3. Había una vez, hace un millón de años antes de
Cristo, en una tribu prehistórica, dos niños que
se fueron a jugar hasta que uno de ellos se
perdió y no sabía cómo volver. El otro niño fue
a decírselo a los demás de la tribu.
Lo buscaron y lo encontraron durmiendo y
todos se pusieron muy contentos.
-Aitor-

4. Había una vez 5 hombres que pertenecían al
mismo clan.
Un día fueron a cazar, vieron un búfalo y
tiraron de su piel marrón para hacerse ropa.
Al otro día vieron un reno y uno de ellos dijo:
-¡Mirad, no lo asustéis, vamos a cazarlo!
Entonces, otro de los hombres… ¡catapúm!, lo
cazó. Aquella piel era también era fenomenal,
igual que su carne. Cuando todos empezaban a
comerla, uno de los miembros del clan dijo:
-¿Por qué no guardamos algo para el invierno?
-¡Buena idea! -respondió otro.
Así lo hicieron y, cuando llegó el invierno…
-¡Enhorabuena porque, gracias a ti, tenemos
carne para mantenernos!
-Moisés-

5. EL REENCUENTRO
Éranse una vez una mujer y un hombre. Hicieron una familia
de tres hijos. Todos trabajaban menos el pequeño, que no
sabía hacer nada. El padre le enseñó a pescar, el hermano
mayor le enseñó a cazar y la madre, a coger frutos y raíces.
La hermana no le enseñó nada porque, antes de que naciera,
era la hermana pequeña y recibió toda la atención. ¡¡¡Tenía
celos!!!
El hermano pequeño quería la ayuda de la hermana.
Entonces la hermana le enseñó un camino para coger frutos
y raíces. Era mentira, era un camino para que se perdiese. El
niño se fue solo y luego no sabía volver a casa. La hermana
llegó a casa y el padre le preguntó:
-Y tu hermano pequeño, ¿dónde está?.
•-Cogiendo frutos y raíces- le contestó la chica.
Al día siguiente, el niño no estaba en casa y a la hermana le
daba pena. Entonces la fue a buscar. Lo encontró durmiendo
y lo cogió en brazos. Lo llevó a casa y los padres se pusieron
muy contentos.
-Daniel -

6. LA COOPERACIÓN ES IMPORTANTE
Hace un millón de años, en la prehistoria, hubo una tribu. Era
como todas las tribus, excepto por una cosa. No se llevaban
bien y esto sucedía porque a uno no le gustaba convivir con
los demás, otro no quería compartir, otro decía que si él había
cazado a un animal por qué lo comían todos. Esta era la razón
de sus peleas.
Un día, Miguelón, que era un troglodita, se fue temprano a
cazar para que cuando cogiese algún animal, comérselo él solo
y tener sus pieles sin compartirlas. Pasado un tiempo, se
encontró un mamut y lo intentó cazar pero… el animal le dio
una patada y lo dejó inconsciente. En el poblado, empezaban a
notar su falta y fueron a buscarlo. Después de un rato, lo
encontraron detrás de un árbol e intentaron reanimarlo. Pero
no hubo manera, así que se lo llevaron a cuestas. Por el
camino, se encontraron con el mamut y lo mataron. Ya en la
aldea, Miguelón se despertó y comprendió que, en una tribu, lo
importante es la cooperación. Desde entonces, no volvieron a
pelearse.
-Vicky -

7. Hace muchos años, en la etapa de la Prehistoria,
los hombres estaban decidiendo en qué sitio se
iban a quedar. Unos querían estar al lado de la
catarata para tener más agua. Otros, al lado del río
porque tenían agua y podían pescar peces. Como no
se ponían de acuerdo, acudieron al jefe quien dijo
que era mejor instalarse en el río. Los que preferían
la catarata se enfadaron.
Al día siguiente, reflexionaron y fueron a pedirle
disculpas al jefe por no haberle hecho caso y… ¡lo
celebraron con un gran banquete riquísimo!
Y así termina esta historia.
-Ana Belén-

8. DESDE LA PREHISTORIA…
Éranse una vez unos chicos de la Prehistoria que
estaban pintando sus retratos, se lo enseñaron a sus
familias y les encantó. Entonces, les pidieron que les
hicieran a ellos otro retrato. ¡Les quedaron muy bien y
se lo dieron de recuerdo!
-Elías -

9. Érase una vez una familia de la prehistoria que tenía tres hijos, gracias a su
pequeña escultura de la Venus.
El primer hijo era joven y su sueño era poder cazar un mamut con su padre.
El segundo hijo era de nuestra edad y su sueño era poder hablarle a la chica que
le gustaba y…
El pequeñajo ya tenía de todo: mimos, amor…
Cuando el chico joven cumplió 18 años, su padre le dejó ir con él y con su
tribu a cazar. Iban a por un reno cuando vieron un mamut viejo y cansado, por
lo que fueron a por él. El joven estaba nerviosísimo. Primero, lo rodearon;
después, le empezaron a tirar hachas, lanzas… El mamut iba debilitándose pero
¡estaba a punto de caerse encima de su padre! El joven lo empujó antes de que
le cayera encima y los dos se salvaron. Su padre le otorgó ser el jefe de la tribu.
Un día, el niño de mi edad iba a recolectar con su madre, se tropezó con la
chica que le gustaba y empezó a tartamudear:
•¡Lo-lo-lo si-si-en-en-to-to!
Y salió corriendo.
Al día siguiente, cuando estaban desmontando las cabañas para trasladarse, el
chico la empezó a mirar y pensó:
•¡Venga, tú puedes!¡Deja de ser tan tímido!
Fue a hasta donde estaba ella. Ya no sentía vergüenza. Era como si se
conocieran de toda la vida.
Bueno, así fue cómo todos cumplieron sus sueños.
-Áxel -

10. En la Prehistoria, pintaban en las paredes de las
cuevas, con un solo color. Hacían como fotos y se
dibujaban a ellos mismos cazando a un búfalo, con
las lanzas, con la sangre. Además de dibujar, para
comer los hombres necesitaban cazar y las mujeres,
recolectar. Era un mundo de clanes o familias, de
caza y recolección.
Una vez hubo un hombre al que echaban de todos los
clanes porque todo el día quería pelea. En una le
arrancaron una muela. Y… como en la Prehistoria no
había médicos, se le infectó y se murió.
-Moisés-

11. La imagen corresponde a las pinturas esquemáticas de la
Cueva del Castillo de Monfragüe (Cáceres),
pertenecientes a la Edad del Bronce.