5. Acceso y participación de los
sectores populares mexicanos en el
mercado formal de crédito1
Pablo Cotler y Eduardo Rodríguez-Oreggia2
Resumen
Existe un creciente interés por diseñar políticas públicas que eleven la participación de la población de escasos
recursos en los mercados crediticios formales. Tomando en consideración la diferencia que existe entre el
acceso y el uso, utilizamos una base de datos panel para examinar qué factores determinan que sectores
populares –que cuentan con acceso a servicios crediticios institucionales– hagan uso de dichos productos
financieros. Con el fin de verificar la robustez de los resultados, se analiza además qué factores determinan la
movilidad o inmovilidad de la decisión de participar a través del tiempo. Entre los múltiples determinantes
destacan un índice de riqueza familiar, la existencia de perturbaciones a la localidad, la posición en el trabajo
y la recepción de transferencias provenientes del Estado.
Palabras Clave: Acceso y participación, crédito formal, panel data.
JEL: C33, G21, 016
Abstract
There is a growing interest for designing policies that may help increase the use formal financial products
by poor people. We use a panel database of families with access to these financial products and analyze why
some use these products and others not. To verify the robustness of our results, we also analyze what factors
are responsible in the change of these decisions overtime. Among the multiple determinants we find family
wealth, local shocks, labor position and whether the family receives government transfers.
1 Agradecemos el apoyo financiero del Instituto de Investigaciones sobre Desarrollo Sustentable y Equidad Social de la Universidad
Iberoamericana y el trabajo de nuestros asistentes Martín Lima y María José Ogando.
2 Pablo Cotler, Departamento de Economía Universidad Iberoamericana; Eduardo Rodríguez-Oreggia, Escuela de Graduados en
Administración Pública, Tecnológico de Monterrey-Estado de México. Sus correos son pablo.cotler@uia.mx y eduardo.oreggia@
gmail.com
6. Acceso y participación de los
sectores populares mexicanos en el
mercado formal de crédito
Pablo Cotler y Eduardo Rodríguez-Oreggia
i. introducción México es uno de esos países. Posterior a la crisis
bancaria y cambiaria de 1995, se ha buscado robus-
Ante los posibles beneficios que depara el financia- tecer el marco regulatorio y supervisor del sistema
miento, existe un creciente interés por diseñar políti- financiero y se ha generado una industria privada
cas públicas que eleven la participación de la pobla- de información crediticia caracterizada por la pre-
ción de escasos recursos en los mercados crediticios sencia de dos burós de crédito. En un contexto de
formales. Desde un punto de vista macroeconómi- estabilidad macroeconómica, se esperaba que estas
co, trabajos como los de Beck, Demirguc y Levine modificaciones generaran un ambiente propicio para
(2007) muestran la importancia de una mayor pro- elevar el acceso y la participación de las poblacio-
fundidad financiera: afecta de manera despropor- nes de menores recursos en los mercados crediticios
cionada el ingreso del 20% más pobre, con lo que formales.
no sólo ayuda a reducir la pobreza sino que además Sin embargo, los resultados son aún incipientes.
contribuye a reducir la desigualdad. Por otro lado, a México posee una de las penetraciones financieras
nivel microeconómico, trabajos como los de Pitt y más bajas de América Latina (el crédito bancario
Khandker (1998) sugieren que el acceso al financia- como porcentaje del pib es de 14%) y los préstamos
miento formal genera impactos positivos, siendo és- bancarios están concentrados en muy pocas empresas
tos mayores para las más pequeñas empresas –véase (en 2006, 84% del crédito comercial –que representa
por ejemplo Cotler y Woodruff (2008). 60% del crédito bancario total– estaba en manos de
Si bien hay muy poca evidencia empírica (véase Ar- 300 empresas).4 Por otro lado, si bien las operacio-
mendáriz y Morduch, 2005) que muestre de manera nes de las más importantes instituciones dedicadas a
fehaciente que el acceso a fuentes formales de finan- las microfinanzas viene creciendo a tasas anuales de
ciamiento puede generar impactos positivos,3 la po- 40%, atienden a menos de cinco millones de personas
lítica pública en muchos países subdesarrollados se (Mixmarket y Prodesarrollo, 2007). Consistente con
ha orientado en los últimos años a sentar las bases lo anterior, los datos de la última encuesta nacional
para un desarrollo financiero que logre incorporar a de ingreso-gasto de los hogares (inegi, 2006) mues-
la mayoría de la población a los servicios que ofre- tran que sólo 34% de los hogares encuestados afir-
cen las instituciones financieras formales. man tener erogaciones financieras asociadas a algún
3 El impacto que pueda tener una mayor participación en servicios financieros formales sobre el crecimiento depende de un conjunto
de factores. Así por ejemplo, la aversión al riesgo por parte de los potenciales deudores (Zeller y Sharma, 2002), la ausencia de
competencia entre los oferentes, el escaso uso de burós de crédito (Beck, Demirguc y Martinez, 2006) y el inadecuado capital
humano (Karlan y Valdivia, 2006) son todos factores que reducen el impacto que pudiera acarrear un mayor acceso a los productos
crediticios que ofrecen las instituciones financieras.
4 Comisión Nacional Bancaria y de Valores (2007).
7
7. tipo de préstamo institucional.5 Más aún, tomando de proyectos productivos que requieren de financia-
en consideración la distribución del ingreso mone- miento, la presencia de proyectos cuya rentabilidad
tario corriente, es recién en el séptimo decil de di- esperada no es compatible con el costo del crédito
cha distribución que el porcentaje de familias en- y la exigencia de documentación que en muchas
deudadas supera 34%. Así, los datos no hacen más ocasiones es incompatible con las características de
que confirmar la baja intermediación financiera que dicha población. Así, en un contexto de acceso, la
existe en el país. demanda por dichos productos es la que determi-
¿Implican estos resultados que la política públi- nará la decisión de participar o no de los servicios
ca llevada a cabo en los últimos doce años ha sido financieros institucionales.
