La palabra de los pueblos
Organizaciones sociales consideran que para luchar contra el cambio climático hay que cambiar el sistema y lo plantearán en la Cumbre de los Pueblos, paralela a la COP20.
Denuncia en la Justicia Federal por la salud en La Rioja
Lima: Cumbre de los Pueblos alternativa a la Conferencia sobre Cambio Climático
1. Lima: Cumbre de los Pueblos alternativa a la Conferencia
sobre Cambio Climático
Para más información: http://cumbrepuebloscop20.org/es/
La palabra de los pueblos
Organizaciones sociales consideran que para luchar contra el cambio
climático hay que cambiar el sistema y lo plantearán en la Cumbre de
los Pueblos, paralela a la COP20.
Los gobiernos y las grandes corporaciones mundiales ocultan que el
calentamiento global es consecuencia del sistema depredador y
extractivista. Por eso, las organizaciones sociales, agrarias,
sindicales, pueblos originarios, jóvenes, mujeres consideran que para
combatir el calentamiento global hay que cambiar el sistema.
Las organizaciones sociales impulsan la Cumbre de los Pueblos frente
al Cambio Climático, que se desarrollará, del 8 al 11 de diciembre, en
el Parque de Lima con la presencia de visitantes y activistas
nacionales y extranjeros.
Será un espacio de diálogo y acción abierto, democrático y horizontal
de la sociedad. Las conversaciones buscarán fortalecer una agenda
común y ejercer presión ante los que toman las decisiones en la
COP20 a fin de que se incorporen las demandas de los pueblos en la
declaración final que se aprobará en la COP 21 en París.
Cambio civilizatorio
2. Desde el 1 hasta el 12 de diciembre se realizará en Lima la Vigésima
Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones
Unidas sobre el Cambio Climático (COP20, por su sigla en inglés) y
reunirá en el Perú a líderes políticos y representantes de 194 países,
que analizarán las causas del aumento de la temperatura en la Tierra.
En Lima se presentará el borrador de un informe que deberá ser
aprobado el 2015 en la COP21 de París, para sustituir al protocolo de
Kioto.
Se realizarán actividades culturales y de debate y articulación de las
organizaciones y movimientos sociales los siguiente ejes:
(http://diariouno.pe/2014/11/30/la-palabra-de-los-
pueblos/?fb_action_ids=846252498753113&fb_action_types=og.com
ments) Cambio civilizatorio y modelo de desarrollo; calentamiento
global y cambio climático; energía, seguridad y soberanía
alimentaria; gestión sustentable del territorio; financiamiento,
transferencia de tecnología e interaprendizajes; mujeres y
sostenibilidad de la vida; trabajo digno versus la economía verde; y
los empleos verdes y otras falsas soluciones.
Habrá cinco carpas temáticas en las cuales se harán exposiciones y
talleres. Habrá carpas de Pueblos originarios, agrarios, sindicatos,
jóvenes, mujeres, etc. Se exhibirán productos agroecológicos,
alternativos. Por la gran cantidad de eventos inscritos se han
considerado otros locales en los alrededores del Parque de Lima.
Quienes vienen
La Inauguración se realizará el lunes 8 a las 5 de la tarde en el
anfiteatro del Parque. La alcaldesa de Lima, Susana Villarán, dará la
bienvenida a todos los visitantes. Se estima la llegada a nuestro país
de 300 dirigentes de la Vía Campesina; 300 del Movimiento Sin Tierra
(MST) de Brasil; 150 sindicalistas; y de cientos de activistas sociales
y medioambientales de todo el mundo.
De Centro América, viene la Caravana Climática, que en su recorrido
por todos nuestros países vienen documentando casos de defensa de
tierras comunales y de violación a nuestros ecosistemas.
A nivel nacional se han formado comités impulsores de la Cumbre de
los Pueblos, y vienen discutiendo en foros las consecuencias del
cambio climático en su región.
En Cajamarca en un evento realizado en Celendín se acordó la
Marcha de los Pueblos que partiendo el 7 de diciembre de las lagunas
de Cajamarca, recorrerá Trujillo, Chimbote y otras ciudades para
llegar a Lima el 9 y participar el 10 en la Gran Marcha.
3. Marcha por la Madre Tierra
El 10 de diciembre, Día Internacional de los Derechos Humanos,
Lima será el centro de la Marcha mundial de los Pueblos por la
defensa de la Madre Tierra y será una expresión multitudinaria y
multicultural de la diversidad de voces y comunidades del Perú y el
mundo. Esta marcha se realizará en diversas ciudades del Perú y en
las principales capitales del mundo. En Lima se iniciará a las 11 de la
mañana en el Campo de Marte y su recorrido concluirá en la Plaza
San Martín donde se realizará un mitin.
