SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 3
Descargar para leer sin conexión
1



       La percepción de lo correcto

       La presencia de la sociedad civil en los actos oficiales

       Fernando Ramos

       Doctor en Ciencias de la Información
       Profesor Titular de Derecho de la Información
       Universidad de Vigo.

        No necesariamente hay que invitar a todos a todo. Por lo tanto, hay que adecuar
el acto a su verdadero sentido y dimensión, resaltando la representación más acorde
con su propia naturaleza, dentro de unos límites razonables, entre otras cosas, al
propio espacio. Además de las autoridades tradicionales, las representaciones de la
vida civil deben ser adecuadamente tratadas s y ordenadas con criterios de escrupulosa
cortesía.



        El Protocolo, entendido como técnica para ordenar los actos de los hombres, no
es una ciencia exacta. Tampoco la vida lo es. Pero, pese a estas verdades, lo cierto es
que todo el mundo, en el ámbito respectivo donde de desenvuelva cada uno posee eso
que acertadamente se ha dado en llamar “la percepción de lo correcto”. En este
sentido, uno de los problemas que suscita mayor controversia entre especialistas y
profesionales es el modo de ordenar en las diversas situaciones –oficiales o no- la
presencia de los representantes de eso que se ha dado en llamar “la sociedad civil”,
eufemismo socorrido, a veces sin el menor sentido, para englobar en el mismo saco a
instituciones y personalidades muy diversas, desde corporaciones profesionales a clubes
de alpinismo.

        Algunos profesionales del Protocolo parecen reclamar plantillas o criterios guía
para todo, puesto que se sienten desorientados y perdidos cuando han de afrontar
situaciones nuevas o no previstas. Pertenecen a este grupo quienes demandan mayor
repertorio reglamentista a la hora de determinar dónde colocar a un presidente de
Cámara de Comercio o al de una asociación de vecinos. Olvidan que ni el Gobierno, ni
las autoridades autonómicas o locales poseen capacidad –fuera de la de establecer, en
cada caso, los reglamentos pertinentes de precedencias y ceremonial público y oficial-
para regular otro tipo de actos que escapan a su jurisdicción y competen, obviamente, a
la esfera de quien los organiza, aunque las autoridades oficiales sean –o no- invitadas.

       Pero si el exceso de reglamentismo es inadecuado, entendido como tal la
obsesión porque todo esté escrito, aunque no sea aplicable –porque nadie puede obligar
a imponerlo-, también lo es el abandono aleatorio, para ir resolviendo los problemas
sobre la marcha, con el criterio que a cada uno se le active en cada caso, pero sin
ninguna previsión anterior. Pero, entonces, ¿cómo regulamos protocolariamente a la
sociedad civil? ¿Con qué plantilla o parámetros la ordenamos y en qué casos?

        Al famoso y superado Real Decreto de Precedencias del Estado se le achaca, con
razón, sin duda, que se ha olvidado ordenar también la presencia de las representaciones
2

de la repetida sociedad civil que, en condición de tales, acuden a los actos oficiales. Sin
duda, pese a las fallas del referido Decreto, su ámbito de aplicación está correctamente
formulado. No es allí, por tanto, donde debemos establecer los criterios guía para
ordenar a esas otras representaciones en los actos de carácter oficial, dejando que ellas
mismas se ordenen internamente, salvo en el caso que de ser necesario se requiera.

        En 1948, la Diputación de Lugo publicó, bajo el título de “Protocolo oficial”,
breve y completo, un folleto, donde se aborda –dentro del contexto de la época- la
cuestión que hoy debatimos aquí. En esta curiosa recopilación se observan dos apuntes
interesantes sobre los que vamos a incidir, por ser oportuno estribo para la discusión.

        En el ordenamiento propuesta están autoridades y representaciones, con las
características del momento, dividas en dos bloques, según se tratase de las primeras
autoridades (alcalde, gobernador civil, gobernador militar, alcalde, etc.) y el resto de
todo aquel que representase algo en la ciudad. En esta curiosa propuesta se reconocen
honores o precedencias a las más diversas instituciones, mezclando las de carácter
público con colegios profesionales, directores de instituto, ingeniero del puerto,
delegados de empresas de carácter público, instituciones religiosas, cofradías, casinos y
todo lo demás, hasta los directores de los periódicos y las asociaciones de la prensa,
jueces, asociaciones deportivas y todo cuanto representase algo, fuera lo que fuere.

