Las familias son unidades de consumo que requieren diversos bienes y servicios. Para elegirlos, las familias consideran sus necesidades, ingresos y preferencias. Además, las familias también son factores de producción porque su trabajo hace posible las diversas actividades económicas de un país como la agricultura, la industria y el comercio. Gracias a los ingresos generados por su trabajo, las familias pueden elegir bienes y servicios según sus metas y ahorros.