Asignatura: Historia y Modelos del Periodismo. Universidad de Málaga (UMA). Curso 2017/2018

1. on José Alarcón
Luján (alcalde
entre 1876-1880)
llevó al Ayunta-
miento la idea de
la construcción de la calle, tras
pedir consejo a la ciudadanía. Las
razones que se objetaron para su
construcción fueron: cambiar el
“antiestético” tejido urbano desde
la plaza de la Constitución hasta
sus inmediaciones (las calle Mar-
tínez, Nueva, Granada, Sancha
de Lara, entre otros).
La idea de la construcción
se remonta en 1878. El Ayunta-
miento pretendió obtener la auto-
rización para ampliar la anchura
de la calle de 10 a 20 metros. El
1 de mayo de 1880, el Ayunta-
miento hizo público las bases de
una sociedad anónima para pro-
mover la construcción de la calle.
Se fijó un precio estimado de un
millón de pesetas, con flexibilidad
en función de las necesidades
constructivas.
El capital se distribuyó en
cuarenta acciones de 25.000 pese-
tas cada una. Los accionistas del
proyecto fueron los hijos de
Manuel Heredia, los hijos de
Manuel Larios, Antonio Campos
Garín, Jorge Loring y Simón Cas-
tel.
De los 107 casas previstas
para su demolición, 76 fueron
adquiridas por la familia Larios
en agosto de 1886. Estas compras
fueron para ayudar al Consistorio
ya que tenía dificultades financie-
ras para adquirir todas. Posterior-
mente, durante el gobierno de
Liborio García como alcalde, la
familia Larios se ofreció para cola-
borar en la construcción de la
calle durante la Comisión especial
celebrada el 20 de noviembre. El
11 de mayo de 1887 se ofició el
acuerdo entre el Consistorio y la
familia Larios en la que se estipu-
ló que la segunda se responsabi-
lizó de las edificaciones de la calle.
El encargado de la construcción
fue el arquitecto Eduardo Stra-
chan que utilizó técnicas avanza-
das de la época.
Las obras comenzaron en
1887 y terminaron en verano de
1891, inaugurándose el 27 agosto
del mismo año. Se construyó en
la entrada de la calle un arco de
inspiración neomudéjar, con dos
torres a ambos lados y en el centro
se lució el escudo de la ciudad.
Además, se levantó una altar para
que el obispo de la ciudad, Mar-
celo Spínola Maestre, celebrase
una misa. Sebastián Souvirón
Torres fue alcalde cuando se inau-
guró la calle. La familia Larios no
estuvo presente en la inaugura-
ción porque en ese momento vivía
en Biarritz (Francia). La ausencia
de la familia fue consecuencia de
la revolución de 'La Gloriosa', en
1868, cuando sus trabajadores se
sublevaron contra sus patronos y
sitiaron el palacio de los Larios,
obligando a la familia a huir por
los tejados y a exiliarse a Gibraltar,
a Londres y a París. La familia
agradeció desde allí la iniciativa
del Ayuntamiento de declarar
como hijo predilecto a Manuel
Domingo Larios.
Prensecia en los medios
La inauguración de la
calle Marqués de Larios apareció
en los principales periódicos
nacionales y de la provincia de
Málaga. Por ejemplo, El Heraldo
de Madrid dedicó una sección a
este acontecimiento, denominada
“Las fiestas de Málaga”. Dice así:
“Entrega de la calle de Larios. La
entrega de calle de Larios al Ayun-
tamiento fue una ceremonia
solemne. Asistieron el obispo,
autoridades, las corporaciones y
la prensa. Terminada la ceremo-
nia, el marqués de Larios obse-
quió a los invitados con un lunch,
en el que se dieron vivas al Rey, a
la Reina y al marqués de Larios.”.
Este diario informó que durante
la inauguración hubo una batalla
de flores a las 6 de la tarde que
terminó en una revuelta de un
bando anarquista en la que hubo
varios heridos y ciudadanos con
contusiones. A pesar del inciden-
te, la batalla de flores tuvo una
duración media de una hora, has-
ta que se produjo la revuelta. Ter-
minada la inauguración, en la
calle desfilaron varias carrozas
adornadas de flores.
