Jesús promete enviar el Espíritu Santo a sus discípulos para que esté siempre con ellos y no se sientan huérfanos. Jesús invita a cumplir sus mandamientos como forma de demostrarle amor, y asegura que aquellos que los cumplan serán amados por él y por el Padre. El documento también insta a los lectores a reflexionar sobre cómo han vivido el amor a Dios y sobre cómo mejorar en ello.