ineficaz para elevar la participación? Con el fin de Dado que el éxito de una política pública que bus-
responder a dicha pregunta es necesario recordar que incluir a sectores de bajos ingresos en el uso
que “acceso” y “participación” son dos conceptos de productos financieros institucionales depende de
distintos. Como señalan Beck, Demirguc-Kunt y manera central que éstos estén dispuestos a parti-
Martínez (2006), el acceso se tiende a definir bajo cipar, el objetivo del presente trabajo consiste en
una dimensión geográfica, de modo que una falta encontrar los determinantes de dicha participación
de acceso se asocia con la ausencia de institucio- y los motivos que dan lugar a que ésta pudiera alte-
nes financieras en determinadas ubicaciones. A este rarse. Para ello, el trabajo está compuesto de cuatro
respecto, la densidad poblacional y espacial de las secciones adicionales: la primera describe la base de
sucursales bancarias y de los cajeros automáticos se datos panel de donde se exploraran los determinan-
tiende a utilizar como indicador del nivel de acceso tes de la participación, así como la transición entre
a productos financieros institucionales que existe diversos estados de utilización; en la segunda se de-
en una determinada área geográfica. Sin embargo, talla el marco metodológico utilizado y las hipótesis
como bien mencionan estos mismos autores, la falta del trabajo; la tercera sección puntualiza los resulta-
de acceso no se limita a una cuestión meramente de dos obtenidos y, finalmente, en la cuarta se presentan
localización, pues también importa el costo de los las conclusiones.
productos y servicios así como los requisitos que
deben cumplirse para poder acceder a los mismos.
Consistente con esta visión, la política pública se- ii. una descripción de la base de datos
guida en México durante los últimos años ha busca-
do elevar el acceso por medio de la generación de un a. La muestra
marco institucional que incentive la entrada de nue-
vas instituciones crediticias y ayude a transparentar Siendo el objetivo del presente trabajo encontrar
el costo de los productos y servicios que ofrecen. cuáles son los determinantes de la participación en
La mayor concurrencia de instituciones crediticias servicios crediticios institucionales en un contexto
y la mayor y mejor información del costo de los pro- donde no hay problemas de acceso, decidimos recu-
ductos y servicios se espera que generen un entorno rrir a la encuesta nacional que levantó el Banco del
de mayor competencia en el mercado crediticio que Ahorro Nacional y Servicios Financieros (Bansefi)
posibilite a su vez la ampliación de la frontera de durante los años 2004 y 2005.
acceso. Esta encuesta es un levantamiento panel que realizó
Sin embargo, la ampliación del acceso a instru- Bansefi en poblaciones donde hubieran sociedades
mentos financieros es condición necesaria más no de ahorro y crédito popular (sacp) –las cuales inclu-
suficiente para que se eleve la participación de la yen cajas de ahorro, cajas solidarias, sociedades de
población de menores ingresos en estos productos ahorro y préstamo, cooperativas, uniones de crédito,
crediticios. Los motivos son múltiples: la ausencia sucursales de Bansefi y otras entidades que ofrecían
5 En el presente trabajo diferenciaremos a los oferentes de servicios financieros como institucional o personal en lugar del tradicional
formal/informal. Tal modificación la hacemos en virtud de que –como sucede en muchos países en desarrollo– muchas veces las
entidades financieras formales que atienden al sector de bajos ingresos son sólo formales en papel, pues ni están supervisadas por
una institución oficial apropiada ni cumplen en muchos casos con la reglamentación oficial (financiera, impositiva, laboral).
8
8. microcréditos. En dichas poblaciones se entrevistó aquellos hogares que no contaban con préstamos es-
a hogares que tuvieran miembros que fueran clien- taban en tal situación por carecer de una demanda
tes6 de alguna de estas entidades, así como a hogares por tal servicio a los precios vigentes. En este sen-
que estando en la misma localidad y teniendo con- tido, supondremos que la muestra incorpora a un
diciones socioeconómicas similares a los primeros segmento que tiene acceso –siguiendo la definición
no utilizan los productos que ofrecen las sociedades de Beck, Demirguc-Kunt y Martinez (2005)– a ser-
de ahorro y crédito popular o cualquier otra institu- vicios financieros institucionales pero que no parti-
ción financiera. Dadas las escasas restricciones que cipa de ellos.
exigían estas sociedades de ahorro y crédito popular Respecto al tamaño y composición de la muestra,
para otorgar financiamiento,7 es posible suponer que Bansefi (2004) reporta que la muestra de clientes
Cuadro 1
Tamaño de las sacp Número de Clientes Número de no-clientes
entrevistados entrevistados
Norte Muy pequeña 262 249
Pequeña 181 170
Mediana 27 20
Grande 60 50
Total Norte 530 489
Centro Muy pequeña 292 294
Pequeña 333 311
Mediana 209 190
Grande 150 130
Total Centro 984 925
Sur Muy pequeña 819 819
Pequeña 432 362
Mediana 150 138
Grande 60 60
Total Sur 1461 1379
TOTAL 2975 2793
Notas:
1) Los rangos de tamaño de las sacp se definen como sigue: muy pequeña: hasta un máximo de 1 500 clientes; pequeña: entre 1
501 y 10 000 clientes, y mediana, entre 10 001 y 100 000 clientes.
2) La región NORTE incluye a las siguientes entidades federativas: Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur,
Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, San luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Zacatecas. La región Centro
comprende a Colima, Distrito Federal, Estado de México, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nayarit y
Querétaro. La región Sur comprende a Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Tabasco, Tlaxcala,
Veracruz y Yucatán.
Fuente: Bansefi (2004).
6 Dependiendo del tipo de institución, en algunos casos es más pertinente referirse a los deudores como clientes de la institución y en
otros casos como socios de la misma. Sin embargo, por motivos de brevedad, en el presente texto nos referiremos a los deudores
como clientes.
7 Si bien los requisitos varían de acuerdo a la tecnología crediticia utilizada (crédito individual versus grupal, unión de crédito versus
caja de ahorro y crédito, etcétera), por lo general no exigen garantías ni documentos formales que muestren que el potencial deudor
tiene un puesto de trabajo en el sector formal ni documentación en donde se registre la dirección postal del individuo. Asimismo,
los montos mínimos de préstamos tienden a ser extremadamente bajos y las decisiones de otorgamiento de crédito tienden a ser muy
rápidas. Para una mayor descripción véase Cotler, 2003.
