1. Pontificia Universidad Javeriana 26 de Marzo de 2014
Información y documentación
Relato autobiográfico narrativo
Mónica Forero Malaver
Soy Mónica María Forero Malaver. Mi madre, Nydia Malaver, decidió que el día
indicado para que yo naciera fuera el 13 de agosto; así, ella programó su cita y a las
8:30 am empezó mi vida en Bogotá.
Fui muy afortunada pues debido a que mis padres pasaban gran parte del día en el
trabajo, siempre estuve al cuidado de gente extraordinaria que dedicaba sus días a
enseñarme cosas nuevas, cosas que me sirvieran más adelante. Mi abuela, Ivette Kure,
fue una de esas personas. Nuestros días siempre estuvieron llenos de libros de cuentos,
música y café (sí, me servía café en un pocillo diminuto).Ella me enseñó a encontrar en
los libros mundos donde lo impensable era posible, dónde el o la protagonista siempre
descubrían mundos nuevos y salían victoriosos de sus hazañas. Para mi un libro era una
gran carta de posibilidades buscando ser exploradas.
Al pasar algunos años, mis padres se divorciaron y yo me fui a vivir con mi madre a
Bucaramanga. Allá estudié en el Colegio La Quinta del Puente y estuve siempre
expuesta a la última tecnología del momento. Es un colegio que está muy a la
vanguardia de la tecnología y nos la presentó como una forma de progreso clave.
Es así que para mí era normal y cotidiano tener computadores Apple en varios de los
salones, estar metida en internet, hacer talleres de inglés o de matemáticas vía online y
estar relacionada con las redes sociales.
Fue por mi colegio que las búsquedas académicas la mayoría de veces tenían lugar en
internet; artículos y documentos online fueron fuentes que yo manejé con mucha
confianza y tranquilidad. No obstante, los libros literarios siempre los preferí en físico.
Mi grado de bachiller llegó en Junio del 2008 y fue ese mismo año que me fui a vivir a
París. Allá el panorama era totalmente distinto; una cultura digital, artística, diversa. Me
ofrecía una cantidad de posibilidades tecnológicas en la universidad, en la calle, incluso,
en mi hogar. Todo se manejaba por medio de botones, muy fácil y no tan costoso.
Además, aprendí a comprar por internet y a explorar el comercio vía web; tiquetes de
viaje, ropa, electrodomésticos, recibos, todo lo hacía desde mi portátil. Maravilloso me
parecía.
Curiosamente al llegar de nuevo a Colombia, me encontré con que Internet y la
tecnología en sí no era usada en la cotidianidad de las personas en general sino como
medios de paso para ahorrar tiempo en búsquedas y en comunicación mediante redes
sociales. Existía, y existe, mucha precaución e incluso rechazo frente a la incorporación
tecnológica en nuestras vidas. El hecho de que se maneje todo mediante un click asusta
a los colombianos y transmite una idea negativa frente al tema.
De esta manera, los pasos dados en pro a las TIC se estancaron. Incluso después de
entrar a estudiar a la Universidad Javeriana, el incentivo recibido por los profesores fue
muy poco. No fue sino a partir de cuarto semestre que ciertas materias me permitieron
abrir mucho mi panorama frente al correcto uso de Internet. No sólo al uso correcto sino
al uso extenso de esta increíble herramienta. Textos, libros, aplicaciones, juegos,
2. amigos, publicaciones, contactos, música, en fin, un sin número de opciones que se
adecuan a mis necesidades y que yo puedo usar a mi conveniencia.
No obstante, ha venido creciendo una duda en mi. ¿Qué tan libre he sido realmente
durante el tiempo que paso en internet? He observado que en mis búsquedas siempre
sale publicidad de cosas que me llaman la atención. Qué las cosas que me sugieren la
mayoría de veces son acertadas. Que todo está dispuesto para que sea de mi agrado. Es
por eso que llego a la conclusión de que buscadores como Google, me han creado una
especie de perfil en el que se adelantan a mis criterios, a mis gustos y a mis necesidades.
Puede que sea muy atrevido pero también puede llegar a ser muy útil.
Lo que yo quiero es saber realmente cómo se manejan empresas como Google,
facebook o Instagram, por nombrar unas pocas, para que el día de mañana pueda
utilizarlas a mi favor en cualquier ámbito; laboral, académico, familiar o social y logre
incorporar eficazmente estas herramientas a mi vida.
Bibliografía.
POLAR STAR FILMS. (Productor). 2013. Google y el cerebro mundial [DVD]. De
https://www.youtube.com
Reischl, G. (2008). El engaño Google: una potencia mundial incontrolada en Internet.
Barcelona: Medialive Content.
Valderrama, C. E. (2012). Sociedad de la Información: hegemonía, reduccionismo
tecnológico y resistencias. Nómadas, (36), 13-25. Recuperado de
http://www.ucentral.edu.co/images/stories/iesco/revista_nomadas/36/36_1_sociedad_de
_la_informacion.pdf