Curso básico de discipulado, para el crecimiento espiritual de aquellas personas que han emprendido el camino hacia el servicio al Señor. Ya que aprenderá a cómo entregarse verdaderamente en el trabajo de la obra de Cristo. Esto no solo le ayudará en su crecimiento personal, sino también ayudará a otros por medio del conocimiento adquirido y a travez del buen ejemplo de entrega en el servicio espiritual
2. VAYAN Y HAGAN DISCÍPULOS
• La mayoría de las iglesias de Cristo en el país se
han dedicado a sumar miembros, pero no a hacer
discípulos.
• Cuando predicamos el evangelio a un perdido y
éste recibe a Jesús como salvador, se arrepiente,
le confiesa como Señor y se bautiza, se vuelve
discípulo (Mt.28:19; Mr. 16:15,16; Lucas 24:46-
49).
• Pero lo que le hace completar el proceso es que
se le enseñe todo lo que Cristo a mandado
4. LA IGLESIA DEBE TENER UN BUEN
PLAN DE EDIFICACIÓN
• “Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a
otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros,
pastores y maestros,
a fin de perfeccionar a los santos para la obra
del ministerio, para la edificación del cuerpo
de Cristo,
hasta que todos lleguemos a la unidad de la
fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un
varón perfecto, a la medida de la estatura de
la plenitud de Cristo; ”…
5. LA IGLESIA DEBE TENER UN BUEN
PLAN DE EDIFICACIÓN
• …“para que ya no seamos niños fluctuantes,
llevados por doquiera de todo viento de doctrina,
por estratagema de hombres que para engañar
emplean con astucia las artimañas del error,
sino que siguiendo la verdad en amor,
crezcamos en todo en aquel que es la cabeza,
esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien
concertado y unido entre sí por todas las
coyunturas que se ayudan mutuamente, según la
actividad propia de cada miembro, recibe su
crecimiento para ir edificándose en amor.”
(Efesios 4:11-16)
6. HAY QUE CREAR LAS CONDICIONES
• La iglesia debe organizarse de tal forma que
todo el mundo ponga a producir su talento
para el maestro. Todo aspecto de su esfuerzo
va dirigido a que las almas se salven.
Trabajemos para tener imprentas, programas
radiales y televisivos, paginas de Internet y un
activo programa de predicación en la
congregación en las escuelas, en los centros
de trabajo, por las casas, etc. Todo esto a
tiempo fuera de tiempo (2Timoteo 4:2).
7. EL DISCIPULADOR DEBE TENER UN
BUEN PLAN
• El discipulador debe proveer un buen plan de
estudios bíblicos para su alumno o discípulo.
Debe ser diligente y disciplinado en su estudio
de la Biblia porque nadie da lo que no tiene.
• Recomiendo que en lugar de ser una persona a la
vez, se forme un pequeño grupo de 3 a 7
personas.
• Así el discipulador deja de ser el centro para
convertirse en una parte del grupo. El convoca,
motiva y da ejemplo, pero no carga todo el peso.
Se pasa de un dialogo a un intercambio dinámico.
8. CADA CRISTIANO DEBE TENER SU
PLAN DE EDIFICACIÓN
• “Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la
exhortación y la enseñanza. No descuides el
don que hay en ti.. (1Timoteo 4:12,13ª).
• “… entonces escribirá para sí en un libro una
copia de esta ley…; y lo tendrá consigo, y
leerá en él todos los días de su vida, para que
aprenda a temer a Jehová su Dios, para
guardar todas las palabras de esta ley y estos
estatutos, para ponerlos por obra;”
9. UN PLAN PARA EL DISCIPULADOR
• 1. Pase un tiempo orando y consultando con Dios
antes de iniciar a discipular.
• 2. Hable con los hermanos que usted desea
discipular y manifiéstele su intención y su plan de
acción
• 3. Tenga un plan de estudio y oración organizado
según la necesidad del grupo.
• 4. Establezca día y hora de reunión y aprovéchela.
• 5. Mantenga el contacto entre reunión y reunión.
10. EL PODER DE HACER DISCIPULOS
• Ayudar a que alguien se convierta a Cristo y luego
abandonarlo es lo que facilita que se enfríe,
cause problemas y abandone.
• El poder de discipular está en las relaciones que
se crean, las experiencias que se comparten, los
lazos que se fortalecen. ES CAMINAR JUNTOS
HACIA EL CIELO.
• El cristianismo es una relación con Dios y con los
demás (Mateo 22:37-39). Por eso, discipular es
mucho más que enseñar doctrinas.
11. EL DISCÍPULO DEBE ESTUDIAR LA
PALABRA
• Independientemente de que la iglesia provea
un buen plan de estudios, y que formes parte
de un pequeño grupo donde eres discipulado,
debes tener tu propio plan de estudios
Bíblicos.