9
9. de estas sociedades de ahorro y crédito popular fue b. CaraCterizaCión de Los hogares
seleccionada mediante un esquema de muestreo re-
gionalizado, estratificado al interior de cada región Con el fin de tener una idea más clara de las carac-
de acuerdo al número de clientes de cada sacp. Así, terísticas de las familias en cada grupo, el cuadro 2
para cada estrato de cada región se llevó a cabo un muestra estadísticas básicas de alguna de las varia-
esquema de muestreo proporcional al número de bles que podrían estar influyendo en la decisión de
clientes de cada sacp. Posteriormente, se seleccionó participar de los servicios crediticios institucionales.
de manera aleatoria a los clientes de cada sacp con Un primer indicador que diferencie a ambas pobla-
base en su directorio de clientes. Para la muestra de ciones debiera ser su nivel de ingreso. Sin embargo,
no-clientes se tomó el tamaño relativo de la muestra la encuesta no recogió información de ingresos o
resultante por localidad y se buscaron hogares con gastos; más bien se centra en recoger información
características similares dentro de la misma. El cua- de activos y pasivos financieros así como de la pro-
dro 1 muestra la ubicación espacial de las personas piedad de activos no financieros. Ante ello, hicimos
entrevistadas así como el tamaño relativo de las uso de la metodología utilizada por Filmer y Prit-
sacp a las que pertenecen los clientes. chett (2001) para construir un índice de activos con
Cuadro 2
Características generales de la muestra en el 2004
Clientes entrevistados No-clientes entrevistados
Número de entrevistados 2 975 2 793
Edad promedio del jefe 48.1 45.9
Grado promedio de escolaridad del jefe 2.54 1.97
Índice de activos 3.336 2.669
Posición en el trabajo:
1. Patrón 63 14
2. Cuenta propia 582 462
3. Asalariado 1 853 1 788
% de familias en zonas rurales 45.8 47.9
No. de familias que reciben transferencias públicas. No. = 1 200 No. = 990
Monto promedio Monto = 1 582 Monto = 1 217
# Familias que reciben transferencias privadas. No. = 522 No. = 394
Monto promedio recibido. Monto = 3 289 Monto = 1 961
# Familias que están en tandas. No. = 609 No. = 424
Aportación promedio. Monto = 2 459 Monto = 663
# Familias que ha dado a guardar su ahorro a otras No. = 37 No. = 34
personas. Ahorro promedio. Monto = 2 500 Monto = 1 395
# Familias que ha otorgado préstamos. No. = 257 No. = 150
Monto promedio prestado. Monto = 3 519 Monto = 1 432
# Familias que tiene un préstamo de amigos o No. = 965 No. = 1 087
parientes o vecinos o comerciantes o tienda
o prestamista
# Familias con:
a) Perturbación negativa local y hogar 228 179
b) Perturbación negativa local u hogar 1 095 1 207
c) Ninguna perturbación 1 652 1 407
10
10. base en las características de la vivienda y propie- de acumulación de activos fijos o de ganancias) que
dad de activos no financieros. Así, por medio del mé- pudiera tener el financiamiento institucional supere al
todo de componentes principales, se construyó un que pudiera darse con un financiamiento personal.
índice que midiera en términos relativos el acervo Como el cuadro 3 sugiere, el financiamiento insti-
de riqueza de las familias.8 Como puede notarse en tucional más utilizado por los clientes de las sacp
el cuadro 2, los clientes de las sociedades de ahorro son justamente los provenientes de estas entidades
y crédito popular tienden –en promedio– a tener un no bancarias (categoría 1 del cuadro 3). Aun cuando
mayor índice de riqueza. Si bien tal resultado po- tal preponderancia pudiera ser resultado de cómo se
dría ser compatible con una mayor probabilidad de construyó la muestra, los datos de la última encues-
demandar préstamos (véase por ejemplo The World ta nacional de ingreso-gasto de los hogares (inegi,
Bank, 2005), es necesario señalar que un cliente de 2006) son consistentes con tal resultado. Así, según
una sacp no necesariamente es un deudor pues pue- la encuesta, para el 50% más pobre del total de ho-
de ser un cliente de los productos de ahorro. Más gares con erogaciones asociadas al pago de deudas,
aún, es necesario tomar la supuesta causalidad entre la principal fuente de financiamiento no eran enti-
demanda de préstamos y riqueza con cuidado pues dades bancarias, ni sociedades financieras de objeto
la misma pudiera ir en ambas direcciones. limitado ni tiendas comerciales; eran personas fí-
Un segundo aspecto a resaltar de dicho cuadro es sicas y otras instituciones, entrando en esta última
la participación de los clientes de las sacp en el categoría las entidades no bancarias que aparecen en
uso de productos de crédito y ahorro de oferentes la categoría 1 del cuadro 3.
no-institucionales (tandas, guardadito y préstamos Además de buscar entender cuáles son las principa-
informales). En este sentido, la presunta dicotomía les características de aquellos que participan en el
que muchas veces se plantea entre lo institucional financiamiento que ofrecen las entidades financieras
y lo no-institucional parecería descartarse;9 más bien, no bancarias (categoría 1 del cuadro 3), resulta in-
los datos no contradicen lo expresado por Zeller y teresante constatar la robustez de dichas caracterís-
Sharma (2002) respecto a la posible complementa- ticas por medio de averiguar qué determina que un
riedad entre los servicios ofrecidos por ambos tipos hogar decida moverse de una situación en que estaba
de agentes. endeudado a otra donde ya no la está, y viceversa.
Finalmente, consideramos que es importante llamar A este respecto, el cuadro 4 muestra las tres posi-
la atención respecto a lo común que parecen ser las bles posturas en que pueden estar los hogares que
perturbaciones negativas tanto a nivel localidad son clientes o socios de alguna sociedad de ahorro
como propias del hogar. Así, las cifras del cuadro 2 y crédito popular: en ambos años contaron con fi-
muestran que aproximadamente la mitad de la po- nanciamiento institucional (20%), en alguno de los
blación sufrió durante 2004 una perturbación nega- dos años contaron con préstamos (29%) o nunca han
tiva.10 tenido préstamos provenientes de dichas entidades
Aun cuando la población tiene acceso a servicios (51%). Por otro lado, el cuadro 5 da algunos indi-
crediticios ofrecidos por instituciones y personas, cios de las similitudes y diferencias de las pobla-
nos interesa entender cuáles son los determinantes de ciones en estas tres posturas. Así, indistintamente
la participación en los servicios crediticios que ofre- de la postura tomada por el hogar frente a la oferta
cen las instituciones. Este interés se finca en que los crediticia, el porcentaje de los jefes del hogar que se
productos que ofrecen las instituciones tienden a ser declaraba desocupado era muy similar (14%) y, en-
superiores en términos del monto, plazo, de la varie- tre aquellos que laboraban, el peso especifico de los
dad de productos y del riesgo.11 Estas características asalariados también lo era (60%). Por otro lado, la
conducen a que el impacto económico (en términos escolaridad promedio parece distinguir a estos tres
8 Cálculos disponibles con los autores.
9 Sobre este punto véase también Carreón, Di Giannatale y López (2007).
10 Una perturbación negativa en la localidad incluye a los desastres naturales o baja en los precios de venta de los productos. Por otro
lado, una perturbación negativa al hogar incluye decesos, enfermedad grave o descompostura de algún equipo de trabajo.