Carpas para mil mujeres
La Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas,
Indígenas, Nativas y Asalariadas del Perú – FENMUCARINAP,
(https://www.facebook.com/notes/femucarinap-per%C3%BA/la-
federaci%C3%B3n-de-mujeres-campesinas-artesanas-
ind%C3%ADgenas-nativas-y-asalariadas-de/371366362920491)
anunció la llegada a Lima de mil mujeres provenientes de diversas
regiones. Para alojarlas ha solicitado al gobierno la instalación de
carpas en la Explanada del Estadio Nacional. “Nosotras no
demandamos hoteles de 5 estrellas, como los visitantes del gobierno,
pero si queremos un lugar que brinde la seguridad y buenas
condiciones sanitarias para nuestras delegaciones”, sostuvo Lourdes
Huanca, vocera de las mujeres.
—
*Dante Alfaro es representante de la Federación de Trabajadores del
agua potable y alcantarillado del Perú (FENTAP) y miembro de la
Comisión Política Organizadora de la Cumbre de los Pueblos frente al
Cambio Climático.
4.
5. Cumbre alternativa a la COP20 lanza programa de actividades
abiertas a la ciudadanía
Lima, 1 de diciembre de 2014.- La Cumbre de los Pueblos frente al
Cambio Climático que se realizará del 8 al 11 de diciembre en Lima,
Perú, ofrecerá un amplio programa de actividades autogestionarias
impulsadas por organizaciones de la sociedad civil, las cuales serán
de libre acceso a todos los ciudadanos.
El evento que tendrá como escenario principal el Parque de la
Exposición de Lima se desarrollará en una Gran Sala de Conferencias
y cinco salas acondicionadas en este recinto para los eventos.
Además, en la explanada se desarrollará una muestra fotográfica y se
presentará el Salón de la Biodiversidad.
Debido al número de actividades los eventos se desarrollarán además
en diez auditorios cercanos al Parque de la Exposición.
Estos corresponden a salas de conferencias de diversas instituciones
como el Sindicato Telefónico, la Federación Nacional de Trabajadores
de la Universidad del Perú (Fentup), entre otros.
Participan organizaciones y redes internacionales
Entre las redes internacionales que participarán en la Cumbre se
encuentra la Articulación Regional Amazónica (ARA), la Coordinadora
Latinoamericana de Organizaciones del Campo (CLOC), afiliada a Vía
Campesina Internacional y la Global Alliance for the Rights of Nature.
Asimismo, la Global Campaign fo Demand Climate Justica, Amigos de
la Tierra Internacional, el Foro de Mujeres Asia Pacífico, la Coalición
Clima 21 y el Pan African Climate Justice Alliance (PAC JA).
También Jubileo Sur América, Pan para el Mundo, la Red Andina del
Agua, la Asociación de Pueblos de Montaña y Climate Action Network,
entre muchas otras.
Pueblos originarios inauguran Gran Sala de Conferencia
La Gran Sala de Conferencia acogerá el lunes 8 a partir de las 12 m.
a un evento organizado por el Pacto de Unidad de Organizaciones
Indígenas del Perú donde se debatirá el tema: “Territorio, Cambio
Climático y Autodeterminación de los Pueblos Indígenas.
Precisamente, las seis organizaciones que integran dicho Pacto
forman parte de la Comisión política organizadora de la Cumbre de
los Pueblos frente al Cambio Climático.
6. La concentración indígena proseguirá el martes 9 de diciembre de 10
am a 6 de la tarde.
Inauguración y marcha climática
Cabe destacar que la inauguración de la Cumbre de los Pueblos se
realizará el lunes 8 a partir de las 5 de la tarde en el anfiteatro del
Parque de la Exposición donde se desarrollará un programa cultural y
artístico especial.
La alcaldesa metropolitana de Lima será la autoridad encargada de
inaugurar oficialmente la cumbre como máxima autoridad de la
metrópoli limeña.
La Marcha Mundial de los Pueblos en Defensa de la Madre Tierra
partirá el miércoles 10 de diciembre del Campo de Marte a las 11 de
la mañana, donde los diversos sectores sociales se irán concentrando
desde muy temprano.
La movilización ciudadana que tiene como lema: ”Cambiemos el
sistema, no el clima” culminará con una concentración en la Plaza
San Martín en el que intervendrán delegados nacionales e
internacionales.
Existe desequilibrio de género en las negociaciones sobre
cambio climático
Lima, 1 de diciembre de 2014.- La Organización Nacional de
Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (ONAMIAP)*
señaló que en el debate mundial sobre cambio climático hay un
profundo desequilibrio entre la participación de hombres y mujeres en
los espacios de negociación creados por la Organización de Naciones
Unidas en el marco de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre
Cambio Climático (CMNUCC).
