1. LAS NUBES
• Las nubes en el cielo son parte del ciclo del agua. De formas y tamaños diferentes a lo largo del
día, han sido ampliamente estudiadas para comprender su papel en el clima y el tiempo de las
regiones del mundo.
• ¿Qué es una nube? Antes de definirla, es esencial saber que en la atmósfera siempre existe
alguna cantidad de vapor de agua, un gas que resulta de la evaporación del agua de los
diferentes depósitos terrestres (océanos, ríos, arroyos, etcétera) o de la sublimación del hielo. Sin
embargo, no siempre forma nubes.
Para que esto suceda, el vapor de agua tiene que condensarse. A medida que el aire asciende el
vapor pasa del estado gaseoso al estado líquido, aunque en ocasiones se transforma en cristales de
hielo. Entonces, las gotitas o cristales se unen con partículas de polvo, humo, polen e incluso
partículas de sustancias contaminantes y gotas o cristales de agua que permanecen suspendidos en
la atmósfera, generalmente en la troposfera, la capa que está en contacto con la corteza terrestre.
2. • Tipos de Nubes
• Según su forma, hay 4 tipos principales de nubes: cirros, estratos, cúmulos y nimbos. Fáciles de
reconocer, los cirros parecen ser filamentosos y tener bordes delgados. Los estratos son grandes,
planos y de tono y forma uniforme. Los cúmulos son nubes aisladas con la parte superior
abombada, de figura más cercana a las típicas nubes representadas en dibujos animados,
mientras que los nimbos son masas irregulares de color gris oscuro que por lo regular producen
lluvias.
• De acuerdo con la World Meteorological Organization (Organización Meteorológica Mundial, por
sus siglas en inglés), existen 10 tipos básicos de nubes ordenados en 3 niveles de altura: baja,
media y alta.
• Nivel alto:
• Cirros.
Son las nubes tenues, de aspecto fibroso o filamentoso. Están compuestos por cristales de hielo
muy separados, y he ahí la razón de su aspecto casi transparente.
3. Cirrocúmulos.
Se presentan como manchones blancos que parecen estar formados por masas más pequeñas y
redondeadas, como escamas u ondulaciones.
• Cirroestratos.
Nubes blanquecinas, aún más tenues que los cirros pues parecen casi totalmente transparentes. Los
cirroestratos son muy lisos y extensos, y por lo regular cubren casi todo el cielo visible.
• Nivel medio:
• Altocúmulos.
Estas masas de agua condensada están dispuestas en capas redondeadas o “rollos” de aspecto difuso o
fibroso, a menudo de bordes irregulares. Pueden confundirse con los cirrocúmulos, pero estos son más
gruesos.
• Altoestratos.
Nubes grises o azuladas translúcidas u opacas que cubren todo el cielo visible o una parte de él. Tras
ellas, el sol se ve como si estuviera tras vidrio esmerilado, es decir, un poco difuso.
4. Nimboestratos.
Se producen por el engrosamiento de los altoestratos, y muestran un color gris oscuro, detrás del
cual el sol (o la luna) es difícilmente imperceptible debido a que son muy densos.
• Nivel bajo:
• Cúmulos.
Nubes pequeñas, densas y de contornos nítidos, bien reconocidas. La base es oscura y la parte
superior, más ancha, se percibe blanca como resultado de la iluminación del sol. Su forma se
describe como semejante a la de una coliflor. No generan lluvias.
Cumulonimbos.
Son nubes densas, pesadas y en forma de montaña o yunque. La parte superior es estriada o
fibrosa, pero normalmente aplanada, mientras que la base es oscura y a menudo muestra nubes
más pequeñas de bordes irregulares. Producen lluvias y tormentas eléctricas.
5. • Estratocúmulos.
Se ven como parches blancos y redondeados oscurecidos en la base. Desde abajo parecen formar un
mosaico.
• Estratos.
Se disponen de tal manera que forman una visible capa gris no tan difusa como la que forman los
nimboestratos, pues el sol es visible a través de ella. Si es lo suficientemente gruesa cae llovizna,
granos de nieve o prismas de hielo.
La influencia de las nubes en el clima terrestre es muy significativa, porque reflejan la radiación
solar de onda corta de vuelta hacia el espacio, lo que permite el enfriamiento del aire, pero también
evitan el escape de la radiación de onda larga, produciendo así un efecto invernadero. Por lo
regular, las nubes más bajas y las medias ayudan a enfriar el planeta.