2. 1) Hacer un balance de lo que ha sido el año.
Hace un año estábamos planteándonos objetivos que
seguramente muchos de nosotros, a día de hoy, no hemos
cumplido. Para empezar el año deberíamos descargarnos de
sentimientos negativos, de culpas, de miedos o de cualquier
cosa que nos limite la ilusión de tener un buen objetivo que
cumplir este año.
En contraposición con esto, deberíamos llenar la maleta de
todo lo que ha funcionado, de todo lo que ha sido
estupendo en este año, las buenas cosas que hicimos, los
buenos amigos, las buenas compañías, los buenos éxitos…
Resume en una palabra o frase positiva lo que ha significado
para ti este año.
3. 2) Hay que marcarse objetivos que ilusionen.
Olvidamos el “para qué” de ese objetivo, se
nos acaba olvidando para qué lo pusimos en
marcha y entonces la voluntad se debilita. La
ilusión es una energía muy potenciadora que
mueve a la acción y, lo más importante, nos
hace disfrutar del camino.
4. 3) Los objetivos deben estar alineados con
nuestra misión de vida.
• Pregúntate cuál es tu misión de vida, cuál es
tu don o talento que puedes poner al servicio
de los demás. Un médico chino le dijo a su
paciente:
• “Cómo voy a curarle si no sé cuál es su
finalidad en la vida”.
5. 4) No a los objetivos realistas.
Si de todos modos hay que pensar,
mejor pensar a lo grande.
Abandonemos los objetivos realistas,
nos aburren… pero cuidado,
planteémonos objetivos ecológicos,
objetivos que una vez planteados no nos
descalabren el resto de los objetivos.
6. • 5) Nunca te rindas ante un objetivo.
• Pon la estadística a tu favor, inténtalo
una y otra vez. Nos rendimos porque
no creemos en nosotros mismos o
porque se nos olvida la misión que
tienen nuestros objetivos.
7. • 6) Determina el qué, el cómo y el para
qué de un objetivo.
• El qué quieres lograr te sitúa en la
realidad del objetivo, el cómo te amplía
el paradigma (con quién quieres realizar
tu objetivo y qué medios vas a utilizar
para conseguirlo) y el para qué te
muestra la utilidad del objetivo.
8. • 7) Ejercitar la voluntad.
• Hay que desglosar el gran objetivo en
metas muy pequeñas, fácilmente
realizables y que tengan mucho
emponderamiento para fortalecer tu
autoconfianza.
9. • 8) Visualiza el estado que quieres
conseguir.
• Visualiza el tipo de trabajo que te
gustaría tener, visualiza la figura
corporal que deseas obtener… para
tener claro en qué dirección debes
trabajar.
10. • 9) Rodéate de gente positiva.
• Deja de escuchar noticias negativas porque
eso te limita, te incapacita a la hora de soñar.
En lugar de eso, rodéate de gente que te
inspire, que sea positiva que te aliente y
anime. Es como pedir prestado un poquito de
la energía de dichas personas. Conviértete tu
mismo en una de esas personas positivas que
modifican y transforman su alrededor.