El documento describe el estilo artístico del Manierismo, que se caracteriza por el virtuosismo técnico, la sofisticación, las figuras estilizadas con proporciones caprichosas, colores brillantes y posturas exageradas. El Manierismo marca el momento en que se pierde la belleza del clasicismo, siendo un estilo subjetivo e inestable que se aleja de lo verosímil. Entre los principales artistas manieristas se mencionan a Giulio Romano, Giorgio Vasari y Bartolomeo Ammannati.