• El discípulo necesita pasar ese tiempo cada día
con su Dios y no verlo como una tarea que me
dejaron en la escuela dominical o en grupo.
12. EL DISCÍPULO Y SUS BIENES
MATERIALES
• El discípulo debe mostrar disposición para
aportar de sus recursos económicos para que la
obra crezca.
• “ Y sabéis también vosotros, oh filipenses, que al
principio de la predicación del evangelio, cuando
partí de Macedonia, ninguna iglesia participó
conmigo en razón de dar y recibir, sino vosotros
solos; pues aun a Tesalónica me enviasteis una y
otra vez para mis necesidades.” (Fil. 4:15-16)
13. EL QUE GANA ALMAS ES SABIO (Prov.
11.30)
• Mateo 4:19, “Venid en pos de mí, y os haré
pescadores de hombres”.
• La obra de ganar almas es como la obra de
pescar. Hay que estudiar el comportamiento de
los peces, y saber como y cuando es mejor
atraparlos en la red.
• Debemos mostrar interés por la gente. Primero
pongamos atención a las personas que visitan el
local. Prestémosle la Biblia, himnarios,
ayudémosle a buscar, seamos atentos. Anotemos
nombre, teléfono, hagamos visitar, llamadas,
enviemos mini-mensajes, etc
14. HAY QUE SER MADUROS
• “Por lo cual, siendo libre de todos, me he hecho
siervo de todos para ganar a mayor número. Me
he hecho a los judíos como judío, para ganar a los
judíos; a los que están sujetos a la ley (aunque yo
no esté sujeto a la ley) como sujeto a la ley, para
ganar a los que están sujetos a la ley;
a los que están sin ley, como si yo estuviera sin ley
(no estando yo sin ley de Dios, sino bajo la ley de
Cristo), para ganar a los que están sin ley. Me he
hecho débil a los débiles, para ganar a los débiles;
a todos me he hecho de todo, para que de todos
modos salve a algunos. Y esto hago por causa del
evangelio, para hacerme copartícipe de él. ”
15. EL DISCIPULO Y LA EVANGELIZACIÒN
• Jesús no quiere perder las almas de los
hombres, sino salvarlas (Lucas 9:56). Él vino al
mundo para buscar y salvar lo que se había
perdido (Lucas 19:10). Salvar las almas es su
preocupación.
• Los discípulos de Cristo somos los
comisionados para ejecutar esta misión, La
más importante sobre la tierra. ¿Estamos
nosotros dispuestos a hacerla?.
16. MATEO 9:35-38
• Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas,
enseñando en las sinagogas de ellos, y
predicando el evangelio del reino, y sanando toda
enfermedad y toda dolencia en el pueblo. Y al ver
las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque
estaban desamparadas y dispersas, como ovejas
que no tienen pastor. Entonces dijo a sus
discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los
obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies,
que envíe obreros a su mies" (Mateo 9:35-38).
17. HAY ANSIEDAD EN EL CIELO POR LOS
PERDIDOS (LUCAS 15:1-24)
• DIOS AMA AL PECADOR. A DIOS LE DUELE
CUANDO UN ALMA MUERE EN PECADO.
• Hay 7000 millones de habitantes en el mundo. 10
millones en Rep. Dom. La romana más de 250
mil. ¿Cuántos son cristianos de este total?
• Por eso Cristo a mandó a sus discípulos a predicar
de dos en dos. Primero a los 12 (Lucas 9:1,2),
luego a los 70 (Lucas 10:1-3). Finalmente a los
apóstoles y la iglesia (Mateo 28:19; Marcos
16:15).
18. EL DESAFIO ES NUESTRO
• Los apóstoles y la iglesia cumplieron su parte
(Hechos 5:42; 8:1-4; 11:19,20; 1 Tesalonicenses
1:8).
• El evangelio llegó a todo el mundo conocido de
aquel entonces (Romanos 10:18; Colosenses
1:23). Esto sin vehículos rápidos, bocinas, sin
radio, sin imprenta, sin televisión, sin Internet.
¿Podríamos nosotros hacer lo mismo contando
con estas ayudas?.
• VAYAN Y HAGAN DISCIPULOS!
19. EZEQUIEL 3:17-21
• “Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la
casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi
boca, y los amonestarás de mi parte. Cuando yo
dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le
amonestares ni le hablares, para que el impío sea
apercibido de su mal camino a fin de que viva, el
impío morirá por su maldad, pero su sangre
demandaré de tu mano. Pero si tú amonestares al
impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de
su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú
habrás librado tu alma”.