2. Los condensadores son dispositivos capaces de
almacenar una determinada cantidad de electricidad.
Se componen de dos superficies conductoras, llamadas
armaduras, puestas frente a frente y aisladas entre sí
por un material aislante que es llamado dieléctrico. La
capacidad de almacenar electricidad es proporcional
directamente a la superficie enfrentada; inversamente
proporcional a la distancia que separa las armaduras y
depende del dieléctrico existente entre ambas.
3. Aquí tenemos un ejemplo del funcionamiento de un condensador frente
a una corriente alterna. Vemos un generador de corriente alterna que
está conectado a un condensador. Debido a la tensión alterna U, el
condensador resulta cargado, descargado, vuelto a cargar con polaridad
opuesta; una vez más descargado, y así sucesivamente. Con ello circula
una corriente cuya variación es senoidal. Pero, la corriente no circula a
través del condensador, es decir a través de su dieléctrico que es
aislante como hemos dicho, la corriente sólo circula de los bornes del
generador a las armaduras del condensador y viceversa, es decir, aunque
el circuito realmente no está cerrado el efecto es como si lo estuviera; y
siendo éste el efecto, se suele decir que por el circuito circula una
corriente eléctrica.
La intensidad de la corriente o, mejor dicho, el valor eficaz de la corriente alterna depende,
aparte de la tensión del generador, de la capacidad del condensador y de la frecuencia de la
propia corriente alterna. Cuanto mayor es la capacidad y más elevada la frecuencia, con tanta
más violencia se desarrolla el proceso continuo de carga y descarga y, en consecuencia, tanto
más intensa será la corriente. A pequeñas capacidades y frecuencias circulará sólo una débil
corriente.
En lo que respecta a la corriente continua el comportamiento del condensador es diferente.
Aquí sí hay una interpretación práctica de la corriente.
4. Los condensadores tienen muchas aplicaciones. Como su capacidad depende de la sección
entre las placas, se pueden construir condensadores de capacidad variable, como los
utilizados en los mandos de sintonización de un aparato de radio tradicional. En estos
aparatos, al girar el mando, se varía la superficie efectiva entre placas, con lo que se ajusta
su capacidad y, en consecuencia, se sintoniza una frecuencia de una emisora. Del mismo
modo, el teclado de un ordenador actúa sobre un condensador variable, lo que nos permite
actuar sobre la pantalla del mismo.
Los condensadores también son particularmente útiles para dirigir el movimiento de haces de
partículas cargadas. Si se trata de condensadores planos producen un campo eléctrico
uniforme, con el que se pueden desviar las partículas al aplicarles una fuerza eléctrica
proporcional a dicho campo. También se puede conectar el condensador a una corriente
alterna u oscilante, que hace que sus dos placas se carguen y descarguen continuamente
alternándose en cada una la carga positiva y la negativa. Entonces, el campo eléctrico entre
ellas también oscila y cambia de orientación con la misma frecuencia del alternador.
Nos referimos ahora a dos, entre las muchas aplicaciones tecnológicas del proceso de descarga
del condensador. Una de ellas es el desfibrilador, un aparado que se usa para reanimar
enfermos en situaciones de emergencia. El desfibrilador usa un condensador que puede
almacenar 360J y entregar esta energía al paciente en 2ms. Otro ejemplo de utilidad de la
descarga del condensador es el flash de las cámaras fotográficas, que posee un condensador
que almacena la energía necesaria para proporcionar un destello súbito de luz.
5. A diferencia del condensador, la bobina por su forma (espiras de alambre arrollados) almacena
energía en forma de campo magnético. Todo cable por el que circula una corriente tiene a su
alrededor un campo magnético generado por la mencionada corriente, siendo el sentido de
flujo del campo magnético el que establece la ley de la mano derecha. Al estar la bobina
hecha de espiras de cable, el campo magnético circula por el centro de la bobina y cierra su
camino por su parte exterior.
Una característica de las bobinas es que se oponen a los cambios bruscos de la corriente que
circula por ellas. Esto significa que a la hora de modificar la corriente que circula por ellas
(ejemplo: ser conectada y desconectada a una fuente de poder), esta tratará de mantener su
condición anterior.
Las bobinas se miden en Henrios (H.), pudiendo encontrarse bobinas que se miden en
MiliHenrios (mH). El valor que tiene una bobina depende de:
• El número de espiras que tenga la bobina (a más vueltas mayor inductancia, o sea mayor
valor en Henrios).
• El diámetro de las espiras (a mayor diámetro, mayor inductancia, o sea mayor valor en
Henrios).
• La longitud del cable de que está hecha la bobina.
• El tipo de material de que esta hecho el núcleo si es que lo tiene.
6. Una de la aplicaciones más comunes de las bobinas y que forma parte de nuestra vida diaria es
la bobina que se encuentra en nuestros autos y forma parte del sistema de ignición.
En los sistemas de iluminación con tubos fluorescentes existe un elemento adicional que
acompaña al tubo y que comúnmente se llama balastro
En las fuentes de alimentación también se usan bobinas para filtrar componentes de corriente
alterna y solo obtener corriente continua en la salida
La operación de las bobinas se basa en un principio de la teoría electromagnética, según el
cual, cuando circula una corriente a través de un alambre, este produce a su alrededor un
campo magnético.
Las líneas de fuerza que representan el campo magnético son perpendiculares a la dirección
del flujo de la corriente. Si doblamos en algún punto el alambre para formar un bucle o
espira, el campo magnético en esa parte del alambre se concentra dentro de la espira puesto
que todas las líneas de fuerza apuntan en la misma dirección y convergen hacia el centro.
Por lo tanto, si continuamos agregando espiras, formando una bobina propiamente dicha, los
campos magnéticos creados por cada una se reforzaran mutuamente, configurando así un
campo de mayor intensidad en el interior del sistema, El conjunto se comporta entonces como
un electroimán.
El campo magnético creado por una bobina de núcleo de aire como la anterior puede ser
intensificado aumentando la corriente aplicada o llenando el espacio vacío dentro de la misma
con un núcleo de material magnético, que concentre mejor las líneas de fuerza. Otra es
construyendo la bobina en múltiples capas, es decir realizando un nuevo devanado encima del
primer arrollamiento, uno encima del segundo, y así sucesivamente.