Este documento presenta una introducción a la mariología desde la perspectiva de la tradición patrística y conciliar. Explica que los primeros padres de la Iglesia como los padres apostólicos, nicenos y capadocios sentaron las bases para el desarrollo posterior de la mariología aunque no se enfocaron directamente en María, sino que la ubicaron en el contexto del misterio de Cristo y la Iglesia.

1. MARIOLOGÍA
P r o fe s o r a : Ro s a r i o M o r e F l o r e s , M .C

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3. 1. María a la luz de la tradición patrística y conciliar.
CONTENIDOS
2.1. La virgen María en la tradición apostólica.
2.1.1. María en torno a los padres Pre nicenos.
2.2. La virgen María en la tradición conciliar.
2.2.1. María en torno a los padres Nicenos.
2.2.2. María en torno a los padres Capadocios
DESTREZAS - Sintetizar
- Interpretar
- Producir
ACTITUDES 1. Dialogar asertivamente
2. Ser tolerante
3. Cumplir con las tareas en el tiempo establecido

4. M I P U N T O
D E P A R T I D A
S E C U E N C I A D I D Á C T I C A
01
F A C U L T A D D E A D M I N I S T R A C I Ó N Y C O N T A B I L I D A D

5. Lluvia de ideas
- ¿Qué es la Patrística?
- ¿Quiénes son los padres apostólicos?
- ¿Cuál es la tarea primordial de los padres de la Iglesia?
- ¿Qué es la Tradición?

7. T E O R I Z O
Y E L A B O R O
S E C U E N C I A D I D Á C T I C A
02
F A C U L T A D D E A D M I N I S T R A C I Ó N Y C O N T A B I L I D A D

8. • La Patrística estudia el cristianismo de los primeros
siglos y de sus primeros autores conocidos como
padres de la Iglesia.
• En la historia, es la fase de la organización y la teología
cristiana. Abarca desde el fin del cristianismo primitivo
(específicamente desde Hech. de los Ap., año 100 d.C)
hasta el 451 (fecha del Conc. de Calcedonia), o hasta
el II Conc. de Nicea, del s. VIII.
• Se caracterizó por ser el periodo en que se gestó el
contenido doctrinal de nuestra fe cristiana, así como
su defensa apologética contra los ataques de las
religiones paganas primero, y sucesivamente de las
interpretaciones que dieron lugar a las herejías,
después.
Introducción

9. PP. Apostólicos
Tales como Lino y Clemente de
Roma recibieron y continuaron
con la tradición y enseñanza de
los mismos Apóstoles.
Desaparecieron a inicios del s. II,
excepto aquellos pocos que
pudieron haber sido discípulos de
Juan (+ Éfeso, aprox. el 99 d.C.),
tales como Policarpo.
PP. Nicenos
Los padres anteriores al Concilio
de Nicea (325 d.C), tuvieron
inicialemente la preocupación de
los escritos espurios, y después
dedicaron gran parte de su
tiempo a defender la doctrina
cristina de la falsa doctrina.
Algunos fueron Irineo, Ignacio y
Justino mártir.
PP. Capadocios
Basilio el Grande, Gregorio
Nacianceno y Gregorio de Nisa.
Reunificaron Capadocia en la
recta doctrina, tras ser dividida
por arrianos, anomeos y
antiarrianos; armonizaron: sentir
cristiano y paideia griego,
promoviendo el ideal de un
cristianismo culto que acepte lo
válido y bueno del helenismo sin
desfigurar el mensaje cristiano.

10. * La Tradición es la "tradición apostólica" y no de las tradiciones eclesiales. No
es la tradición que crece, sino la comprensión eclesial de la misma. La Tradición
progresa y la comprensión de ella crece. Los agentes de este progreso son la
asistencia del E.S, la contemplación y el estudio, la inteligencia de las cosas
espirituales y la predicación del Magisterio.
* El progreso de la tradición es tarea de toda la Iglesia, a quien se le ha confiado
el deposito sagrado de la Palabra de Dios. Por la tradición los libros sagrados
son comprendidos cada vez mejor y son mantenidos siempre activos. La
tradición interpreta y aplica los libros sagrados a la vida. Una comunidad que
acoge la Palabra con la que Dios sigue conversando, se va introduciendo en la
verdad plena.
* Francisco defiende una “fidelidad creativa a la tradición”. Y es que, la
tradición, como “origen de la fe”, o “crece o se marchita”. “La tradición es la
garantía del futuro y no una pieza de museo”. De esta manera, “es lo que
hace crecer a la Iglesia de abajo hacia arriba, como un árbol, desde las
raíces”. Hay que diferenciarla del “tradicionalismo, que es la fe muerta de los
vivos, que es cuando nos encerramos”.