       Esta fórmula ecléctica, a la que agarran algunos responsables de protocolo en
nuestros días, puede servir para salir del paso, pero es necesario ir más allá. Proponemos
un debate para sereno entre los profesionales para fijar, con criterios valorativos
ponderados, cómo ordenamos lo que no está previsto en las normas jurídicas que
ordenan las precedencias oficiales.

       Primero: La regla de la especialización.

               Es decir, la confección de una serie de listas de autoridades y
representaciones, según la naturaleza del acto a ordenar. Cada lista debe expurgarse
previamente antes de ser cruzada con otra. Por ejemplo: en la inauguración de la “Casa
de las palabras”, es decir de una institución cultural, no cabe duda de que debe cuidarse
que todas las asociaciones y entidades de este ámbito estén representadas. No
necesariamente hay que invitar a todos a todo. Por lo tanto, hay que adecuar el acto a su
verdadero sentido y dimensión, resaltando la representación más acorde con su propia
naturaleza, dentro de unos límites razonables, entre otras cosas, al propio espacio.

       Segundo: La regla de la ponderación

                Aplicando criterios de evaluación de la valencia de cada entidad o
representante en función de la propia importancia objetiva y representatividad de la
institución o la persona que vamos a colocar en una lista de protocolo. Por ejemplo, en
una ciudad marítima, la autoridad portuaria es un personaje relevante; pero también lo
puede ser en un pequeño pueblo castellano el director del hospital comarcal. En un
determinado contexto, una personalidad o representación puede poseer un carácter del
que carezca en otro.

       Tercero: La regla del equilibrio
3

               Además de las autoridades tradicionales, las representaciones de la vida
civil deben ser adecuadamente tratadas s y ordenadas con criterios de escrupulosa
cortesía. En todo caso, el presidente de la Cooperativa de Armadores del puerto de Vigo
es mucho más importante que el comandante de Marina en un acto relacionado con la
actividad económica de la ciudad. Salta a la vista o, incluso, que el capitán marítimo del
puerto –autoridad oficial ahora en este ámbito- es un representante administrativo a
estos efectos. Estos dos últimos son meras autoridades delegadas del Capitán General
del Departamento o del Ministerio de Transportes, respectivamente, pero el presidente
de los armadores es un cargo electivo de una institución que aglutina a todas las
empresas pesqueras del primer puerto de Europa en esta especialidad. Tiene una doble
valencia, la que la da el carácter de se elegido y la que objetivamente posee la entidad
que representa.

       Cuarto: La regla de la vinculación

               Es de sentido común que, si el presidente de la Cámara de Comercio o
una determinada empresa patrocinan una actividad de una entidad pública, el
representante de aquella corporación o de la empresa en cuestión, han de ser colocados,
en su caso, en lugar preferente dentro del acto oficial de que se trate. Ocurre con
frecuencia, por ejemplo, cuando una entidad privada o mercantil sufraga los gastos de
recuperación de un monumento o de cualquier otra pieza del patrimonio nacional,
regional o local.


       Quinto: La regla de la tradición

        Cierto que el Reino de España es un estado aconfesional y que en el Protocolo
oficial no se contempla ni prevé dónde colocar a las autoridades eclesiásticas. Pero,
¿como puede ignorar el Ayuntamiento de Compostela al arzobispo de la ciudad, que
fue, además, el señor de la urbe? ¿O cómo puede ignorar la Universidad de Santiago,
que fue fundada, precisamente, por un antepasado del actual arzobispo? Por lo tanto, a
falta de norma reglada, la tradición acude en nuestro socorro, con el refuerzo de que en
el propio ámbito de lo jurídico, costumbres y tradiciones son fuentes de Derecho.

        Estas cinco reglas, o criterios de reflexión, no pretenden ser un prontuario, sino
una simple guía de razonamiento para aplicar, según el caso, a cada situación concreta.
Ni quieren ser exhaustivas ni se agotan en su propia exposición. Son un mero apunte
para el debate permanente. Lo dicho, el Protocolo no es una ciencia exacta. Pero hemos
de hacerla lo más aproximada posible al ideal de lo correcto en cada caso.

