1. De las ganas de tener un sitio donde compartir con los demás las
cosas que vemos o leemos y nos gustan nace “Cuarto
Creciente”, de las ganas de dos desconocidos que aman las
“Cosas Chiquitas”.
Norit
Cuarto Creciente surge desde la palabra y para la palabra. Desde
este papel no podemos cambiar el mundo, pero si podemos
intentar que algún rato sea más llevadero. Si alguna frase,
poesía, palabra, letra, punto o coma que leas en Cuarto Creciente
consigues que tu corazón se acelere o se frene, esto tendrá
sentido.
Gracias Norit por creer en esta historia.
El Barrunto
Cuando no sea el dolor
sino la dicha
de mirarse dos rostros
Hoy
dulcemente
conocí a un genio en el tren
y no haya cordilleras de cemento como de seis años de edad;
sino la paz menuda de la higuera, se sentó a mi lado y,
cuando no tengamos que inventar mientras el tren
corría por la costa,
esquinas
llegamos al océano.
donde los besos crezcan,
el niño me miró y me dijo:
cuando no pague impuestos ningún
quot;el mar no es nada bonitoquot;.
sueño
fue la primera vez
ni haya séptimos pisos para amarse... que me di cuenta
entonces, de ello.
cuando el amor tan solo,
CHARLES BUKOWSKY
será todo mas fácil.
Joaquín Sabina
“ Son cosas chiquitas. No acaban con la pobreza, no nos sacan del subdesarrollo, no socializan los
medios de producción, y, en cambio no expropian las cuevas de Ali Baba.
Pero quizá desencadenen la alegría, el hacer y la traduzcan en actos.
Y, al fin al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla aunque sea un
poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable ”
E. GALEANO

2. El poeta comprende
todo lo incomprensible
Este es el prologo
y a cosas que se odian,
el, amigas las llama.
Dejaría en este libro
toda mi alma
Sabe que los senderos
Este libro que ha visto
son todos imposibles,
conmigo los paisajes
y por eso de noche
y vivido horas santas.
va por ellos en calma.
¡Que pena de los libros
En los libros de versos,
que nos llenan las manos
entre rosas de sangre,
de rosas y de estrellas
van pasando las tristes
y lentamente pasan!
y eternas caravanas
¿Qué tristeza tan honda
que hicieron al poeta
en mirar los retablos Tocadme
cuando llora en las tardes,
de dolores y penas no soy infeccioso
rodeado y ceñido
que un corazón levanta! aunque bien es cierto
por sus propios fantasmas. que mamé de las ubres de las
ratas
Ver pasar los espectros
Poesía es amargura, y lamí las páginas
de vidas que se borran, de libros polvorientos
miel celeste que mana
ver al hombre desnudo cierto es que me expuse
de un panal invisible
en Pegaso sin alas, con la mano en el pecho
que fabrican las almas.
ver la vida y la muerte a la radiación de vuestras
lenguas
la síntesis del mundo,
Poesía es lo imposible pero mira mis poros
que en espacio profundos
hecho posible. Arpa sólo supuran vida
se miran y se abrazan. quizá
que tiene en vez de cuerdas
porque nunca los rocié
corazones y llamas.
Un libro de poesías como vosotros
es el otoño muerto: con repelente
Poesía es la vida para los sueños.
los versos son las hojas
que cruzamos con ansia
negras en tierras blancas,
esperando al que lleva Kutxi Romero Lorente
sin rumbo nuestra barca.
y la voz que los lee
es el soplo del viento
Libros dulces de versos
que les hunde en los pechos
son los astros que pasan
-entrañables distancias-
por el silencio mudo
al reino de la Nada,
El poeta es el árbol
escribiendo en el cielo
con frutos de tristeza
sus estrofas de plata.
y con hojas marchitas
de llorar lo que ama
¿Oh, que penas tan hondas
y nunca remediadas,
El poeta es el médium
las voces dolorosas
de la Naturaleza
que los poetas cantan!
que explica su grandeza
por medio de palabras
Dejaría en el libro Federico García Lorca…7 de
este toda mi alma… agosto de 1918.