El Imparcial añade a la
información suministrada por El
Heraldo de Madrid que el acto
tuvo lugar a las 14 horas y que
asistió el capitán general de Gra-
nada, asiduo en la ciudad. El obis-
po ofició una ceremonia donde
hubo un altar en mitad de la vía
y, al finalizar el acto, a los asisten-
tes se les ofreció un tentempié en
la planta baja de la casa número
10. Este diario remarca cuales
fueron las carrozas más importan-
tes que desfilaron in el acto de la
celebración : “La del Liceo, ver-
dadera joya de elegancia, buen
gusto y riqueza, estilo Luis XV y
tirada por cuatro hermosos caba-
llos a lo Dumont; la del Centro
Militar, que representaba el Alcá-
zar de Segovia y era arrastrada por
cuatro bueyes; la del Comercio y
la del Círculo Mercantil, verdade-
ras preciosidades de capricho, y
el carruaje del señor Torres sobre
el cual el carruaje se ostentaba
una bonita reproducción de la
Torre Eiffel”. Los cuatro carruajes
compitieron para llevarse un
estandarte pintado por el artista
Martínez de la Vega. El premio
representaba a una mujer reclina-
da sobre flores. Además, otro
estandarte pintado por Moreno
Carbonero y que representaba a
otra mujer con un abanico y un
lazo, otro por Ocón con una bellí-
D
Los obreros de la calle Larios días antes de la inauguración
José Alarcón Luján Manuel Domingo Larios, II marqués
cho años des-
pués de la inau-
guración de
esta vía emblemática,
se erigió en Málaga otra
construcción, en este
caso una estatua, que
honra de nuevo a un
miembro de la casa
Larios: Manuel Domingo
Larios. El estreno se
efectuó el 1 de enero de
1899.
El periódico madrileño La
Época se hizo eco de este homenaje,
informándolo el 18 de diciembre del
anterior año. En sus páginas, se pue-
de leer en un tono literario lo significa-
tivo que fue este acon-
tecimiento. Explica que
la estatua hará que la
figura del marqués de
Larios siempre será
venerada por los mala-
gueños. “Jamás podrá
extinguirse los recuer-
dos de los beneficios
sembrados por el mar-
qués en la tierra mala-
gueña”, expresó este
diario.
La estatua fue realizada en
piedra y bronce por el escultor Maria-
no Benlliure, gran exponente del rea-
lismo del s.XIX.
Otro reconocimiento a la familia Larios
O
FACULTAD MÁLAGA
El acto tuvo lugar a las 14 horas. El obispo ofreció una
ceremonia donde hubo un altar en mitad de la vía y, al
finalizar el acto, a los asistentes se les ofreció un
tentempié en la planta baja de la casa nº10
La calle que marcó un hito en la
historia de la Málaga del Siglo XIX
La inauguración de la vía fue cubierta por los principales diarios de la provincia costasoleña y de la capital
Estatua del II marqués
Luque Daniel, Ortega Inma, Vecchione Ilaria
1Historia y Modelos del Periodismo14 DE MAYO DE 2018

2. sima “marina”, y otro realizado
por Muñoz Degrain que mostraba
una valenciana con un cesto de
flores. Además, cada uno de los
participantes recibía un álbum
regalado por la Academia de
Bellas Artes y un premio de 230
pesetas. Los premiados fueron los
siguientes: el primer premio reca-
yó in la carroza del Comercio; el
segundo in el Centro Militar y el
tercero a la del Liceo. El Señor
Marqués de Larios obsequió con
2.500 pesetas destinadas a los más
desfavorecidos de la provincia,
5.000 al Ayuntamiento y 2.500 al
Obispo.
La edición de El Liberal
del 28 de agosto solo añade, ade-
más de la información ya sumi-
nistrada por sus homólogos
madrileños, que se repartieron
6.000 panes a los pobres. No exis-
te un número oficial de asistentes
a la ceremonia pero se calcula que
hubo en torno a 40.000 personas,
según informó La Corresponden-
cia de España. Este diario tam-
bién amplía la información sobre
la revuelta ocurrida durante la
inauguración. Por la noche, la
policía arrestó a los principales
promotores de la revuelta pero
siguió buscando a otros partici-
pantes anarquistas.
El diario La Época infor-
mó del acto de una manera más
literaria que el resto de periódicos
de la capital. Lo que aparece a
continuación es un fragmento de
la noticia: “La batalla de flores,
según los telegramas de nuestro
servicio y los que publican otros
periódicos, ha sido superior a
cuanto pudo crear la más poética
fantasía. La nueva y espaciosa
calle, teatro de este recreo, estaba
adornada con profusión de ban-
deras y gallardetes; de los balco-
nes, poblados de bellezas, pendían
infinitas guirnaldas; los edificios
estaban cubiertos de plantas olo-
rosas. Con un gentío, que casi
imposibilitaba el tránsito, comen-
zó la fiesta, entrando in fila los
carruajes, que marchaban a paso
muy lento, rivalizando in esplen-
didez y elegancia”.
