1. 1. Analiza la estructura morfológica de las siguientes formas verbales:
2. Identifica y clasifica las perífrasis verbales:
Hemos venido a parar
Acabo de hacer
Sigue cultivando su afición por los coches
Hay que saber decir no
Suelen arreglar
No podía levantarse del sofá
Laura debe de ser su hermana
3. Desarrolla el siguiente tema: “Usos del presente”.
4. Escribe las siguientes formas verbales:
a) 3.ª pers. del pl. del presente de subjuntivo del verbo satisfacer.
b) 2.ª pers. del pl. del pretérito perfecto simple de indicativo del verbo andar.
c) 2.ª pers. del sing. del pretérito perfecto compuesto de indicativo del verbo traducir.
d) 2.ª pers. del sing. del pretérito anterior del verbo ir.
Raíz VT DTM DNP
Podrían
Ocurriera
Llegó
Perdone
T . 1 8 , 1 9 , 2 0 ( p o s i b l e s p r e g u n t a s )
2. En este tiempo vino a posar al mesón un ciego, el cual, pareciéndole que yo sería para adestralle, me pidió a mi madre,
y ella me encomendó a él, diciéndole como era hijo de un buen hombre, el cual por ensalzar la fe había muerto en la de
los Gelves1, y que ella confiaba en Dios, no saldría peor hombre que mi padre, y que le rogaba me tratase bien y mirase
por mí, pues era huérfano. Él le respondió que así lo haría, y que me recibía no por mozo sino por hijo. Y así le comencé
a servir y adestrar a mi nuevo y viejo amo.
Como estuvimos en Salamanca algunos días, pareciéndole a mi amo que no era la ganancia a su contento, determinó
irse de allí; y cuando nos hubimos de partir, yo fui a ver a mi madre, y ambos llorando, me dio su bendición y dijo:
—Hijo, ya sé que no te veré más. Procura ser bueno, y Dios te guíe. Criado te he y con buen amo te he puesto. Válete
por ti.
Y así me fui para mi amo, que esperándome estaba.
Salimos de Salamanca, y llegando a la puente, está a la entrada della un animal de piedra, que casi tiene forma de toro,
y el ciego mandóme que llegase cerca del animal, y allí puesto, me dijo:
—Lázaro, llega el oído a este toro, y oirás gran ruido dentro de él.
Yo simplemente llegue, creyendo ser así; y como sintió que tenía la cabeza par de la piedra, afirmó recio la mano y
diome una gran calabazada en el diablo del toro, que más de tres días me duró el dolor de la cornada, y díjome:
—Necio, aprende que el mozo del ciego un punto ha de saber más que el diablo.
Y rio mucho la burla.
Parecióme que en aquel instante desperté de la simpleza en que como niño dormido estaba. Dije entre mí: «Verdad dice
este, que me cumple avivar el ojo y avisar, pues solo soy, y pensar cómo me sepa valer».
1 la de los Gelves: se refiere a la «Jornada de los Gelves», una expedición militar que tuvo lugar en 1510 en la que Fernando el
Católico trató de conquistar, en vano, algunas plazas en el norte de África.
Lazarillo de Tormes
5. Establece los temas tratados en el texto leído.
6. Indica qué rasgos del pícaro se ponen de manifiesto en el fragmento.
7. Analiza el tipo de narrador.
8. Establece el espacio y el tiempo en el que se desarrolla la acción.
9. Analiza los recursos estilísticos empleados.
10. La prosa renacentista. El auge de la novela.
11. Rasgos fundamentales de la novela picaresca.
12. El Lazarillo de Tormes: estructura, originalidad de la obra, estilo, autoría y fecha.
Los galeotes
Cuenta Cide Hamete Benengeli, autor arábigo y manchego, en esta gravísima, altisonante, mínima, dulce e imaginada
historia, que después que entre el famoso don Quijote de la Mancha y Sancho Panza, su escudero, pasaron aquellas
razones que en el fin del capítulo veinte y uno quedan referidas, que don Quijote alzó los ojos y vio que por el camino
que llevaba venían hasta doce hombres a pie, ensartados como cuentas en una gran cadena de hierro por los cuellos, y
todos con esposas a las manos; venían asimismo con ellos dos hombres de a caballo y dos de a pie: los de a caballo,
con escopetas de rueda, y los de a pie, con dardos y espadas; y que así como Sancho Panza los vio, dijo:
—Esta es cadena de galeotes, gente forzada del rey, que va a las galeras.
