El documento lista las cuantiosas pensiones, indemnizaciones y pagos recibidos por varios ex directivos de cajas de ahorros y bancos españoles al prejubilarse o dejar sus cargos, las cuales van desde los 500.000 euros hasta los 20 millones de euros. Estos pagos excesivos se critican al final del documento con las frases "¡¡ESPAÑA VA BIEN!!" y "¡¡SÓLO VIVEN LOS TRUHANES!!"