SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 13
Descargar para leer sin conexión
EL MATEM´ATICO
JOHN VON NEUMANN
Un an´alisis sobre la naturaleza del trabajo intelectual es una tarea dif´ıcil
en cualquier campo, incluso en los que no est´an tan apartados del ´area cen-
tral de nuestro com´un esfuerzo intelectual humano como lo son todav´ıa las
matem´aticas. Una discusi´on sobre la naturaleza de cualquier esfuerzo inte-
lectual es dif´ıcil per se; en todo caso, m´as dif´ıcil que el mero ejercicio de
ese particular esfuerzo intelectual. Es m´as dif´ıcil comprender el mecanismo
de un aeroplano y las teor´ıas de las fuerzas que lo elevan y lo mueven, que
montar en ´el, ser elevado y transportado por ´el o incluso gobernarlo. Es
excepcional que uno fuera capaz de adquirir el conocimiento de un proceso
sin haber adquirido anteriormente una profunda familiaridad con su funcio-
namiento, con su uso, sin antes haberlo asimilado de una manera instintiva
y emp´ırica.
As´ı, cualquier an´alisis sobre la naturaleza de un esfuerzo intelectual en
cualquier campo es dif´ıcil, a menos que se presuponga una f´acil y rutina-
ria familiaridad con este campo. En las matem´aticas esta limitaci´on llega a
ser muy grave, si el an´alisis debe mantenerse en un plano no matem´atico.
Entonces mostrar´a necesariamente algunos aspectos muy malos; se acep-
tar´an principios que nunca podr´an ser comprobados propiamente y se hace
inevitable una cierta superficialidad general. Es su relaci´on peculiar con las
ciencias naturales, o, m´as generalmente, con toda ciencia que interprete la
experiencia en un nivel superior al descriptivo.
S´e muy bien las limitaciones con que voy a hablar y me disculpo de an-
temano. Asimismo, las oponiones que voy a expresar probablemente no son
plenamente compartidas por muchos matem´aticos —ustedes adquirir´an las
impresiones e interpretaciones no muy bien sistematizadas de un hombre—
y yo puedo prestarles muy poca ayuda para decidir hasta qu´e punto son
acertadas. Sin embargo, a pesar de todos los inconvenientes, debo admitir
que el hacer el intento y hablarles a ustedes de la naturaleza del esfuerzo
intelectual en matem´aticas es una tarea interesante y desafiadora. Espero
no hacerlo del todo mal.
En mi opini´on, el hecho m´as esencialmente caracter´ıstico de las matem´ati-
cas es su relaci´on enteramente peculiar con las ciencias naturales, o, m´as
El Matem´atico. John Von Neumann 2
generalmente, con toda ciencia que interprete la experiencia en un nivel
superior al puramente descriptivo.
La mayor´ıa de la gente, matem´aticos o no, convendr´an en que las ma-
tem´aticas no son una ciencia emp´ırica, o al menos en que se practican de
una manera que difiere en varios aspectos decisivos de las t´ecnicas de las
ciencias emp´ıricas. Y, a´un as´ı, su desarrollo est´a estrechamente ligado al de
las ciencias naturales. Una de sus ramas principales, la geometr´ıa, empez´o de
hecho como ciencia natural y emp´ırica. Algunas de las mejores inspiraciones
de las matem´aticas modernas (yo creo que las mejores) provienen claramen-
te de las ciencias naturales. Los m´etodos matem´aticos invaden y dominan
las secciones “te´oricas” de las ciencias naturales. En las modernas ciencias
emp´ıricas se han convertido en un criterio principal de ´exito el que hayan
llegado a ser accesibles al m´etodo matem´atico o a m´etodos f´ısicos casi ma-
tem´aticos. Ciertamente, a trav´es de todas las ciencias naturales se ha hecho
cada vez m´as evidente una ininterrumpida cadena de sucesivos seudomorfis-
mos, todos ellos tendiendo hacia las matem´aticas, y casi identificados con la
idea de progreso cient´ıfico. La biolog´ıa ha sido invadida gradualmente por
la qu´ımica y la f´ısica, la qu´ımica por la f´ısica experimental y te´orica, y la
f´ısica por formas muy matem´aticas de f´ısica te´orica.
Existe una duplicidad completamente peculiar en la naturaleza de las
matem´aticas. Uno tiene que darse cuenta de esta duplicidad, aceptarla y
asimilarla en sus conceptos del asunto. Este doble aspecto es el de las ma-
tem´aticas y no creo que sea posible otra visi´on simplificada y unitaria de
ellas sin sacrificar su esencia.
Por lo tanto, no intentar´e ofrecerles una versi´on unitaria. Intentar´e descri-
bir, lo mejor que pueda, el fen´omeno m´ultiple que constituye las matem´ati-
cas.
Es innegable que algunas de las mejores inspiraciones de las matem´aticas
—de parte de ellas, que son matem´aticas tan puras como pueda imaginarse—
proceden de las ciencias naturales. Mencionar´e los dos hechos m´as sobresa-
lientes.
El primer ejemplo es, como ten´ıa que ser, geom´etrico. La geometr´ıa era la
parte principal de las matem´aticas antiguas. Todav´ıa es, con alguna de sus
ramificaciones, una de las secciones principales de las matem´aticas moder-
nas. No puede haber duda de que su origen en la antig¨uedad fue emp´ırico y
que empez´o de manera semejante a la f´ısica te´orica de hoy. Aparte todas las
dem´as evidencias, el mismo nombre “geometr´ıa” lo indica. El tratamiento
El Matem´atico. John Von Neumann 3
con postulados de Euclides representa un gran paso fuera del empirismo, pe-
ro no es del todo simple el defender la postura de que ´este fue el paso decisivo
y final para producir una separaci´on absoluta. El hecho de que la axioma-
tizaci´on de Euclides no cumpla en algunos puntos menores, las exigencias
modernas de absoluto rigor axiom´atico es de menor importancia en este as-
pecto. Lo m´as esencial es esto: otras disciplinas, que son indudablemente
emp´ıricas, como la mec´anica y la termodin´amica, se presentan generalmen-
te con un tratamiento m´as o menos postulativo, que en la presentaci´on de
algunos autores se distingue dif´ıcilmente del procedimiento de Euclides. El
cl´asico de la f´ısica te´orica de nuestro tiempo, los Principia de Newton, era,
en la forma literaria as´ı como en la esencia de algunas de sus partes m´as
cr´ıticas, un libro muy parecido a los de Euclides. Naturalmente, en todos
estos ejemplos hay detr´as de la presentaci´on en forma de postulados la pers-
picacia f´ısica que apoya los postulados y la comprobaci´on experimental que
sostiene los teoremas. Pero bien puede argumentarse que es posible una in-
terpretaci´on similar de Euclides, especialmente desde el punto de vista de
la antig¨uedad, antes de que la geometr´ıa hubiera adquirido su actual esta-
bilidad y autoridad bimilenaria, de la que est´a claramente falto el moderno
edificio de la f´ısica te´orica.
Adem´as, aun cuando la desempirizaci´on de la geometr´ıa ha progresado
gradualmente desde Euclides, nunca ha llegado a ser completa, ni siquiera
en los tiempos modernos. La discusi´on de la geometr´ıa no eucl´ıdea constitu-
ye un buen ejemplo de esto. Y tambi´en de la ambivalencia del pensamiento
matem´atico. Ya que la mayor parte de la discusi´on transcurre en un plano
muy abstracto, trata el problema puramente l´ogico de si el “quinto postula-
do” de Euclides era o no una consecuencia de los otros, y el conflicto formal
fue acabado por el ejemplo, puramente matem´atico de F. Klein, que hizo
ver c´omo un trozo de plano eucl´ıdeo pod´ıa hacerse no eucl´ıdeo definiendo
otra vez formalmente ciertos conceptos b´asicos. Y el est´ımulo emp´ırico a´un
estaba aqu´ı desde el comienzo hasta el fin. La primera raz´on de por qu´e,
de entre todos los postulados de Euclides, se discut´ıa el quinto era clara-
mente el car´acter no emp´ırico del concepto de todo el plano infinito que
interviene all´ı y s´olo all´ı. La idea de que, por lo menos en un importante
sentido —y a pesar de todos los an´alisis logicomatem´aticos—, la decisi´on
en pro o en contra de Euclides puede tener que ser emp´ırica, pas´o cierta-
mente por la mente del m´as eximio de los matem´aticos, Gauss. Y despu´es
Bolyai, Lobatchevsky, Riemann y Klein han obtenido more abstracto lo que
hoy en d´ıa consideramos como soluci´on formal de la controversia primitiva;
sin embargo, el empirismo —o mejor la f´ısica— tuvo la ´ultima palabra. El
El Matem´atico. John Von Neumann 4
descubrimiento de la relatividad general impuso una revisi´on de nuestras
perspectivas sobre la relaci´on geom´etrica de una manera enteramente nueva
y con una distribuci´on completamente nueva del puro ´enfasis matem´ati-
co. Finalmente, un toque m´as para completar la imagen de contraste. Este
´ultimo desarrollo se produjo en la misma generaci´on que vio la completa
desempirizaci´on y abstracci´on del m´etodo axiom´atico de Euclides en manos
de los modernos matem´aticos de l´ogica axiom´atica. Y estas dos actitudes
aparentemente contradictorias son compatibles en una mente matem´atica;
as´ı, Hilbert hizo importantes aportaciones a la geometr´ıa axiom´atica y a la
relatividad general.
El segundo ejemplo es de c´alculo, o mejor de an´alisis, que proviene de ´el.
El c´alculo fue la primera obra de las matem´aticas modernas y es dif´ıcil so-
breestimar su importancia. Creo que define mejor que cualquier otra cosa el
comienzo de las matem´aticas modernas, y el sistema de an´alisis matem´atico,
que es su desarrollo l´ogico, constituye todav´ıa el mayor avance t´ecnico del
pensamiento exacto.
Los or´ıgenes del c´alculo son claramente emp´ıricos. Los primeros intentos
de integraci´on de Kepler fueron formulados como “dolicometr´ıa” —medida
de cu˜nas— esto es, volumetr´ıa para cuerpos con superficies curvas. Es de-
cir, geometr´ıa, pero posteucl´ıdea y, en la ´epoca en cuesti´on, geometr´ıa no
axiom´atica, emp´ırica. Esto Kepler lo sab´ıa de sobra. El principal esfuerzo
y los mayores descubrimientos, los de Newton y Leibniz, eran de origen
expl´ıcitamente f´ısico. Newton invent´o el c´alculo “de fluxiones” con prop´osi-
tos esencialmente mec´anicos —de hecho, desarrollaba m´as o menos juntas las
dos disciplinas, c´alculo y mec´anica—. Las primeras formulaciones de c´alculo
no eran ni siquiera rigurosamente matem´aticas. ¡Una formulaci´on inexac-
ta, semif´ısica, fue la ´unica disponible durante m´as de ciento cincuenta a˜nos
despu´es de Newton! ¡Y, sin embargo, durante este per´ıodo se produjeron
algunos de los m´as importantes avances de an´alisis a pesar de estas bases
inexactas y matem´aticamente inadecuadas! Algunas de las principales men-
tes matem´aticas del per´ıodo no eran nada rigurosas, como Euler; pero otras,
las principales, lo eran, como Gauss o Jacobi. El desarrollo era muy confuso
y ambiguo y su relaci´on con el empirismo no estaba ciertamente de acuerdo
con nuestras ideas actuales (o euclideas) de abstracci´on y rigor. Con todo,
ning´un matem´atico desear´ıa excluirlo del conjunto —¡este per´ıodo produjo
matem´aticos tan eminentes como cualquier otro!— E incluso despu´es de que
el predominio del rigor fue esencialmente restablecido con Cauchy, se produ-
jo con Riemann una reca´ıda muy peculiar en los m´etodos semiemp´ıricos. La
personalidad cient´ıfica de Riemann es uno de los ejemplos m´as ilustrativos
El Matem´atico. John Von Neumann 5
de la doble naturaleza de las matem´aticas, as´ı como la controversia de Rie-
mann y Weierstrass, pero me introducir´ıa demasiado en materias t´ecnicas
si entrara en detalles espec´ıficos. Desde Weierstrass, el an´alisis parece haber
llegado a ser completamente abstracto, riguroso y no emp´ırico. Pero esto
no es absolutamente cierto. La controversia acerca de los “fundamentos”
de las matem´aticas y de la l´ogica, que se produjo durante las dos ´ultimas
generaciones, disip´o muchas ilusiones sobre el asunto.
Esto me conduce al tercer ejemplo, que es fundamental para el diagn´osti-
