2. El uso de luminarias (farolas, proyectores o focos, etc) que, debido a un
mal diseño luminotécnico o a una colocación inapropiada, dejan escapar
buena parte del flujo luminoso fuera del área que se necesita iluminar. Una
excesiva iluminación, produce asimismo importantes e innecesarias
pérdidas de luz por reflexión en el suelo y demás objetos sobre iluminados.
Una zona excesivamente iluminada, provoca que en las zonas vecinas se
tienda a imitarla, igualando al menos aquel nivel de iluminación,
produciéndose una "reacción en cadena" que agrava el problema. Esto se
debe a que el ojo humano necesita un cierto tiempo de adaptación entre
diferentes niveles de iluminación, de modo que cuando pasamos de una
zona con un exceso de luz a otra razonablemente bien iluminada tenemos
la falsa impresión de que el alumbrado de esta última es pobre o
insuficiente.
Causas de la contaminación lumínica:
3. La falta de sensibilidad de las personas y sobre todo de las entidades
responsables es debida principalmente a una falta de información
unida al hecho frecuente de que al vivir durante mucho tiempo con
este problema, nos hemos acostumbrado a él y ya no lo percibimos
como tal. Todo esto lleva a que, con frecuencia, a la hora de elegir un
modelo de luminaria, al carecer de unos criterios propios y
racionales, se utilice el recurso fácil de imitar a otras poblaciones con
alumbrado contaminante, o a que solo se tengan en cuenta criterios
supuestamente estéticos, olvidándose de su principal función que es
la de iluminar bien.
Causas de la contaminación lumínica:
4. Derroche energético: La luz no aprovechada, que con frecuencia
supera el 25 % llegando en algunos casos a superar el 50 %
(farolas tipo globo), también tenemos que pagarla. Nos obliga a
usar lámparas de mayor potencia ya que solo estamos utilizando
una parte de la misma, perdiendose el resto innecesariamente.
Este exceso de consumo que deben de suministrar las centrales
electricas, supone un mayor gasto de combustible y, en
consecuencia, una mayor emisión de gases contaminantes a la
atmósfera, responsables entre otras cosas del efecto invernadero
que está haciendo aumentar la temperatura media de nuestro
planeta y de la lluvia ácida que destruye los bosques.
Las consecuencias de la contaminación
lumínica:
5. Deslumbramiento: La luz que incide directamente desde la
lámpara en nuestros ojos tiene una intensidad bastante
superior a la que nos llega reflejada por el suelo y por los
obstáculos que en él se presenten, haciendo que los veamos
peor, ya que la abertura de las pupilas se ha cerrado hasta
adaptarse a aquella mayor intensidad luminosa. Este molesto
deslumbramiento nos produce fatiga visual , reduce nuestra
percepción y ,en consecuencia, aumenta el riesgo de accidentes
de tráfico, es decir, reduce la seguridad vial.
Las consecuencias de la contaminación
lumínica:
6. También afecta negativamente a la vida nocturna de la
fauna, en especial a ciertas aves (un caso muy conocido es
el de las crías de pardela que en su primer vuelo se
desorientan y se estrellan debido al deslumbramiento de
las poblaciones, hiriéndose y muriendo en muchas
ocasiones). Intromisión en la vida privada de las personas:
Al iluminar fachadas y ventanas con la luz no dirigida al
suelo se producen bastantes moléstias y se facilita la
indiscreción de los viandantes.
Las consecuencias de la contaminación
lumínica:
7. Dificulta y llega a impedir la visión del cielo estrellado: Esta es
una consecuencia realmente lamentable para todos y muy
especialmente para el astrónomo, ya que ese maravilloso
espectáculo, fuente inagotable de conocimientos y de belleza,
que indudablemente es la visión del resto del Universo del que
formamos parte, se ha degradado de tal manera a causa de
dicha contaminación, que hasta hemos ido perdiendo la
costumbre de mirar al cielo por las noches, pues ha dejado de
llamarnos la atención.
Las consecuencias de la contaminación
lumínica:
8. No existen estudios que hablen acerca del grado de afectación
de la luz artificial sobre el hombre, aunque en ciertos casos
curiosos parecen apuntar hacia una conexión entre el uso de
bombillas de Vapor de Mercurio (luz blanca) y la
exteriorización de mayores índices de agresividad
Recientemente, se ha descubierto que el uso de luces tipo
"LED" en habitaciones de niños pequeños es desaconsejable
porque produce alteraciones en el sueño.