11. Nicea (325)
Constantinopla
(381)
Éfeso (431)
Calcedonia
(451)
Constantinopla
II (553)
Constantinopla
III (680-681)
Nicea II (787)

13. Con María se da el nexo
entre depósito de la fe, el
sentido de la fe en la
devoción, el culto y el acto
del creer.
La comunidad primitiva, da
fe testimonial de la
presencia discipular y
personal de María.
Importante valorar el itinerario de
la fe de María, evidenciado en
los evangelios, porque cumple
con el propósito de catequizar.
Por esto, por la Tradición basada
en las Escrituras, el Magisterio y
la devoción siempre presentan a
María como modelo de “Escucha
orante de la Palabra de Dios”.

14. Los padres y los escritores fueron en general apologistas, pero no se centraron
sobre María de forma directa, salvo algunas excepciones. Se puede decir que ellos
ubicaron preferiblemente el misterio de María entre el misterio de Cristo y el
misterio de la Iglesia:

15. 1. Primero, fijaron la doctrina básica de la fe cristológica, y en relación con ella el papel de María en
el establecimiento de la ontología de Cristo. Solo después fue posible atender al problema de los
frutos de la obra redentora de Cristo en su madre.
2. Desde el principio enseñaron sobre la santidad de María hablando de sus virtudes, y solo existían
algunas atribuciones a María. Fue tras el Concilio de Éfeso que se presentó el problema de su
completa santidad personal, afirmada poco a poco hasta convertirse en doctrina universal. Solo
implícitamente hablaban de lo que después se llamó “Inmaculada Concepción”. Era considerada
totalmente redimida por la gracia de Cristo.
3. Habiéndose aclarado, por los símbolos de la fe, el término de nuestra redención, por analogía de
la fe enseñan y celebran, al menos desde el s. VI, el misterio de la “Asunción de María”, como
término personal de su participación en la obra salvífica de su Hijo.

16. • Fue más fácil para los PPII ver a María, activa, al lado de Cristo en la obra de salvación que llegar a
conclusiones sobre los efectos de la obra de su Hijo en ella.
• Al ser definida la verdad fundamental sobre la misión de María, elegida libremente por el Padre
para ser la madre de su Hijo hecho carne, se despejó el camino para preguntarse, a la luz de esta
verdad, cuáles eran los frutos inmediatos de la obra redentora de su Hijo en la primera de todos los
cristianos, y en la cual el Salvador había venido a nuestra carne.
• Los Santos Padres tenían preocupaciones teológicas muy diversas de las nuestras, porque vivían en
un contexto histórico distinto, y en otro nivel del desarrollo dogmático. Tal vez ni siquiera se
preguntaron sobre los dogmas hoy formulados, porque aún no se encontraban en el estadio de
descubrir su significado.

17. • Los PPAA son como la fuente para los que
vendrán después, porque fueron testigos de la
predicación de los Apóstoles, garantizadores de la
Revelación y los transmisores de la Tradición de la
Iglesia. Cuando aparecieron las primeras herejías
que intentaban confundir a los cristianos, los
padres se dirigían a estos para cotejar con ellos las
enseñanzas de los Apóstoles.
• De modo que, en los escritos de los padres se
encuentran en germen los elementos doctrinales
que —desarrollados a lo largo de los siglos por la
reflexión teológica y por el sensus fidelium, bajo la
inspiración del Espíritu Santo— facilitaron
posteriormente la proclamación de los dogmas
marianos.

18. San Atanasio, siendo diácono fue uno de la padres
conciliares en Nicea (325). Se convirtió en el gran
defensor de la fe ortodoxa sobre Cristo frente a los
errores de Arrio, quien sostenía que Cristo no era
Hijo de Dios sino una criatura más excelsa que
realizaba el papel de intermediario entre Dios y los
hombres.
Gracias a San Atanasio, el Concilio de Nicea declaró
que Cristo es homo/oúsios con el Padre, es decir, de
la misma sustancia, de la misma naturaleza divina, y
por tanto Dios como el Padre.