co. Sin embargo, este ejemplo trata de la relaci´on de las matem´aticas con la
filosof´ıa o epistemolog´ıa m´as que con las ciencias naturales. Ilustra de una
manera muy llamativa que el mismo concepto de rigor matem´atico “abso-
luto” no es inmutable. La variabilidad del concepto de rigor muestra que,
aparte de la abstracci´on matem´atica, debe existir alguna otra cosa en el
modo de ser de las matem´aticas. Al analizar la controversia acerca de los
“fundamentos”, no he sido capaz de convencerme a m´ı mismo de que el
veredicto deba ser en favor de la naturaleza emp´ırica de esta componente
adicional. El proceso en favor de tal interpretaci´on es bastante fuerte, al me-
nos en algunas fases del estudio. Pero no lo considero del todo convincente.
Sin embargo, dos cosas son claras. Primero, que entra de manera esencial al-
go no matem´atico, relacionado de alguna manera con las ciencias emp´ıricas
o con la filosof´ıa o con ambas a la vez; y su car´acter no emp´ırico s´olo podr´ıa
afirmarse si se supone que la filosof´ıa (o m´as espec´ıficamente la epistemo-
log´ıa), pueden existir en independencia de la experiencia. (Y est´a suposici´on
es s´olo necesaria, pero no suficiente.) Segundo, que el origen emp´ırico de las
matem´aticas est´a fuertemente sostenido por casos como nuestros dos prime-
ros ejemplos (geometr´ıa y c´alculo), aparte de la mejor interpretaci´on de la
controversia acerca de los “fundamentos”.
Al analizar la variabilidad del concepto de rigor matem´atico, deseo dar
una importancia principal a la controversia de los “fundamentos” antes men-
cionada. Sin embargo, me gustar´ıa considerar en primer lugar de manera
breve un aspecto secundario de la cuesti´on. Este aspecto tambi´en confirma
mi argumento, pero lo considero secundario, porque probablemente es menos
conclusivo que el an´alisis de la controversia de los “fundamentos”. Me refiero
a los cambios de “estilo” matem´atico. Es bien sabido que el estilo con que
se escriben las demostraciones matem´aticas ha experimentado considerables
fluctuaciones. Es mejor hablar de fluctuaciones que de tendencias, porque
en ciertos aspectos la diferencia entre lo actual y ciertos autores de los siglos
xviii o xix es mayor que entre lo actual y Euclides. Por otra parte, en otros
El Matem´atico. John Von Neumann 6
aspectos ha habido una notable constancia. En los campos en que hay di-
ferencias, ´estas son principalmente de presentaci´on, que pueden eliminarse
sin introducir nuevas ideas. Sin embargo, en muchos casos las diferencias
son tan amplias que uno empieza a dudar si los autores que “presentan sus
casos” de formas tan divergentes pueden estar separados solamente por dife-
rencias de estilo, gusto o educaci´on; de si realmente pueden haber tenido las
mismas ideas acerca de lo que constituye el rigor matem´atico. Finalmente,
en los casos extremos (por ejemplo, en muchos de los trabajos de an´alisis de
finales del siglo xviii, antes citados), las diferencias son tan fundamentales
que s´olo pueden corregirse, si es posible, con la ayuda de nuevas y profundas
teor´ıas, que tardaron cien a˜nos en desarrollarse. Algunos de los matem´ati-
cos que trabajaron con tales procedimientos, para nosotros no rigurosos (o
algunos de sus contempor´aneos que los criticaron), conoc´ıan bien su falta
de rigor. O para ser m´as objetivos: sus propias aspiraciones de lo que deb´ıa
ser un proceso matem´atico estaban m´as de acuerdo que sus acciones con
nuestros actuales conceptos. Pero otros —como Euler, el mayor virtuoso del
per´ıodo— parecen haber actuado con perfecta buena fe y haber quedado
completamente satisfechos de sus obras.
Sin embargo, no deseo insistir m´as sobre este asunto. En cambio, me
dedicar´e a un suceso perfectamente definido, la controversia acerca de los
“fundamentos de las matem´aticas”. A finales del siglo xix y a principios
del xx una nueva rama de matem´aticas abstractas, la teor´ıa de conjuntos
de G. Cantor, provoc´o nuevas dificultades. Esto es, ciertos razonamientos
conduc´ıan a contradicciones y, aun cuando estos razonamientos no estaban
en la parte central y “´util” de la teor´ıa de conjuntos y siempre pod´ıan ser
criticados f´acilmente con ciertos criterios formales, no obstante no quedaba
claro por qu´e deb´ıan considerarse te´oricamente menos que las partes “afor-
tunadas” de la teor´ıa. Aparte de la perspicacia ex post de que conduc´ıan
realmente al desastre, no quedaba claro qu´e motivo a priori, qu´e filosof´ıa
consistente de la situaci´on, permit´ıa segregarlos de estas partes de la teor´ıa
de conjuntos que se deseaba salvar. Un estudio m´as atento de los merita
del caso, emprendido principalmente por Russell y Weyl y concluido por
Brouwer, mostr´o que la manera en que no s´olo la teor´ıa de conjuntos sino
tambi´en la mayor´ıa de las matem´aticas modernas utilizaban los conceptos de
“validez general” y de “existencia” era recusable filos´oficamente. Un sistema
matem´atico que estaba libre de estos rasgos indeseables, el “intuicionismo”,
fue desarrollado por Brouwer. En este sistema no se presentaban las difi-
cultades y contradicciones de la teor´ıa de conjuntos. Sin embargo, un buen
cincuenta por ciento de las matem´aticas modernas, en sus partes m´as vitales
El Matem´atico. John Von Neumann 7
—y hasta entonces indiscutibles—, especialmente el an´alisis, eran tambi´en
afectadas por esta “purga”; o se volv´ıan no v´alidas o ten´ıan que ser justi-
ficadas por consideraciones secundarias muy complicadas. Y en es ´ultimo
proceso, a menudo se perd´ıa apreciablemente en cuanto a validez general y
elegancia en la deducci´on. No obstante, Brouwer y Weyl consideraron nece-
sario que se revisara el concepto de rigor matem´atico de acuerdo con estas
ideas.
Es dif´ıcil sobrestimar la significaci´on de estos sucesos. ¡En la tercera d´eca-
da del siglo xx, dos matem´aticos —los dos de primera magnitud y tan ple-
namente conscientes de lo que son las matem´aticas, o de cu´al es su objeto,
o de lo que tratan, como el que m´as— propusieron de hecho que el concepto
de rigor matem´atico, de lo que constituye una demostraci´on exacta, deb´ıa
cambiarse! Los desarrollos que siguieron son igualmente dignos de notarse.
1.- S´olo muy pocos matem´aticos quisieron aceptar los nuevos y exigentes
modelos para uso diario. Sin embargo, muchos admitieron que Weyl y
Brouwer estaban prima facie en lo cierto, pero continuaron transgre-
diendo estos modelos, esto es, haciendo sus matem´aticas en la vieja y
“f´acil manera” —probablemente con la esperanza de que alguien encon-
trara, en otro tiempo, la respuesta a la cr´ıtica intuicionista y que, por
lo tanto, les justificase a posteriori—.
2.- Hilbert sali´o al paso con una ingeniosa idea para justificar las matem´ati-
cas “cl´asicas” (es decir, preintuicionistas): Incluso en el sistema intui-
cionista es posible dar una explicaci´on rigurosa de c´omo operan las
matem´aticas cl´asicas, esto es, puede describirse c´omo trabaja el siste-
ma cl´asico, aunque no pueden justificarse sus procedimientos. Por lo
tanto, cab´ıa demostrar de manera intuionista que los procedimientos
cl´asicos no pod´ıan conducir nunca a contradicciones, a conflictos en-
tre s´ı. Estaba claro que tal demostraci´on ser´ıa muy dif´ıcil, pero hab´ıa
ciertas indicaciones de c´omo pod´ıa intentarse. ¡Si este proyecto hubie-
ra dado resultado habr´ıa suministrado una justificaci´on notable de las
matem´aticas cl´asicas a partir del sistema intuicionista opuesto! Al me-
nos, esta interpretaci´on se habr´ıa legitimado en un sistema de filosof´ıa
matem´atica que la mayor´ıa de matem´aticos quer´ıan aceptar.
3.- Despu´es de casi una d´ecada de intentos para realizar este programa,
G¨odel suministr´o un resultado m´as notable. Este resultado no puede
enunciarse con absoluta precisi´on sin ciertas cl´ausulas e hip´otesis que
son demasiado t´ecnicas para formularlas aqu´ı. Sin embargo, su signifi-
cado esencial era ´este: Si un sistema matem´atico no conduce a contra-
dicci´on, entonces este hecho no puede demostrarse con procedimientos
El Matem´atico. John Von Neumann 8
de ese sistema. La demostraci´on de G¨odel satisfizo el criterio de rigor
matem´atico m´as estricto, el intuicionista. Su influencia en el programa
de Hilbert es algo controvertible, por razones que de nuevo son demasia-
do t´ecnicas para esta ocasi´on. Mi opini´on personal, que es compartida
por muchos otros, es que G¨odel demostr´o que el programa de Hilbert es
esencialmente sin esperanza.
4.- Una vez desaparecida la principal esperanza de justificaci´on de las ma-
tem´aticas cl´asicas —en el sentido de Hilbert o de Brouwer y Weyl—
muchos matem´aticos decidieron usar ese sistema sea lo que fuere. Des-
pu´es de todo, las matem´aticas cl´asicas daban resultados que eran ele-
gantes y ´utiles y, aunque nunca se podr´ıa estar de nuevo absolutamente
seguro de su precisi´on, al menos ten´ıan un fundamento tan s´olido co-
mo, por ejemplo, la existencia del electr´on. He aqu´ı que si uno quer´ıa
aceptar las ciencias, pod´ıa asimismo aceptar el sistema de matem´aticas
cl´asicas. Tales opiniones llegaron a ser aceptables incluso para algunos
de los primitivos defensores del sistema intuicionista. Actualmente la
controversia acerca de los “fundamentos” no est´a acabada, pero pare-
ce improbable que nadie, excepto una peque˜na minor´ıa, abandone el
sistema cl´asico.
He narrado tan detalladamente la historia de esta controversia, porque
pienso que constituye la mejor advertencia contra el dar demasiado por
supuesto el inmutable rigor de las matem´aticas. Esto sucedi´o en el transcurso
de mi propia vida y yo s´e con cu´an humillante facilidad mi concepto sobre la
verdad absoluta matem´atica ha cambiado durante estos episodios ¡y c´omo
ha cambiado sucesivamente tres veces!
Espero que los tres ejemplos anteriores ilustren bien una mitad de mi tesis
—que muchas de las mejores inspiraciones matem´aticas proceden de la ex-
periencia y que dif´ıcilmente es posible creer en la existencia de un concepto
de rigor matem´atico absoluto, inmutable y disociado de toda experiencia
humana—. Estoy intentando tomar una actitud poco culta en este asun-
to. Cualesquiera que sean las preferencias filos´oficas o epistemol´ogicas que
puedan tenerse respecto a esto, las actuales experiencias de las asociaciones
matem´aticas con su sujeto dan muy poca base para suponer de la existencia
de un concepto a priori de rigor matem´atico. Sin embargo, mi tesis tambi´en
tiene una segunda mitad y ahora voy a volverme hacia esta parte.
Es muy dif´ıcil para un matem´atico el creer que las matem´aticas son una
ciencia puramente emp´ırica o que todas las ideas matem´aticas proceden de
materias emp´ıricas. Perm´ıtanme considerar primero la segunda parte de la
El Matem´atico. John Von Neumann 9
afirmaci´on. Existen varias partes importantes de las matem´aticas modernas
en que no puede se˜nalarse el origen emp´ırico, o, si puede se˜nalarse, es tan
remoto que queda claro que el sujeto ha sufrido una completa metamorfosis
desde que fue separado de sus ra´ıces emp´ıricas. El simbolismo del ´algebra
fue inventado para uso exclusivamente matem´atico, pero puede afirmarse
razonablemente que tuvo fuertes v´ınculos emp´ıricos. Sin embargo, el ´alge-
bra moderna, “abstracta”, se ha desarrollado m´as y m´as en direcciones que
tienen a´un menos conexiones emp´ıricas. Lo mismo puede decirse de la topo-
log´ıa. Y en todos estos campos el criterio subjetivo de ´exito del matem´atico,
de valoraci´on de su esfuerzo, es muy reservado, est´etico y libre (o casi libre)
