Todos los habitantes de la Tierra somos viajeros del espacio. En primer lugar, la Tierra gira alrededor del Sol a una velocidad de 30 km/s, 45 veces más rápido que el Concorde. Tarda 365 días (un año) en completar una órbita.
2. Los estudios de los fósiles de rocas antiguas nos revelan
que la vida probablemente comenzó hace unos 4 billones
de años, cuando la Tierra era muy joven. Nadie sabe
cómo comenzó la vida en nuestro planeta. La mayoría de
los científicos piensa que se originó en el agua líquida.
Pero, ¿fue en charcos en la superficie, bajo tierra o en el
fondo de los océanos donde la actividad volcánica crea
manantiales calientes?
Los experimentos demuestran que los componentes
químicos fundamentales de la vida se pueden formar en
el espacio o en la Tierra. Muchos de ellos deben haber
llegado a nuestro planeta con la caída de meteoritos y
cometas. De algún modo, estas sustancias químicas
'orgánicas' simples se unieron y formaron moléculas más
avanzadas. Luego comenzaron a copiarse a si mismas y
a crecer.
3. Lo que sí sabemos es que, una vez que logra formarse, la vida es increíblemente
resistente. Se ha podido encontrar bacterias vivas en la congelada Antártica, en
agua hirviente y dentro de rocas ubicadas hasta cinco kilómetros bajo tierra.
También sabemos que estos organismos pueden sobrevivir durante años en el
difícil ambiente del espacio.
Una vez que se esparció la vegetación por el planeta, el aire comenzó a recibir
grandes cantidades de oxígeno. La Tierra se convirtió en el único planeta de
nuestro Sistema Solar con una atmósfera rica en ese elemento. Mediante la
búsqueda de oxígeno en otros mundos, tal vez un día encontremos evidencia de
vida extraterrestre.
4. La vida probablemente comenzó hace unos 3.800 millones de años, sólo 700 millones de años
después de la formación de nuestro planeta.
La investigación experimental sobre el origen de la vida comenzó en la década de 1950, con el
trabajo de dos científicos pioneros en una disciplina llamada química prebiótica: Stanley L. Miller y
Joan Oró.
5. • un compartimento (delimitado por una membrana)
• un metabolismo básico (que permitía intercambiar
materia y energía con el entorno)
• una molécula con información genética (probablemente
el ARN, que luego daría lugar a las proteínas y al
ADN).
En el gran laboratorio de química que era la Tierra
primitiva se sintetizaron las primeras moléculas orgánicas,
que fueron organizándose progresivamente para formar
otras más largas y complejas.
6. Consideramos que esas células primitivas fueron los primeros seres vivos, pues ya
tenían capacidad para automantenerse y autorreproducirse. A partir de ellas, la
evolución por selección natural dio lugar a una especie unicelular más compleja (a la
que llamamos LUCA, iniciales en inglés de Último Ancestro Común Universal), que fue
el antepasado del que deriva toda la biodiversidad actual. Probablemente nunca
sabremos cómo empezó la vida. Pero cada vez vamos poniendo más piezas en el puzle
de esta fascinante cuestión.
8. Todos los habitantes somos viajeros del espacio. En primer lugar, la Tierra gira
alrededor del Sol a s de la Tierra una velocidad de 30 km/s, 45 veces más rápido que
el Concorde. Tarda 365 días (un año) en completar una órbita.
9. La tierra gira muy rápidamente, como un trompo inclinado
hacia uno de sus lados.
Viaja de oeste a este a una velocidad de 1.670 km. por
hora. (La velocidad es menor para la gente que vive cerca
de los polos). Puesto que todo lo que nos rodea se mueve
de la misma manera, por lo general no nos damos cuenta
de la gran velocidad de nuestro viaje.
La manera más obvia de advertirlo es observar el Sol, la
Luna y las estrellas cuando parecen moverse por el cielo.
La inclinación del eje que une los polos norte y sur hace
posible que la Tierra tenga estaciones. Cuando el polo
norte apunta hacia el Sol, es verano en los países del
norte y cuando apunta en dirección contraria al Sol, es
invierno en esa parte del mundo.