Contamos cosas en grupos de cinco porque cuando la gente aprendió a contar, asociaron las cantidades con los dedos de sus manos. Una botella de litro puede contener la cantidad que ocupa ambas manos, y una botella grande de cuatro litros tiene tres cifras como número. Los dígitos se basan en líneas rectas como las de una acera, una cancha de tenis o un diamante de béisbol.