de conexiones emp´ıricas. (Sobre esto insistir´e m´as adelante.) En teor´ıa de
conjuntos esto es todav´ıa m´as claro. La “potencia” y la “ordenaci´on” de un
conjunto infinito pueden ser la generalizaci´on de conceptos num´ericos finitos,
pero su forma infinita (especialmente la “potencia”) dif´ıcilmente tienen nin-
guna relaci´on con este mundo. Si no deseara evitar los tecnicismos, podr´ıa
documentar esto con numerosos ejemplos de teor´ıa de conjuntos —el pro-
blema del “axioma de elecci´on”, la comparatividad de “potencias” infinitas,
“el problema del continuo”, etc´etera—. Las mismas observaciones se aplican
asimismo a la teor´ıa de funciones reales y a la teor´ıa de conjuntos de puntos
reales. La geometr´ıa diferencial y la teor´ıa de grupos dan dos sorprenden-
tes ejemplos: fueron ciertamente concebidas como disciplinas abstractas, no
aplicadas, y casi siempre cultivadas con ese esp´ıritu. Despu´es de una d´ecada
en un caso y de un siglo en el otro, resultaron muy ´utiles para la f´ısica. Y
todav´ıa se contin´uan principalmente con el citado esp´ıritu abstracto, de no
aplicaci´on.
Podr´ıan multiplicarse los ejemplos de estas condiciones y de sus diversas
combinaciones, pero en lugar de esto prefiero volver al primer punto, que he
indicado antes: ¿Las matem´aticas son una ciencia emp´ırica? O, con mayor
precisi´on: ¿Las matem´aticas se desarrollan actualmente de la misma manera
que se desarrollan las ciencias emp´ıricas? O, con mayor generalidad: ¿Cu´al es
la relaci´on normal del matem´atico a su objeto? ¿Cu´ales son sus criterios de
´exito, de elecci´on? ¿Qu´e influencias, qu´e consideraciones controlan y dirigen
su esfuerzo?
Veamos, entonces, en qu´e aspectos la manera en que el matem´atico trabaja
normalmente difiere del modo de trabajo de las ciencias naturales. La dife-
rencia entre ´estas, por una parte, y las matem´aticas, por otra, va creciendo
claramente, a medida que se pasa de las disciplinas te´oricas a las experimen-
tales, y de las experimentales a las descriptivas. Comparemos, por lo tanto,
las matem´aticas con la categor´ıa que est´a m´as pr´oxima a ellas: las disciplinas
El Matem´atico. John Von Neumann 10
te´oricas. Y escojamos la que est´a m´as pr´oxima a las matem´aticas. Espero que
no me juzgar´an con mucho rigor si no consigo controlar la hybris matem´atica
y a˜nado que es la que ha alcanzado un desarrollo m´as alto entre todas las
ciencias te´oricas —es decir, la f´ısica te´orica—. Las matem´aticas y la f´ısica
te´orica tienen, de hecho, buena parte en com´un. Como antes he indicado, el
sistema geom´etrico de Euclides fue el prototipo de presentaci´on axiom´atica
de la mec´anica cl´asica, y tratamientos similares dominan la termodin´amica
fenomenol´ogica, as´ı como ciertos aspectos del sistema electrodin´amico de
Maxwell, y tambi´en de la relatividad especial. Adem´as, la postura de que
la f´ısica te´orica no explica los fen´omenos, sino que s´olo los clasifica y co-
rrelaciona, es hoy en d´ıa adoptada por muchos f´ısicos. Esto significa que
el criterio de ´exito para tal teor´ıa es simplemente el de poder, mediante un
esquema de clasificaci´on y de correlaci´on sencillo y elegante, abarcar muchos
fen´omenos, que sin este esquema parecer´ıan complicados y heterog´eneos, y
el de si este esquema abarca fen´omenos que no se consideraron, o incluso que
no se conoc´ıan en el tiempo que este esquema fue desarrollado. (Estas dos
´ultimas afirmaciones expresan, naturalmente, el poder de unificaci´on y de
predicci´on de la teor´ıa.) Ahora bien, este criterio, tal como aqu´ı se expresa,
es, en gran parte, de naturaleza est´etica. Por esta raz´on, es muy parecido a
los criterios de ´exito matem´atico, que, como ver´an, son casi completamente
est´eticos. De este modo, estamos ahora comparando las matem´aticas con
la ciencia emp´ırica que est´a m´as unida a ellas, y con la que tienen, como
espero haber demostrado, mucho en com´un con la f´ısica te´orica. Las diferen-
cias en el actual modus procedendi son, no obstante, grandes y b´asicas. Los
objetivos de la f´ısica te´orica son, en su mayor parte, dados desde “fuera”,
en muchos casos por las necesidades de la f´ısica experimental. Casi siempre
proceden de la necesidad de resolver una dificultad. Los ´exitos de predicci´on
y unificaci´on vienen, generalmente, despu´es. Si se nos permite un s´ımil, los
progresos (predicciones y unificaciones) se producen durante la investiga-
ci´on, que va precedida necesarianente de una lucha contra alguna dificultad
preexistente (generalmente una contradicci´on aparente dentro del sistema
que ya existe). Parte del trabajo del f´ısico te´orico es la investigaci´on de las
obstrucciones que prometen una posibilidad de “abrirse camino”. Como he
dicho, estas dificultades se producen generalmente en la experimentaci´on,
pero algunas veces son contradicciones entre diferentes partes del cuerpo de
doctrina aceptado. Los ejemplos son, desde luego, numerosos.
El experimento de Michelson, que condujo a la relatividad especial, y
las dificultades de ciertos potenciales de ionizaci´on y de ciertas estructu-
ras espectrosc´opicas, que condujeron a la mec´anica cu´antica, son ejemplos
El Matem´atico. John Von Neumann 11
del primer caso; el conflicto entre la relatividad especial y la teor´ıa de la
gravitaci´on de Newton, que condujo a la relatividad general, es un ejemplo
del segundo caso, m´as raro. En cualquiera de ellos, los problemas de f´ısica
te´orica est´an dados objetivamente y, mientras que los criterios que rigen la
explotaci´on de un ´exito son, como he indicado antes, principalmente est´eti-
cos, aun as´ı la parte del problema y lo que he llamado antes el primitivo
“abrirse camino”, son hechos firmes y objetivos. Por lo tanto, el objeto de la
f´ısica te´orica fue, casi siempre, enormemente concentrado; en casi todos los
tiempos, la mayor parte del esfuerzo de los f´ısicos te´oricos estaba concentra-
do s´olo en uno o dos campos muy limitados —ejemplos de ello son la teor´ıa
cu´antica en la segunda d´ecada de este siglo y principios de la tercera, y las
part´ıculas elementales y la estructura del n´ucleo, a partir de la tercera—.
La situaci´on en las matem´aticas es enteramente diferente. Las matem´ati-
cas est´an sujetas a gran n´umero de subdivisiones, que difieren bastante unas
de otras en car´acter, estilo, objetivos e influencia. Presentan lo m´as opuesto a
la extrema concentraci´on de la f´ısica te´orica. Un buen f´ısico te´orico, hoy d´ıa,
todav´ıa puede tener un conocimiento viable de la mitad de su materia. Dudo
que cualquier matem´atico actual tenga, a lo sumo, relaci´on con m´as de un
cuarto. Problemas dados “objetivamente” e “importantes”, pueden presen-
tarse despu´es de que se haya llegado relativamente lejos en una subdivisi´on
de las matem´aticas y si se ha retrocedido seriamente ante una dificultad.
Pero, incluso entonces, el matem´atico es esencialmente libre de tomarlo o
dejarlo y dedicarse a otra cosa, mientras que un problema “importante” de
f´ısica te´orica es, por lo general, un conflicto, una contradicci´on que “debe”
resolverse. El matem´atico tiene gran variedad de campos a que dedicarse, y
disfruta de una libertad muy considerable en lo que hace con ellos. Llegamos
al punto decisivo: creo que es correcto decir que sus criterios de selecci´on,
y tambi´en los de ´exito, son, principalmente, est´eticos. Comprendo que esta
afirmaci´on es pol´emica, y que es imposible “demostrarla” o justificarla hasta
el ´ultimo extremo sin analizar numerosas pruebas espec´ıficas y t´ecnicas. Esto
requrir´ıa de nuevo un tipo de discusi´on sumamente t´ecnico; no es la ocasi´on
propicia. Baste decir que el car´acter est´etico es incluso m´as relevante que
en el ejemplo que antes he mencionado en el caso de la f´ısica te´orica. Uno
espera que un teorema matem´atico o una teor´ıa matem´atica, no s´olo des-
criba y aclare de manera sencilla y elegante numerosos casos particulares, a
priori dispares. Tambi´en espera “elegancia” en su aspecto “arquitect´onico”
y estructural. Facilidad al establecer el problema, gran dificultad en cap-
tarlo y en todos los intentos de aproximarse a ´el, entonces otra vez alg´un
giro muy sorprendente por el cual la aproximaci´on, o alguna parte de la
El Matem´atico. John Von Neumann 12
aproximaci´on, llegue a ser f´acil, etc. Tambi´en, si las deducciones son indebi-
damente largas o complicadas, debe estar implicado alg´un principio general
sencillo, que “explique” las complicaciones y rodeos, reduzca la aparente
arbitrariedad a unas pocas motivaciones simples, que sirvan de gu´ıa. Estos
criterios son claramente los de todo arte creativo, y la existencia de alg´un
estrato emp´ırico, motivo profano en el origen —a menudo en un origen muy
remoto desarrollado por progresos est´eticos y continuado en una multitud
de variantes laber´ınticas—; todo esto est´a mucho m´as emparentado con la
atm´osfera de arte puro y simple que con la de las ciencias emp´ıricas.
Notar´an que no he mencionado siquiera una comparaci´on de las matem´ati-
cas con las ciencias experimentales o con las descriptivas. Aqu´ı las diferencias
de m´etodo y de atm´osfera general son demasiado obvias.
Creo que es una aproximaci´on relativamente buena a la verdad, la cual
es lo bastante complicada como para permitir solamente aproximaciones,
que la ideas matem´aticas se originan en lo emp´ırico, aunque la genealog´ıa
sea, a veces larga y oscura. Pero, una vez concebidas as´ı, el asunto empieza
a vivir una vida peculiar propia, y es mejor compararla a lo creativo, go-
bernado por motivos casi enteramente est´eticos, que a cualquier otra cosa
y, en particular, a una ciencia emp´ırica. Sin embargo, hay otro punto que
creo necesario subrayar. Cuando una disciplina matem´atica se aparta mu-
cho de su fuente emp´ırica, o, a´un m´as, si est´a durante una segunda y una
tercera generaci´on inspirada s´olo indirectamente por las ideas que proceden
de la “realidad”, est´a amenazada de peligros muy graves. Se vuelve m´as y
m´as en esteticismo puro, m´as y m´as en l’art pour l’art. Esto no es necesa-
riamente malo, si el campo est´a rodeado de materias correlacionadas, las
cuales todav´ıa tienen conexiones emp´ıricas m´as pr´oximas, o si la disciplina
est´a bajo la influencia de hombres con un criterio extraordinariamente bien
desarrollado. Pero existe un grave peligro de que la materia sea desarrollada
a lo largo de la l´ınea de m´ınima resistencia, que la corriente, tan alejada
de su origen, quede separada en multitud de ramas insignificantes, y que la
disciplina se convierta en una masa desorganizada de detalles y complejida-
des. En otras palabras, a gran distancia de su origen emp´ırico, o despu´es de
muchas reproducciones “abstractas”, un tema matem´atico est´a en peligro
de degeneraci´on. Al principio, el estilo es generalmente cl´asico; cuando pre-
senta signos de transformarse en barroco, aparece la se˜nal de peligro. Ser´ıa
f´acil dar ejemplos, trazar evoluciones espec´ıficas del barroco y del barroco
exagerado; pero esto, de nuevo, ser´ıa demasiado t´ecnico.
El Matem´atico. John Von Neumann 13
En cualquier caso, siempre que se alcance este punto, me parece que el
´unico remedio es el retorno rejuvenecedor a la fuente: la reinyecci´on de ideas
m´as o menos directamente emp´ıricas. Estoy convencido de que ´esta es una
condici´on necesaria para conservar el frescor y la vitalidad de la materia, y
que esto seguir´a siendo igualmente cierto en el futuro.
Digitalizaci´on: maplewhite@gmail.com

