre hacia los pulmones. La sangre pasa por el tejido
de los pulmones que funciona como un filtro donde se lleva a cabo el intercambio
entre bióxido de carbono y oxígeno y de ahí regresa y entra la sangre ya
oxigenada al corazón a través de la aurícula izquierda. De esta cavidad pasa a la
siguiente, el ventrículo izquierdo, desde donde la sangre saldrá hacia todo el
organismo para poder oxigenar a todas las células del cuerpo.
¿Por qué 4 cavidades? Sabemos que el volumen total de la sangre en el cuerpo
es aproximadamente de cinco a siete litros que circular al mismo tiempo por este
7. circuito, pero este volumen se encuentra repartido entre diversos vasos
sanguíneos y el corazón. Éste es, para fines prácticos la bomba que recicla la
sangre en este circuito cerrado. Dado el relativo pequeño tamaño del corazón, la
naturaleza ideó estas cavidades que se llenan y vacían de forma rítmica, lo que da
como resultado que la sangre se movilice en forma pulsada, no continua a través
de las mismas. Por esta razón podemos detectar el pulso en diferentes partes del
cuerpo, como las muñecas de las manos, los pies o las ingles. El corazón impulsa
a la sangre en forma de pequeños volúmenes que permiten que la sangre llegue a
todas las células de organismo a una velocidad suficientemente lenta para que se
lleve a cabo el intercambio de gases, pero suficientemente rápida como para
impedir que la sangre se detenga y forme coágulos. Este mecanismo permite que
la caída de la presión que sufre la sangre dentro de las arterias no dañe al as
pequeñas células al entrar en contacto con éstas a través de los capilares.
Arterias.
La sangre es expulsada a través de las arterias. Estos vasos tienen como
característica que soportan la presión elevada que ejerce el ventrículo izquierdo
del corazón sobre las paredes de los vasos. La sangre transita inicialmente por un
solo vaso (aorta), que paulatinamente disminuye su calibre al tiempo que se divide
cada vez más en ramas, tal como un árbol iniciar por el tronco que se divide
paulatinamente en ramas cada vez mayores en número pero menores en
diámetro. Esta multiplicación progresiva del número de ramas junto con la
disminución del diámetro obliga a estos vasos, todavía llamados arterias a cambiar
las características de su pared. Cada una de estas arterias termina en el siguiente
segmento de la circulación, los capilares.
Capilares
El nombre proviene de la palabra cabello, dada la comparación entre estos
pequeños vasos sanguíneos y la pequeñez que representaría un tubo de las
dimensiones de un cabello. Dada la disminución del diámetro en forma paulatina y
progresiva de las arterias, éstas llegan a tener dimensiones apenas perceptibles
8. con un microscopio. Esta sección intermedia entre las arterias y las venas se llama
capilar o mejor dicho, red capilar, ya que la división progresiva de cada una de las
arterias que les antecede, contribuye a la formación de millones de capilares.
Estos vasos son muy especializados. Dado que el espesor de las paredes de
estos vasos sanguíneos es extremadamente delgado, del orden de una cuantas
fracciones de milímetro, esto permite como parte de sus funciones el intercambio
de moléculas de oxígeno hacia las células de los órganos y tejidos, por el bióxido
de carbono que se forma como resultado del metabolismo de todas y cada una de
las células del cuerpo. Una vez que se ha llevado a cabo este intercambio de
moléculas, es decir que la sangre ha perdido una gran cantidad del oxígeno que
hasta ahora contenía y lo ha intercambiado por el bióxido de carbono, la sangre
inicia el camino de retorno hacia el corazón. Para esta tercera parte del circuito, la
circulación se vale del tercer tipo de vasos sanguíneos, las venas.
Venas.
El camino de regreso hacia el corazón es en sentido inverso al de salida, es
opuesto al de las arterias. Una vez que la sangre ha pasado y abandonado los
capilares, empieza a reunirse en venas pequeñas que paulatinamente van
uniéndose para formar venas cada vez de mayor diámetro, pero al mismo tiempo
disminuyendo su número hasta terminar en una vena única llamada vena cava.
Esta vena lleva la sangre finalmente al lado derecho del corazón, entra en él a
través de la cavidad llamada aurícula derecha, de allí pasa al ventrículo derecho
para ser expulsada hacia los pulmones, donde la sangre rica en bióxido de
carbono pasará a los pulmones, dentro de ellos intercambiará las moléculas de
bióxido de carbono por moléculas de oxígeno. La sangre pasará hacia la aurícula
izquierda para iniciar el ciclo nuevamente.
En los miembros inferiores existen tres sistemas de venas:
a) Sistema venoso profundo
b) Sistema venoso superficial
9. c) Sistema venoso de las venas comunicantes.4
Reacciones homeostáticas.
Las características de la sangre se mantienen dentro de estrechos límites gracias
a la existencia de procesos regulados con precisión. Por ejemplo, la alcalinidad de
la sangre se mantiene en un intervalo constante (pH entre 7,38 y 7,42) de manera
que si el pH desciende a 7,0 (el del agua pura), el individuo entra en un coma
acidótico que puede ser mortal; por otro lado, si el pH se eleva por encima de 7,5
(el mismo que el de una solución que contiene una parte de sosa cáustica por 50
millones de partes de agua), el individuo entra en una alcalosis tetánica y es
probable que fallezca. De igual manera, un descenso de la concentración de
glucosa en sangre (glucemia), en condiciones normales del 0,1% a menos del
0,05%, produce convulsiones. Cuando la glucemia se eleva de forma persistente y
se acompaña de cambios metabólicos importantes, suele provocar un coma
diabético (véase Diabetes mellitus). La temperatura de la sangre no suele variar
más de 1 ºC dentro de un intervalo medio entre 36.3 y37.1 ºC, la media normal es
de 37 ºC. Un aumento de la temperatura de 4 ºC es señal de enfermedad grave,
mientras que una elevación de 6 ºC suele causar la muerte.
Formación de las células de la sangre.
Los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las plaquetas se originan en la médula
ósea. Pero aun siendo glóbulos blancos, los linfocitos se producen también en los
ganglios linfáticos, en el bazo y en el timo, pequeña glándula que se encuentra
cerca del corazón que funciona solamente en niños y adultos jóvenes y donde se
originan y maduran los llamados linfocitos T. Dentro de la médula ósea, todas las
células sanguíneas se originan a partir de un solo tipo de célula llamada célula
madre. Esta célula madre se divide en células inmaduras que van dividiéndose a
su vez y van madurando hasta llegar a los tres tipos presentes en la sangre.
La velocidad de la producción de las células sanguíneas es controlada según las
4
Velasco Ortega Erich Carlos
10. necesidades del cuerpo. Cuando el volumen de oxígeno de los tejidos corporales
o el número de glóbulos rojos disminuye, los riñones producen y liberan la
eritropoyetina, una hormona que estimula a la médula ósea para producir más
glóbulos rojos. En caso de infecciones, la médula ósea produce y libera más
glóbulos blancos mientras que, ante una hemorragia, produce más plaquetas. 5
5
Revista Hematología, Agrupación Mexicana para el estudio de la Hematología.