Este poema rinde homenaje a los maestros que continuaron enseñando durante la pandemia y cuarentena a pesar de los desafíos. Reconoce que los maestros tuvieron que aprender nuevas herramientas tecnológicas como Zoom y Edmodo para dar clases virtuales y mantenerse pendientes del desarrollo y las tareas de sus alumnos con amor y sacrificio. Finalmente, felicita a cuatro maestros en particular, María Claudia, Mari y Laura.