Más contenido relacionado

La actualidad más candente

Conocimiento y realidad
Conocimiento y realidadConocimiento y realidad
Conocimiento y realidad
nenaprinces
 
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
Diego Sierra
 
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
Xavi Gasset
 
Morin, edgar complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
Morin, edgar   complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]Morin, edgar   complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
Morin, edgar complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
LILI
 
06 lacan - seminario 4
06   lacan - seminario 406   lacan - seminario 4
06 lacan - seminario 4
Djalma Argollo
 
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y mediciónQuezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
Alfredo Muñoz
 
Incertidumbre Sebastian Rozas
Incertidumbre Sebastian RozasIncertidumbre Sebastian Rozas
Incertidumbre Sebastian Rozas
sebastian rozas
 

La actualidad más candente (20)

Teoria y realidad
Teoria y realidadTeoria y realidad
Teoria y realidad
 
Teoria del caos y de la complejidad
Teoria del caos y de la complejidadTeoria del caos y de la complejidad
Teoria del caos y de la complejidad
 
240401970 a-schlick-el-viraje-de-la-filosofi-a
240401970 a-schlick-el-viraje-de-la-filosofi-a240401970 a-schlick-el-viraje-de-la-filosofi-a
240401970 a-schlick-el-viraje-de-la-filosofi-a
 
Conocimiento y realidad
Conocimiento y realidadConocimiento y realidad
Conocimiento y realidad
 
Leyes del caos 2
Leyes del caos 2Leyes del caos 2
Leyes del caos 2
 
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
125889706 badiou-el-ser-y-el-acontecimiento-pdf
 
Fundamentos de la geometria
Fundamentos de la geometriaFundamentos de la geometria
Fundamentos de la geometria
 
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
Gabriel hernan una-nueva_teoria_diluciones_homeopaticas(1)
 
Conductivismo y positivismo
Conductivismo y positivismoConductivismo y positivismo
Conductivismo y positivismo
 
Morin, edgar complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
Morin, edgar   complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]Morin, edgar   complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
Morin, edgar complejidad restringida y complejidad generalizada [2007]
 
Quezada 2002 Causalidad Física: Procesos Causales y Cantidades Conservadas
Quezada 2002 Causalidad Física: Procesos Causales y Cantidades ConservadasQuezada 2002 Causalidad Física: Procesos Causales y Cantidades Conservadas
Quezada 2002 Causalidad Física: Procesos Causales y Cantidades Conservadas
 
06 lacan - seminario 4
06   lacan - seminario 406   lacan - seminario 4
06 lacan - seminario 4
 
Caos fractales y cosas raras eliezer braun
Caos fractales y cosas raras   eliezer braunCaos fractales y cosas raras   eliezer braun
Caos fractales y cosas raras eliezer braun
 
Quezada 2000 Causalidad Problemas Teorías y Recomendaciones
Quezada 2000 Causalidad Problemas Teorías y RecomendacionesQuezada 2000 Causalidad Problemas Teorías y Recomendaciones
Quezada 2000 Causalidad Problemas Teorías y Recomendaciones
 
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y mediciónQuezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
Quezada & Pavez 2011 causalidad pseudocausalidad y medición
 
1 obstaculo espistemológico
1 obstaculo espistemológico1 obstaculo espistemológico
1 obstaculo espistemológico
 
Incertidumbre Sebastian Rozas
Incertidumbre Sebastian RozasIncertidumbre Sebastian Rozas
Incertidumbre Sebastian Rozas
 
Incertidumbre
IncertidumbreIncertidumbre
Incertidumbre
 
Ilovepdf merged (4) with-numbers
Ilovepdf merged (4) with-numbersIlovepdf merged (4) with-numbers
Ilovepdf merged (4) with-numbers
 
Quezada 2007 Revision: haciendo que las cosas ocurran
Quezada 2007 Revision: haciendo que las cosas ocurranQuezada 2007 Revision: haciendo que las cosas ocurran
Quezada 2007 Revision: haciendo que las cosas ocurran
 

Destacado

Resumen de la capacitacion de las tics angi
Resumen de la capacitacion de las tics angiResumen de la capacitacion de las tics angi
Resumen de la capacitacion de las tics angi
johannadayita
 
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
Aljirio Tapia Carrasco
 
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obandoEmiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
JP11234
 
публикация діти
публикация дітипубликация діти
публикация діти
irinamartaloga
 
EMMA-ROWE-PACSUN2015
EMMA-ROWE-PACSUN2015EMMA-ROWE-PACSUN2015
EMMA-ROWE-PACSUN2015
Emma Rowe
 

Destacado (18)

Tema de mi carrera
Tema de mi carreraTema de mi carrera
Tema de mi carrera
 
InvestigacióN
InvestigacióNInvestigacióN
InvestigacióN
 
Resumen de la capacitacion de las tics angi
Resumen de la capacitacion de las tics angiResumen de la capacitacion de las tics angi
Resumen de la capacitacion de las tics angi
 
Presentacion de p.i (1)
Presentacion de p.i (1)Presentacion de p.i (1)
Presentacion de p.i (1)
 
Bloqe 4 ud
Bloqe 4 udBloqe 4 ud
Bloqe 4 ud
 
Teaching Oportunities in Mexico High School Curricula
Teaching Oportunities in Mexico High School CurriculaTeaching Oportunities in Mexico High School Curricula
Teaching Oportunities in Mexico High School Curricula
 
Recursos periféricos
Recursos periféricosRecursos periféricos
Recursos periféricos
 
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
Comandos linux-para-gestiocc81n-de-usuarios-y-grupos1
 
Mi bitácora
Mi bitácoraMi bitácora
Mi bitácora
 
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obandoEmiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
Emiratos árabes unidos juan pablo ballesteros obando
 
публикация діти
публикация дітипубликация діти
публикация діти
 
Sistema nervioso
Sistema nerviosoSistema nervioso
Sistema nervioso
 
Mapa de gerencia de proyecto
Mapa de gerencia de proyectoMapa de gerencia de proyecto
Mapa de gerencia de proyecto
 
EMMA-ROWE-PACSUN2015
EMMA-ROWE-PACSUN2015EMMA-ROWE-PACSUN2015
EMMA-ROWE-PACSUN2015
 
Bojan Šćepanović - Tarot karta ti kaže..., Controlling magazin 01
Bojan Šćepanović - Tarot karta ti kaže..., Controlling magazin 01Bojan Šćepanović - Tarot karta ti kaže..., Controlling magazin 01
Bojan Šćepanović - Tarot karta ti kaže..., Controlling magazin 01
 
Plan De Clase
Plan De ClasePlan De Clase
Plan De Clase
 
Yorkshire Bank biz
Yorkshire Bank bizYorkshire Bank biz
Yorkshire Bank biz
 
Escuelas Sociologicas
Escuelas SociologicasEscuelas Sociologicas
Escuelas Sociologicas
 

Similar a [Matematicas].el.matematico.(john.von.neumann)[mad math]

Texto morín
Texto morínTexto morín
Texto morín
HAV
 
Morin edgar epistemologia de la complejidad
Morin edgar epistemologia de la complejidadMorin edgar epistemologia de la complejidad
Morin edgar epistemologia de la complejidad
Mauricio Villabona
 
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubesEl geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
Julián
 
Morin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
Morin, Edgar Epistemologia De La ComplejidadMorin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
Morin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
HAV
 
Epistemologia de la complejidad edgar morin
Epistemologia de la complejidad edgar morinEpistemologia de la complejidad edgar morin
Epistemologia de la complejidad edgar morin
LILI
 