19. • La negación de la divinidad de Cristo echaba por
tierra el valor redentor de la vida y muerte de
Cristo. Al mismo tiempo, los errores sobre Cristo
influían en su Madre. Si Cristo no era Dios, María
no era la Theotokos.
• Así, Atanasio defiende la realidad divina de
Cristo. Él es el Logos eterno, por medio del cual se
ha realizado la restauración del hombre, su
redención. La incorruptibilidad que el hombre
había perdido por el pecado ha sido recuperada a
través de Cristo, que ha asumido un cuerpo
humano como el nuestro, de la Virgen María por
obra del Espíritu Santo.

20. • “Si Él hubiese querido solamente aparecerse, habría
podido asumir un cuerpo más excelente, pero en
realidad tomó un cuerpo como el nuestro, aunque no
a la manera usual y corriente, sino que el suyo es un
cuerpo puro... Lo asumió de una virgen inviolada,
pura y que no conoció varón” (De Incarnatione Verbi,
8).
• “El cuerpo tenía una naturaleza común a todos; era
realmente un cuerpo humano, si bien fue engendrado
de la Virgen con un prodigio extraordinario” (Ib., 20).
• San Atanasio aplica a María el título de aeiparthenos =
“siempre virgen”, y probablemente, junto a S. Epifanio
de Salamina, son los primeros en usar este término
aplicado a María. La fe en la virginidad perpetua está
presente en la Iglesia desde los comienzos.

21. • Los PPII enfatizaron que María, al engendrar a Jesús, cooperó para reparar el daño que
nos causó el pecado de Adán y Eva. No obstante, algunos como el Patriarca Nestorio
sostenían que aunque María era digna de toda alabanza no podía llamársele
Theotokos, Madre de Dios. Sostenía que existían dos personas en Cristo, la divina y la
humana, y por lo tanto María debía ser llamada Christotokos, Madre de Cristo, porque
era solo la madre de la persona humana.
• Este problema se combatió en el Concilio de Éfeso (431), y proclamó que María es
verdaderamente Theotokos, Madre de Dios, por haber concebido en su vientre al Dios
hecho hombre. Se puso énfasis en el significado de la Encarnación. María no es Madre
de Dios en términos de la divinidad de Cristo, pero cuando el verbo se unió a la
humanidad al nacer de María, puede decirse que nació según la carne. En cuanto la
naturaleza divina y la naturaleza humana están unidas en Jesucristo, puede decirse
que María es Madre de Dios

22. F A C U L T A D D E A D M I N I S T R A C I Ó N Y C O N T A B I L I D A D
A P L I C O
L O A P R E N D I D O
S E C U E N C I A D I D Á C T I C A
03

23. Producto / evidencia:
Indicaciones para el trabajo:
- Analiza lo estudiado respecto a los Padres de la Iglesia
en la Mariología, luego
- Elabora una infografía sobre uno de los aspectos que
consideres fundamental en la Mariología de los PPII y
dio lugar al desarrollo de la Mariología en la Iglesia
actual.

24. Instrumento de evaluación
CRITERIOS INDICADORES PUNTAJE
Dominio de
contenidos
Muestra uno de los aspectos fundamentals de la
Mariaología en la Tradición 4
Orden y
coherencia
Buena organización y síntesis pertinente de la
información 3
Diseño y
presentación
Es creativo y original
2
Redacción y
ortografía
No tiene errores de ortografía ni redacción 1

25. R E F L E X I O N O Y A P R E N D O
¿Qué propuestas puedes desarrollar, a partir de los Padres de la Iglesia,
para enfocarlo lo fundamental de la figura de María en la Iglesia?

26. R E F E R E N C I A S
Boulanger, Carlos. (2002). Curso de Mariología.
https://hectorucsar.files.wordpress.com/2015/04/p-
carlos-boulanger-curso-de-mariologc3ada.pdf
Alson J. y Larocca, A. María y la Palabra.
https://udayton.edu/imri/mary/_resources/docs-
pdfs/es/maria-y-la-palabra.pdf
Díez Merino, L. (2016). El misterio de María en la
Sagrada Escritura. Estudios Marianos (82) 11-66.
Pablo VI (1964). Lumen Gentium, Madrid, BAC.

27. GRACIAS
D O C E N T E U M C H