Este documento anima constantemente a no rendirse ante las dificultades de la vida. En más de 20 ocasiones repite la frase "¡No os rindáis!". Alienta a recordar los buenos momentos del pasado y a enfocarse en el presente. Finalmente, celebra la belleza natural del entorno montañoso y anima a disfrutarlo.

1. La Montaña, 16 de marzo de 2014.
Amigo fiel, cada día tengo un pensamiento
para esa persona que estuvo a tu lado taaan
hermosa y linda, te preparó con perfume y pétalos
de rosa, que sea feliz y que siempre el Moncayo la
envuelva de esa pureza, de esos perfumes y esos
aromas ¡Feliz Domingo, Amigo fiel!
Mis queridas semillas,
Una palabra, retenerla, mil veces si es necesario al día ¡No os
rindáis! ¡Jamás!
¡No os rindáis!, si tenéis un momento difícil, doloroso o
problemático, pensar que solo es un momento, únicamente es un momento.
¡No os rindáis! Recordar la alegría de recibir a un amigo, de
preparar una fiesta para cuando viene vuestra familia, recordar ese día
tan maravilloso cuando habéis ido a la playa y el agua estaba taaan
calentita que no queríais salir.
¡No os rindáis! Que la gente está llorando porque está la crisis.
¡No os rindáis! La crisis siempre ha sido benéfica para la
humanidad, es una limpieza, es un cambio, es una lección para aquellos
que tenían y no lo sabían ¡aprenderán! Y los que no tienen y han perdido
todo, tendrán que recordar qué hicieron en otras vidas, cuál fue su
comportamiento, siempre el por qué de las cosas.
¡No os rindáis! Luchar para conseguir esas metas que tanta
ilusión os hace, el sueño siempre se realiza si vosotros queréis ¡No os
rindáis! Si estáis lejos de vuestra casa y tenéis que trabajar y no tenéis a
nadie.
¡No os rindáis! Si os habéis enfadado o si venís de separaros, el
tiempo siempre pone tooodo en su sitio, siempre, no hay mal que cien años
dure dice el proverbio.

2. ¡No os rindáis! Si tenéis que subir una cuesta, preparar bien los
zapatos y subirla con alegría, si tenéis que afrontar las responsabilidades
que os tocan.
¡No os rindáis! Hacer lo que podáis y pedir ayuda, nadie se puede
valer por sí mismo, necesitamos siempre ayuda y una mano amiga.
¡No os rindáis! Si os cuesta trabajo reconocer vuestra
prepotencia, vuestro orgullo, a veces pensamos que podemos con todo que
somos autosuficientes, mejor, pero si sois sinceros, comprenderéis que se
necesita esa mano amiga.
¡No os rindáis! Ni tampoco bajéis los brazos cuando veáis a
alguien que necesita un tratamiento, darlo.
¡No os rindáis! Cuando se niegan a escuchar que estáis hablando
de una Enseñanza extraordinaria.
¡No os rindáis! Su alma os ha llamado y ha pedido de abrir esa
Puerta a otras dimensiones.
Estamos en un lugar privilegiado, este trozo de tierra es virgen,
estuvo cubierto por millones de años por el mar, donde ballenas y delfines
se paseaban, cuando se retiró el agua después de muchísimos siglos, la
tierra se despertó y se abrieron volcanes, estamos en este lugar de la
Montaña donde cada metro de tierra ha estallado un volcán y vibra esa
vida que nace a cada instante, es una maravilla poder meditar en este
lugar.
Mis estrellas, vosotros también podréis hacerlo, el cielo y este
rincón sólo hacen Uno, han venido
los druidas, han venido los celtas,
están esos seres maravillosos como
centinelas guardando y
protegiendo que siempre esté en su
pureza este rincón para las almas
que sois vosotros mis semillas que
vendréis aquí y podréis
experimentar esa paz esa serenidad
que lleva vuestra mente y alegra vuestro corazón, por estos momentos ¡No
os rindáis!

3. ¡No os rindáis! Si es duro levantar piedras, mover árboles.
¡No os rindáis! Cuando vengan esos seres tan maravillosos
contemplarán las obras que habéis hecho y lo disfrutarán.
¡No os rindáis! El cuerpo siempre se quejará de dolor, es humano,
pero vuestra alma está alegre y contenta.
¡No os rindáis! Y recordar los buenos momentos, el momento de
compartir, el momento de dar y recibir.
¡Qué felicidad de saberse unido al Universo, por esos hilos
invisibles que nos conectar con
el Padre, con el Yo Superior!
¡Qué maravilla contemplar este
rincón! ¡Qué delicia escuchar el
silencio que acaricia esa brisa de
aire que viene a nuestras
mejillas! Son los ángeles que nos
saludan que nos dan fuerza, que
nos dicen “No estáis solos,
estamos juntos” ¡Qué alegría de
sentir la tierra, sus olores de los árboles, del boj, los avellanos, los
manzanos, los robles!
Es el paraíso para estos momentos que pasamos, insisto ¡No os
rindáis! Es un momento único y hay que vivirlo intensamente.
Disfrutarlo y compartirlo con los vuestros, salir al campo, a la montaña, al
mar y compartir.
¡Feliz Domingo!
Con todo mi amor,
La Jardinera