1. Los Ecohombres
Todo parecía hecho ya, este era un planeta que había
cruzado la delgada línea del progreso, de la evolución y
del consumo, a vivir artificialmente se había terminado
pues con todos los recursos hídricos y la flora y fauna que
caracterizaba antes, pero eso era un recuerdo nada más
para todos sus habitantes que ahora buscaban un lugar
más sano para vivir, exiliados por sus propios inventos los
hombres de este planeta buscaban vida en otros planetas,
se vieron obligados a explorar otros, cómo marte, Venus y hasta el mismo Júpiter.
Sin embargo, nada era suficiente, nada era tan bello y fascinante como la tierra,
planeta que los humanos ya habían destruido, ya no quedaban personas muy
adultas solo viejitos de seis años, la especie humana estaba casi extinta, los
animales que sin quedaban en la tierra eran solo cucarachas, gigantes
sobrevivieron a todos los daños ocasionados por los hombres.
El único que quedaba no tenía más de
veinte años , y guardaba en su poder
solamente dos cosas la que en su
momento fue un arma de destrucción letal
y unas semillas, ya ni recordaba de quién ,
pero como se dice por ahí uno siempre
vuelve a dónde fue feliz. Por tanto inició
un viaje de regreso a morir en su planeta
pues sabía que su a retorno solamente lo
esperaba la muerte, finalmente que
podríamos esperar de un planeta que ya
no contaba con agua, flores ni animales;
no habría allí nada que comer ni que
beber, siendo así, y ya un poco demente, comenzó a
planear su regreso a la tierra a morir, pues no quería morir
de calor, en Marte planeta que aunque se había adaptado
cierto modo de vida jamás sería igual que la tierra. Cómo
este hombre estaba demente y con el corazón muy
entristecido, ignoraba que pensaba en voz alta.
Entre tanto el hombre pensaba, se acercó un anciano de
tan solo cinco años de edad, que de tanto oír las historias
2. del recuerdos de la vida pasada de aquel hombre, había
estado pensando desde hace un año como recuperar el
planeta, ese que parecía muy bello, desde los recuerdos de
aquel hombre, entonces el anciano de cinco años había
pensado ya en una idea, y fue guardando rocas enormes
durante el último año, le pidió a el hombre poderlo
acompañar en su viaje de regreso a la tierra, así pues sin
transporte alguno regresaron al planeta saltando entre
estrellas constelaciones y de vez en cuando uno que otro asteroide, aunque no
pareció tan rápido cuando por fin llegaron a tierra habían pasado ya
algunos años, y desde que llegaron a la tierra el anciano empezó a
romper las capas de la tierra que estaban ya muy gruesas, modifico el
arma de aquel hombre y le cargó las semillas a manera de balas, de
esta manera y sin saber si daría resultados o no solo quedaba la
esperanza, el amor, y la paciencia. Y cuando ya ambos estaban
dispuestos a morir en sus últimos minutos sintieron una gota de agua
que los despertó les devolvió la esperanza, y vieron unas hojitas verdes
que brotaban de la tierra, el planeta se empezaba a recuperar, no se
sabe cómo ni de qué manera, pero en los otros planetas llegó el rumor y
poco a poco fueron llegando más ancianos de cuatro tres y dos años, pero todos
con una increíble pasión por ayudar, algunos de ellos traían animales que
parecían muy extraños, sobrevivieron y mutaron pero definitivamente había
esperanza.
Algo muy extraño sucedió, allí en vez de sufrir envejeciendo todo el que deseaba
retornar a la tierra y ayudar con su recuperación; parecía que se veían cada vez
más jóvenes, a esta generación se le llamo los ecohombres. Amorosos con la
tierra, recobraron solo las costumbres que siempre fueron buenas para la tierra,
empezaron a crecer y entender la importancia de cuidar aquel planeta hermoso y
maravilloso y ya más nunca hubo fin solo un continuaremos felices.
FIN