3. Que se nieguen a parir.
Alto soy de mirar a las palmeras,
No hay error mas grande que el de engendrarnos.
rudo de convivir con las montañas…
No hay crimen mas grande que el de parirnos.
Yo me vi bajo y blando en las aceras
Si sabemos como van a esclavizarnos,
de una ciudad esplendida de arañas.
y con falsas esperanzas seducirnos.
Difíciles barrancos de escaleras,
calladas cataratas de ascensores,
Mientras haya un niño triste, esclavizado
¿Qué impresión de vacío!
por cualquier propagandista del vivir.
ocupaban el puesto de mis flores,
Mientras haya un solo ser triste y humillado,
los aires de mis aires y mi río…
que se nieguen las mujeres a parir.
…Topado por mil senos, embestido
Mientras diga el poderoso: ¿asi es la vida?
por mas de mil peligros, tentaciones,
cuando la vida esta cansada de sufrir,
mecánicas jaurías,
la verdad injustamente escarnecida,
me seguían lujurias y cláxones,
que se nieguen la mujeres a parir.
deseos y tranvías…
Mientras haya un se humano sin alimento,
…Y miro, y solo veo
resignado y humillado por pedir,
velocidad de vicio y de locura.
mientras digan que ennoblece el sufrimiento,
Todo eléctrico: todo de momento…
que se nieguen las mujeres a parir.
…¿Ascensores!: ¡que rabia! A ver,
Mientras sigan sin decir por que los paren:
¿Cuál sube a la talla de un monte
¿para ser libres o esclavos de un señor?,
y sobrepasa el perfil de una nube,
que se nieguen a parir o declaren
o el cardo, que, de místico, se abrasa
las mujeres que camino es el mejor.
en la serrana gracia de la altura?
¡Metro!; ¡que noche oscura
Que tal vez sea mejor imaginarlos
para el suicidio del que desespera!:
que engendrar muchos hijos no nacidos,
¡que subterránea y basta gusanera,
que parirlos para verlos acabar
donde se cata y zumba
en esclavos o en amos malnacidos.
la labor y el secreto de la tumba!
¡Asfalto!: ¡que impiedad para mi planta!
Mientras sigan, por amor, pariendo hijos
¡Ay, que de menos echa
para verlos condenados a vivir,
el tacto de mi pie mundos de arcilla
explotados por hipócritas y picaros,
cuyo contacto imanta,
que se nieguen las mujeres a parir.
paisajes de cosecha,
caricias y tropiezos de semilla!...
Poema de Ramón
…Lo que haya de venir, aquí lo espero
Sampedro.
cultivando el romero y la pobreza.
Aquí de nuevo empieza
Cartas desde el infierno.
el orden, se reanuda
el reposo, por yerros alterado,
mi vida humilde, y por humilde, muda.
Y Dios dirá que esta siempre callado.
Extractos del poema EL SILBO DE
AFIRMACION EN LA ALDEA.
Miguel Hernández

4. Nadie se lo dijo
Había una vez dos niños que patinaban sobre una laguna helada. Era una tarde nublada y fría,
pero los niños jugaban sin preocupación. De pronto, el hielo se reventó y uno de los niños cayó
al agua, quedando atrapado. El otro niño, viendo que su amigo se ahogaba bajo el hielo, tomó
una piedra y empezó a golpear con todas sus fuerzas hasta que logró romper la helada capa,
agarró a su amigo y lo salvó.
Cuando llegaron los bomberos y vieron lo que había sucedido se preguntaban cómo lo hizo,
pues el hilo era muy grueso.
- Es imposible que lo haya podido romper con esa piedra y sus manos tan pequeñas –
afirmaban
En ese instante apareció un anciano y dijo:
- Yo sé cómo lo hizo.
- ¿Cómo?
- No había nadie a su alrededor para decirle que no podía hacerlo.
C O L A B O R A
Envíanos las poesías, relatos, tiras cómicas, cuentos, historias…lo que sea que te guste y
quieras que aparezca aquí, nosotros haremos todo lo posible para que salga en el próximo
número.
Podéis mandarlo por correo electrónico a: elcuartocreciente@yahoo.es
También podéis dejarlo en el buzón que hay en el Bar La Mazmorra. (C/Valdivia)
C O L A B O R A