Lecciones 05 Esc. Sabática. Fe contra todo pronóstico.
Autobiografía
1. Autobiografía
Me llamo Jesús Romero Gómez, nací en Hermosillo Sonora, el 15 de noviembre del 1997. Mi
forma física es delgado, alto, un poco quemado, con pelo rizado ondulado. Recuerdo que mi casa
se me hacía más grande, cuando era pequeño, había pocos muebles y me podía desplazar
fácilmente con mis juguetes. A mí me gustaban los camiones y en mi casa hacia como un tipo
recorrido de la ruta de los camiones de verdad y hacías topes con plastilina y los pegaba en el
piso, jugaba con mi hermano y me divertía mucho.
Los recuerdos del kínder ya no recuerdo muy bien, pero si algunos, cuando era la hora de receso
salía con mis amigos a jugar en los columpios, en las llantas, en el resbaladero, etc. También
hubo algunas veces que poníamos la mochila y echábamos todas las Sabritas ahí encima y nos la
comíamos bien a gusto, otras veces salíamos de ir de paseo. También hubo un campamento en el
que me divertí mucho porque realizamos una búsqueda de tesoro, yo halle una Barbie, pero le
dije a la maestra y me dijo que fuera a buscar otro y me encontré una pistola de agua, esas fueron
algunas de mis experiencias del kínder.
En la primaria recuerdo que, en la hora de recreo, jugábamos al chicote y se juntaba casi dos
salones jugando al chicote. También en tercero el maestro Gustavo nos ponía a jugar como parte
de un tema de clase y así para mi aprendía más. En cuarto y quinto nos dio el mismo maestro y
con el decía que el primero que terminara revisaría, y a mí siempre me gusto revisar, por eso a
veces me apuraba para yo revisar, también si no revisabas le podías jugar una partida de ajedrez
con el maestro, y desde que empecé a jugar con el ajedrez, me gusto.
Yo estuve en la escolta del kínder, de la primaria todos los años y estuve en posiciones diferentes
y en la secundaria los tres años. En la primaria fuimos a participar a un concurso de escoltas en el
2. colegio Regis y nos ganamos un reconocimiento, el cual nosotros los de la escolta decidimos
entregarlo a la dirección de la primaria, para no pelearnos por quien se quedaría con el
reconocimiento.
También recuero que participe en las campañas de vota por el azul, creo que era para la sociedad
de alumnos, ya no recuerdo bien, el caso es que a mí me gustaba entrar a eso y hacer apoyar el
color que nos tocó.
Por último, cuando ya salíamos de la escuela, mis amigos se venían para mi casa y nos
quedábamos a jugar en la calle muchas diferentes; venían algunos vecinos a jugar con nosotros,
durábamos hasta las ocho de la noche ahí divirtiéndonos.