2. Política de Argentina El Poder Ejecutivo argentino está compuesto por el Presidente de la Nación y el Vice-presidente electos, por el Jefe de Gabinete de Ministros y por los demás Ministros y Secretarios.El Presidente es el jefe supremo de la nación, jefe de gobierno y responsable político por la administración del país. A él le compete también ejercer la Jefatura Suprema de las Fuerzas Armadas, nombrar embajadores e indicar los ministros de la Suprema Corte, ad referéndum del Senado Federal. El Vice-presidente reemplaza al Presidente en casos de impedimiento y ejerce la Presidencia del Senado. El Jefe de Gabinete es nombrado por el Presidente para ejercer la coordinación de los Ministerios, la administración, además de representar al Poder Ejecutivo ante el Congreso. El Presidente también nombra los ocho Ministros y los Secretarios de Estado responsables por las 16 Secretarías dependientes directamente de la Presidencia, entre las cuales están la de la Pequeña y Mediana Empresa, la de Recursos Naturales y Desarrollo Sustentable y la de Turismo. Estos últimos gozan, en la práctica, del status de Ministro.
3. Historia Argentina está ubicada en el extremo sur de Sud América. Es el octavo país del mundo en cuanto a extensión después de Rusia, Canada, China, EEUU, Brasil, Australia e India. Su superficie continental de 2.791.810 Km2 equivale al 33% de la superficie de Europa. Sus extremos norte y sur están separados por 3460 km, distancia comparable a la que existe entre el extremo norte de Europa (Cabo Norte en Noruega) y Sicilia en Italia. Su nombre tiene como origen el latín "argentum", que significa plata. Los conquistadores españoles llamaron a esta región del mundo de esta forma ya que creian que aquí se encontraban grandes cantidades de ese mineral. Argentina limita al Oeste con Chile, al Norte con Bolivia y Paraguay, al Este con Uruguay, Brasil y el océano Atlántico, mientras que al sur es el canal de Beagle el que marca sus límites.
4. Cultura en argentina Durante muchos años se impuso en Argentina, como en el resto del mundo, una concepción elitista de lo cultural que circunscribía sus producciones al ámbito exclusivo de las bellas artes.En el siglo XX, con el aporte sustancial de la antropología, la etnografía y el folklore, el campo de lo cultural se ensancha y comienzan a ser objeto de estudio y reflexión las costumbres, tradiciones, artesanías, y hasta el modo peculiar de prácticas, hábitos y usos cotidianos de un grupo social.Tras el tremendo impacto producido por los medios, al que se suma actualmente el de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, las condiciones de creación y circulación de bienes culturales ha cambiado notablemente. Defendidos o denostados, los nuevos productos culturales ya forman parte incuestionable de un horizonte en el que confluyen el arte y la ciencia, la tradición y la innovación, el individuo y las instituciones, la materia y el símbolo.