Aunque el debate sobre cambio climático se inició en los años setenta
del siglo pasado, fue la Cumbre de la Tierra desarrollada por la ONU
del 3 al 14 de junio de 1992, conocida como Río’92 donde se
profundizó el tema de cambio climático. Entonces solo se hablaba de
mitigación.
Fue recién en el 2001 cuando el Panel Internacional de Cambio
Climático reconoce por primera que los impactos del cambio climático
no se sienten igual en todos los países del mundo. Y también por
primera vez se habla de género.
7. Sin embargo, tuvieron que pasar otros seis años para que el tema
apareciera en las actas de negociación: antes del 2007, en la
CMNUCC no había una sola mención de género. En la actualidad,
según la Guía de Género y Cambio Climático difundida por el
Ministerio del Ambiente peruano, existe un total de 27 decisiones que
lo mencionan:
Adaptación: 10 decisiones.
Mitigación: 3 decisiones.
Finanzas: 5 decisiones.
Tecnología: 4 decisiones.
Desarrollo de capacidades: 5 decisiones.
Total: 27 decisiones.
Mozambique fue el primer país, en el 2010, que solicitó estrategias de
cambio climático género-sensibles. Hoy son 17 los países que las
piden. A nivel internacional ha sido creado un índice de género y
medio ambiente. El Perú está en séptimo lugar de los ocho países de
América Latina donde se hace esta medición. Y en el lugar 26 de 72
países a nivel mundial.
El desequilibrio de género en la composición de los comités es
también evidente. Según la misma fuente, dicha composición es la
siguiente:
Comité de Adaptación: 8 hombres y 4 mujeres.
Grupo Consultivo de Expertos: 15 hombres y 10 mujeres.
Comité de Finanzas: 12 hombres y 7 mujeres.
Comité de Tecnología: 17 hombres y 3 mujeres.
Centro de Tecnología del Clima: 19 hombres y 3 mujeres.
Junta del Fondo Verde: 21 hombre y 3 mujeres.
Para la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y
Amazónicas del Perú (ONAMIAP), el desequilibrio de género no es
solo numérico, sino también, y fundamentalmente, de contenidos.
8. Las decisiones que mencionan el tema de género a las que nos
referimos líneas arriba, reconocen a las mujeres, junto con los
pueblos indígenas, como poblaciones especialmente vulnerables.
La atención a las necesidades especiales de mujeres y pueblos
indígenas es importante y urgente. Pero las mujeres indígenas no
solo tenemos demandas, también tenemos propuestas.
Por ello es imprescindible que las negociaciones internacionales y el
diseño de políticas sobre cambio climático incorporen nuestra visión,
nuestros saberes y nuestras prácticas, junto con el reconocimiento
expreso de los derechos de los pueblos indígenas.
Las mujeres indígenas debemos estar presentes en la discusión, el
planeamiento, la ejecución y el monitoreo de las políticas climáticas.
Deben identificarse nuestras demandas y nuestras propuestas. El
empoderamiento de las mujeres en general y de las mujeres
indígenas en particular debe ser una estrategia central en el
enfrentamiento del cambio climático.
—
*Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas
del Perú (ONAMIAP), entidad miembro del Pacto de Unidad de
Organizaciones Indígenas del Perú y de la Comisión Política
organizadora de la Cumbre de los Pueblos frente al Cambio Climático.
Ver más información en Blog ÚLTIMA LLAMADA
Los ciudadanos y ciudadanas europeos, en su gran mayoría, asumen
la idea de que la sociedad de consumo actual puede “mejorar” hacia
el futuro (y que debería hacerlo). Mientras tanto, buena parte de los
habitantes del planeta esperan ir acercándose a nuestros niveles de
bienestar material. Sin embargo, el nivel de producción y consumo se
ha conseguido a costa de agotar los recursos naturales y energéticos,
y romper los equilibrios ecológicos de la Tierra.
Nada de esto es nuevo. Las investigadoras y los científicos más
lúcidos llevan dándonos fundadas señales de alarma desde principios
de los años setenta del siglo XX: de proseguir con las tendencias de
crecimiento vigentes (económico, demográfico, en el uso de recursos,
generación de contaminantes e incremento de desigualdades) el
resultado más probable para el siglo XXI es un colapso civilizatorio.
Hoy se acumulan las noticias que indican que la vía del crecimiento es
ya un genocidio a cámara lenta. El declive en la disponibilidad de
energía barata, los escenarios catastróficos del cambio climático y las
tensiones geopolíticas por los recursos muestran que las tendencias
de progreso del pasado se están quebrando.