Más contenido relacionado

Similar a La percepción de lo correcto. La presencia de la sociedad civil en los actos oficiales

Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficiente
Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficienteSuprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficiente
Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficientefernando ramos
 
Protocolo2
Protocolo2Protocolo2
Protocolo2funlam
 
Protocolo2
Protocolo2Protocolo2
Protocolo2funlam
 
Diccionario constitucional chileno
Diccionario constitucional chilenoDiccionario constitucional chileno
Diccionario constitucional chilenoAna Urriola
 
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014Nelson Leiva®
 
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdf
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdfLECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdf
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdfJhonnyLozano2
 
Protocolo sin Protocolo
Protocolo sin ProtocoloProtocolo sin Protocolo
Protocolo sin Protocolofernando ramos
 
Protocolo sin Protocolo
Protocolo sin ProtocoloProtocolo sin Protocolo
Protocolo sin Protocolofernando ramos
 
El derecho para los profesionales comerciales
El derecho para los profesionales comercialesEl derecho para los profesionales comerciales
El derecho para los profesionales comercialesMiguel Fagian Filippini
 
Power Ceremonial I A
Power Ceremonial I APower Ceremonial I A
Power Ceremonial I Aaltaidea
 
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991Episcopalpy
 
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...Ciro Victor Palomino Dongo
 
43203683 normas-y-deberes
43203683 normas-y-deberes43203683 normas-y-deberes
43203683 normas-y-deberesNelson A
 
El personero municipal
El personero municipalEl personero municipal
El personero municipalDiegoLeivaC
 
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdf
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdfPROTOCOLO EMPRESARIAL.pdf
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdfSoledadCorrea12
 
Que es administracion publica
Que es administracion publicaQue es administracion publica
Que es administracion publicawilson alvarado
 

Similar a La percepción de lo correcto. La presencia de la sociedad civil en los actos oficiales (20)

Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficiente
Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficienteSuprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficiente
Suprimir los tratamientos, una medida inútil e ineficiente
 
Protocolo2
Protocolo2Protocolo2
Protocolo2
 
Protocolo y Comunicación
Protocolo y ComunicaciónProtocolo y Comunicación
Protocolo y Comunicación
 
Protocolo2
Protocolo2Protocolo2
Protocolo2
 
"Innovación en Actos" por Carlos Fuente Lafuente
"Innovación en Actos" por Carlos Fuente Lafuente"Innovación en Actos" por Carlos Fuente Lafuente
"Innovación en Actos" por Carlos Fuente Lafuente
 
Diccionario constitucional chileno
Diccionario constitucional chilenoDiccionario constitucional chileno
Diccionario constitucional chileno
 
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014
Diccionario Constitucional de la República de Chile 2014
 
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdf
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdfLECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdf
LECTURA - León, Leysser, Derecho privado - Parte general_unlocked.pdf
 
Protocolo sin Protocolo
Protocolo sin ProtocoloProtocolo sin Protocolo
Protocolo sin Protocolo
 
Protocolo sin Protocolo
Protocolo sin ProtocoloProtocolo sin Protocolo
Protocolo sin Protocolo
 
El derecho para los profesionales comerciales
El derecho para los profesionales comercialesEl derecho para los profesionales comerciales
El derecho para los profesionales comerciales
 
Cristina protocolo2
Cristina protocolo2Cristina protocolo2
Cristina protocolo2
 
Power Ceremonial I A
Power Ceremonial I APower Ceremonial I A
Power Ceremonial I A
 
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991
Una Constitución para nuestro pueblo. 18 de diciembre de 1991
 
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...
ACERCA DEL REGISTRO NACIONAL DE ABOGADOS SANCIONADOS POR MALA PRACTICA PROFES...
 
