2. Había una vez un niño llamado Juan el cual vivía con
su familia que se dedicaba a sembrar trigo y al
pastoreo de ovejas
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3. Juan era el mas pequeño de los cinco hermanos y era
por mucho el mas inquieto, juguetón y mentiroso de
todos, tanto así que se la pasaba descansando en la
casa y no trabajando con sus hermanos en el campo
para evitar provocara algún incidente por su
inmadurez.
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4. Era lógico que sus hermanos lo miraran con
desagrado y siempre le exigían a su padre que lo
obligara a hacerse responsable de alguna actividad
para ayudar en la casa. Hasta que un día el padre
accedió a sus peticiones y le pidió a Juan que se hiciera
cargo de cuidar las ovejas en lo alto de la loma.
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5. Juan muy molesto y de mala gana fue a cuidare las
ovejas, mientras se alejaba de la casa alcanzo a
escuchar entre los muchos consejos de su preocupado
padre que tuviera cuidado porque un lobo andaba
merodeando por esos lugares y que pidiera auxilio si
lo alcanzaba a ver porque era muy peligroso
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6. La mañana transcurrió de forma tranquila y muy
aburrida para Juan, en la tarde ya no sabia que hacer
para entretenerse ya había apedreado lagartijas,
aplastado hormigas, sacado lombrices y se le ocurrió
la peor idea
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7. Empezó a correr y a gritar de forma desesperada y tan
fuerte para que lo escucharan en la casa - ¡AUXILIO,
AUXILIO! EL LOBO, EL LOBO, SE COME LAS
OVEJAS. Para que sus hermanos y padre se asustaran
y corrieran por la larga colina a ayudarlo
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8. Sus familiares llegaron a la loma muy fatigados y
espantados con palos y piedras en manos, pero lo
único que encontraron fue a un rebaño tranquilo y a
Juan tirado de la risa en el piso por la carrera que les
había hecho pasar.
Y de la misma forma lo hizo varias veces mas.
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9. Su familia ya estaba harta de las mentiras de Juan
y ya no le daban importancia.
Pero llego el día en que el lobo salió de su
escondite a buscar alimento y fue el rebaño de
ovejas el que encontró. Juan estaba durmiendo y
no lo vio acercarse hasta escuchar los balidos de
las ovejas entonces empezó a gritar y gritar pero
sus familiares no le hicieron caso porque pensaron
era otra de sus mentiras.
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10. El lobo acabo con el rebaño y juan llorando regreso a
su casa muy arrepentido de las mentiras que
provocaron que su familia no le creyera.
LA CONFIANZA SE GANA AL DECIR
SIEMPRE LA VERDAD
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