11 Los datos del cuadro No. 3 sugieren que, en promedio, los montos y plazos de los créditos conseguidos con sacp, bancos y tiendas
tienden a ser mayores que los conseguidos con amigos, prestamistas y comerciantes.
11
11. Cuadro 3
Un Comparativo de Fuentes de Financiamiento para los Clientes de las sacp en 2004
Fuente No. De familias con Monto promedio Plazo a pagar Frecuencia de pago
préstamo otorgado (en meses)
1. sacp: cajas 1 229 15 619 15.9 Diario 0.08%
de ahorro, Semana 10.33%
cajas solidarias, Quincena 11.85%
sociedades de Mes 59.02%
ahorro y préstamo, Otro 18.71%
uniones de crédito,
etcétera
2. Banco 68 24 1701 29.2 Semana 11.94%
Quincena 26.87%
Mes 56.72%
Otro 4.48%
3. Sofol 4 85 858 109.6 Quincena 25%
Mes 75%
4. Institución 93 8 277 10.8 Semana 12.22%
gubernamental Quincena 3.33%
Mes 20%
Otro 64.44%
5. Amigo, pariente o 569 6 654 9.9 Diario 0.36%
vecino. Semana 7.59%
Quincena 9.58%
Mes 37.43%
Otro 45.03%
6. Tienda que vende 314 13 255 15.3 Diario 0.32%
a crédito Semana 17.74%
Quincena 18.39%
Mes 45.16%
Otro 18.39%
7. Comerciante 264 5 667 11.3 Diario 0.39%
Semana 19.69%
Quincena 18.9%
Mes 36.22%
Otro 24.8%
8. Prestamista 54 10 312 11.0 Semana 15.38%
Quincena 7.69%
Mes 51.92%
Otro 25%
* Dado que una familia puede tan sólo ahorrar o tener más de un préstamo, la suma de las cantidades de la segunda columna no
tiene por que ser igual al total de clientes reportado en el cuadro 2.
grupos. Medido en una escala que va del 0 al 6,12 Como puede observarse, los datos permiten realizar
los datos parecen sugerir que un mayor nivel edu- dos tipos de estimaciones. La primera consistiría en
cativo estaba asociado con una mayor probabilidad utilizar como universo a todos aquellos que vivían
de utilizar los productos crediticios que ofrecían las en zonas donde había presencia de una sociedad de
sociedades de ahorro y crédito popular. ahorro y crédito popular (las cuales incluyen cajas
12 La escala de 0 es para aquellos que no fueron a la escuela, 1 para aquellos que sólo cursaron educación preescolar, 2 para aquellos
que cursaron educación primaria, 3 secundaria, 4 preparatoria/vocacional, 5 estudios profesionales y 6 postgrado.
12
12. de ahorro, cajas solidarias, sociedades de ahorro y son lo suficientemente laxos como para asumir que
préstamo, cooperativas, uniones de crédito, sucur- una familia que no haga uso de dichos servicios se
sales de Bansefi y otras entidades que ofrecían mi- comporta así por voluntad propia. En este sentido,
crocréditos), y buscar entender qué características podemos analizar los determinantes de la participa-
determinan que un porcentaje de éstos hagan uso de ción en servicios crediticios ofrecidos por las socie-
los servicios crediticios que ofrecen dichas institu- dades de ahorro y crédito popular.
ciones. Como indicamos con anterioridad, los requi- Una segunda estimación consistirá en analizar qué
sitos para participar de los servicios crediticios que determina que un individuo que tenía préstamos
ofrecen las sociedades de ahorro y crédito popular continúe teniéndolos o deje de tenerlos, y viceversa.
Cuadro 4
Matriz de transición de los clientes
2005
Tiene financiamiento de una No tienen financiamiento
sacp de una sacp
Tienen financiamiento de una 48.4 % 51.6 %
sacp
2004
No tienen financiamiento de una 15.9 % 84.1 %
sacp
Cuadro 5
Características de los clientes
Siempre tuvieron Alguna vez tuvieron Nunca tuvieron
financiamiento de una financiamiento de una financiamiento de una
sacp sacp sacp
# Entrevistados 484 711 1 239
Edad promedio del jefe 47.2 48.0 49.5
Escolaridad promedio 2.75 2.60 2.03
del jefe
Posición trabajo:
a) Patrón 10 24 17
b) Cuenta Propia 104 167 205
c) Asalariado 303 421 786
% de familias en zonas 53.5 45.9 47.7
rurales
# Familias con:
a) Perturbación negativa 46 50 91
hogar y local.
b) Perturbación negativa 173 266 455
hogar o local.
c) Ninguna perturbación 265 395 693
negativa
13
13. Un estudio de los determinantes de dicha movilidad eliminaría la totalidad de las variables sociodemo-
permitirá verificar la robustez de los resultados ob- gráficas, así como otras que no tienen mucha va-
tenidos con la primera estimación antes descrita.13 riación en el tiempo. Además, las estimaciones se
vuelven ineficientes, pues al buscar estimar un alto
número de parámetros –en un plazo temporal de dos
iii. Metodología años– se pierden muchos grados de libertad.
Una forma de atacar el dilema planteado por la de-
Como dijéramos anteriormente, la pregunta cen- cisión de cuál de estos modelos utilizar –efectos fijos
tral del trabajo es ¿cuáles son los principales deter- o aleatorios– es hacer uso de un modelo dinámico
minantes de la participación de los hogares en los de diferencias. En dicho caso, podemos cambiar la
servicios crediticios? Con el fin de no confundir pregunta a: ¿qué factores conducen a que se altere
acceso con participación, haremos uso de una en- la decisión o no de participar? En este escenario, la
cuesta panel levantada por Bansefi durante los años variable dependiente estaría descrita por una matriz
2004-2005 en localidades del país donde habían so- de transición entre estados (véase cuadro 4): tener o
ciedades de ahorro y crédito popular que ofrecían no financiamiento y su cambio en el siguiente perio-
servicios financieros. Dado que la gran mayoría de do, y utilizaríamos un multinomial logit (McFad-
estas instituciones no tiende a pedir documenta- den, 1974) de la siguiente forma:
ción formal para acreditar garantías, ni domicilio ni
comprobante de un trabajo en el sector formal, su x 'ij w 'i
sola presencia se toma como indicador de la posibi- pij e j
m
lidad de poder acceder a dichos servicios. Con base e x 'i l
en tal supuesto podemos inferir que la participación l 1
o no en los servicios crediticios es una decisión a
nivel del hogar. donde pij es la probabilidad de que el hogar i se en-
La probabilidad de participar se puede analizar a cuentre en la situación j en lo que se refiere a partici-
través de un modelo probit de datos de panel con par o no de los servicios financieros; β es el conjunto
efectos aleatorios de la forma (Greene, 2003): de parámetros a estimar y x es el conjunto de matri-
yit=β0+βxit+νi+εit. El resultado aleatorio está en fun- ces de características a incluir en las regresiones, ta-
ción del valor de la media más un término de error les como las sociodemográficas, la posición del jefe
νi que no debe estar correlacionado con el error de del hogar en el mercado laboral, la presencia de per-
las variables y que es heterogéneamente específico turbaciones a la localidad y al hogar, etcétera.