43203683 normas-y-deberes
43203683 normas-y-deberes43203683 normas-y-deberes
43203683 normas-y-deberes
 
El personero municipal
El personero municipalEl personero municipal
El personero municipal
 
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdf
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdfPROTOCOLO EMPRESARIAL.pdf
PROTOCOLO EMPRESARIAL.pdf
 
Las claves del protocolo en los eventos oficiales
Las claves del protocolo en los eventos oficialesLas claves del protocolo en los eventos oficiales
Las claves del protocolo en los eventos oficiales
 
Que es administracion publica
Que es administracion publicaQue es administracion publica
Que es administracion publica
 

Más de fernando ramos

Comunicación Corporativa. Temas V al VIII
Comunicación Corporativa. Temas V al VIIIComunicación Corporativa. Temas V al VIII
Comunicación Corporativa. Temas V al VIIIfernando ramos
 
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....fernando ramos
 
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV. 4º Curso de Publicidad. Po...
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV.  4º Curso de Publicidad. Po...Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV.  4º Curso de Publicidad. Po...
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV. 4º Curso de Publicidad. Po...fernando ramos
 
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...fernando ramos
 
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...fernando ramos
 
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa española
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa españolaEl tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa española
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa españolafernando ramos
 
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...fernando ramos
 
Mística militar y cultura de defensa
Mística militar y cultura de defensaMística militar y cultura de defensa
Mística militar y cultura de defensafernando ramos
 
El acceso a la informacion publica
El acceso a la informacion publicaEl acceso a la informacion publica
El acceso a la informacion publicafernando ramos
 
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollar
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollarInformar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollar
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollarfernando ramos
 
El acceso a la información pública
El acceso a la información públicaEl acceso a la información pública
El acceso a la información públicafernando ramos
 
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”fernando ramos
 
Pluralismo frente a culturalismo
Pluralismo frente a culturalismoPluralismo frente a culturalismo
Pluralismo frente a culturalismofernando ramos
 
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollar
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollarInformar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollar
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollarfernando ramos
 
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismo
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismoComunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismo
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismofernando ramos
 
Legitimidad de la propia cultura de empresa
Legitimidad de la propia cultura de empresaLegitimidad de la propia cultura de empresa
Legitimidad de la propia cultura de empresafernando ramos
 
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONALELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONALfernando ramos
 
La publicidad perniciosa
La publicidad perniciosaLa publicidad perniciosa
La publicidad perniciosafernando ramos
 

Más de fernando ramos (20)

Comunicación Corporativa. Temas V al VIII
Comunicación Corporativa. Temas V al VIIIComunicación Corporativa. Temas V al VIII
Comunicación Corporativa. Temas V al VIII
 
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....
Apuntes Alumnos 4º Imagen Corporativa. Publicidad. Pontevedra. Temas I al IV....
 
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV. 4º Curso de Publicidad. Po...
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV.  4º Curso de Publicidad. Po...Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV.  4º Curso de Publicidad. Po...
Comunicación e Imagen Corporativa. Temas I al IV. 4º Curso de Publicidad. Po...
 
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...
Apuntes Alumnos 4º Publicidad. Imagen Corporativa. Prof. Dr. Fernando Ramos F...
 
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...
Los símbolos del poder y su significación en la sociedad moderna. Arquitectur...
 
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa española
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa españolaEl tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa española
El tratamiento privilegiado del rey y su familia en la prensa española
 
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...
Disfunciones y contradicciones en la mistica, el protocolo y los usos y costu...
 
Mística militar y cultura de defensa
Mística militar y cultura de defensaMística militar y cultura de defensa
Mística militar y cultura de defensa
 
Periodsimo local
Periodsimo localPeriodsimo local
Periodsimo local
 
El acceso a la informacion publica
El acceso a la informacion publicaEl acceso a la informacion publica
El acceso a la informacion publica
 
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollar
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollarInformar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollar
Informar desde el Ayuntamiento, una materia por desarrollar
 
El acceso a la información pública
El acceso a la información públicaEl acceso a la información pública
El acceso a la información pública
 
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”
“Del Ejército de la Victoria al Ejército de la paz”
 
Pluralismo frente a culturalismo
Pluralismo frente a culturalismoPluralismo frente a culturalismo
Pluralismo frente a culturalismo
 
Periodismo Local
Periodismo LocalPeriodismo Local
Periodismo Local
 
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollar
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollarInformar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollar
Informar desde el ayuntamiento. Una tarea por desarrollar
 
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismo
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismoComunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismo
Comunicación y choque de culturas: pluralismo frente a multicutalismo
 
Legitimidad de la propia cultura de empresa
Legitimidad de la propia cultura de empresaLegitimidad de la propia cultura de empresa
Legitimidad de la propia cultura de empresa
 
