El documento describe las características fundamentales de los tendones y ligamentos. Los tendones están compuestos principalmente de colágeno tipo I y decorina, y tienen una organización longitudinal. Los ligamentos contienen más elastina y proteoglicanos que los tendones, y sus fibras de colágeno están menos organizadas. Ambos tejidos transfieren fuerzas desde los músculos a los huesos, pero los ligamentos también estabilizan las articulaciones.
2. PREGUNTAS
Tipo de colágeno predominante en el Sistema musculoesquelético
Célula predominante en el tendon
Tipo de organizacion predominante en el tendon
Proteoglicano predominante en los ligamentos
4. Colágeno
TIPO I ( 85% DEL PESO SECO)
-Glicina 33%, prolina 15%, hidroxiprolina
15%.
-Estructura fibrilar, longitud 300nm, diámetro
de 1.5nm
Proteoglicanos
DECORINA (1-5% DEL PESO SECO)
-Atrae agua. Transfiere las cargas y entrega
resistencia a la estructura.
-Impide la fusión lateral de las fibras de
colágeno.
AGRECANO, TENASCINA C, FIBRONECTINA,
ELASTINA.
Mantienen la hidratación, facilitan el
deslizamiento y el retorno a la condición de
reposo después de las cargas.
*ORGANIZACIÓN LONGITUDINAL AL EJE
DEL TENDÓN.
La función de los tendones es transferir la fuerza desde el músculo al hueso para producir el movimiento de la
articulación.
COMPONENTES ESTRUCTURALES:
Agua
7. IRRIGACIÓN
– Tendones con vaina: regiones relativamente avasculares que se nutren por difusión de
la vaina sinovial.
–Tendones sin vaina: vasos que ingresan a la superficie del tendón a través del
paratenon o a la éntesis (unión tendón-hueso).
8. INERVACIÓN
Funciones aferentes: mecanocepción, nocicepción y modulación vasomotora
Funciones eferentes: Proliferación celular, expresión de citocinas y de factores de
crecimiento, inflamación, respuesta inmune y eferencia paradójica de las fibras
aferentes nociceptivas
9. a) Mecanoceptores:
a.1) Tipo I (Ruffini), sensibles al estiramiento
y la presión.
a.2) Tipo II (Vater-Pacini), sensibles a
cambios de presión y de velocidad (de
alargamiento, aceleraciones y deceleraciones).
a.3) Tipo III (Golgi), sensibles a los cambios
de tensión.
b) Nociceptores (fibras de tipo IVa).
La acción eferente se realiza a través de
neurotransmisores clásicos (monoaminas,
acetilcolina) y de neuropéptidos.
c) Sistema autonómico (fibras IVb).
Su principal localización está en la pared de los
pequeños vasos sanguíneos.
11. Colágeno
TIPO I (70% del peso seco)
Proteoglicanos
ELASTINA (5% del peso seco)
Actina, integrina, laminina, fibronectina
*ORGANIZACIÓN LONGITUDINAL AL EJE
DEL TENDÓN.
La función de los ligamentos es restringir la movilidad articular sobre los parámetros fisiológicos,
estabilizando las articulaciones
Los ligamentos contienen mecanorreceptores y terminales nerviosas libres que a través de la
propiocepción colaboran en el rol estabilizador de la articulación
Célula predominante: fibroblasto, más redondos que los de los tendones
COMPONENTES ESTRUCTURALES:
Agua
12. Microscópicamente poseen un carasterístico patrón
ondulado, importante para la amortiguación ante el estrés
mecánico al estiramiento de sus fibras
Estructura y composición parecida a los tendones,
diferencias importantes:
• Más cortos y más anchos que los tendones.
• Porcentaje más bajo de colágeno y un porcentaje más
alto de proteoglicanos y de agua.
• Las fibras de colágeno están menos organizadas.
Los ligamentos tienen una irrigación sanguínea y una celularidad
relativamente escasas.
13.
14. Son las estructuras más débiles de la articulación, por lo que los esguinces son
frecuentes, sobre todo en la zona central del ligamento.
Los ligamentos extraarticulares tienen una mayor capacidad de reparación que
los intraarticulares.
En los intraarticulares el líquido sinovial no contiene eritrocitos ni factores de
coagulación, por lo que no permite una reparación directa de tejidos
16. Tejido transicional entre tendones y ligamentos
-Éntesis directa: el tendón se inserta en el hueso sin mediar otras estructuras (ej.:
tendón supraespinoso del manguito rotador).
-Éntesis indirecta: el tendón se inserta en otras estructuras que a su vez se insertan
en el hueso (ej.: ligamento colateral medial de la rodilla, el cual en su zona más
superficial y proximal se inserta en el periostio).
Ocasionalmente, tendones sometidos a mayores fuerzas de fricción pueden estar además cubiertos por vainas sinoviales por sobre el peritenon (ej.: tendones flexores de la mano). Estas vainas tendíneas tienen una capa fibrosa (superficial) y una capa sinovial (profunda)
los tendones pueden recibir irrigación a través de tejido conjuntivo que transporta vasos sanguíneos, esta estructura es conocida como víncula.
Colagno tipo II, típico del cartílago, y el tipo III, predominante en piel
en los intraarticulares el líquido sinovial no contiene eritrocitos ni factores de coagulación, por lo que no permite una reparación directa de tejidos. Así también, el líquido sinovial disuelve el coágulo de fibrina por lo que no se produce un puente de tejido entre los cabos.
La éntesis presenta estructuralmente cuatro zonas que le permiten un cambio gradual en la composición de su tejido y poder de esta forma transferir la carga entre dos materiales biomecánicamente diferentes.
la capa superficial conecta con el periostio, y la capa profunda se fija al hueso mediante fibras de Sharpey.
Fibras de Sharpey: Unión indirecta tendón-periostio-hueso, en la cual una matriz de fibras de colágeno que son parte de la capa fibrosa del periostio se anclan en la cortical ósea.
Aunque la región inserción se divide habitualmente en cuatro zonas, los cambios en los tejidos son graduales, sin límites nítidos entre las distintas zonas (Figura 5). Se supone que esta transición gradual en la composición tisular ayuda a una transferencia eficiente de las fuerzas entre el tendón y el hueso.
La éntesis tiene menor resistencia mecánica que el tendón o ligamento en la mitad de su sustancia.
Las lesiones de la éntesis pueden presentarse como roturas del tendón o ligamento en su inserción, o bien como fracturas avulsivas, en las cuales la éntesis se mantiene unida al tendón/ligamento y arranca un fragmento óseo
A pesar de lo anterior, la mayoría de las lesiones de la éntesis ligamento-hueso no requieren resolución quirúrgica, excepto en situaciones en que produzcan secundariamente una inestabilidad de la articulación por los ligamentos comprometidos.