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humanaComo se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
Terezhiita Farelo
 
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdfHolzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
frank0071
 
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
LauzAlvarez
 
Revolución científica Sociales
Revolución científica Sociales Revolución científica Sociales
Revolución científica Sociales
Alexis218554
 

Similar a [Matematicas].el.matematico.(john.von.neumann)[mad math] (20)

Que_son_las_matematicas-Courant.pdf
Que_son_las_matematicas-Courant.pdfQue_son_las_matematicas-Courant.pdf
Que_son_las_matematicas-Courant.pdf
 
Texto morín
Texto morínTexto morín
Texto morín
 
"Epistemología de la complejidad"
"Epistemología de la complejidad""Epistemología de la complejidad"
"Epistemología de la complejidad"
 
Morin edgar epistemologia de la complejidad
Morin edgar epistemologia de la complejidadMorin edgar epistemologia de la complejidad
Morin edgar epistemologia de la complejidad
 
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubesEl geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
El geómetra fractal sobre mandelbrot y sus nubes
 
Morin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
Morin, Edgar Epistemologia De La ComplejidadMorin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
Morin, Edgar Epistemologia De La Complejidad
 
Epistemologia de la complejidad edgar morin
Epistemologia de la complejidad edgar morinEpistemologia de la complejidad edgar morin
Epistemologia de la complejidad edgar morin
 
La teoria del todo - Eladio García
La teoria del todo - Eladio GarcíaLa teoria del todo - Eladio García
La teoria del todo - Eladio García
 
El Pensamiento Complejo
El Pensamiento Complejo El Pensamiento Complejo
El Pensamiento Complejo
 
BUNGE, Mario, Teoria y Realidad.pdf Metodología - Juan Alfonso Veliz Flores
BUNGE, Mario, Teoria y Realidad.pdf Metodología - Juan Alfonso Veliz FloresBUNGE, Mario, Teoria y Realidad.pdf Metodología - Juan Alfonso Veliz Flores
BUNGE, Mario, Teoria y Realidad.pdf Metodología - Juan Alfonso Veliz Flores
 
Ciencias de la complejidad
Ciencias de la complejidadCiencias de la complejidad
Ciencias de la complejidad
 
Temas De Interes Para Disertar
Temas De Interes Para DisertarTemas De Interes Para Disertar
Temas De Interes Para Disertar
 
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humanaComo se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
Como se explica que las matemáticas siendo un producto de la mente humana
 
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdfHolzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
Holzapfel, Cristobal. - Ser y universo [ocr] [1989].pdf
 
Historia de la geometría
Historia de la geometríaHistoria de la geometría
Historia de la geometría
 
2016-clase-51.ppt
2016-clase-51.ppt2016-clase-51.ppt
2016-clase-51.ppt
 
2016-clase-51.ppt
2016-clase-51.ppt2016-clase-51.ppt
2016-clase-51.ppt
 
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
2016-clase-51girosociologicoehistorico.ppt
 
khun, lakatos, feyerabend.ppt
khun, lakatos, feyerabend.pptkhun, lakatos, feyerabend.ppt
khun, lakatos, feyerabend.ppt
 
Revolución científica Sociales
Revolución científica Sociales Revolución científica Sociales
Revolución científica Sociales
 

Último

Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptxConcepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Fernando Solis
 

Último (20)

Sesión de clase APC: Los dos testigos.pdf
Sesión de clase APC: Los dos testigos.pdfSesión de clase APC: Los dos testigos.pdf
Sesión de clase APC: Los dos testigos.pdf
 
Código Civil de la República Bolivariana de Venezuela
Código Civil de la República Bolivariana de VenezuelaCódigo Civil de la República Bolivariana de Venezuela
Código Civil de la República Bolivariana de Venezuela
 
FICHA CUENTO BUSCANDO UNA MAMÁ 2024 MAESTRA JANET.pdf
FICHA CUENTO BUSCANDO UNA MAMÁ  2024 MAESTRA JANET.pdfFICHA CUENTO BUSCANDO UNA MAMÁ  2024 MAESTRA JANET.pdf
FICHA CUENTO BUSCANDO UNA MAMÁ 2024 MAESTRA JANET.pdf
 
UNIDAD DE APRENDIZAJE DE PRIMER GRADO DEL MES DE MAYO PARA TRABAJAR CON ESTUD...
UNIDAD DE APRENDIZAJE DE PRIMER GRADO DEL MES DE MAYO PARA TRABAJAR CON ESTUD...UNIDAD DE APRENDIZAJE DE PRIMER GRADO DEL MES DE MAYO PARA TRABAJAR CON ESTUD...
UNIDAD DE APRENDIZAJE DE PRIMER GRADO DEL MES DE MAYO PARA TRABAJAR CON ESTUD...
 
ACERTIJO LA RUTA DEL MARATÓN OLÍMPICO DEL NÚMERO PI EN PARÍS. Por JAVIER SOL...
ACERTIJO LA RUTA DEL MARATÓN OLÍMPICO DEL NÚMERO PI EN  PARÍS. Por JAVIER SOL...ACERTIJO LA RUTA DEL MARATÓN OLÍMPICO DEL NÚMERO PI EN  PARÍS. Por JAVIER SOL...
ACERTIJO LA RUTA DEL MARATÓN OLÍMPICO DEL NÚMERO PI EN PARÍS. Por JAVIER SOL...
 
Factores que intervienen en la Administración por Valores.pdf
Factores que intervienen en la Administración por Valores.pdfFactores que intervienen en la Administración por Valores.pdf
Factores que intervienen en la Administración por Valores.pdf
 
Ensayo Paes competencia matematicas 2 Preuniversitario
Ensayo Paes competencia matematicas 2 PreuniversitarioEnsayo Paes competencia matematicas 2 Preuniversitario
Ensayo Paes competencia matematicas 2 Preuniversitario
 
Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptxConcepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
Concepto y definición de tipos de Datos Abstractos en c++.pptx
 
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docxMINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
MINEDU BASES JUEGOS ESCOLARES DEPORTIVOS PARADEPORTIVOS 2024.docx
 
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR MERC 2024-2.docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR MERC 2024-2.docxPLAN DE REFUERZO ESCOLAR MERC 2024-2.docx
PLAN DE REFUERZO ESCOLAR MERC 2024-2.docx
 
Tema 17. Biología de los microorganismos 2024
Tema 17. Biología de los microorganismos 2024Tema 17. Biología de los microorganismos 2024
Tema 17. Biología de los microorganismos 2024
 
animalesdelaproincia de beunos aires.pdf
animalesdelaproincia de beunos aires.pdfanimalesdelaproincia de beunos aires.pdf
animalesdelaproincia de beunos aires.pdf
 
AEC2. Egipto Antiguo. Adivina, Adivinanza.pptx
AEC2. Egipto Antiguo. Adivina, Adivinanza.pptxAEC2. Egipto Antiguo. Adivina, Adivinanza.pptx
AEC2. Egipto Antiguo. Adivina, Adivinanza.pptx
 
PP_Comunicacion en Salud: Objetivación de signos y síntomas
PP_Comunicacion en Salud: Objetivación de signos y síntomasPP_Comunicacion en Salud: Objetivación de signos y síntomas
PP_Comunicacion en Salud: Objetivación de signos y síntomas
 
Interpretación de cortes geológicos 2024
Interpretación de cortes geológicos 2024Interpretación de cortes geológicos 2024
Interpretación de cortes geológicos 2024
 
Procedimientos para la planificación en los Centros Educativos tipo V ( multi...
Procedimientos para la planificación en los Centros Educativos tipo V ( multi...Procedimientos para la planificación en los Centros Educativos tipo V ( multi...
Procedimientos para la planificación en los Centros Educativos tipo V ( multi...
 
Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigosLecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
Lecciones 06 Esc. Sabática. Los dos testigos
 
Tema 11. Dinámica de la hidrosfera 2024
Tema 11.  Dinámica de la hidrosfera 2024Tema 11.  Dinámica de la hidrosfera 2024
Tema 11. Dinámica de la hidrosfera 2024
 
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
Tema 10. Dinámica y funciones de la Atmosfera 2024
 
AEC 2. Aventura en el Antiguo Egipto.pptx
AEC 2. Aventura en el Antiguo Egipto.pptxAEC 2. Aventura en el Antiguo Egipto.pptx
AEC 2. Aventura en el Antiguo Egipto.pptx
 

[Matematicas].el.matematico.(john.von.neumann)[mad math]

