La sociedad anónima es la forma societaria más utilizada en Colombia, según el autor. Ofrece protección de los bienes e intereses de los socios limitando su responsabilidad al capital invertido o acciones. Presenta ventajas como la posibilidad de oferta pública inicial, anonimato para los propietarios, proyección de activos, ausencia de impuestos a la transferencia de capital, extensión de responsabilidad y continuidad después de la muerte de socios.