–en nuestro caso– a un hogar, y es además constante Con el fin de responder a las preguntas de qué fac-
en el tiempo. Una ventaja de este modelo de efec- tores motivan la demanda por servicios financie-
tos aleatorios es que permite la inclusión de variables ros y cuáles son los que motivan la alteración de
que no se modifican en el tiempo, o que cambian tal participación, utilizaremos, respectivamente, dos
marginalmente dentro del modelo de análisis. variables dependientes. La primera es una variable
Sin embargo, un problema con este tipo de modelos dicotómica (1,0) que refleja si la familia ha tenido
de efectos aleatorios es que la función condicio- (o no) en los últimos doce meses un préstamo de
nal promedio puede incluir el efecto específico del una sociedad de ahorro y crédito popular. Por otro
hogar. Ante ello, podría resultar más idóneo el uso lado, para estimar el modelo dinámico utilizaremos
de efectos fijos. Empero, en la medida que nuestra como variable dependiente a una que toma los valo-
muestra sólo consta de dos años, el uso de efectos res (1,2,3) para describir si nunca tuvo un préstamo,
fijos se vuelve problemático pues prácticamente si alguna vez lo tuvo o si siempre lo ha tenido.
13 Dado el relativamente libre acceso, asumimos innecesario realizar una estimación en dos etapas –siguiendo el procedimiento
sugerido por Heckman– para hallar la significancia estadística de algunos posibles determinantes de la demanda por crédito. Sin
embargo, siempre puede haber el riesgo de autoselección y la búsqueda de una variable de exclusión se dificulta más por las limi-
taciones de la encuesta. Con el fin de considerar este problema, la segunda estimación nos permite analizar una versión dinámica
que analiza los cambios en la decisión de tomar o no microcréditos.
14
14. Para explicar la decisión de participar y la de alterar vaya del índice de riqueza a la variable dependiente.
dicha decisión, utilizaremos tres tipos de variables. Sin embargo, siendo esto una suposición, será nece-
El primer tipo incorpora variables sociodemográfi- sario tomar con precaución los resultados asociados
cas (género, estado civil, edad y educación) del jefe con dicha variable.
del hogar. Siendo las dos últimas características re- Adicionalmente, se incluyó en este tercer grupo a
flejo del capital humano de las personas, esperamos una variable dicotómica que nos informa si la familia
que edad y escolaridad –como aproximación de ex- recibe transferencias monetarias por parte del Esta-
periencia– estén correlacionadas positivamente con do. A primera vista, la correlación esperada entre
la utilización de servicios crediticios, pero que las esta variable y la dependiente es incierta, pues de-
mismas presenten rendimientos decrecientes –lo penderá en buena medida del uso que las familias
cual se espera constatar por medio del signo que hagan de estos fondos públicos y de las necesidades
tome el parámetro que acompañe a la variable edad financieras que tenían. Ahora bien, la introducción
al cuadrado. De manera adicional, incorporamos de las transferencias públicas en las estimaciones
una variable geográfica que nos indica en qué par- puede causar problemas, pues al estar focalizadas
te del territorio nacional se encuentra la familia, y corremos el riesgo de que el error en la estimación
otra que nos indica el periodo de observación. En de la participación esté correlacionado con las trans-
la medida que estas dos últimas variables intentan ferencias públicas. Dicho de otra manera, es posible
capturar el entorno, a priori no podemos suponer el que los más pobres se caractericen por no hacer uso
signo esperado de la correlación de estas variables de servicios crediticios y ser beneficiarios de los pro-
con la variable dependiente. gramas sociales.
El segundo tipo de variables agrupa a variables labo- Ante ello, la primera opción fue reconstruir la varia-
rales. En este grupo tenemos a los empleados agru- ble transferencias públicas por medio de instrumen-
pados según su posición en el empleo (patrón, cuen- tos. Para tal fin, se estimaron los determinantes de
ta propia y asalariado). En la medida que dejamos ser beneficiario de las transferencias gubernamenta-
como variable omitida a los desempleados, espera- les y, con ello, se generó una variable instrumental
mos obtener –independientemente de la posición en que permitiera controlar la potencial endogeneidad.
el trabajo– una correlación positiva entre empleados A pesar de haber considerado un conjunto de varia-
y la variable dependiente. Ahora bien, dado que las bles sociodemográficas, laborales y de característi-
sociedades de ahorro y crédito popular le dan espe- cas de la vivienda, la prueba Durbin-Wu-Hausman
cial énfasis al uso del crédito con fines productivos, continuó arrojando resultados que no indicaban que
es más probable el uso de servicios crediticios entre tal variable instrumental fuera exógena. Dado este
patrones y cuenta propias que entre asalariados. resultado, se optó por reestimar los parámetros al se-
El tercer tipo de variables explicativas agrupa a una parar la muestra y tomar como población a aquellos
que mide la riqueza de la familia, una dummy que que nunca recibieron transferencias gubernamenta-
indica si la familia es beneficiaria de transferencias les, con el fin de ver si los demás parámetros cam-
monetarias derivadas de los programas sociales del biaban de manera sustancial.