  • 1. EL MATEM´ATICO JOHN VON NEUMANN Un an´alisis sobre la naturaleza del trabajo intelectual es una tarea dif´ıcil en cualquier campo, incluso en los que no est´an tan apartados del ´area cen- tral de nuestro com´un esfuerzo intelectual humano como lo son todav´ıa las matem´aticas. Una discusi´on sobre la naturaleza de cualquier esfuerzo inte- lectual es dif´ıcil per se; en todo caso, m´as dif´ıcil que el mero ejercicio de ese particular esfuerzo intelectual. Es m´as dif´ıcil comprender el mecanismo de un aeroplano y las teor´ıas de las fuerzas que lo elevan y lo mueven, que montar en ´el, ser elevado y transportado por ´el o incluso gobernarlo. Es excepcional que uno fuera capaz de adquirir el conocimiento de un proceso sin haber adquirido anteriormente una profunda familiaridad con su funcio- namiento, con su uso, sin antes haberlo asimilado de una manera instintiva y emp´ırica. As´ı, cualquier an´alisis sobre la naturaleza de un esfuerzo intelectual en cualquier campo es dif´ıcil, a menos que se presuponga una f´acil y rutina- ria familiaridad con este campo. En las matem´aticas esta limitaci´on llega a ser muy grave, si el an´alisis debe mantenerse en un plano no matem´atico. Entonces mostrar´a necesariamente algunos aspectos muy malos; se acep- tar´an principios que nunca podr´an ser comprobados propiamente y se hace inevitable una cierta superficialidad general. Es su relaci´on peculiar con las ciencias naturales, o, m´as generalmente, con toda ciencia que interprete la experiencia en un nivel superior al descriptivo. S´e muy bien las limitaciones con que voy a hablar y me disculpo de an- temano. Asimismo, las oponiones que voy a expresar probablemente no son plenamente compartidas por muchos matem´aticos —ustedes adquirir´an las impresiones e interpretaciones no muy bien sistematizadas de un hombre— y yo puedo prestarles muy poca ayuda para decidir hasta qu´e punto son acertadas. Sin embargo, a pesar de todos los inconvenientes, debo admitir que el hacer el intento y hablarles a ustedes de la naturaleza del esfuerzo intelectual en matem´aticas es una tarea interesante y desafiadora. Espero no hacerlo del todo mal. En mi opini´on, el hecho m´as esencialmente caracter´ıstico de las matem´ati- cas es su relaci´on enteramente peculiar con las ciencias naturales, o, m´as
  • 2. El Matem´atico. John Von Neumann 2 generalmente, con toda ciencia que interprete la experiencia en un nivel superior al puramente descriptivo. La mayor´ıa de la gente, matem´aticos o no, convendr´an en que las ma- tem´aticas no son una ciencia emp´ırica, o al menos en que se practican de una manera que difiere en varios aspectos decisivos de las t´ecnicas de las ciencias emp´ıricas. Y, a´un as´ı, su desarrollo est´a estrechamente ligado al de las ciencias naturales. Una de sus ramas principales, la geometr´ıa, empez´o de hecho como ciencia natural y emp´ırica. Algunas de las mejores inspiraciones de las matem´aticas modernas (yo creo que las mejores) provienen claramen- te de las ciencias naturales. Los m´etodos matem´aticos invaden y dominan las secciones “te´oricas” de las ciencias naturales. En las modernas ciencias emp´ıricas se han convertido en un criterio principal de ´exito el que hayan llegado a ser accesibles al m´etodo matem´atico o a m´etodos f´ısicos casi ma- tem´aticos. Ciertamente, a trav´es de todas las ciencias naturales se ha hecho cada vez m´as evidente una ininterrumpida cadena de sucesivos seudomorfis- mos, todos ellos tendiendo hacia las matem´aticas, y casi identificados con la idea de progreso cient´ıfico. La biolog´ıa ha sido invadida gradualmente por la qu´ımica y la f´ısica, la qu´ımica por la f´ısica experimental y te´orica, y la f´ısica por formas muy matem´aticas de f´ısica te´orica. Existe una duplicidad completamente peculiar en la naturaleza de las matem´aticas. Uno tiene que darse cuenta de esta duplicidad, aceptarla y asimilarla en sus conceptos del asunto. Este doble aspecto es el de las ma- tem´aticas y no creo que sea posible otra visi´on simplificada y unitaria de ellas sin sacrificar su esencia. Por lo tanto, no intentar´e ofrecerles una versi´on unitaria. Intentar´e descri- bir, lo mejor que pueda, el fen´omeno m´ultiple que constituye las matem´ati- cas. Es innegable que algunas de las mejores inspiraciones de las matem´aticas —de parte de ellas, que son matem´aticas tan puras como pueda imaginarse— proceden de las ciencias naturales. Mencionar´e los dos hechos m´as sobresa- lientes. El primer ejemplo es, como ten´ıa que ser, geom´etrico. La geometr´ıa era la parte principal de las matem´aticas antiguas. Todav´ıa es, con alguna de sus ramificaciones, una de las secciones principales de las matem´aticas moder- nas. No puede haber duda de que su origen en la antig¨uedad fue emp´ırico y que empez´o de manera semejante a la f´ısica te´orica de hoy. Aparte todas las dem´as evidencias, el mismo nombre “geometr´ıa” lo indica. El tratamiento
  • 3. El Matem´atico. John Von Neumann 3 con postulados de Euclides representa un gran paso fuera del empirismo, pe- ro no es del todo simple el defender la postura de que ´este fue el paso decisivo y final para producir una separaci´on absoluta. El hecho de que la axioma- tizaci´on de Euclides no cumpla en algunos puntos menores, las exigencias modernas de absoluto rigor axiom´atico es de menor importancia en este as- pecto. Lo m´as esencial es esto: otras disciplinas, que son indudablemente emp´ıricas, como la mec´anica y la termodin´amica, se presentan generalmen- te con un tratamiento m´as o menos postulativo, que en la presentaci´on de algunos autores se distingue dif´ıcilmente del procedimiento de Euclides. El cl´asico de la f´ısica te´orica de nuestro tiempo, los Principia de Newton, era, en la forma literaria as´ı como en la esencia de algunas de sus partes m´as cr´ıticas, un libro muy parecido a los de Euclides. Naturalmente, en todos estos ejemplos hay detr´as de la presentaci´on en forma de postulados la pers- picacia f´ısica que apoya los postulados y la comprobaci´on experimental que sostiene los teoremas. Pero bien puede argumentarse que es posible una in- terpretaci´on similar de Euclides, especialmente desde el punto de vista de la antig¨uedad, antes de que la geometr´ıa hubiera adquirido su actual esta- bilidad y autoridad bimilenaria, de la que est´a claramente falto el moderno edificio de la f´ısica te´orica. Adem´as, aun cuando la desempirizaci´on de la geometr´ıa ha progresado gradualmente desde Euclides, nunca ha llegado a ser completa, ni siquiera en los tiempos modernos. La discusi´on de la geometr´ıa no eucl´ıdea constitu- ye un buen ejemplo de esto. Y tambi´en de la ambivalencia del pensamiento matem´atico. Ya que la mayor parte de la discusi´on transcurre en un plano muy abstracto, trata el problema puramente l´ogico de si el “quinto postula- do” de Euclides era o no una consecuencia de los otros, y el conflicto formal fue acabado por el ejemplo, puramente matem´atico de F. Klein, que hizo ver c´omo un trozo de plano eucl´ıdeo pod´ıa hacerse no eucl´ıdeo definiendo otra vez formalmente ciertos conceptos b´asicos. Y el est´ımulo emp´ırico a´un estaba aqu´ı desde el comienzo hasta el fin. La primera raz´on de por qu´e, de entre todos los postulados de Euclides, se discut´ıa el quinto era clara- mente el car´acter no emp´ırico del concepto de todo el plano infinito que interviene all´ı y s´olo all´ı. La idea de que, por lo menos en un importante sentido —y a pesar de todos los an´alisis logicomatem´aticos—, la decisi´on en pro o en contra de Euclides puede tener que ser emp´ırica, pas´o cierta- mente por la mente del m´as eximio de los matem´aticos, Gauss. Y despu´es Bolyai, Lobatchevsky, Riemann y Klein han obtenido more abstracto lo que hoy en d´ıa consideramos como soluci´on formal de la controversia primitiva; sin embargo, el empirismo —o mejor la f´ısica— tuvo la ´ultima palabra. El
  • 4. El Matem´atico. John Von Neumann 4 descubrimiento de la relatividad general impuso una revisi´on de nuestras perspectivas sobre la relaci´on geom´etrica de una manera enteramente nueva y con una distribuci´on completamente nueva del puro ´enfasis matem´ati- co. Finalmente, un toque m´as para completar la imagen de contraste. Este ´ultimo desarrollo se produjo en la misma generaci´on que vio la completa desempirizaci´on y abstracci´on del m´etodo axiom´atico de Euclides en manos de los modernos matem´aticos de l´ogica axiom´atica. Y estas dos actitudes aparentemente contradictorias son compatibles en una mente matem´atica; as´ı, Hilbert hizo importantes aportaciones a la geometr´ıa axiom´atica y a la relatividad general. El segundo ejemplo es de c´alculo, o mejor de an´alisis, que proviene de ´el. El c´alculo fue la primera obra de las matem´aticas modernas y es dif´ıcil so- breestimar su importancia. Creo que define mejor que cualquier otra cosa el comienzo de las matem´aticas modernas, y el sistema de an´alisis matem´atico, que es su desarrollo l´ogico, constituye todav´ıa el mayor avance t´ecnico del pensamiento exacto. Los or´ıgenes del c´alculo son claramente emp´ıricos. Los primeros intentos de integraci´on de Kepler fueron formulados como “dolicometr´ıa” —medida de cu˜nas— esto es, volumetr´ıa para cuerpos con superficies curvas. Es de- cir, geometr´ıa, pero posteucl´ıdea y, en la ´epoca en cuesti´on, geometr´ıa no axiom´atica, emp´ırica. Esto Kepler lo sab´ıa de sobra. El principal esfuerzo y los mayores descubrimientos, los de Newton y Leibniz, eran de origen expl´ıcitamente f´ısico. Newton invent´o el c´alculo “de fluxiones” con prop´osi- tos esencialmente mec´anicos —de hecho, desarrollaba m´as o menos juntas las dos disciplinas, c´alculo y mec´anica—. Las primeras formulaciones de c´alculo no eran ni siquiera rigurosamente matem´aticas. ¡Una formulaci´on inexac- ta, semif´ısica, fue la ´unica disponible durante m´as de ciento cincuenta a˜nos despu´es de Newton! ¡Y, sin embargo, durante este per´ıodo se produjeron algunos de los m´as importantes avances de an´alisis a pesar de estas bases inexactas y matem´aticamente inadecuadas! Algunas de las principales men- tes matem´aticas del per´ıodo no eran nada rigurosas, como Euler; pero otras, las principales, lo eran, como Gauss o Jacobi. El desarrollo era muy confuso y ambiguo y su relaci´on con el empirismo no estaba ciertamente de acuerdo con nuestras ideas actuales (o euclideas) de abstracci´on y rigor. Con todo, ning´un matem´atico desear´ıa excluirlo del conjunto —¡este per´ıodo produjo matem´aticos tan eminentes como cualquier otro!— E incluso despu´es de que el predominio del rigor fue esencialmente restablecido con Cauchy, se produ- jo con Riemann una reca´ıda muy peculiar en los m´etodos semiemp´ıricos. La personalidad cient´ıfica de Riemann es uno de los ejemplos m´as ilustrativos