9. Frente a este desafío no bastan los mantras cosméticos del desarrollo
sostenible, ni la mera apuesta por tecnologías ecoeficientes, ni una
supuesta “economía verde” que encubre la mercantilización
generalizada de bienes naturales y servicios ecosistémicos. Las
soluciones tecnológicas, tanto a la crisis ambiental como al declive
energético, son insuficientes. Además, la crisis ecológica no es un
tema parcial sino que determina todos los aspectos de la sociedad:
alimentación, transporte, industria, urbanización, conflictos bélicos…
Se trata, en definitiva, de la base de nuestra economía y de nuestras
vidas.
Estamos atrapados en la dinámica perversa de una civilización que si
no crece no funciona, y si crece destruye las bases naturales que la
hacen posible. Nuestra cultura, tecnólatra y mercadólatra, olvida que
somos, de raíz, dependientes de los ecosistemas e interdependientes.
La sociedad productivista y consumista no puede ser sustentada por
el planeta. Necesitamos construir una nueva civilización capaz de
asegurar una vida digna a una enorme población humana (hoy más
de 7.200 millones), aún creciente, que habita un mundo de recursos
menguantes. Para ello van a ser necesarios cambios radicales en los
modos de vida, las formas de producción, el diseño de las ciudades y
la organización territorial: y sobre todo en los valores que guían todo
lo anterior. Necesitamos una sociedad que tenga como objetivo
recuperar el equilibrio con la biosfera, y utilice la investigación, la
tecnología, la cultura, la economía y la política para avanzar hacia ese
fin. Necesitaremos para ello toda la imaginación política, generosidad
moral y creatividad técnica que logremos desplegar.
Pero esta Gran Transformación se topa con dos obstáculos titánicos:
la inercia del modo de vida capitalista y los intereses de los grupos
privilegiados. Para evitar el caos y la barbarie hacia donde hoy
estamos dirigiéndonos, necesitamos una ruptura política profunda con
la hegemonía vigente, y una economía que tenga como fin la
satisfacción de necesidades sociales dentro de los límites que impone
la biosfera, y no el incremento del beneficio privado.
Por suerte, cada vez más gente está reaccionando ante los intentos
de las elites de hacerles pagar los platos rotos. Hoy, en el Estado
español, el despertar de dignidad y democracia que supuso el 15M
(desde la primavera de 2011) está gestando un proceso
constituyente que abre posibilidades para otras formas de
organización social.
Sin embargo, es fundamental que los proyectos alternativos tomen
conciencia de las implicaciones que suponen los límites del
crecimiento y diseñen propuestas de cambio mucho más audaces. La
crisis de régimen y la crisis económica sólo se podrán superar si al
10. mismo tiempo se supera la crisis ecológica. En este sentido, no
bastan políticas que vuelvan a las recetas del capitalismo keynesiano.
Estas políticas nos llevaron, en los decenios que siguieron a la
segunda guerra mundial, a un ciclo de expansión que nos colocó en el
umbral de los límites del planeta. Un nuevo ciclo de expansión es
inviable: no hay base material, ni espacio ecológico y recursos
naturales que pudieran sustentarlo.
El siglo XXI será el siglo más decisivo de la historia de la humanidad.
Supondrá una gran prueba para todas las culturas y sociedades, y
para la especie en su conjunto. Una prueba donde se dirimirá nuestra
continuidad en la Tierra y la posibilidad de llamar “humana” a la vida
que seamos capaces de organizar después. Tenemos ante nosotros el
reto de una transformación de calibre análogo al de grandes
acontecimientos históricos como la revolución neolítica o la revolución
industrial.
Atención: la ventana de oportunidad se está cerrando. Es cierto que
hay muchos movimientos de resistencia alrededor del mundo en pro
de la justicia ambiental (la organización Global Witness ha registrado
casi mil ambientalistas muertos sólo en los últimos diez años, en sus
luchas contra proyectos mineros o petroleros, defendiendo sus tierras
y sus aguas). Pero a lo sumo tenemos un lustro para asentar un
debate amplio y transversal sobre los límites del crecimiento, y para
construir democráticamente alternativas ecológicas y energéticas que
sean a la vez rigurosas y viables. Deberíamos ser capaces de ganar
grandes mayorías para un cambio de modelo económico, energético,
social y cultural. Además de combatir las injusticias originadas por el
ejercicio de la dominación y la acumulación de riqueza, hablamos de
un modelo que asuma la realidad, haga las paces con la naturaleza y
posibilite la vida buena dentro de los límites ecológicos de la Tierra.
Una civilización se acaba y hemos de construir otra nueva. Las
consecuencias de no hacer nada —o hacer demasiado poco— nos
llevan directamente al colapso social, económico y ecológico. Pero si
empezamos hoy, todavía podemos ser las y los protagonistas de una
sociedad solidaria, democrática y en paz con el planeta.