gobierno federal, y una variable que mide si la fa- Finalmente, la tercera variable en este grupo mide si
milia o su entorno geográfico experimentó alguna la familia enfrentó perturbaciones negativas a nivel
perturbación negativa. local como familiar. Como se dijo antes, una pertur-
Como mencionamos en la sección anterior, ante la bación negativa en la localidad se relaciona con un
ausencia de información referente al ingreso o al desastre natural o una baja en el valor agregado de
gasto familiar, se recurrió a la metodología plantea- las ventas; mientras que una perturbación negativa
da por Filmer y Pritchett (2001) para construir –por en el hogar se refiere a decesos en la familia, enfer-
medio del método de componentes principales– un medad grave o descompostura de algún equipo de
índice de activos con base en las características de la trabajo. Dada la casi inexistente oferta de productos
vivienda, utilización de servicios públicos y propie- de aseguramiento, deberíamos esperar una correla-
dad de activos no financieros. Dado que este índice ción positiva entre la presencia de choques negati-
refleja un acervo y no un flujo, es posible suponer vos y el uso de servicios crediticios.
que la causalidad positiva que espera encontrarse
15
15. iv. resultados cios. Sin embargo, con el fin de despejar cualquier
duda, se buscó examinar si su inclusión generaba
Con el fin de responder a la pregunta de qué factores distorsiones importantes en el valor de los otros pa-
determinan que un hogar haga uso de los servicios rámetros.
crediticios que ofrecen las sociedades de ahorro y cré- Un tercer factor que pudiera sesgar los resultados es
dito popular, haremos uso –como se explicó en la el desgaste en el seguimiento de la muestra (attri-
sección anterior– de un modelo probit que permita tion). Aun cuando el presente estudio no es de corte
la utilización de una base de datos panel. La varia- experimental, la desaparición de individuos de un
ble dependiente es una variable dicotómica (1,0) que periodo a otro pudiera sesgar los resultados, por lo
refleja si la familia ha tenido (o no) en los últimos que resulta importante averiguar qué implicancias
doce meses un préstamo de una sociedad de ahorro tiene considerar un panel desbalanceado. Si bien
y crédito popular. sólo 15% de los hogares no fueron entrevistados en
El cuadro 6 presenta los resultados de las estima- ambos años, dicho grupo no tiene en promedio un
ciones. Se reportan cinco estimaciones distintas en índice de activos diferente15 al reportado para las fa-
virtud de cambios en la muestra y variables expli- milias que fueron entrevistados en ambos periodos.
cativas que se incluyen, en razón de cuatro pregun- Finalmente, el cuarto factor que explica la genera-
tas. La primera, ¿la inclusión en la muestra de todos ción de cinco estimaciones es la potencial endogenei-
aquellos que son clientes de Bansefi14 genera un ses- dad de recibir una transferencia gubernamental. Dado
go? Dado que las sucursales de Bansefi se localizan que la recepción de transferencias puede obedecer a
en zonas donde originalmente no había institucio- los mismos factores que explican la participación en
nes financieras, y tomando en consideración que no servicios crediticios, es posible la presencia de una
ofrece servicios crediticios, podría resultar obvia la correlación no nula entre los errores de estimación
exclusión de la muestra de aquellas personas que y la variable de transferencias públicas. Con el fin
eran clientes de esta institución pública debido a de examinar tal aseveración, se reestimaron los pa-
que podrían ser catalogadas como personas que no rámetros tomando como población a aquellos que
tenían acceso a servicios crediticios institucionales. nunca recibieron transferencias gubernamentales.
Sin embargo, en la medida que muchos individuos Independientemente de la muestra utilizada, las va-
recogen las transferencias gubernamentales en las riables edad, edad al cuadrado y escolaridad tienen
sucursales de Bansefi, la correlación existente entre los signos esperados: mayor experiencia (medido
la recepción de dichas transferencias y el uso de ser- por edad) y mayor educación sugieren una mayor
vicios crediticios institucionales podría sesgarse al probabilidad de hacer uso de servicios crediticios.
eliminar de la muestra a aquellos que eran clientes de Respecto al género del jefe de hogar, los resultados
esta entidad financiera pública. A priori, la inclusión generales sugieren que el mismo no es una variable
de estos individuos se espera que no genere cambios significativa en la decisión de endeudarse. Por otro
significativos en el valor de los parámetros estima- lado, indistintamente de la posición en el trabajo, los
dos en virtud del bajo número de individuos que son parámetros estimados para las variables laborales
clientes de Bansefi y que además reciben transferen- son siempre positivos, lo cual sugiere que la pro-
cias gubernamentales. babilidad de utilizar servicios crediticios es menor
Un segundo factor que da origen a estas cinco esti- para los desempleados (categoría base). Respecto a
maciones es la utilización del índice de riqueza como la posición dentro del trabajo, es de resaltar el or-
variable explicativa de la participación en servicios denamiento que tienen los parámetros estimados: la
crediticios. Dado que este índice refleja un acervo mayor probabilidad de hacer uso de servicios credi-
y no un flujo, es poco probable que pudiera verse ticios la tiene el patrón y luego el cuenta propia, lo
influenciado por la utilización de servicios crediti- cual es consistente con el énfasis que tienden a dar
14 De las 5 768 personas entrevistadas en 2004, sólo 324 eran clientes de Bansefi. El 68% de estos 324 recibían una transferencia
gubernamental, y sólo 4% tenía deudas con una sociedad de ahorro y crédito popular.
15 Las pruebas de medias rechazan que las muestras sean diferentes.
16
16. Cuadro 6
Determinantes de participación en microcrédito institucional
Est. 1 Est. 2 Est. 3 Est. 4 Est. 5
Muestra Toda Toda Sin attrition Bansefi=0 Trsf. pública =0
Edad 0.120 *** 0.058 *** 0.097 *** 0.134 *** 0.109 ***
(5.2) (2.6) (3.5) (5.7) (4.3)
Edad 2 -0.0009 *** -0.0005 ** -0.0008 *** -0.001 *** -0.0009 ***
(4.4) (2.3) (3.2) (4.8) (3.5)
Escolaridad 0.577 *** 0.335 *** 0.327 *** 0.580 *** 0.537 ***
(11.4) (6.6) (5.8) (11.4) (10.0)
Jefe hombre -0.202 -0.154 0.589 * -0.245 -0.404
(0.7) (0.6) (1.7) (0.9) (1.3)
Casado 0.753 *** 0.459 * 0.073 0.889 *** 0.957 ***
(2.9) (1.8) (0.2) (3.3) (3.3)
Patrón 0.877** 0.608 0.818 * 0.812 ** 1.07 ***
(2.2) (1.5) (1.9) (2.0) (2.6)
Cuenta propia 0.619 *** 0.510 *** 0.447 ** 0.613 *** 0.693 ***
(3.3) (2.8) (2.1) (3.2) (3.4)
Asalariado 0.360 ** 0.406 ** 0.391 ** 0.375 ** 0.573 ***
(2.2) (2.4) (2.1) (2.2) (3.0)
Índice activos 0.926 *** 0.878 ***
(12.3) (10.7)
Shock local 0.376 *** 0.365 *** 0.367 *** 0.380 *** 0.499 ***
(3.0) (2.9) (2.7) (3.0) (3.3)
Shock hogar 0.451 *** 0.416 *** 0.446 *** 0.410 *** 0.345 **
(3.4) (3.2) (3.0) (3.1) (2.3)
Trasf. pública -0.680 *** -0.248 ** -0.358 *** -0.676 ***
(5.4) (2.0) (2.5) (5.3)
Rural 0.286 ** 1.607 *** 1.532 *** 0.281 ** 0.330 **
(2.3) (9.8) (8.3) (2.3) (2.3)
Norte -0.560 *** -0.449 *** -0.457 *** -0.561 *** -0.750 ***
(3.6) (3.0) (2.6) (3.6) (4.5)
Sur -0.408 *** -0.055 -0.082 -0.499 *** -0.620 ***
(3.1) (0.4) (0.6) (3.8) (4.2)
Observaciones 8,145 8,134 6,610 7.772 4,892
Prob> chi2 0.000 0.000 0.000 0.000 0.000
Notas:
1) Todas las muestras se restringieron a que siempre fuera la misma persona la que respondiera en ambas ocasiones.