  • 5. El Matem´atico. John Von Neumann 5 de la doble naturaleza de las matem´aticas, as´ı como la controversia de Rie- mann y Weierstrass, pero me introducir´ıa demasiado en materias t´ecnicas si entrara en detalles espec´ıficos. Desde Weierstrass, el an´alisis parece haber llegado a ser completamente abstracto, riguroso y no emp´ırico. Pero esto no es absolutamente cierto. La controversia acerca de los “fundamentos” de las matem´aticas y de la l´ogica, que se produjo durante las dos ´ultimas generaciones, disip´o muchas ilusiones sobre el asunto. Esto me conduce al tercer ejemplo, que es fundamental para el diagn´osti- co. Sin embargo, este ejemplo trata de la relaci´on de las matem´aticas con la filosof´ıa o epistemolog´ıa m´as que con las ciencias naturales. Ilustra de una manera muy llamativa que el mismo concepto de rigor matem´atico “abso- luto” no es inmutable. La variabilidad del concepto de rigor muestra que, aparte de la abstracci´on matem´atica, debe existir alguna otra cosa en el modo de ser de las matem´aticas. Al analizar la controversia acerca de los “fundamentos”, no he sido capaz de convencerme a m´ı mismo de que el veredicto deba ser en favor de la naturaleza emp´ırica de esta componente adicional. El proceso en favor de tal interpretaci´on es bastante fuerte, al me- nos en algunas fases del estudio. Pero no lo considero del todo convincente. Sin embargo, dos cosas son claras. Primero, que entra de manera esencial al- go no matem´atico, relacionado de alguna manera con las ciencias emp´ıricas o con la filosof´ıa o con ambas a la vez; y su car´acter no emp´ırico s´olo podr´ıa afirmarse si se supone que la filosof´ıa (o m´as espec´ıficamente la epistemo- log´ıa), pueden existir en independencia de la experiencia. (Y est´a suposici´on es s´olo necesaria, pero no suficiente.) Segundo, que el origen emp´ırico de las matem´aticas est´a fuertemente sostenido por casos como nuestros dos prime- ros ejemplos (geometr´ıa y c´alculo), aparte de la mejor interpretaci´on de la controversia acerca de los “fundamentos”. Al analizar la variabilidad del concepto de rigor matem´atico, deseo dar una importancia principal a la controversia de los “fundamentos” antes men- cionada. Sin embargo, me gustar´ıa considerar en primer lugar de manera breve un aspecto secundario de la cuesti´on. Este aspecto tambi´en confirma mi argumento, pero lo considero secundario, porque probablemente es menos conclusivo que el an´alisis de la controversia de los “fundamentos”. Me refiero a los cambios de “estilo” matem´atico. Es bien sabido que el estilo con que se escriben las demostraciones matem´aticas ha experimentado considerables fluctuaciones. Es mejor hablar de fluctuaciones que de tendencias, porque en ciertos aspectos la diferencia entre lo actual y ciertos autores de los siglos xviii o xix es mayor que entre lo actual y Euclides. Por otra parte, en otros
  • 6. El Matem´atico. John Von Neumann 6 aspectos ha habido una notable constancia. En los campos en que hay di- ferencias, ´estas son principalmente de presentaci´on, que pueden eliminarse sin introducir nuevas ideas. Sin embargo, en muchos casos las diferencias son tan amplias que uno empieza a dudar si los autores que “presentan sus casos” de formas tan divergentes pueden estar separados solamente por dife- rencias de estilo, gusto o educaci´on; de si realmente pueden haber tenido las mismas ideas acerca de lo que constituye el rigor matem´atico. Finalmente, en los casos extremos (por ejemplo, en muchos de los trabajos de an´alisis de finales del siglo xviii, antes citados), las diferencias son tan fundamentales que s´olo pueden corregirse, si es posible, con la ayuda de nuevas y profundas teor´ıas, que tardaron cien a˜nos en desarrollarse. Algunos de los matem´ati- cos que trabajaron con tales procedimientos, para nosotros no rigurosos (o algunos de sus contempor´aneos que los criticaron), conoc´ıan bien su falta de rigor. O para ser m´as objetivos: sus propias aspiraciones de lo que deb´ıa ser un proceso matem´atico estaban m´as de acuerdo que sus acciones con nuestros actuales conceptos. Pero otros —como Euler, el mayor virtuoso del per´ıodo— parecen haber actuado con perfecta buena fe y haber quedado completamente satisfechos de sus obras. Sin embargo, no deseo insistir m´as sobre este asunto. En cambio, me dedicar´e a un suceso perfectamente definido, la controversia acerca de los “fundamentos de las matem´aticas”. A finales del siglo xix y a principios del xx una nueva rama de matem´aticas abstractas, la teor´ıa de conjuntos de G. Cantor, provoc´o nuevas dificultades. Esto es, ciertos razonamientos conduc´ıan a contradicciones y, aun cuando estos razonamientos no estaban en la parte central y “´util” de la teor´ıa de conjuntos y siempre pod´ıan ser criticados f´acilmente con ciertos criterios formales, no obstante no quedaba claro por qu´e deb´ıan considerarse te´oricamente menos que las partes “afor- tunadas” de la teor´ıa. Aparte de la perspicacia ex post de que conduc´ıan realmente al desastre, no quedaba claro qu´e motivo a priori, qu´e filosof´ıa consistente de la situaci´on, permit´ıa segregarlos de estas partes de la teor´ıa de conjuntos que se deseaba salvar. Un estudio m´as atento de los merita del caso, emprendido principalmente por Russell y Weyl y concluido por Brouwer, mostr´o que la manera en que no s´olo la teor´ıa de conjuntos sino tambi´en la mayor´ıa de las matem´aticas modernas utilizaban los conceptos de “validez general” y de “existencia” era recusable filos´oficamente. Un sistema matem´atico que estaba libre de estos rasgos indeseables, el “intuicionismo”, fue desarrollado por Brouwer. En este sistema no se presentaban las difi- cultades y contradicciones de la teor´ıa de conjuntos. Sin embargo, un buen cincuenta por ciento de las matem´aticas modernas, en sus partes m´as vitales
  • 7. El Matem´atico. John Von Neumann 7 —y hasta entonces indiscutibles—, especialmente el an´alisis, eran tambi´en afectadas por esta “purga”; o se volv´ıan no v´alidas o ten´ıan que ser justi- ficadas por consideraciones secundarias muy complicadas. Y en es ´ultimo proceso, a menudo se perd´ıa apreciablemente en cuanto a validez general y elegancia en la deducci´on. No obstante, Brouwer y Weyl consideraron nece- sario que se revisara el concepto de rigor matem´atico de acuerdo con estas ideas. Es dif´ıcil sobrestimar la significaci´on de estos sucesos. ¡En la tercera d´eca- da del siglo xx, dos matem´aticos —los dos de primera magnitud y tan ple- namente conscientes de lo que son las matem´aticas, o de cu´al es su objeto, o de lo que tratan, como el que m´as— propusieron de hecho que el concepto de rigor matem´atico, de lo que constituye una demostraci´on exacta, deb´ıa cambiarse! Los desarrollos que siguieron son igualmente dignos de notarse. 1.- S´olo muy pocos matem´aticos quisieron aceptar los nuevos y exigentes modelos para uso diario. Sin embargo, muchos admitieron que Weyl y Brouwer estaban prima facie en lo cierto, pero continuaron transgre- diendo estos modelos, esto es, haciendo sus matem´aticas en la vieja y “f´acil manera” —probablemente con la esperanza de que alguien encon- trara, en otro tiempo, la respuesta a la cr´ıtica intuicionista y que, por lo tanto, les justificase a posteriori—. 2.- Hilbert sali´o al paso con una ingeniosa idea para justificar las matem´ati- cas “cl´asicas” (es decir, preintuicionistas): Incluso en el sistema intui- cionista es posible dar una explicaci´on rigurosa de c´omo operan las matem´aticas cl´asicas, esto es, puede describirse c´omo trabaja el siste- ma cl´asico, aunque no pueden justificarse sus procedimientos. Por lo tanto, cab´ıa demostrar de manera intuionista que los procedimientos cl´asicos no pod´ıan conducir nunca a contradicciones, a conflictos en- tre s´ı. Estaba claro que tal demostraci´on ser´ıa muy dif´ıcil, pero hab´ıa ciertas indicaciones de c´omo pod´ıa intentarse. ¡Si este proyecto hubie- ra dado resultado habr´ıa suministrado una justificaci´on notable de las matem´aticas cl´asicas a partir del sistema intuicionista opuesto! Al me- nos, esta interpretaci´on se habr´ıa legitimado en un sistema de filosof´ıa matem´atica que la mayor´ıa de matem´aticos quer´ıan aceptar. 3.- Despu´es de casi una d´ecada de intentos para realizar este programa, G¨odel suministr´o un resultado m´as notable. Este resultado no puede enunciarse con absoluta precisi´on sin ciertas cl´ausulas e hip´otesis que son demasiado t´ecnicas para formularlas aqu´ı. Sin embargo, su signifi- cado esencial era ´este: Si un sistema matem´atico no conduce a contra- dicci´on, entonces este hecho no puede demostrarse con procedimientos
  • 8. El Matem´atico. John Von Neumann 8 de ese sistema. La demostraci´on de G¨odel satisfizo el criterio de rigor matem´atico m´as estricto, el intuicionista. Su influencia en el programa de Hilbert es algo controvertible, por razones que de nuevo son demasia- do t´ecnicas para esta ocasi´on. Mi opini´on personal, que es compartida por muchos otros, es que G¨odel demostr´o que el programa de Hilbert es esencialmente sin esperanza. 4.- Una vez desaparecida la principal esperanza de justificaci´on de las ma- tem´aticas cl´asicas —en el sentido de Hilbert o de Brouwer y Weyl— muchos matem´aticos decidieron usar ese sistema sea lo que fuere. Des- pu´es de todo, las matem´aticas cl´asicas daban resultados que eran ele- gantes y ´utiles y, aunque nunca se podr´ıa estar de nuevo absolutamente seguro de su precisi´on, al menos ten´ıan un fundamento tan s´olido co- mo, por ejemplo, la existencia del electr´on. He aqu´ı que si uno quer´ıa aceptar las ciencias, pod´ıa asimismo aceptar el sistema de matem´aticas cl´asicas. Tales opiniones llegaron a ser aceptables incluso para algunos de los primitivos defensores del sistema intuicionista. Actualmente la controversia acerca de los “fundamentos” no est´a acabada, pero pare- ce improbable que nadie, excepto una peque˜na minor´ıa, abandone el sistema cl´asico. He narrado tan detalladamente la historia de esta controversia, porque pienso que constituye la mejor advertencia contra el dar demasiado por supuesto el inmutable rigor de las matem´aticas. Esto sucedi´o en el transcurso de mi propia vida y yo s´e con cu´an humillante facilidad mi concepto sobre la verdad absoluta matem´atica ha cambiado durante estos episodios ¡y c´omo ha cambiado sucesivamente tres veces! Espero que los tres ejemplos anteriores ilustren bien una mitad de mi tesis —que muchas de las mejores inspiraciones matem´aticas proceden de la ex- periencia y que dif´ıcilmente es posible creer en la existencia de un concepto de rigor matem´atico absoluto, inmutable y disociado de toda experiencia humana—. Estoy intentando tomar una actitud poco culta en este asun- to. Cualesquiera que sean las preferencias filos´oficas o epistemol´ogicas que puedan tenerse respecto a esto, las actuales experiencias de las asociaciones matem´aticas con su sujeto dan muy poca base para suponer de la existencia de un concepto a priori de rigor matem´atico. Sin embargo, mi tesis tambi´en tiene una segunda mitad y ahora voy a volverme hacia esta parte. Es muy dif´ıcil para un matem´atico el creer que las matem´aticas son una ciencia puramente emp´ırica o que todas las ideas matem´aticas proceden de materias emp´ıricas. Perm´ıtanme considerar primero la segunda parte de la
