2. La primera fundación:
Así, ante la llegada de Alvarado, el 15 de agosto de 1534, Diego de Almagro fundó la ciudad de “Santiago de Quito”, en lo que
ahora conocemos como Riobamba, para de esta manera tener documentos que prueben el dominio sobre el territorio a
Alvarado. En el acta fundacional de esta fecha, Almagro desconoce la labor de Benalcázar y nombra alcaldes y regidores de
su confianza. Dos días después, el 17 de agosto siempre de 1534, se nombraron procurador y mayordomo de la ciudad, y
finalmente el día 20 del mismo mes, 6 castellanos se inscribieron como los primeros vecinos de la, en ese entonces, Santiago
de Quito.
3. La segunda fundación:
Posteriormente, Almagro ya con Alvarado, previo a rendir cuentas al propio Pizarro, fundó el 28 de agosto de 1534 en la
ciudad de Santiago (Riobamba), la Villa de San Francisco de Quito, estableciendo la orden de mover la ciudad al sitio
conocido por los indios como Quito. Se nombraron alcaldes y regidores y los vecinos de Santiago de Quito junto con Alvarado
y Almagro tomaron rumbo al sur a dar encuentro a Pizarro. Mientras tanto, Benalcázar tomaría rumbo al norte para finalizar la
fundación de la nueva Villa de San Francisco de Quito.
4. La tercera y última “fundación”:
El camino de Benalcázar al norte no fue fácil pues a su paso se encontró con los ejércitos de Rumiñahui que especialmente
en Píllaro y Sigchos pusieron gran resistencia al avance español, motivo por el cual, a Benalcázar le tomó tres meses llegar a
la ahora capital de los ecuatorianos. Sin embargo, otro grupo de españoles avanzó y llegó a Quito el 4 de octubre de 1534,
coincidencialmente el día de San Francisco de Asís, de lo que deja apuntes el cura Juan de Castellanos. El 5 de diciembre de
1534 Benalcázar llegó a Turubamba, y tras pasar la noche, el 6 de diciembre de 1534 finalmente cumplió la orden
encomendada por Almagro y dió asentamiento a la más noble de las ciudades.
5. Resistencia a la Fundación
Hay quienes no están de acuerdo con el festejo de esta fecha, pues nos
recuerda a un momento de conquista, en vez de independencia. La de la
fundación nace con el asesinato de Atahualpa y el asentamiento de los
españoles en “kitu”.