—¿Cómo gente forzada? —preguntó don Quijote—. ¿Es posible que el rey haga fuerza a ninguna gente?
T . 1 8 , 1 9 , 2 0 ( p o s i b l e s p r e g u n t a s )
3. —No digo eso —respondió Sancho—, sino que es gente que por sus delitos va condenada a servir al rey en las galeras
de por fuerza.
—En resolución —replicó don Quijote—, como quiera que ello sea, esta gente, aunque los llevan, van de por fuerza, y
no de su voluntad. […]
Llegó en esto la cadena de los galeotes y don Quijote con muy corteses razones pidió a los que iban en su guarda
fuesen servidos de informarle y decirle la causa o causas porque llevaban aquella gente de aquella manera.
Una de las guardas de a caballo respondió que eran galeotes, gente de Su Majestad, que iba a galeras, y que no había
más que decir, ni él tenía más que saber. […]
—De todo cuanto me habéis dicho, hermanos carísimo, he sacado en limpio que, aunque os han castigado por vuestras
culpas, las penas que vais a padecer no os dan mucho gusto y que vais a ellas muy de mala gana y muy contra vuestra
voluntad, y que podría ser que el poco ánimo que aquel tuvo en el tormento, la falta de dinero de este, el poco favor del
otro y, finalmente, el torcido juicio del juez hubiese sido causa de vuestra perdición y de no haber salido con la justicia
que de vuestra parte teníais. Todo lo cual se me representa a mí ahora en la memoria, de manera que me está diciendo,
persuadiendo y aun forzando que muestre con vosotros el efecto para que el cielo me arrojó al mundo y me hizo
profesar en él la orden de caballería que profeso, y el voto que en ella hice de favorecer a los menesterosos y opresos
de los mayores. Pero, porque sé que una de las partes de la prudencia es que lo que se puede hacer por bien no se
haga por mal, quiero rogar a estos señores guardianes y comisarios sean servidos de desataros y dejaros ir en paz, que
no faltarán otros que sirvan al rey en mejores ocasiones, porque me parece duro hacer esclavos a los que Dios y
naturaleza hizo libres. Cuanto más, señores guardas —añadió don Quijote—, que estos pobres no han cometido nada
contra vosotros.
—¡Donosa majadería! —respondió el comisario—. ¡Bueno está el donaire con que ha salido a cabo de rato! Los for-
zados del rey quiere que le dejemos, como si tuviéramos autoridad para soltarlos, o él la tuviera para mandárnoslo.
Váyase vuestra merced, señor, norabuena su camino adelante y enderécese ese bacín que trae en la cabeza y no ande
buscando tres pies al gato.
—¡Vois sois el gato y el rato y el bellaco! —respondió don Quijote.
Y, diciendo y haciendo, arremetió contra él tan presto, que, sin que tuviese lugar de ponerse en defensa, dio con él en el
suelo malherido de una lanzada.
Miguel de Cervantes
Don Quijote de la Mancha
13. A partir de la primera frase del texto, explica la problemática del narrador en El Quijote.
14. Sitúa el texto dentro de la estructura de la obra.
15. Explica brevemente el contenido de la novela ejemplar El licenciado Vidriera y relaciónalo
con alguna característica de don Quijote.
16. Miguel de Cervantes: la novel pastoril y las Novelas ejemplares.
17. Don Quijote de la Mancha: Fuentes y estructura.
18. Don Quijote de la Mancha: Temas y estilo.
19. El Barroco: rasgos generales, contexto histórico-social.
20. El Barroco: características y diferencias con el Renacimiento.
21. Temas y estilo de la lírica barroca.
22. Características del culteranismo.
23. Características del conceptismo.
24. Luis de Góngora: obra poética y estilo.
25. Lope de Vega: obra poética y estilo.
26. Francisco de Quevedo: obra poética y estilo.
27. Comentario de texto de un poema renacentista o barroco (cfr. poemas del libro y fotocopias
entregadas).