Más del 80% de las aguas residuales que genera la sociedad regresan al ecosistema sin tratamiento, aumentando la contaminación. Existen diferentes tipos de aguas residuales, incluyendo domésticas, industriales, urbanas y agrícolas. El tratamiento de las aguas residuales, especialmente el tratamiento biológico, elimina microorganismos patógenos a través de procesos microbiológicos aerobios y anaerobios.