La huella hídrica, preocupantes cifras que crean la tarea humana de reducir el consumo de agua.

1. La tarea humana de reducir la “Huella Hídrica”
La superficie terrestre de la Tierra se compone de un 71% de agua, de las cuales un 97%
pertenecen a aguas dulces, un 2% a aguas congeladas y un 1% a agua dulce. El agua es un
elemento fundamental para los seres vivos y el correcto funcionamiento del medio
ambiente, es por esto que es necesario conocer sobre el volumen de consumo que esta
posee en nuestra sociedad. La huella hídrica cumple esta función, es un indicador del uso
de agua, que involucra tanto el consumo directo como indirecto de un consumidor o
productor.
Este indicador nos sirve también para analizar la relación que existe entre la acción
humana y el impacto medioambiental, es decir como la contaminación, sobreproducción y
gastos innecesarios de agua afectan el sistema hídrico.
Para cuantificar el uso del agua en los procesos productivos la huella hídrica utiliza tres
colores; verde, agua de lluvia consumida en el proceso productivo; gris, agua dulce
utilizada para diluir los contaminantes hasta que sea apta para su posterior uso; y azul,
agua extraída de cualquier fuente hídrica que no regresa a la misma. Es así como en la
mayoría de los casos, en los procesos de producción agrícola, más del 50% del agua
utilizada en total, proviene del sector verde, y el resto se divide de manera similar entre
gris y azul. Situación preocupante ya que, como mencione anteriormente las aguas verdes
no regresan a su fuente de origen.
Los productos que utilizan mayor cantidad de agua en sus procesos son los zapatos de
piel, textiles de algodón y carnes. Por otro lado los que menos cantidad de agua requieren
son el papel higiénico y manzanas.
La escasez de agua no es un tema ajeno al actual escenario mundial, existen zonas donde
a pesar de haber abundantes lluvias, no hay agua suficiente para cubrir las necesidades
básicas del hogar, esto debido a la excesiva contaminación o la mala distribución que tiene
el consumo alrededor de nuestro planeta, ya que existen zonas donde el agua sobra y se
malgasta enormemente y otras donde apenas alcanza para cubrir necesidades básicas.
La población humana se ha duplicado desde 1950 y como consecuencia el consumo de
agua se ha triplicado. Es por esto que los niveles de la huella hídrica han aumentado a lo
largo del tiempo, debido tanto al consumo de agua independiente por cada consumidor
como al aumento en la producción que se ha experimentado, por una creciente demanda
en el mercado. Depende de nosotros entonces, hacer esfuerzos para disminuir la cifra de
este indicador, pequeños cambios pueden hacer una gran diferencia de cifras. Algunas
medidas simples que pueden tomarse incluyen, reducir el tiempo en la ducha,

2. preocuparse por mantener las llaves de agua en buen estado, no lavar autos con
manguera, aprovechar el agua de la lluvia, entre otras.
En conclusión podemos decir que publicaciones provenientes de la huella hídrica son
fundamentales y necesarias para lograr reducir el consumo de agua que aumenta al pasar
el tiempo, pero que es posible controlar si como comunidad nos proponemos realizar un
cambio en ciertas oportunidades que permitan cuidar el consumo de uno de los
componentes más importantes de nuestro planeta, el agua.
Magdalena Gálvez
193228380
Ecología