Este documento es una carta que describe la experiencia de una familia española que emigró a Cataluña en la década de 1950 para escapar de la pobreza. La familia enfrentó muchas dificultades, como vivir en una habitación pequeña y trabajar largas jornadas con salarios bajos. Con el tiempo y mucho esfuerzo, pudieron construir su propia casa modesta. El autor también trabajó temporalmente en Cataluña cuando era joven y recuerda con cariño el trato de sus compañeros y jefes a pesar de no
1. REFLEXIONES JUNTO A LA FUENTE TAZA
…de sentimientos y afectos
“Queridos padres, hermanos y demás familia. Me alegraré que a la
llegada de estas cuatro letras os encontréis bien, nosotros quedamos
bien G. a D.
Hace una semana que llegamos y mi cuñada ya nos había preparado el
alojamiento; una habitación, con derecho a cocina, que compartimos
con la propietaria -una Sra. mayor, viuda, de Murcia y su hijo, también
bastante mayor-que nos ayuda mucho y nos llevamos muy bien.
Si, Dios quiere, la semana que entra empiezo a trabajar, haciendo faena
en dos casas y, si todo va bien, en menos de un mes entraré en una
fábrica pequeña que hace tapones de corcho. Mi marido ya lleva dos
días trabajando como peón de albañil, el jornal es muy pequeño y la
jornada muy larga: doce horas al día y los sábados seis….”
Con el paso del tiempo y, muchos sacrificios, adquirieron un pequeño
terreno, que adecuaron “a pico y pala” los domingos y construyeron, en
“infinitas fases”, una casa muy humilde a la que se trasladaron con las
paredes sin enlucir y cortinas en los huecos de las puertas; urgía ocuparla
pues había nacido la segunda de sus hijas y la habitación, con derecho a
cocina, no daba para más. Y nació una tercera hija y seis nietos y un
biznieto
Esta es la transcripción, más o menos literal, de una de los cientos de
cartas que los poceños recibíamos de nuestros familiares, inmigrantes en
2. Cataluña, desde mediados de los años cincuenta; familias que dejaron
una situación penosa, en Andalucía, para iniciar una nueva vida plagada
de penalidades, pero sin una queja, sin un reproche, más bien
agradecidos a la Tierra que les acoge.
En uno de mis artículos, recuerdo que les contaba como en los veranos,
nada más finalizar el curso, marchaba a la Costa Brava a trabajar y lo hice
como peón de albañil, repartidor de cerveza y de butano, sereno en un
hotel y al final, en el 69, en la fábrica de Coca Cola, en el
Besós(Barcelona). Hace unos años, cuando tramitaba mi prejubilación,
como Maestro , solicité a la Seguridad Social un INFORME DE VIDA
LABORAL, y me sorprendí al comprobar que, a excepción de Coca-Cola, el
resto de mis patronos se “olvidaron de darme de alta en la Seguridad
Social”; agua pasada no mueve molino y quiero quedarme con el trato
cordial recibido, tanto de mis compañeros de trabajo como de mis jefes.
Ni un sólo año he dejado de visitar Cataluña, en compañía de mi esposa e
hijos, recalando siempre en Barcelona pero, sobre todo en el Baix
Empordá, en Palafrugell, Patria Chica del gran Josep Pla, patriarca de las
letras catalanas, al que tuve el honor de conocer y mantener una breve
conversación en su Mas de Llofriu, - que apenas dista unos centenares de
metros de la casa de de mi hermana, donde me alojaba-. Cuando paseo
por las calles de Palafrugell, experimento la sensación de estar en casa;
cada rincón me resulta familiar y a cada paso saludo a alguien conocido:
amigos de Pozo Alcón o amigos catalanes que, aún conservo de mis años
de inmigrante temporero o de mi época de Alcalde. Y las playas: Calella
( Canadell, Port Bo , Port Pelegrí… )LLafranch, Tamariu y el Faro de San
Sebastián, impresionante balcón que te asoma a un Mediterráneo casi
siempre “embravecido”. Y, al llegar a Barcelona, nada más apearme del
coche ,en la Meridiana, ( después de hacer 750 Kms, casi de un tirón) cojo
el Metro en Sagrera y me bajo en Plaza de Cataluña; un paseo por las
Ramblas, esa Babel maravillosa que cambia a cada paso; multicolor,
multilingüe y multiracial y, cómo no, una parada en la Boqueria,-sin duda,
uno de los mercados más peculiares de Europa- Universo de colores,
olores y, si tu cuerpo te lo permite, de sabores.
3. Nueve de Noviembre de, 2014 …” consulta para saber si el pueblo de
Cataluña quiere independizarse de resto de España”. Independizarse,
¿ de qué?¿de quiénes?.¿ Tal vez de un país que siente un profundo
respeto por los catalanes y, en la mayoría de los casos, una gran
admiración? ,¿quizá de aquellos que, en su día, hicimos de “fogoneros”
de la locomotora de la economía española?...Sinceramente, me cuesta
creer que, en tan poco tiempo, se hayan olvidado tantos sentimientos y
afectos y que, sólo prevalezcan CRITERIOS ECONÓMICOS, para proponer
una separación tan injusta como inoportuna y tan alejada del sentir de
la mayoría social – quiero creer- de Cataluña y el resto de España.
Tenemos unos políticos que no nos merecemos y que utilizan sus escaños
para tapar sus ineptitudes y “trapicheos”;los unos, los de Madrid,
vaticinan un Apocalipsis económico para una Cataluña, supuestamente
separada de España y, los otros, los de Barcelona, prometen los efectos
de de una “benefactora Tramontana” que, una vez conseguida la
independencia, barrerá Catalonia y, como por ensalmo , todos los
problemas,-económicos, claro- desaparecerán. Nos mienten todos y, sus
discursos y actitudes, no hacen sino ensanchar la zanja que nos separa y
que ellos mismos cavaron.
En estos días, en los que la FELICIDAD se convierte en un asunto de
obligado cumplimiento, os invito a que realicéis un balance del, 2013,
para perseverar en todo aquello que nos ha unido y corregir actitudes
que nos han separado o distanciado de nuestros círculos más queridos; la
familia y las amistades leales-próximas o lejanas-. Para 2014, un día sí y,
otro también, debemos permanecer atentos y si descubrimos que hay
situaciones que reclaman nuestra SOLIDARIDAD…¿?.
¡¡¡FELIZ AÑO NUEVO!!!
Pozo Alcón, 1 de Enero, de 2014
Francisco Quiñones Martínez