El documento resume las metas de una vida transformada por la palabra de Dios: crecer en sabiduría y gracia como Jesús, pensar como Jesús pensaba al hacer la voluntad de Dios, vivir sirviendo a los demás como Jesús sirvió, amar a otros como Jesús amó sin reservas, y soportar la hostilidad y sufrimiento como Jesús soportó la cruz para imitar su ejemplo. Pablo anima a los creyentes a imitar a Cristo y confiar en su fortaleza.