2.
INTRODUCCION: A través de la historia de la humanidad, el hombre ha
utilizado diferentes formas de comunicarse, desde la comunicación con señas,
hasta la comunicación a distancia por medio de dispositivos tecnológicos
avanzados.
Los avances logrados en el área de telecomunicaciones han permitido que el
hombre se desempeñe de una manera más eficiente, y es esta eficiencia lo que en
gran medida, ha motivado a empresas nuevas que día a día exigen mayores retos a
quienes lo desarrollan.
De esta forma, se ha llegado a alternativas de gran impacto a través del tiempo
como son: Internet (correo electrónico), tren rápido, avión, cables de comunicación
(ejemplo: fibra óptica), telefonía celular, televisión por cable, etc.
Al comenzar el tercer milenio, la humanidad está creando una red global de
transmisión instantánea de información, de ideas y de juicios de valor en la ciencia,
el comercio, la educación, el entretenimiento, la política, el arte, la religión, y en
todos los demás campos. En esta red ya se puede ver en tiempo real, el sentir de la
humanidad, pero al mismo tiempo también es posible tergiversar, manipular o
frivolizar este sentir; es decir, paradójicamente, los medios de comunicación
también pueden usarse para separar y aislar.
AVANCES TECNOLOGICOS
3.
Cuando Charles W. Hull, más conocido como
Chuck Hull, fabricó la primera pieza con impresión
3D en 1983, no imaginaba ni por asomo a dónde
podría llegar su invención. Unos 30 años después,
los expertos afirman que la impresión en 3D
impulsará la próxima revolución industrial,
transformando por completo el proceso de
fabricación y construcción de prácticamente todo
lo que nos rodea.
La revolución de la impresión 3D: órganos, ropa,
prótesis... y todo lo que puedas imaginar
4.
Hull, considerado como el padre de la impresión 3D, trabajaba por
aquel entonces en una empresa que utilizaba la luz ultravioleta para
aplicar unas finas capas de resina sobre mesas y muebles. Fue
entonces cuando se le ocurrió que poniendo múltiples capas, unas
sobre otras, de un fotopolímero líquido que se convierte en sólido al
contacto con la luz y aplicándoles luz ultravioleta para darles forma,
podría construir un objeto en 3D. Este nuevo método de fabricación,
que Hull denominó estereolitografía, ha derivado en lo que hoy en
día se conoce como la fabricación aditiva o impresión 3D.
La técnica, que permite crear un objeto tridimensional sólido a
partir de un modelo digital, se introdujo rápidamente en la industria
del automóvil y la aeroespacial. Empresas como General Motors o
Mercedes-Benz la utilizaron para la fabricación de prototipos. Y
pronto se introdujo también en la fabricación de material quirúrgico.
Comienzos y evolución de la
impresión en 3D
5.
Las ventajas de la impresión 3D son infinitas y tan
asombrosas que muchas de ellas ni siquiera podemos
imaginarlas hoy en día, sino que irán surgiendo con el
paso del tiempo. No obstante, algunas ya son evidentes
y podremos disfrutar de ellas a corto plazo:
Ventajas de la impresión
en 3D
6.
Basta con crear o modificar el diseño en formato digital
para adaptarlo a nuestro gusto o medidas e imprimirlo.
Además, la complejidad del objeto no influye en la
dificultad del trabajo ni en el coste: a la impresora 3D le
cuesta lo mismo imprimir un objeto simple que uno
lleno de curvas o recovecos, la máquina simplemente
se limita a seguir el diseño digital
1. Recuperaremos la personalización y
fabricación a medida:
7.
Su enorme versatilidad: Podremos fabricar de todo con una sola
máquina. Una vez realizado el diseño digital de lo que queremos fabricar
es muy rápido imprimir múltiples copias del objeto, ya sean iguales o
distintas, dado que basta con modificar rápidamente el diseño digital para
imprimir una variante diferente del objeto. Tampoco es necesario cambiar
de máquina ni reprogramarla para fabricar algo diferente: hasta ahora, la
mayoría de las máquinas estaban diseñadas específicamente para fabricar
un producto concreto y cualquier cambio en el producto fabricado o la
necesidad de fabricar otro producto diferente requería modificar o
reprogramar la máquina o bien utilizar otra máquina diferente. Ahora,
podremos fabricar objetos completamente diferentes y de materiales muy
variados con la misma impresora 3D.