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONALELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL
ELEMENTOS PARA EL DEBATE SOBRE UNA LETRA PARA EL HIMNO NACIONAL
 
La publicidad perniciosa
La publicidad perniciosaLa publicidad perniciosa
La publicidad perniciosa
 

La percepción de lo correcto. La presencia de la sociedad civil en los actos oficiales

  • 1. 1 La percepción de lo correcto La presencia de la sociedad civil en los actos oficiales Fernando Ramos Doctor en Ciencias de la Información Profesor Titular de Derecho de la Información Universidad de Vigo. No necesariamente hay que invitar a todos a todo. Por lo tanto, hay que adecuar el acto a su verdadero sentido y dimensión, resaltando la representación más acorde con su propia naturaleza, dentro de unos límites razonables, entre otras cosas, al propio espacio. Además de las autoridades tradicionales, las representaciones de la vida civil deben ser adecuadamente tratadas s y ordenadas con criterios de escrupulosa cortesía. El Protocolo, entendido como técnica para ordenar los actos de los hombres, no es una ciencia exacta. Tampoco la vida lo es. Pero, pese a estas verdades, lo cierto es que todo el mundo, en el ámbito respectivo donde de desenvuelva cada uno posee eso que acertadamente se ha dado en llamar “la percepción de lo correcto”. En este sentido, uno de los problemas que suscita mayor controversia entre especialistas y profesionales es el modo de ordenar en las diversas situaciones –oficiales o no- la presencia de los representantes de eso que se ha dado en llamar “la sociedad civil”, eufemismo socorrido, a veces sin el menor sentido, para englobar en el mismo saco a instituciones y personalidades muy diversas, desde corporaciones profesionales a clubes de alpinismo. Algunos profesionales del Protocolo parecen reclamar plantillas o criterios guía para todo, puesto que se sienten desorientados y perdidos cuando han de afrontar situaciones nuevas o no previstas. Pertenecen a este grupo quienes demandan mayor repertorio reglamentista a la hora de determinar dónde colocar a un presidente de Cámara de Comercio o al de una asociación de vecinos. Olvidan que ni el Gobierno, ni las autoridades autonómicas o locales poseen capacidad –fuera de la de establecer, en cada caso, los reglamentos pertinentes de precedencias y ceremonial público y oficial- para regular otro tipo de actos que escapan a su jurisdicción y competen, obviamente, a la esfera de quien los organiza, aunque las autoridades oficiales sean –o no- invitadas. Pero si el exceso de reglamentismo es inadecuado, entendido como tal la obsesión porque todo esté escrito, aunque no sea aplicable –porque nadie puede obligar a imponerlo-, también lo es el abandono aleatorio, para ir resolviendo los problemas sobre la marcha, con el criterio que a cada uno se le active en cada caso, pero sin ninguna previsión anterior. Pero, entonces, ¿cómo regulamos protocolariamente a la sociedad civil? ¿Con qué plantilla o parámetros la ordenamos y en qué casos? Al famoso y superado Real Decreto de Precedencias del Estado se le achaca, con razón, sin duda, que se ha olvidado ordenar también la presencia de las representaciones
  • 2. 2 de la repetida sociedad civil que, en condición de tales, acuden a los actos oficiales. Sin duda, pese a las fallas del referido Decreto, su ámbito de aplicación está correctamente formulado. No es allí, por tanto, donde debemos establecer los criterios guía para ordenar a esas otras representaciones en los actos de carácter oficial, dejando que ellas mismas se ordenen internamente, salvo en el caso que de ser necesario se requiera. En 1948, la Diputación de Lugo publicó, bajo el título de “Protocolo oficial”, breve y completo, un folleto, donde se aborda –dentro del contexto de la época- la cuestión que hoy debatimos aquí. En esta curiosa recopilación se observan dos apuntes interesantes sobre los que vamos a incidir, por ser oportuno estribo para la discusión. En el ordenamiento propuesta están autoridades y representaciones, con las características del momento, dividas en dos bloques, según se tratase de las primeras autoridades (alcalde, gobernador civil, gobernador militar, alcalde, etc.) y el resto de todo aquel que representase algo en la ciudad. En esta curiosa propuesta se reconocen honores o precedencias a las más diversas instituciones, mezclando las de carácter público con colegios profesionales, directores de instituto, ingeniero