  • 9. El Matem´atico. John Von Neumann 9 afirmaci´on. Existen varias partes importantes de las matem´aticas modernas en que no puede se˜nalarse el origen emp´ırico, o, si puede se˜nalarse, es tan remoto que queda claro que el sujeto ha sufrido una completa metamorfosis desde que fue separado de sus ra´ıces emp´ıricas. El simbolismo del ´algebra fue inventado para uso exclusivamente matem´atico, pero puede afirmarse razonablemente que tuvo fuertes v´ınculos emp´ıricos. Sin embargo, el ´alge- bra moderna, “abstracta”, se ha desarrollado m´as y m´as en direcciones que tienen a´un menos conexiones emp´ıricas. Lo mismo puede decirse de la topo- log´ıa. Y en todos estos campos el criterio subjetivo de ´exito del matem´atico, de valoraci´on de su esfuerzo, es muy reservado, est´etico y libre (o casi libre) de conexiones emp´ıricas. (Sobre esto insistir´e m´as adelante.) En teor´ıa de conjuntos esto es todav´ıa m´as claro. La “potencia” y la “ordenaci´on” de un conjunto infinito pueden ser la generalizaci´on de conceptos num´ericos finitos, pero su forma infinita (especialmente la “potencia”) dif´ıcilmente tienen nin- guna relaci´on con este mundo. Si no deseara evitar los tecnicismos, podr´ıa documentar esto con numerosos ejemplos de teor´ıa de conjuntos —el pro- blema del “axioma de elecci´on”, la comparatividad de “potencias” infinitas, “el problema del continuo”, etc´etera—. Las mismas observaciones se aplican asimismo a la teor´ıa de funciones reales y a la teor´ıa de conjuntos de puntos reales. La geometr´ıa diferencial y la teor´ıa de grupos dan dos sorprenden- tes ejemplos: fueron ciertamente concebidas como disciplinas abstractas, no aplicadas, y casi siempre cultivadas con ese esp´ıritu. Despu´es de una d´ecada en un caso y de un siglo en el otro, resultaron muy ´utiles para la f´ısica. Y todav´ıa se contin´uan principalmente con el citado esp´ıritu abstracto, de no aplicaci´on. Podr´ıan multiplicarse los ejemplos de estas condiciones y de sus diversas combinaciones, pero en lugar de esto prefiero volver al primer punto, que he indicado antes: ¿Las matem´aticas son una ciencia emp´ırica? O, con mayor precisi´on: ¿Las matem´aticas se desarrollan actualmente de la misma manera que se desarrollan las ciencias emp´ıricas? O, con mayor generalidad: ¿Cu´al es la relaci´on normal del matem´atico a su objeto? ¿Cu´ales son sus criterios de ´exito, de elecci´on? ¿Qu´e influencias, qu´e consideraciones controlan y dirigen su esfuerzo? Veamos, entonces, en qu´e aspectos la manera en que el matem´atico trabaja normalmente difiere del modo de trabajo de las ciencias naturales. La dife- rencia entre ´estas, por una parte, y las matem´aticas, por otra, va creciendo claramente, a medida que se pasa de las disciplinas te´oricas a las experimen- tales, y de las experimentales a las descriptivas. Comparemos, por lo tanto, las matem´aticas con la categor´ıa que est´a m´as pr´oxima a ellas: las disciplinas
  • 10. El Matem´atico. John Von Neumann 10 te´oricas. Y escojamos la que est´a m´as pr´oxima a las matem´aticas. Espero que no me juzgar´an con mucho rigor si no consigo controlar la hybris matem´atica y a˜nado que es la que ha alcanzado un desarrollo m´as alto entre todas las ciencias te´oricas —es decir, la f´ısica te´orica—. Las matem´aticas y la f´ısica te´orica tienen, de hecho, buena parte en com´un. Como antes he indicado, el sistema geom´etrico de Euclides fue el prototipo de presentaci´on axiom´atica de la mec´anica cl´asica, y tratamientos similares dominan la termodin´amica fenomenol´ogica, as´ı como ciertos aspectos del sistema electrodin´amico de Maxwell, y tambi´en de la relatividad especial. Adem´as, la postura de que la f´ısica te´orica no explica los fen´omenos, sino que s´olo los clasifica y co- rrelaciona, es hoy en d´ıa adoptada por muchos f´ısicos. Esto significa que el criterio de ´exito para tal teor´ıa es simplemente el de poder, mediante un esquema de clasificaci´on y de correlaci´on sencillo y elegante, abarcar muchos fen´omenos, que sin este esquema parecer´ıan complicados y heterog´eneos, y el de si este esquema abarca fen´omenos que no se consideraron, o incluso que no se conoc´ıan en el tiempo que este esquema fue desarrollado. (Estas dos ´ultimas afirmaciones expresan, naturalmente, el poder de unificaci´on y de predicci´on de la teor´ıa.) Ahora bien, este criterio, tal como aqu´ı se expresa, es, en gran parte, de naturaleza est´etica. Por esta raz´on, es muy parecido a los criterios de ´exito matem´atico, que, como ver´an, son casi completamente est´eticos. De este modo, estamos ahora comparando las matem´aticas con la ciencia emp´ırica que est´a m´as unida a ellas, y con la que tienen, como espero haber demostrado, mucho en com´un con la f´ısica te´orica. Las diferen- cias en el actual modus procedendi son, no obstante, grandes y b´asicas. Los objetivos de la f´ısica te´orica son, en su mayor parte, dados desde “fuera”, en muchos casos por las necesidades de la f´ısica experimental. Casi siempre proceden de la necesidad de resolver una dificultad. Los ´exitos de predicci´on y unificaci´on vienen, generalmente, despu´es. Si se nos permite un s´ımil, los progresos (predicciones y unificaciones) se producen durante la investiga- ci´on, que va precedida necesarianente de una lucha contra alguna dificultad preexistente (generalmente una contradicci´on aparente dentro del sistema que ya existe). Parte del trabajo del f´ısico te´orico es la investigaci´on de las obstrucciones que prometen una posibilidad de “abrirse camino”. Como he dicho, estas dificultades se producen generalmente en la experimentaci´on, pero algunas veces son contradicciones entre diferentes partes del cuerpo de doctrina aceptado. Los ejemplos son, desde luego, numerosos. El experimento de Michelson, que condujo a la relatividad especial, y las dificultades de ciertos potenciales de ionizaci´on y de ciertas estructu- ras espectrosc´opicas, que condujeron a la mec´anica cu´antica, son ejemplos
  • 11. El Matem´atico. John Von Neumann 11 del primer caso; el conflicto entre la relatividad especial y la teor´ıa de la gravitaci´on de Newton, que condujo a la relatividad general, es un ejemplo del segundo caso, m´as raro. En cualquiera de ellos, los problemas de f´ısica te´orica est´an dados objetivamente y, mientras que los criterios que rigen la explotaci´on de un ´exito son, como he indicado antes, principalmente est´eti- cos, aun as´ı la parte del problema y lo que he llamado antes el primitivo “abrirse camino”, son hechos firmes y objetivos. Por lo tanto, el objeto de la f´ısica te´orica fue, casi siempre, enormemente concentrado; en casi todos los tiempos, la mayor parte del esfuerzo de los f´ısicos te´oricos estaba concentra- do s´olo en uno o dos campos muy limitados —ejemplos de ello son la teor´ıa cu´antica en la segunda d´ecada de este siglo y principios de la tercera, y las part´ıculas elementales y la estructura del n´ucleo, a partir de la tercera—. La situaci´on en las matem´aticas es enteramente diferente. Las matem´ati- cas est´an sujetas a gran n´umero de subdivisiones, que difieren bastante unas de otras en car´acter, estilo, objetivos e influencia. Presentan lo m´as opuesto a la extrema concentraci´on de la f´ısica te´orica. Un buen f´ısico te´orico, hoy d´ıa, todav´ıa puede tener un conocimiento viable de la mitad de su materia. Dudo que cualquier matem´atico actual tenga, a lo sumo, relaci´on con m´as de un cuarto. Problemas dados “objetivamente” e “importantes”, pueden presen- tarse despu´es de que se haya llegado relativamente lejos en una subdivisi´on de las matem´aticas y si se ha retrocedido seriamente ante una dificultad. Pero, incluso entonces, el matem´atico es esencialmente libre de tomarlo o dejarlo y dedicarse a otra cosa, mientras que un problema “importante” de f´ısica te´orica es, por lo general, un conflicto, una contradicci´on que “debe” resolverse. El matem´atico tiene gran variedad de campos a que dedicarse, y disfruta de una libertad muy considerable en lo que hace con ellos. Llegamos al punto decisivo: creo que es correcto decir que sus criterios de selecci´on, y tambi´en los de ´exito, son, principalmente, est´eticos. Comprendo que esta afirmaci´on es pol´emica, y que es imposible “demostrarla” o justificarla hasta el ´ultimo extremo sin analizar numerosas pruebas espec´ıficas y t´ecnicas. Esto requrir´ıa de nuevo un tipo de discusi´on sumamente t´ecnico; no es la ocasi´on propicia. Baste decir que el car´acter est´etico es incluso m´as relevante que en el ejemplo que antes he mencionado en el caso de la f´ısica te´orica. Uno espera que un teorema matem´atico o una teor´ıa matem´atica, no s´olo des- criba y aclare de manera sencilla y elegante numerosos casos particulares, a priori dispares. Tambi´en espera “elegancia” en su aspecto “arquitect´onico” y estructural. Facilidad al establecer el problema, gran dificultad en cap- tarlo y en todos los intentos de aproximarse a ´el, entonces otra vez alg´un giro muy sorprendente por el cual la aproximaci´on, o alguna parte de la
  • 12. El Matem´atico. John Von Neumann 12 aproximaci´on, llegue a ser f´acil, etc. Tambi´en, si las deducciones son indebi- damente largas o complicadas, debe estar implicado alg´un principio general sencillo, que “explique” las complicaciones y rodeos, reduzca la aparente arbitrariedad a unas pocas motivaciones simples, que sirvan de gu´ıa. Estos criterios son claramente los de todo arte creativo, y la existencia de alg´un estrato emp´ırico, motivo profano en el origen —a menudo en un origen muy remoto desarrollado por progresos est´eticos y continuado en una multitud de variantes laber´ınticas—; todo esto est´a mucho m´as emparentado con la atm´osfera de arte puro y simple que con la de las ciencias emp´ıricas. Notar´an que no he mencionado siquiera una comparaci´on de las matem´ati- cas con las ciencias experimentales o con las descriptivas. Aqu´ı las diferencias de m´etodo y de atm´osfera general son demasiado obvias. Creo que es una aproximaci´on relativamente buena a la verdad, la cual es lo bastante complicada como para permitir solamente aproximaciones, que la ideas matem´aticas se originan en lo emp´ırico, aunque la genealog´ıa sea, a veces larga y oscura. Pero, una vez concebidas as´ı, el asunto empieza a vivir una vida peculiar propia, y es mejor compararla a lo creativo, go- bernado por motivos casi enteramente est´eticos, que a cualquier otra cosa y, en particular, a una ciencia emp´ırica. Sin embargo, hay otro punto que creo necesario subrayar. Cuando una disciplina matem´atica se aparta mu- cho de su fuente emp´ırica, o, a´un m´as, si est´a durante una segunda y una tercera generaci´on inspirada s´olo indirectamente por las ideas que proceden de la “realidad”, est´a amenazada de peligros muy graves. Se vuelve m´as y m´as en esteticismo puro, m´as y m´as en l’art pour l’art. Esto no es necesa- riamente malo, si el campo est´a rodeado de materias correlacionadas, las cuales todav´ıa tienen conexiones emp´ıricas m´as pr´oximas, o si la disciplina est´a bajo la influencia de hombres con un criterio extraordinariamente bien desarrollado. Pero existe un grave peligro de que la materia sea desarrollada a lo largo de la l´ınea de m´ınima resistencia, que la corriente, tan alejada de su origen, quede separada en multitud de ramas insignificantes, y que la disciplina se convierta en una masa desorganizada de detalles y complejida- des. En otras palabras, a gran distancia de su origen emp´ırico, o despu´es de muchas reproducciones “abstractas”, un tema matem´atico est´a en peligro de degeneraci´on. Al principio, el estilo es generalmente cl´asico; cuando pre- senta signos de transformarse en barroco, aparece la se˜nal de peligro. Ser´ıa f´acil dar ejemplos, trazar evoluciones espec´ıficas del barroco y del barroco exagerado; pero esto, de nuevo, ser´ıa demasiado t´ecnico.
  • 13. El Matem´atico. John Von Neumann 13 En cualquier caso, siempre que se alcance este punto, me parece que el ´unico remedio es el retorno rejuvenecedor a la fuente: la reinyecci´on de ideas m´as o menos directamente emp´ıricas. Estoy convencido de que ´esta es una condici´on necesaria para conservar el frescor y la vitalidad de la materia, y que esto seguir´a siendo igualmente cierto en el futuro. Digitalizaci´on: maplewhite@gmail.com