El documento habla sobre la caridad conyugal y la unión efectiva entre esposos como una buena amistad y pasión erótica que es capaz de sobrevivir aunque los sentimientos o pasión se debiliten. El matrimonio es más que una formalidad social o tradición, requiere un alto compromiso de luchar, renacer y reinventarse constantemente. La sexualidad en el matrimonio no es un mal permitido sino un don de Dios que embellece el encuentro de los esposos.