2) Al hacer las regresiones se controló por una dummy de tiempo (2004) y una constante.
3) Debajo del parámetro estimado se reporta el valor del estadístico z.
4) Categorías base: jefe mujer; no casado; sin ocupación alguna; zona centro.
5) ***significativo al 1%, ** significativo al 5%, * significativo al 10%.
17
17. las sociedades de ahorro y crédito popular al présta- tal variable instrumental fuera exógena, es impor-
mo con fines productivos. tante señalar que la inclusión de dicha variable –en
Respecto al índice de riqueza, los resultados son lugar de la variable original– no alteraba el signo ni
consistentes con lo esperado: se reporta una co- significancia estadística del impacto19 que acarrean
rrelación positiva entre la variable dependiente y las transferencias del gobierno sobre el uso de ser-
el valor que toma el índice. Tal correlación podría vicios crediticios.
responder a una posible asociación entre niveles de Un segundo tipo de estimación, como se mencionó
riqueza y posibilidades de emprender un negocio.16 en la metodológica, consiste en analizar qué deter-
Dado que dicho índice es un indicador del acervo de mina la movilidad o inmovilidad del hogar en lo que
riqueza, se supuso que la misma no se alteraba por se refiere a su demanda por servicios crediticios. Un
la participación en los mercados crediticios. Con el estudio de los determinantes de esta movilidad per-
fin de examinar de manera indirecta tal hipótesis,17 mitirá verificar la robustez de los resultados presen-
una comparación de las primeras dos estimaciones tados en el cuadro anterior. Para tal fin se utilizó un
muestran que la inclusión del índice de riqueza no logit multinomial que –como se dijo en la metodolo-
afecta ni el signo ni la significancia estadística de gía– utiliza una variable dependiente que toma los
los demás parámetros estimados. valores (1,2,3) para describir si nunca tuvo un prés-
Con respecto al impacto que tienen las perturbacio- tamo, si alguna vez lo tuvo o si siempre lo ha teni-
nes negativas sobre el uso de servicios crediticios, do. En los resultados que presentamos en el Cuadro
su signo es claramente positivo. Así, una perturba- 7, se tomó como base a aquellos individuos que
ción negativa en la localidad (desastres naturales o nunca pidieron préstamos y se evaluó la movilidad
baja en valor de ventas) o una perturbación negativa de los otros dos grupos: los que en alguno de los dos
en el hogar (muerte, enfermedad grave o descom- años pidieron o los que pidieron en ambos años. La
postura de algún equipo de trabajo)18 conducen a muestra fue similar a la utilizada en las primeras dos
una elevación en el uso de servicios crediticios. En estimaciones del Cuadro 6. Junto al valor estimado
este sentido, los resultados parecen sugerir que los de los parámetros se reportan los valores que toma
préstamos fueron utilizados como mecanismo para el relative risk ratio (rrr) –el cual nos indica cuán-
amortiguar el impacto que dichas perturbaciones tas veces más o menos (lo cual dependerá de si el
tienen sobre el gasto. rrr es mayor ó inferior a la unidad) es probable que
Finalmente, está el signo del parámetro que acom- nos quedemos en la categoría en que se encuentra
paña a la variable transferencias públicas. Como se el hogar (alguna vez tuvo préstamos o siempre tuvo
observa, todas las estimaciones del cuadro 6 repor- préstamos) ante un cambio en el valor de alguna va-
tan un parámetro para esta variable con signo ne- riable explicativa.
gativo y estadísticamente significativo, lo cual su- Como puede observarse, el valor del relative risk ra-
giere una especie de efecto expulsión: la recepción tio que acompañan a la edad y la escolaridad –para
de transferencias gubernamentales reduce la nece- ambos grupos de personas– son consistentes con
sidad de utilizar los servicios crediticios institucio- nuestras hipótesis y con los resultados obtenidos en
nales. Ante la existencia de un potencial problema el cuadro anterior. Así, el hecho de que los relative
de endogeneidad, construimos –por medio de un risk ratios sean mayores a la unidad implica que
conjunto de variables sociodemográficas, laborales y un aumento en cualquiera de estas dos variables lo
de características de la vivienda– una variable instru- hace menos proclive a pasarse al grupo base: los que
mental. Si bien la prueba Durbin-Wu-Hausman con- nunca tuvieron crédito. Esta consistencia en los re-
tinuaba arrojando resultados que no indicaban que sultados de ambos cuadros también se observa en la
16 Los índices de riqueza urbana y rural a nivel familiar son –en promedio– mayores para patrones, seguido de cuenta propia, emplea-
dos y finalmente desocupados.
17 La prueba de Durbin-Wu-Hausman es significativa, sin embargo, es muy improbable encontrar un buen instrumento para esta
variable.
