Este documento celebra las bodas de oro de los abuelos Silvia y José. Resalta el gran amor y compromiso que han demostrado a lo largo de 50 años de matrimonio, criando una familia con 3 hijos y 7 nietos. Los autores se sienten orgullosos del ejemplo que han dado sus abuelos y agradecidos por su apoyo y presencia en sus vidas.
Bodas de oro de Silvia y José: 50 años de amor y familia
1. Buenas tardes a todos los presentes, hoy 30 de
septiembre en un momento tan especial para
nuestra familia, nos gustaría compartirles
algunas palabras y reflexiones de esta
celebración de bodas de oro de nuestros
abuelos: Silvia y José, que sin su amor nada de
esto hubiese sido posible.
2. El estar ahora, frente a dos personas que hace
50 años atrás iniciaron una historia común y
optaron por estar libremente juntos para toda
la vida, no hace más que hacernos sentir un
tremendo orgullo como nietos, de poder ver a
nuestros abuelos como un ejemplo a seguir en
esta larga trayectoria de vida.
3. El tiempo que representa 50 años en la vida de
cualquier ser humano es considerable, pero el
recorrerlo de la mano junto a la persona que uno elige
es un desafío aún mayor, con esto, quiero decir que lo
que estamos celebrando hoy, lo que nuestros abuelos
han construido durante este largo tiempo ha sido
producto de: Un sacrificio diario de entrega mutua,
respeto, paciencia, tolerancia, fidelidad y más, pero por
sobre todas las cosas ha sido producto del gran amor
que hoy en día vemos reflejado del uno por el otro.
4. Cuando se inicia la vida matrimonial se sabe que estos
valores son la clave para lograr la felicidad, lo que en
ese instante parece obvio, al poco andar uno se da
cuenta de la tremenda responsabilidad que ese
compromiso significa, sobre todo con la procreación,
en donde empiezan a llegar los hijos y es allí cuando
comienza a crecer la familia. Nuestros abuelos, pero
como comúnmente les llamamos: los tatas, trajeron
este mundo a 2 hombres: José Alfonso, Jorge Andrés y
1 mujer: Silvia Marisela.
5. Pero el árbol genealógico no se detiene en ese momento, la
familia sigue creciendo, ya que, al pasar los años empezaron a
llegar los nietos, los que hoy en día somos 7 como nos pueden
ver: José Pablo, Mariapaz, Martin, Alinson, Luis Felipe, Mayte y
Ámbar, los que hoy en día en conjunto formamos una gran
familia. Y como ustedes dicen ‘’Mira toty’’ o ‘’Mira Abel’’ estamos
aquí en la casa con todos los nietos’’.
Afortunados y orgullosos estamos hoy y seguiremos estando
siempre de las maravillosas personas con el rol de abuelos y más
que abuelos unos segundos padres que nos regaló la vida,
presentes en nuestra crianza educación y bienestar, y por sobre
todo preocupados de cada paso: logro, caída o merito, que
tenemos. No existen palabras para agradecer lo orgulloso que
estamos de ustedes.
6. •El estar aquí celebrando las bodas de oro,
nos hace palpar la realización del misterio
del sacramento del matrimonio, nos hace
creer en la presencia de Dios en esta
hermosa unión. Hoy estamos llenos de
felicidad y emoción de poder revivir un
momento tan importante como este y
poder estar aquí hoy acompañando a
nuestros abuelos: José y Silvia.
7. • Es una bendición poder conmemorar nuevamente lo
que hace tanto tiempo ellos aventuraron como su
proyecto de vida. Que satisfacción deben sentir el mirar
hacia atrás de cuando eran unos jóvenes de 15 y 22
años y comprender que los sueños son una realidad,
que ya están rodeados de hijos, nietos, familiares y
amigos que los quieren y admiran profundamente, lo
que en definitiva es lo que alimenta el alma y alegra el
corazón.
Los amamos, Mami toty y Tata Abel.
Un fuerte abrazo de parte de sus 7 nietos.