2. La Celestina 1- Personajes 2- Auto XI 3- Auto XII 4- Auto XIII 5- Curiosidades 6- Desarrollo de los personajes 7- Técnica y estilo 8- Lenguaje 9-Formas de Expresión
8. Auto XI Argumento CELESTINA.- ¡Ay, Dios, si llegase a mi casa con mi mucha alegría a cuestas! A Pármeno y a Sempronio veo ir a la Magdalena. Tras ellos me voy y, si ahí no estuviere Calisto, pasaremos a su casa a pedirle albricias de su gran gozo. SEMPRONIO.- Señor, mira que tu estada es dar a todo el mundo qué decir. Por Dios, que huyas de ser traído en lenguas, que al muy devoto llaman hipócrita. ¿Qué dirán sino que andas royendo los santos? Si pasión tienes, súfrela en tu casa; no te sienta la tierra, no descubras tu pena a los extraños. Pues está en manos el pandero que lo sabrá bien tañer. CALISTO.- ¿En qué manos? SEMPRONIO.- De Celestina. CELESTINA.- ¿Qué nombráis a Celestina? ¿Qué decís de esta esclava de Calisto? Toda la calle del Arcediano vengo a más andar tras vosotros por alcanzaros y jamás he podido con mis luengas haldas.
13. CELESTINA.- Salgamos, señor, de la iglesia, y de aquí a la casa te contaré algo con que te alegres de verdad. CELESTINA.- ¡Ay, Dios, si llegase a mi casa con mi mucha alegría a cuestas! A Pármeno y a Sempronio veo ir a la Magdalena. Tras ellos me voy y, si ahí no estuviere Calisto, pasaremos a su casa a pedirle albricias de su gran gozo.
16. Auto XII Argumento CALISTO.- Ayúdame aquí a vestirlas. Mira tú, Sempronio, si parece alguno por la calle. SEMPRONIO.- Señor, ninguna gente parece y, aunque la hubiese, la mucha oscuridad privaría el viso y conocimiento a los que nos encontrasen. CALISTO.- Pues andemos por esta calle, aunque se rodee alguna cosa, porque más encubiertos vamos. Las doce da ya; buena hora es. PÁRMENO.- Cerca estamos. CALISTO.- A buen tiempo llegamos. Párate tú, Pármeno, a ver si es venida aquella señora por entre las puertas.
22. CALISTO.- Ayúdame aquí a vestirlas. Mira tú, Sempronio, si parece alguno por la calle. CELESTINA.- ¿Quién llama? SEMPRONIO.- Abre, que son tus hijos. CELESTINA.- No tengo yo hijos que anden a tal hora. SEMPRONIO.- Ábrenos a Pármeno y Sempronio, que nos venimos acá almorzar contigo. SEMPRONIO.- Señor, ninguna gente parece y, aunque la hubiese, la mucha oscuridad privaría el viso y conocimiento a los que nos encontrasen.
25. Auto XIII Argumento CALISTO Duerme y descansa, penado, desde ahora, pues te ama tu señora de su grado. Venza placer al cuidado y no le vea, pues te ha hecho su privado Melibea. TRISTÁN.- Señor, no hay ningún mozo en casa. CALISTO.- Pues abre esas ventanas; verás qué hora es. TRISTÁN.- Señor, bien de día. CALISTO.- Pues tórnalas a cerrar y déjame dormir hasta que sea hora de comer.
31. Tiempo CALISTO.- Pues abre esas ventanas; verás qué hora es. TRISTÁN.- Señor, bien de día. CALISTO.- Pues tórnalas a cerrar y déjame dormir hasta que sea hora de comer.
32. Curiosidades Cambio de mentalidad SEMPRONIO.- ¡Oh vieja avarienta, muerta de sed por dinero!, ¿no serás contenta con la tercia parte de lo ganado? CELESTINA.- ¿Qué tercia parte? Vete con Dios de mi casa tú. Y esotro no dé voces, no allegue la vecindad. No me hagáis salir de seso, no queráis que salgan a plaza las cosas de Calisto y vuestras. SEMPRONIO.- Da voces o gritos, que tú cumplirás lo que prometiste o cumplirás hoy tus días. ELICIA.- Mete, por Dios, el espada. Tenlo, Pármeno, tenlo, no la mate ese desvariado. CELESTINA.- ¡Justicia, justicia, señores vecinos! ¡Justicia, que me matan en mi casa estos rufianes! SEMPRONIO.- ¿Rufianes o qué? Espera, doña hechicera, que yo te haré ir al infierno con cartas. CELESTINA.- ¡Ay, que me ha muerto! ¡Ay, ay, confesión, confesión! PÁRMENO.- Dale, dale. Acábala, pues comenzaste, que nos sentirán. ¡Muera, muera! De los enemigos, los menos.
33. Desarrollo de los personajes Celestina SEMPRONIO.- ¡Oh vieja avarienta, muerta de sed por dinero!, ¿no serás contenta con la tercia parte de lo ganado? Calisto SOSIA.- Sempronio y Pármeno... TRISTÁN.- ¿Qué dices, Sempronio y Pármeno? ¿Qué es esto, loco? ¡Aclárate más, que me turbas! SOSIA.- Nuestros compañeros, nuestros hermanos... TRISTÁN.- O tú estás borracho, o has perdido el seso, o traes alguna mala nueva. ¿No me dices qué es eso que dices de esos mozos? SOSIA.- Que quedan degollados en la plaza. Pármeno y Sempronio PÁRMENO.- Dete lo que prometió o tomémosselo todo. Harto te decía yo quién era esta vieja, si tú me creyeras. Prostitutas de Celestina ELICIA.- ¡Oh crueles enemigos! ¡En mal poder os veáis! ¿Y para quién tuvisteis manos? Muerta es mi madre y mi bien todo.
34. Técnica y estilo CELESTINA.- ¡Ta, ta, ta, ta! ELICIA.- ¿Quién llama? CELESTINA.- Abre, hija Elicia. ELICIA.- ¿Cómo vienes tan tarde?
35. Lenguaje Registro Culto CALISTO.- ¡Oh joya del mundo, acorro de mis pasiones, espejo de mi vista! El corazón se me alegra en ver esa honrada presencia, esa noble senectud. Dime, ¿con qué vienes? ¿Qué nuevas traes? ¡Que te veo alegre y no sé en qué está mi vida!
36. Lenguaje Registro Vulgar CELESTINA.- ¡Oh locos traviesos! Entrad, entrad. ¿Cómo venís a tal hora, que ya amanece? ¿Qué habéis hecho? ¿Qué os ha pasado? ¿Despidiose la esperanza de Calisto o vive todavía con ella, o cómo queda? PÁRMENO.- ¡No me hinches las narices con esas memorias; si no, enviarte he con nuevas a ella, donde mejor te puedas quejar!