18 La correlación entre ambos tipos de perturbaciones es de 0.07.
19 Resultados disponibles con los autores.
18
18. variable transferencias gubernamentales. Congruen- pidió préstamos (escenario base). El hecho de que
te con lo reportado en el cuadro 6, los resultados del la movilidad no dependa de las perturbaciones en el
cuadro 7 sugieren que, en caso de que una familia hogar (enfermedad grave, muerte y descompostura
fuera a recibir una transferencia del Estado, es más de algún equipo de trabajo)21 podría sugerir que el
probable –dado que el valor del relative risk ratio uso de servicios crediticios es más común cuando la
es inferior a la unidad– que pase de cualquiera de perturbación se asocia a un choque transitorio sobre
estos dos escenarios al escenario base (nunca tuvo la generación de ingreso.
préstamos). Así, los resultados que se reportan en el cuadro 7
Por otro lado, en cuanto a las perturbaciones, los son consistentes con nuestras hipótesis y con los re-
resultados del cuadro 7 indican que sólo las de ori- sultados presentados en el cuadro 6. Quizá la única
gen local tienen impacto sobre la movilidad: una excepción a esta caracterización son las variables
perturbación de esta naturaleza (caída en ventas, que reflejan la posición laboral; si bien los paráme-
sequía y baja en precios)20 vuelve menos proclive tros estimados son los correctos,22 son no-significa-
a una familia a estar en una situación donde nunca tivos, lo cual sugiere que las variables por sí solas
Cuadro 7
Determinantes de movilidad en participación de microcrédito institucional
Alguna vez tuvo Siempre tuvo
rrr P> | z | rrr P> | z |
Edad 1.115 *** 0.000 1.145 *** 0.000
Edad2 0.999 *** 0.000 0.998 *** 0.000
Escolaridad 1.366 *** 0.000 1.676 *** 0.000
Jefe hombre 1.005 0.988 1.818 0.151
Casado 1.165 0.649 0.837 0.648
Patrón 4.886 ** 0.012 1.434 0.578
Cuenta propia 2.634* 0.077 1.215 0.701
Asalariado 1.954 0.215 0.956 0.928
Perturbación local 1.342 ** 0.014 1.458 *** 0.007
Perturbación hogar 0.998 0.992 1.280 0.128
Transf. pública 0.556 *** 0.000 0.700 *** 0.011
Rural 1.239 ** 0.054 1.858 *** 0.000
Norte 0.589 *** 0.001 0.540 *** 0.001
Sur 0.915 0.452 0.779 0.077
No. observaciones, 2906
(Prob> chi2) 0.0000
Notas:
1) Base del multinomial: nunca tuvo un préstamo de una sociedad de ahorro y crédito popular.
2) La muestra se restringió siempre a que fuera la misma persona la que respondiera en ambas ocasiones.
3) Al hacer las regresiones se controló por una dummy de tiempo (2004) y una constante.
4) Categorías base: jefe mujer; no casado; sin ocupación alguna; zona centro.
5) ***significativo al 1%, ** significativo al 5%, * significativo al 10%.
20 Ordenado de mayor a menor recurrencia.
21 Ordenado de mayor a menor recurrencia.
22 Al ser mayores a la unidad, implican que una persona empleada es menos proclive a moverse al escenario base.
19
19. no logran explicar un cambio en la posición en que situación laboral y su posición en el trabajo; el ni-
se encuentra el individuo respecto a su participación vel de riqueza de las personas; la presencia de per-
en los servicios crediticios. turbaciones locales, y la recepción de transferencias
Con el fin de evaluar la sensibilidad de estos paráme- gubernamentales. La importancia que tienen las dos
tros a los posibles cambios en la muestra por los moti- primeras variables es consistente con el énfasis que
vos señalados previamente, se reestimaron los valores tienden a dar las sociedades de ahorro y crédito popu-
de los relative risk ratios para muestras en donde no lar al préstamo con fines productivos, y con la posible
se incluyeran a los clientes de Bansefi ni tampoco a asociación que pudiera haber entre niveles de riqueza
aquellos que recibían transferencias públicas. En am- y posibilidades de emprender un negocio.
bos casos, los parámetros (no reportados aquí pero Respecto al impacto de las perturbaciones negati-
disponibles con los autores) fueron similares a los vas, los resultados sugieren que los préstamos tienden
reportados en el cuadro 7. Asimismo, se consideró a ser demandados en mayor medida cuando se trata
al índice de riqueza como variable explicativa adi- de perturbaciones de carácter local que de carácter
cional. Consistente con los resultados del cuadro 6, familiar. En este sentido, la demanda por servicios
el relative risk ratio para dicha variable fue mayor a financieros es más común cuando la perturbación se
la unidad, y su inclusión no trajo consigo un cambio asocia a un choque transitorio al ingreso. Este re-
significativo en el valor de los demás parámetros. sultado podría sugerir la existencia de una potencial
demanda por productos de aseguramiento. Sin em-
bargo, ante la alta ocurrencia de tales perturbacio-
v. conclusiones nes, tendrían que considerarse diversas exclusiones
o un alto precio para que su oferta fuera rentable, lo
Ante la presunción de los posibles beneficios –en cual limitaría su demanda.
términos de alivio a la pobreza y mejora en la dis- Finalmente, están las transferencias monetarias que
tribución del ingreso– que pudiera acarrear el acce- otorga el gobierno federal como parte de la política
so a fuentes formales de financiamiento, existe un social. Si bien su inclusión en las estimaciones pre-
creciente interés por diseñar políticas públicas que senta un potencial problema de endogeneidad que no
eleven la participación de la población de escasos pudo ser resuelto de una manera apropiada, las diver-
recursos en el uso de los servicios crediticios. To- sas pruebas que se hicieron sugieren que los recepto-
mando en consideración las diferencias que pudie- res de los mismos tienden a una menor probabilidad
ran existir entre los conceptos de acceso y partici- de demandar servicios crediticios institucionales.
pación, el objetivo del presente artículo consistió en Así, no puede descartarse un escenario en el cual
encontrar qué factores determinan que una pobla- el objetivo de una política gubernamental (en este
ción –que cuenta con acceso a servicios crediticios caso la social) atente contre el objetivo de otra po-
institucionales– participe de los mismos. Para hacer lítica pública (la financiera). Si bien estas políticas
más robustos nuestros resultados, un segundo obje- públicas no son excluyentes,23 los resultados sugie-
tivo fue entender si estos mismos factores determi- ren que sería propicio encontrar vías para reducir el
nan los cambios en la decisión de participar o no de potencial conflicto que pudiera haber entre ambos
dichos servicios a través del tiempo. objetivos.
En términos generales, encontramos que la decisión
de participar depende de cuatro tipos de variables: la
23 De acuerdo con los datos del cuadro 2, aproximadamente 40% de la población –independientemente de si eran o no socios de una
sacp– recibieron en 2004 una transferencia monetaria proveniente del Estado.
20
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Tel.: (55) 59504339, 59504000 x7679, Fax: (55) 59504195