El documento explica que la drogadicción es una enfermedad compleja que afecta el cerebro y no solo un problema de falta de voluntad. Las drogas cambian el cerebro para fomentar el abuso compulsivo, pero la drogadicción se puede tratar exitosamente. También señala que la drogadicción es prevenible a través de programas educativos dirigidos a familias, escuelas y la comunidad que crean conciencia sobre los riesgos del abuso de drogas.