del puerto, delegados de empresas de carácter público, instituciones religiosas, cofradías, casinos y todo lo demás, hasta los directores de los periódicos y las asociaciones de la prensa, jueces, asociaciones deportivas y todo cuanto representase algo, fuera lo que fuere. Esta fórmula ecléctica, a la que agarran algunos responsables de protocolo en nuestros días, puede servir para salir del paso, pero es necesario ir más allá. Proponemos un debate para sereno entre los profesionales para fijar, con criterios valorativos ponderados, cómo ordenamos lo que no está previsto en las normas jurídicas que ordenan las precedencias oficiales. Primero: La regla de la especialización. Es decir, la confección de una serie de listas de autoridades y representaciones, según la naturaleza del acto a ordenar. Cada lista debe expurgarse previamente antes de ser cruzada con otra. Por ejemplo: en la inauguración de la “Casa de las palabras”, es decir de una institución cultural, no cabe duda de que debe cuidarse que todas las asociaciones y entidades de este ámbito estén representadas. No necesariamente hay que invitar a todos a todo. Por lo tanto, hay que adecuar el acto a su verdadero sentido y dimensión, resaltando la representación más acorde con su propia naturaleza, dentro de unos límites razonables, entre otras cosas, al propio espacio. Segundo: La regla de la ponderación Aplicando criterios de evaluación de la valencia de cada entidad o representante en función de la propia importancia objetiva y representatividad de la institución o la persona que vamos a colocar en una lista de protocolo. Por ejemplo, en una ciudad marítima, la autoridad portuaria es un personaje relevante; pero también lo puede ser en un pequeño pueblo castellano el director del hospital comarcal. En un determinado contexto, una personalidad o representación puede poseer un carácter del que carezca en otro. Tercero: La regla del equilibrio
  • 3. 3 Además de las autoridades tradicionales, las representaciones de la vida civil deben ser adecuadamente tratadas s y ordenadas con criterios de escrupulosa cortesía. En todo caso, el presidente de la Cooperativa de Armadores del puerto de Vigo es mucho más importante que el comandante de Marina en un acto relacionado con la actividad económica de la ciudad. Salta a la vista o, incluso, que el capitán marítimo del puerto –autoridad oficial ahora en este ámbito- es un representante administrativo a estos efectos. Estos dos últimos son meras autoridades delegadas del Capitán General del Departamento o del Ministerio de Transportes, respectivamente, pero el presidente de los armadores es un cargo electivo de una institución que aglutina a todas las empresas pesqueras del primer puerto de Europa en esta especialidad. Tiene una doble valencia, la que la da el carácter de se elegido y la que objetivamente posee la entidad que representa. Cuarto: La regla de la vinculación Es de sentido común que, si el presidente de la Cámara de Comercio o una determinada empresa patrocinan una actividad de una entidad pública, el representante de aquella corporación o de la empresa en cuestión, han de ser colocados, en su caso, en lugar preferente dentro del acto oficial de que se trate. Ocurre con frecuencia, por ejemplo, cuando una entidad privada o mercantil sufraga los gastos de recuperación de un monumento o de cualquier otra pieza del patrimonio nacional, regional o local. Quinto: La regla de la tradición Cierto que el Reino de España es un estado aconfesional y que en el Protocolo oficial no se contempla ni prevé dónde colocar a las autoridades eclesiásticas. Pero, ¿como puede ignorar el Ayuntamiento de Compostela al arzobispo de la ciudad, que fue, además, el señor de la urbe? ¿O cómo puede ignorar la Universidad de Santiago, que fue fundada, precisamente, por un antepasado del actual arzobispo? Por lo tanto, a falta de norma reglada, la tradición acude en nuestro socorro, con el refuerzo de que en el propio ámbito de lo jurídico, costumbres y tradiciones son fuentes de Derecho. Estas cinco reglas, o criterios de reflexión, no pretenden ser un prontuario, sino una simple guía de razonamiento para aplicar, según el caso, a cada situación concreta. Ni quieren ser exhaustivas ni se agotan en su propia exposición. Son un mero apunte para el debate permanente. Lo dicho, el Protocolo no es una ciencia exacta. Pero hemos de hacerla lo más aproximada posible al ideal de lo correcto en cada caso.