El periódico malagueño,
la Unión Mercantil, fue el único
medio que informó de la inaugu-
ración del famoso pasaje de la pro-
vincia de la Costa del Sol. Su
ejemplar del día 28 de agosto abre
con un titular a 5 columnas: “La
calle del Marqués de Larios”. La
información sobre la inauguración
aparece en más de la mitad de la
página, dándole al acto un trata-
miento de preferencia. La Unión
Mercantil señala que desde muy
temprano comenzó a llegar gente
interesada en ver el acto; y que la
decoración de los balcones y
fachadas comenzó a las 11horas.
Las flores que fueron colocadas
en primer lugar y que, por tanto,
llegaron antes a sus destinatarios,
fueron las del conocido floricultor
el señor Asencio, que prestaba sus
servicios en el jardín del Señor
Don José Cánovas del Castillo. La
información cuenta con un punto
de vista interpretativo en la que
el autor (no identificado) da su
opinión sobre la importancia de
la calle: “Bajo el punto de vista del
ornato y de la higiene ha ganado
tanto Málaga, con esta gran vía,
hoy su principal arteria, que
encontramos muy justos los elo-
gios que ayer damos a propios y
extraños”. Dicen los antecedentes
que el proyecto debió hacerse
muchos años atrás con la inicia-
tiva de “Don Martín”, el padre de
los actuales Señores Larios y que
se podría haber llevado a cabo
antes de su muerte y del Sexenio
Revolucionario.
El diario publica a conti-
nuación una fotografía del mar-
qués de Larios y se dirige a él y al
arquitecto Eduardo Strachan para
agradecerles la construcción de
la calle por su “constante propó-
sito para que el proyecto no fra-
casara, dados los obstáculos y
entorpecimientos con los que
luchó durante años”. La Unión
Mercantil es muy exacta en sus
informaciones y señala que las
14:15 fue la hora en la que el
obispo bendijo la calle, acompa-
ñado “por el señor Dean y los
canónigos Don Manuel Ordóñez
Marra y Don Gregorio Naranjo”.
A las 3:30 horas quedaron firma-
das todas las actas y comenzó el
famoso lunch que destacan todos
los medios. El periódico también
publicó una extensísima lista de
invitados a la ceremonia, en la que
destacan: los Señores Gobernador
civil y Militar, Sánchez de Toledo
y Bouza; Comandante de Marina
Sr. Ory; Secretario del gobierno
civil, Don Carlos Barrero; Presi-
dente de la Diputación Provincial,
Antonio María Pérez; juez muni-
cipal de la Alameda, Sr. Miró o el
alcalde de Málaga, don Sebastián
Souvirón, entre otros.
Se libró un desfile de
coches particulares y de alquiler
engalanados con flores, pero solo
se presentaron tres: el de el sub-
director de los ferrocarriles anda-
luces, Mr. Paul; el de los señores
Gross y el de “una distinguida
familia de la capital”. Sin embar-
go, ningún carruaje se presentó
engalanado como el caso exigía y
el premio de 250 pesetas destina-
do al ganador fue declarado
desierto. De la batalla de flores
destacaremos dos cosas que no
han sido nombradas por los perió-
dicos madrileños.
Primero, La Unión Mer-
cantil afirma que no hubo tiro que
anunciara que comenzaba la bata-
lla de flores y que la participación
fue tan alta que muchas familias
“tuvieron que echar la capota a
sus carruajes, porque peligraba la
salud individual”. Segundo, la
famosa revuelta que recogen con
gran atención los medios de la
capital tiene un tratamiento
superficial en este periódico. El
tono es agresivo e interpretativo:
“Consignaremos que la fuerza
pública estuvo prudente y el pue-
blo aprovechó esta ocasión para
vengarse de la burguesía, apabu-
llando lícitamente sombreros
mesocráticos y reventando algu-
nas narices burguesas”. También
señala que advierten mucha des-
consideración en la manera de
lanzar los ramos , dándose casos
de verdadero encarnizamiento,
convirtiéndose la broma en agre-
sión; y termina diciendo que “gra-
cias a Dios, no concluyó tan mal
como creíamos”.
La cobertura dada por los dife-
rentes diarios evidencia lo impor-
tante que fue la construcción de
esta calle para Málaga y España.
La Unión Mercantil, 28 de agosto de 1891
Arco de la entrada de la nueva calle Obispo Marcelo Spínola Maestre
14 DE MAYO DE 2018 2
La calle Larios dieciséis años después de su inauguración
Eduardo Strachan Viana-Cárdenas Sebastián Souvirón de Torres