La fabricación local: dado que la impresión 3D permite realizar la
fabricación in situ en cualquier lugar, ya no será necesario transportar
largas distancias los productos, ni disponer de almacenes en los que
guardar el stock. Eso reducirá aún más los costes de producción y
eliminará los de almacenaje y distribución.
2. Fabricaremos más rápido y por menos
dinero gracias a:
8.
Contaminaremos menos: Al no ser necesario distribuir los
productos a largas distancias, desparecerá la contaminación
generada actualmente con su transporte.
Generaremos menos residuos: en la fabricación tradicional, se
suele partir de una cantidad mayor de materia prima a la que se
le van sustrayendo capas o trozos, raspando, cortando, etc.
hasta obtener el objeto deseado; este tipo de técnicas generan
numerosos residuos. En el caso de la impresión 3D, en cambio,
el objeto se genera añadiendo capas de material sólo donde es
necesario para dar forma al objeto, de forma que no sólo no se
genera ningún tipo de residuo, sino que se utiliza menos
cantidad de materia prima para fabricar el objeto
3. Dañaremos menos el
medioambiente:
9.
La ciber información del futuro, en lugar de ser una comunidad
global, podría convertirse en una vasta y fragmentada red de
personas aisladas que interactúan con sus datos y no con las
personas. Estamos, pues, ante un arma de doble filo de la cual ya
habla el Magisterio de la Iglesia desde hace algunas décadas. Es
más, cabe la reflexión en este punto, de si es posible considerar
realmente ese proceso, llamado comunicación, como un proceso de
intercambiar o compartir, como originalmente ha sido identificado,
ya que hoy en día priman en las relaciones humanas enfocadas a
satisfacer necesidades, es decir, enfocadas a fines.
En este sentido se hace necesario acudir a Habermas, para aclarar
que definitivamente el problema de la modernidad no ha podido ser
resuelto ya que ha sido abordado desde la razón técnica, es decir,
que el hombre ha privilegiado la articulación de medios a fines para
controlar el medio externo, teniendo esto como resultado el
desarrollo de la técnica, a diferencia de lo que pasaría si se
abordara el problema de la modernidad desde la razón práctica, la
que tendría como resultado la comprensión de los sujetos, que es
justamente lo que consideramos que falta en este momento de la
historia de la humanidad.
conclusión
10.
Con esto planteamos que de acuerdo a la reflexión de Habermas la solución del
problema de la modernidad tendría sentido a través de la razón práctica y con esto,
a través de la comunicación práctica, que sería ilocutiva. En este sentido, Habermas,
muy bien plantea que la posmodernidad sería el rescate de la razón y de la acción
comunicativa.
Al distinguir entre pensar calculador y pensar reflexivo, claramente se puede concluir
que lo que nos hace falta como “mundo moderno” es el utilizar un modo de pensar
reflexivo, que es un pensar del sentido, donde el hombre antes que todo se
preocupe de pensar en sí mismo. Por lo tanto se puede afirmar que lo que ocurre
con la modernidad es que nos encontramos en la fuga del pensar, es decir, no
estamos pensando reflexivamente. Por esto consideramos que lo que nos hace falta,
es una comunicación orientada al entendimiento, a la comprensión, a la verdadera
comunicación entre los sujetos; sin embargo, este único aspecto de la realidad no
sería suficiente si no existiera un conocimiento técnico, más orientado al control y al
dominio, por lo que concordamos con Habermas y con su idea de encontrar un
equilibrio entre los intereses del conocimiento técnico y los intereses de la
interacción, es decir, moverse en los dominios de lo técnico (relación con el medio) y
de lo práctico (comunicativo; relación sujeto-sujeto)
Por todo lo anteriormente expuesto, podemos decir, que si bien consideramos que
los medios de comunicación humana que hoy encontramos no han evolucionado de
una manera favorable para las relaciones humanas directas, cálidas o naturales,
pueden, no obstante lo anterior, cambiar de fin, es decir, pasar de ser meras fuentes
de información a ser verdaderos nexos entre las personas, con componentes
afectivos, emocionales y en general vivenciales que compartir, y así quizás, de esta
manera, producir un cambio a nivel universal en cuanto a la modernidad y globalidad
que vivimos y que no hemos sabido enfrentar de una manera íntegra.