1. PREHISTORIA
Hace millones de años los pocos habitantes que en La Tierra había
eran completamente felices, vivían en perfecta armonía con la
Naturaleza y el resto de los animales.
Si tenían que recolectar plantas o cazar para comer, primero pedían
permiso y después disculpas.
Todos sus conocimientos los adquirían observando y los compartían.
No tenían problemas de hipoteca ni de facturas porque vivían en
comunidad en cuevas, se vestían con pieles de animales, no se
cortaban las melenas, no gastaban suelas, ni cubiertos, ni champús…
Jamás se aburrían porque estaban siempre entretenidos descubriendo,
observando, cazando, pescando, recolectando, despulgándose,
jugando…no se estresaban para nada.
Tampoco necesitan hablar, con sólo señalar las cosas y algún que otro
gruñido, se entendían.
Así fueron pasando muchos años más hasta que llegó un invierno muy
crudo y les fue muy difícil salir de las cuevas para sobrevivir.
Precisamente en una de esas cuevas ocurrió una anécdota que
marcaría toda la historia de la humanidad:
Estaba un grupo de muchachos en la boca de la cueva contemplando
la intensa lluvia- hacía ya una semana que no paraba de llover- y a
uno de ellos, sin saber cómo, se le escapó de la boca una expresión que
no fue un gruñido y que dejó a todos perplejos:
- ¡¡¡¡AGÜITA!!!!
Aquella primera y única expresión se escuchó en todos los lugares y
todos, absolutamente todos los habitantes de las cuevas salieron de
ellas repitiéndola locos de alegría y…poco a poco dejó de llover.
Comprendieron que nombrando las cosas por su nombre les facilitaba
la existencia y aparecieron los SUSTANTIVOS: árbol, pájaro, hijo,
nube, mar, cielo, esperanza… de modo que sólo tenían que decir una
palabra y se entendían.
2. De nuevo fueron pasando los años felizmente hasta que llegó el día en
el que comprobaron que no todos los sustantivos eran iguales.
Necesitaban palabras que los diferenciaran y así aparecieron los
ADJETIVOS: árbol frondoso, pájaro de colores…
Pasaron los años y mientras iban desapareciendo los dinosaurios de la
faz de la Tierra apareció entre los humanos un sentimiento nuevo
que nunca antes habían sentido: la envidia . Tenían que distinguir a
los dueños de los sustantivos para no pelearse. Así fue como
aparecieron los DETERMINANTES$: mi nube voladora…
Vivieron años de felicidad conociendo sólo estas tres categorías, pero
poco a poco se dieron cuenta que faltaban las acciones que ejecutaban
esas cosas. Entonces aparecieron los VERBOS: el pájaro de colores
vuela
Mucho más tarde se dieron cuenta que si bien muchas cosas hacían
las mismas acciones, no todas lo hacían de la misma manera,
apareciendo esta vez los ADVERBIOS: tu dragón vuela fatal.
Ana Delia López García
¿Cómo crees que aparecieron las preposiciones?