Los Inconvenientes en la Salud:
9. Hay un caso de trastorno evidente: el de aquellas personas que
en verano necesitan imperiosamente abrir la ventana para
dormir y no pueden hacerlo si tienen la mala suerte de tener un
foco luminoso frente a ella. Esto produce alteraciones en la vida
social, que si no se remedian pueden llegar a ser graves.
Los posibles síntomas de la falta de sueño gracias a las luces
demasiado potentes son usualmente: sueño inquieto, ausencia
de reposo, insomnio, cansancio y nerviosismo.
Los Inconvenientes en la Salud:
10. En 2012 fue publicado un estudio capitaneado por neurocientíficos de la
Ohio State University Medical Center, financiado parcialmente por el
Departamento de Defensa de Estados Unidos, que sugiere que exponerse
por la noche a fuentes lumínicas, como pantallas de ordenador o televisión
alteraría el ciclo luz-oscuridad provocando desajustes que serían causa de
depresión, además de modificaciones en el hipocampo, disminución de la
densidad de las espinas dendríticas y aumento del factor de necrosis
tumoral (TNF). Estudios anteriores encontraron relación entre
contaminación lumínica nocturna y mayor riesgo de cáncer de mama y
obesidad. El informe dice además que el incremento de la tasa de
trastornos del humor guarda relación con el incremento de la
contaminación lumínica nocturna en las ciudades durante los últimos 50
años.
Los Inconvenientes en la Salud:
11. Desde comienzos de los años 1980 existen diferentes movimientos
organizados de gente preocupada por este problema y que
promueven campañas de prevención de la contaminación lumínica.
Es posible aplicar medidas que, manteniendo un correcto nivel de
iluminación, llevarían a prevenir el problema de la contaminación
lumínica como las siguientes:
Usar lámparas de espectro poco contaminante y gran eficiencia
energética, preferentemente de vapor de sodio a baja presión (VSBP)
o de vapor de sodio a alta presión (VSAP), con una potencia
adecuada al uso.
Impedir que la luz se emita por encima de la horizontal y dirigirla
sólo allí donde es necesaria. Emplear de forma generalizada
luminarias apantalladas cuyo flujo luminoso se dirija únicamente
Propuestas para posibles
soluciones:
12. Iluminar exclusivamente aquellas áreas que lo necesiten, de
arriba hacia abajo y sin dejar que la luz escape fuera de estas
zonas
Ajustar los niveles de iluminación en el suelo a los
recomendados por organismos como el Instituto Astrofísico de
Canarias o la Comisión Internacional de Iluminación.
Regular el apagado de iluminaciones ornamentales,
monumentales y publicitarias.
Prohibir los cañones de luz o láser y cualquier proyector que
envíe la luz hacia el cielo.
Propuestas para posibles
soluciones:
13. Reducir el consumo en horas de menor actividad, mediante el
empleo de reductores de flujo en la red pública o el apagado
selectivo de luminarias. Apagar totalmente las luminarias que
no sean necesarias.
Para medir la calidad del cielo, se utilizan escalas cómo por
ejemplo la escala de cielo oscuro de Bortle. El 20 de abril de
2007 se promulgó la Declaración de la Palma por el derecho a
observar las estrellas, con el apoyo de la Unesco
Propuestas para posibles
soluciones:
14. España es uno de los países de Europa mas afectados por la
contaminación lumínica y el primero en cuanto a gastos de
KWh por habitante. Gastaba unos 450 millones de euros al año
para la iluminación de las calles, ciudades y casas en 2007. En
2012 gasta cerca de los 820 millones de euros debido al
aumento de la tarifa eléctrica. Mientras que en otros países
como en Alemania, un habitante gasta 45 KWh, en España se
gastan 116KWh por habitante Según un estudio de la Comisión,
España es el segundo país de la UE que menos bombillas de
bajo consumo usa.
Países afectados:
15. Andalucía, Levante (Comunidad Valenciana y Región de
Murcia), Cataluña, Madrid, Cantábrico-Valle del Ebro y el eje
atlántico (La Coruña-Lisboa) son las áreas contaminadas en la
península ibérica .Valencia es la ciudad que ha registrado el
mayor índice de KWh por habitante de España (127 KWh frente
a 61,5 KWh por habitante de la capital, Madrid) La
contaminación lumínica de Madrid se puede divisar hasta a 100
Km, siendo visible en las provincias de: Toledo, Cuenca, Ávila,
Segovia, Teruel, Soria, Guadalajara Todo esto supone una
excesiva iluminación de las calles y por lo tanto un gran gasto
eléctrico; es más, Madrid gastó en 2007 45 millones de € en
Países afectados: