El poemario "La Guerra Invisible" incluye también "Mudanza", la anterior publicación de la autora. Pueden descargarlo gratuitamente o pedir una copia impresa en esta dirección:
http://www.bubok.es/libros/226564/La-Guerra-Invisible
Meriam Bendayán nació en la ciudad de Lima–Perú. Proviene de una familia de escritores y artistas loretanos. Escribe con habilidad innata. Su poesía intimista revela la búsqueda de lo hermoso. Actualmente integra el Gremio de Escritores del Perú.
2. Meriam Bendayán.
Nació en la ciudad de Lima–Perú. Proviene de una familia de escritores y artistas loretanos. Escribe con
habilidad innata. Su poesía intimista revela la búsqueda de lo hermoso. Actualmente integra el Gremio
de Escritores del Perú. Ha publicado los Poemarios:
Mudanza, Grupo Editorial No Tenemos editores 2009.
La Guerra Invisible, Grupo Editorial Arteideas 2011 (Edición Impresa)
También forma parte de los siguientes Poemarios Colectivos, Antologías y publicaciones digitales:
Poética, Edita Raúl Allain e Iván Fernández Dávila 2010.
Eco-Poesía, Edita Amantes del País 2010.
Antología Poética Palabras sin Frontera, Edita Universidad Ricardo Palma y Librería Libum 2011.
Revista Estación Compartida, Edita Amantes del País 2011.
Antología Poética Pasiones, Edita Sociedad Peruana de Poetas 2011.
Embajadores Peruanos de la Palabra Edita Amantes del País 2011
Convergencias, Edita Rio Negro 2011.
Revista YUYAYKUSUN, Departamento de Humanidades Edita Universidad Ricardo Palma, 2011.
Anuario SEMBRADORAS, Betesda Ediciones España 2011.
Viernes Literarios Poesía Peruana Contemporánea I y II volumen, Edita Viernes Literarios y
Amantes del País 2012.
La Mujer en verso y Prosa, Edita Amantes del País 2012.
Revista Palabra en libertad, REVISTA PERUANA DE LITERATURA Edita Amantes del País 2012.
Luces de la palabra, Edita Amantes del País 2012.
Antología Poética Palabras sin Frontera, Edita Universidad Ricardo Palma y Librería Libum 2012.
Homenaje a la letra Ñ, Edita Gaviota Azul 2012.
Metamorfosis del Verso, Edita Sociedad Peruana de Poesía 2012.
Poemas de mi Vida. Edita Sociedad Peruana de Poesía 2012.
Todas las Voces. Editorial Vicio Perpetuo, Perpetuo Vicio. 2013.
Amor al Rojo Vivo. Edita Gaviota Azul 2013.
Poesía en Libertad. Edita Gaviota Azul 2013.
VERSOLIBRISMO Poesía y arte contemporáneo. Edita Rio Negro, Lima 2013.
HABEMUS POESÍA. Edita Amantes del País 2013.
Hija de Samuel natural de Iquitos y de Eva natural de Cajamarca, es una amante del encanto de la
selva, de los animales con quienes comparte su tiempo libre, es madre de Israel y Belén y ha centrado
su vida en la búsqueda del bienestar interior y la fe. Es también economista, egresada de la
Universidad Ricardo Palma (1986).
6. ÍNDICE
Presentación
El nuevo modernismo en la poesía
de Meriam Bendayán, Héctor Ñaupari I 9
Semilla de protesta y vida en libertad en La guerra
silenciosa de Meriam Bendayán, Alfredo Pérez Alencart I 12
I
CORAZÓN / 19
SOY LA VIDA / 20
ASÍ ESTOY EN PIE / 22
LA GUERRA INVISIBLE / 23
PENSANDO / 25
HAY TIEMPOS Y TIEMPOS/ 27
IQUITOS / 29
LAS COSAS QUE TENGO / 31
EL HOMBRE / 33
A TODOS LOS QUE SUEÑAN / 35
II (Poemario Mudanza)
Presentación
Encuentro en el borde del camino. Sobre la poesía
de Meriam Bendayán, Pepe Farfán I 40
ESCAPO / 43
LIBRE / 45
LLEGÓ MI AMADO / 48
MIS PIES / 51
CUAL TAPIZ / 53
MUDANZA / 55
SIN TI / 58
POUR MARTHA / 60
HERMOSA NIÑA DE LOS OJOS GRANDES / 62
TE AMO / 65
7. > Ir al ÍNDICE 9
Presentación
El nuevo modernismo en la poesía
de Meriam Bendayán
Héctor Ñaupari
Leyendo a Meriam Bendayán, se comprende que
mucho de la literatura se va para no volver,
excepto el modernismo. Sabido es que, junto al
boom narrativo de mediados del siglo XX, el
modernismo latinoamericano representa el
momento en que nuestras letras se hicieron
universales, cosmopolitas, adquiriendo en ese
proceso liderazgo y carta de ciudadanía.
Por ello, no es baladí que Bendayán extraiga de la
savia modernista latinoamericana un extracto,
sensible, discreto, íntimo, y lo convierta en ese
poemario sugestivo que es el suyo, La guerra
invisible. Creemos que nuestra autora se declara
en guerra contra del invisible pero hediondo
estercolero que se han vuelto nuestras letras, su
devoción por lo malsano, lo enfermo, lo cotidiano
como coartada apenas creíble de la mediocridad,
el regocijo de muchísimos escritores por paladear
las pelusas de sus propios ombligos, y nos devuelve
aquello que el modernismo supo expresar mejor:
la libertad, la independencia, el goce del amor, el
desvelo por el ser querido, la reflexión filosófica,
humanista e individual, bien provista de contenido
y significado.
8. > Ir al ÍNDICE 10
De allí también, su rescate del poeta apóstol, José
Martí, figura destacada del movimiento
modernista, alabado por Rubén Darío. Como él,
quien en su ensayo El poeta Walt Whitman se
pregunta «¿Quién el ignorante que mantiene que la
poesía no es indispensable a los pueblos?»,
Bendayán apuesta por el poema como manifiesto
estético, que enriquece a la persona, que lo aleja
de la alienación y la bestialización, de su
encadenamiento a la anulación del pensamiento.
Reconociendo lo bello es como empezamos a ser
humanos: eso es lo que nos dicen sus sentidos
textos.
Como los modernistas, que no requerían de fuegos
de artificio lingüísticos para dotar de emotiva
carga a sus textos, la simplicidad de Bendayán se
agradece, pues nos demuestra que el modernismo
sigue, a pesar del tiempo transcurrido, fresco y
primaveral en su lucidez sempiterna. En su
carácter contemplativo hemos de hallar el secreto
de su permanente juventud. De allí su aprecio,
también, por el celeste color del cielo, que
identifica en sus versos con la libertad.
Por eso quiero rescatar esta cita de Martí, del
ensayo ya referido, que dice:
«Ved sobre los montes, poetas que regáis con
lágrimas pueriles los altares desiertos. Creíais la
religión perdida, porque estaba mudando de
forma sobre vuestras cabezas. Levantaos, porque
vosotros sois los sacerdotes. La libertad es la
religión definitiva.
Y la poesía de la libertad el culto nuevo. Ella
aquieta y hermosea lo presente, deduce e
9. > Ir al ÍNDICE 11
ilumina lo futuro, y explica el propósito inefable
y seductora bondad del universo» 2.
Tributaria de las enseñanzas del patriota y vate
cubano, Meriam Bendayán convierte a su arte en
una poética moderna de la libertad. Que el
espíritu viajero, latinoamericano, universal y
romántico de los modernistas la acompañe
siempre.
Santiago de Surco, 28 de junio de 2011
--------------------------------
1 Poeta y ensayista, nacido en Lima en 1972. Fue integrante
de los Grupos Neón y Vanaguardia en los noventa. Es autor de
los libros En los sótanos del crepúsculo, Poemas sin límites de
velocidad: antología poética 1990-2002, Páginas libertarias,
Rosa de los vientos, Libertad para todos, Políticas liberales
exitosas 2 y La nueva senda de la libertad: cuatro ensayos
liberales. Ha obtenido diversas distinciones y sus poemas
figuran en antologías de poesía peruana e hispanoamericana.
10. > Ir al ÍNDICE 12
2 MARTÍ, José (1964b). «El Poeta Walt Whitman». OC, 13, La
Habana, Editorial Nacional de Cuba.
Semilla de protesta y vida en libertad en La
guerra silenciosa de Meriam Bendayán
Alfredo Pérez Alencart
La poesía como bálsamo, pero también como
promesa. La poeta reconociéndose en la temperatura
de su corazón y en el de los demás, buscando cumplir
una misión de universalidad. Los poemas como garzas
blancas portadoras de mensajes, libres ya del grande
silencio que guardaban más adentro de la boca-
madre. Así pienso tras merodear por los veinte textos
que Meriam Bendayán ofrece en su castellano del
Perú, en su verdeante musicalidad de trasterrada, no
sólo del precedente anclaje familiar (ésa selva y su
espesura ardiente: «Quisiera, de pronto, navegar el
Ucayali.»), sino también de otras errancias forzosas
poniendo cerrojo a orientales tierras prometidas.
Pero mejor, oigámosla: «Extiende tus alas rotas,
corazón/ corazón remendado/ sediento del camino y
sin cesar...»; «Soy la raza humana,/ que persiste en
su marcha...».
No se equivoquen al estimar sólo candor en las
propuestas de Meriam Bendayán. El candor es
ingrediente para la inocencia de su mirada atenta,
proclive al necesario asombro. Ella ha ordenado sus
textos en dos secciones, cual arcas de un cúmulo de
gritos y plegarias. Indignación ante la bajeza de
algunos, rastreros en pos de prebendas o favores
(«Sólo hace falta beber la misma copa./ Y todos
11. > Ir al ÍNDICE 13
transitan en silencio la ruta marcada»; o estos otros
versos: «Mientras caen argumentos y engaños/
persisten los dardos/ y voy aprendiendo el misterio
de encontrar/ toda la victoria en un solo lugar.»); y
además entrega al Dios de sus mayores, renaciendo
en el Hijo, como cuando dice a su padre Samuel, ya
fallecido: «Sin ti/ caminaré bajo el cielo de
Abraham/ mi discurso de fe, caminos nuevos». Y
entonces empieza «el recuento sagrado de todas las
cosas»; renaciendo en sus cánticos, que surcan de lo
terrenal hasta ampararse en lo místico y lo divino.
Tienen savia de Juan de Yepes y de Teresa de Cepeda
y Ahumada («Habitaré a tu abrigo y moraré bajo tu
sombra;/ has llegado al fin, amado mío.»). Albergan
semilla de protesta y Vida en Libertad. Aquí tienen el
sencillo Pan Nuestro que ella promete a su hermana
Martha; aquí tienen esa «Mudanza/ para vivir sin un
lugar, bajo el lenguaje del agua prodigiosa/ que
cambia...»; aquí tienen las potestades del amor que
ha destilado Meriam Bendayán.
Profesor de la Universidad de Salamanca. España
Miembro de la Academia Castellana
y Leonesa de la Poesía
Mayo 2011
12. A mi madre, Eva
A Martha, mi hermana
A mi hermana Carmen
A todos los que sueñan:
Aunque la muerte sobrecoja tu más grande tesoro,
nunca dejes de soñar, creer y esperar
13. I
¿Qué importa que tu puñal
Se me clave en el riñón?
¡Tengo mis versos, que son
Más fuertes que tu puñal!
JOSÉ MARTÍ
Cuba, 1853-1895
14. > Ir al ÍNDICE 19
CORAZÓN
Ese vehículo generoso
que traspone la frontera
invisible de la razón.
Arte lleno de remiendos
que incautado asoma
lentamente sus manitos
a la luz de la ventana.
Y de pronto cavila en su curso
abrigado al calor de una piel
y lleno de sopor pregunta:
¿cómo despertaré la noche oscura?
¿cómo empezaré el parto sin gesta ni luz?
He descubierto el dorso de tu espalda
he conseguido abrir la celda dura
y salir con el día cuando atisba la aurora.
Extiende tus alas rotas, corazón
corazón remendado
sediento del camino y sin cesar
bajo el sigilo de la gran mirada
sueña sin anuncio, sueña corazón.
Ahí, encumbrado en la cima, canta
canta donde tu amor aguarda
y la libertad abre su entraña
y la vida levanta el sepulcro
y vas dando voces corazón.
15. > Ir al ÍNDICE 20
SOY LA VIDA
Soy pez, río
soy viento, tierra.
Soy la vida.
La esperanza que late y germina
sobre el dolor de una madre
que espera a la vera del camino
el retorno de su hijo perdido.
Soy la fuerza que llega
en el último segundo
cuando ya todo está perdido
y esperas en silencio la muerte.
Soy la vida.
Mil sueños rotos
dentro de una alforja vacía
una lágrima perdida
entre tus manos ajadas.
Y además el hambre
de muchos niños que vagan
día y noche
sin abrigo y no fallecen.
Soy la raza humana
que persiste en su marcha.
Y el cántaro perdido
mil veces buscado
asoma su legado
de fuerza y alegría.
Cual rayo de sol que abriga
en medio de un invierno frío.
Soy la vida.
16. > Ir al ÍNDICE 21
Y revivo en cada aurora
cual sonrisa que amanece
sin razón extendida entre la gente.
Porque un labrador exhala fatigas
pisa al arado y ejecuta
el rito feroz que fecunda
segando con esfuerzo la viña del mañana
comprometes mi existencia.
Soy la vida.
17. > Ir al ÍNDICE 22
ASI ESTOY EN PIE
Como una flor misteriosa
sin saber, sin pensar.
Así estoy en pie.
Con las manos abiertas
el pecho desnudo.
Sin preguntas ni razones
sin motivos ni reclamos.
He recibido una posta
la estaca y la espada.
En mis ojos la sorpresa.
Así estoy en pie.
Y mi corazón inevitable
se funde en tu fuego colosal.
Mitiga tu presencia
cada hambre
cada frío
hasta colmarme.
En medio de tus brazos
me descubro
sólo hace falta tocarte.
Ahora inapelable
la aurora se levanta
para caminar mi propio camino
Así estoy en pie.
18. > Ir al ÍNDICE 23
LA GUERRA INVISIBLE
Allí, donde acaba la razón de lo tangible
empieza el campo de batalla celeste
y de favor sólo miramos las caras adustas.
El enemigo permanece invisible
en los pliegues tenebrosos de la entraña.
Agazapado se mimetiza en cada peregrino.
Y los protagonistas de cada jornada
levantan y bajan el telón
repitiendo el mismo acto.
Desde el confín nace la historia
de causa y efecto
para instalar con astucia la batalla
que confluye por todas partes.
Metida en este cuartel
clavada con insistencia
como una muralla sin horario
voy carente de castigo.
Y el camino insondable expande sus alas
y la lucha invariable, resultó mi hábitat.
Supe entonces
del tigre volador de gran hermosura
del leopardo que cambia su tapiz cada noche
de los monos malvados cargados de argucias.
Y todos traen la soez encomienda de otro.
Después de haber visto, tanto
aprendo a levantar mis manos
y mi pecho jadeante
abrir mi alma saturada de asechanzas
cúmulo doliente de todas las heridas.
19. > Ir al ÍNDICE 24
Así llego a morar la casa del Guerrero
y su mirada prodigiosa me cubre
su agua generosa restaura mi cauce.
Inexorable, ejecutas mi destino.
Mientras caen argumentos falaces
persisten los dardos de fuego
caducan los dientes feroces.
Entonces los días inmutables, agonizan.
Para descubrir el misterio y encontrar
en un sólo lugar, toda la victoria.
20. > Ir al ÍNDICE 25
PENSANDO
En medio de este mundo
me envuelvo de color y despliego
la rutina impregnada de costumbre.
En medio de sonrisas hoscas
voy por mi propio sendero
en sentido contrario.
Y veo cómo todos guardan el fardo de engaño
silenciosos llevan cual valija de mano
un hondo equipaje de cosas malolientes
todas bien tapiadas, bajo el labial de moda.
Es cada vez más lento y pesado caminar aquí
en medio de consabidos papeles
donde se rinde culto al engaño y la transa.
En cualquier rincón, salta un grito jadeante
saturado de orgasmo para romper la sorda rutina
oh melodía absurda, que esgrime jerarquías.
Gira el carrusel colmando de honores
para pagar con aliento la imposible salida.
Aquí las doncellas danzan
emergen al unísono, con la noche oscura.
Las olas feroces coronan la sinfonía rutilante
y la canción ingrata, en esta tierra suena armoniosa.
Los árboles crecen espigados
las uvas tienen dueño y nombre propio
para ser palpados, para ser tomados
sólo hace falta beber la misma copa.
Y en silencio, todos transitan la ruta marcada.
Preñada de sueños imposibles
coronada de favores perpetuos
en este tiempo flagrante de esfuerzo
sigo sin cambiar de senda
donde el propio sol brilla, pariendo
aunque todavía espero alumbrar
21. > Ir al ÍNDICE 26
al mediodía el primer parto.
Será, cuando la senda se quiebre imperiosa
para llenar este mundo conocido y torpe.
¿Cómo te digo lo que aguardo?
¿cómo te digo que te amo?
pertenezco sin duda a tu torpe extrañeza
para retornar de la muerte sucesiva del abismo
y de ahí, vuelvo
y de ahí, vuelve
a la búsqueda constante del tesoro de tus ojos
antes de saberte dormido en tu viaje sin despedida
antes que me dejes sin prodigio, ni razón
pensando.
22. > Ir al ÍNDICE 27
HAY TIEMPOS Y TIEMPOS
Hoy un tiempo para cada tiempo
hay tiempos y tiempos.
He visto pasar los días como pasan las olas
y lo vivido se une a la tarea pendiente.
Las marcas que deja la memoria
permanecen imborrables cual agenda
y la vida instalada está en tus pasos.
Pero hay un tiempo sin tiempo
cortada va la vida en pedazos.
Recuerdo cuando el aire era cálido
y la lluvia caía de vez en cuando.
Entonces asomaba mi cabeza
por el balcón de alas hermosas
grosuras y mañanas.
Entonces súbito se extinguía el aire
lo oscuro normalmente me buscaba
después aprendí a dejarme librar
tras el asomo liviano de lo hermoso, hay más.
Mientras el espacio se abre o se cierra
con señales de sucesos nunca fortuitos
que acontecen en el tiempo.
Sin negarme a mí misma transito la senda
y descubro la guía
la pisada que gravita el día, el claroscuro
sedienta te busco, como flor cuando amanece.
Tiempo que sujeta, que marca y transporta
como preguntar ¿quién eres o a dónde vas?
quizá puedas decir: mi nombre es libertad.
Vengo del lugar donde las leyes no caducan
soy un pedazo de cielo en un estuche gris y opaco
no te propongo seguirme
sino más bien mirar lo Alto
donde va la brisa suave en pos de su destino.
23. > Ir al ÍNDICE 28
Escucha la voz en calma del que amoroso aguarda
hasta que el tiempo borre su ruta y me lleve para siempre
hasta que en realidad
sepas, que simplemente me quedaré
donde vive lo invisible y cierto.
Firme recorro la morada secreta: estoy contigo
hasta el horizonte donde se pierde la memoria.
Hay un tiempo para cada tiempo
y hay un tiempo sin tiempo.
24. > Ir al ÍNDICE 29
IQUITOS
Me encontré contigo me encontré conmigo
en la melodía inmensa de tu verde lindo
fue un hallazgo predecible, grato
fue un pedazo de ayer trasladado al presente
el encuentro tenaz de la memoria cierta
y el latido fiero de esta mañana caliente
llena de fragancias conocidas de tu gente.
Aquí te miré de espaldas y te miré de frente
al fin y finalmente conocí tu bandera de paz
aquella de color celeste
que ondea la flama
cual popa o vuelo de Chisco que revolotea
ésta, nuestra mañana partida de calor
como la gente que canta y sonríe
y la Plaza 28 no duerme, se levanta a toda hora
y la Calle 2 de Mayo esperaba que llegue
a renovar su hora, porque la hora nueva llega.
Donde la mañana aletea y los pájaros cantan
donde se levanta la esperanza por encima del viento
trayendo el abrazo hermoso de la sangre
y temprano voy portadora del prodigio de tu entraña.
La brisa de muchos sueños acaricia mi piel
te descubro en el nombre, en el hombre de a pie
que surge de pronto tendido cara al cielo
para instalar la corriente fraterna del amor nuevo
de las manos amplias y dispuestas.
Y vagas en cada sonrisa sin nombre
todo habla de ti y de mí, del ayer
y la sangre que late en todas partes, aquí.
Hablemos sin voces el camino espera
la espesa bruma marchita
y la sombra del cálido amanecer tuyo
Iquitos nos mira y nos acaricia
es la aventura del encuentro total.
Vivificas el origen y el camino se repleta
cuando el alba levanta tu cálida sonrisa.
25. > Ir al ÍNDICE 30
Me encontré contigo me encontré conmigo
para seguir la senda
y el aroma generoso de tu verde lindo
perdura en la esencia de tu obra prodigiosa.
26. > Ir al ÍNDICE 31
LAS COSAS QUE TENGO
Las cosas que tengo, extrañamente
no son las que hubiera pensado tener.
Hay una larga lista
la sed, el hambre
amigos indisolubles de antes
del desfallecimiento extraño y múltiple
de historias y dolores antiguos
de sucesivas desesperanzas.
Lugar humano y común
donde muchos piden pero nadie escucha
y todos comen el mismo plato vacío
de amor negado.
Larga fila de espera
soledades, dolores y nadas.
En medio del rito feroz de la muerte
caminaba el frugal refugio.
Con paso sigiloso
sondeaba la casa improvisada
para parir gemidos largos y nadas.
Sino implacable cual condena brutal
de valles plagados de sombras.
Buscando saciarme quedé derribada
desnuda frente al espejo que invisible
avizoraba el alma cautiva y sedienta.
Si las aves se despiertan temprano
la noche en su sueño languidece.
El amanecer teje su hilo continuo
y tenue enmienda el camino.
Saciando voy la inquebrantable espera
vuelvo de la piel y la locura
vuelvo de la magia de tu engaño
y te miro de lejos
27. > Ir al ÍNDICE 32
y te miro de cerca
y no estás en mí para atraparme.
De la lejana orfandad
llega la pequeña niña
que perdida vagaba mis caminos.
Temblando en silencio nos miramos
para encontramos en un abrazo largo
que nos instala y nos funde
en la región celeste de la libertad.
Las cosas que tengo, extrañamente
no son las que creí necesitar.
28. > Ir al ÍNDICE 33
EL HOMBRE
¿Qué es el hombre?
Pienso.
Hablando están
mis manos de barro
cantando la canción conocida
que nadie escucha.
El hombre camina
en su afán
en sus ojos certeros
se vislumbra el dolor.
Y es nuestro barro
quien gime sin voz
a diario prosigue su delirio.
Nadie quiere mirar
el espejo sonoro
que muestra el ritmo zigzagueante
de nuestros propios engaños.
Transita el hombre
buscando limpiarse
usando sus mejores trajes.
Y la herencia
marchita anquilosada
clama en las arterias
tenebrosas del olvido.
He visto las manos alzadas
quebradas las rodillas.
Y la esencia, desplegada
busca
pero el hombre se cubre
de excusas dispuestas
de razones calzadas
una tras otra
mientras el fango engañoso
duerme su propio consuelo.
29. > Ir al ÍNDICE 34
Y la mente providente
espera, espera
y el espejo redondo observa
y la conciencia callada
despierta su sopor pausado
a los pies de quien guía
nadie calla sus múltiples miserias.
¿Qué es el hombre
para que de él te acuerdes?
30. > Ir al ÍNDICE 35
A TODOS LOS QUE SUEÑAN
Tengo la mala costumbre
de albergar aves extrañas
que llenas de color
brotan entre mis pechos.
A diario trato de amarte.
Y aquí dentro
viven los múltiples sueños
todos de distintos tamaños.
Pero vez tras vez
he quedado desnuda
desprovista de todo
lo que calzaban mis manos.
Es innumerable la cuenta
en que mis pequeños hijos
se fueron sin siquiera crecer.
Se van las palomas
que crié y alimenté tan asiduamente
de pronto dejándome despojada
con las manos inmensamente vacías.
Y he visto a cada hombre
tropezar la misma valla
que invisible ciñe la entereza y calza.
Seguimos aquí
aguardando el inesperado puntal
de equilibrado ahínco
que repare las paredes cuarteadas
y los muros marchitos
para que surjan aves
palomares y frutos.
Solo los pájaros
conocen la ruta de retorno, al alba
bajo el rocío matutino que lava
vuelve cada uno, con sangre distinta
celeste y grana.
31. > Ir al ÍNDICE 36
Bajo la consigna de lograr amalgamas
retornan
para inundar el lugar de los sueños rotos.
Ahí, mis pechos opacos alcanzan su brillo
restauran su fulgor mis manos sedientas.
Como un combatiente que llega del exilio
así, voy alcanzando el destino de mil sueños.
33. > Ir al ÍNDICE 40
Encuentro en el borde del camino
Sobre la poesía de Meriam Bendayán
Pepe Farfán
Si entendemos la poesía como el arte de decir lo
que es difícil decir, de llevar el lenguaje a los
límites de la semántica y de la expresividad; si la
poesía es la senda suprema de la connotación, de
saber decir mucho diciendo poco; de encerrar
sabiduría en una inexplicable economía de
palabras; Y, además, si la poesía implica este uso
del lenguaje pero con criterio artístico, dándole
cadencia a las palabras, expresando belleza en los
conceptos, en un esfuerzo por apelar a la mente y
mucho más al alma, Meriam Bendayán es
definitivamente una poeta.
En sus textos se agolpan los conceptos en un
desborde emocional continuo. Su poesía es
intimista y personal, y nos convierte por momentos
en cómplices privilegiados de sus aventuras, de sus
desencuentros... pero sobretodo de sus
encuentros.
Porque el tema que corre como hilo conductor en
sus versos es el encuentro, un encuentro que se da
“en un mundo inhóspito”, un encuentro con el
otro:
Un encuentro con el padre (“caminaré al abrigo de
tu recuerdo, a la brisa de tus sueños reflejados
aquí”). Un encuentro con la hermana (“cesa de
llorar, ven aunque todo el resto llueva en
derredor, ven”). Un encuentro con una niña
(“Esperando estoy por ti, hermosa niña de los ojos
grandes”). Un encuentro con el amado (“no ha
34. > Ir al ÍNDICE 41
sido fácil, no digo eso… ha sido un ejercicio
constante, un aprender y desaprender…, un
mirarte, tantas veces, tantas”).
Pero, sobre todo, un encuentro con el
trascendente y sus ineluctables consecuencias en
el ser entero. Un encuentro que no llega fácil, que
no brota espontáneo del camino sino que tiene su
precio y su proceso. Comienza sutil, avanza con
paso lento pero firme y en su momento más
intenso llega incluso a “instalarse con derecho y
sin uso de mi voluntad”. Y entonces se hace
conquista.
Pero no una conquista que mata sino una que da
vida. Una conquista que produce la mudanza, la
metamorfosis del alma, que hace “Libre de la
soledad, el miedo y el frio” a quien la
experimenta. Tanto que al final puede exclamar:
“Y de ayer, nada”.
Y es por eso que su poesía está cargada de
optimismo, de la búsqueda del “país de lo
esperado… para ser, al fin y al cabo para ser”.
Pero no de optimismo vacío nacido de la negación
del dolor, sino del optimismo que brota de la
experiencia cotidiana con la bienaventuranza y la
redención, del caminar diario con la seguridad de
una compañía superior, de un amado supremo.
Porque el amado llega dejando su sello,
marcándolo todo y deslumbrando tanto que el
verso declara: “estoy frente a Tu inimaginable
belleza”. Pero no es un encuentro egoísta que se
agote en el rictus íntimo de las dos almas. Es más
bien un encuentro extensivo, que abre las puertas
a la reconciliación general, que se brinda a todos.
Un encuentro que se convierte en una invitación:
“que lo caminado sea lavado, que pase lo ido y
35. > Ir al ÍNDICE 42
todo lo vivido, que corra el agua de vida para ti”…
“tan sólo resucita, hazlo pronto, hazlo ahora”.
Y es por eso que la poesía de Meriam no es sólo
estética o recreativa. Es básicamente una
invitación a experimentar lo que ella ha
encontrado. Es una invitación a ponerse “al borde
del camino” para encontrarse con el sublime, con
el celestial, a vivir la plenitud del cielo y a
comenzar cada uno para sí su propia mudanza.
Poeta. Escritor. Periodista. Autor de “Latidos”:
http://www.l-a-t-i-d-o-s.blogspot.com
Lima, 27 de agosto de 2009
36. > Ir al ÍNDICE 43
ESCAPO
Cuando la noche llega
cuando llega la calma
todos duermen
aparentemente duerme también
todo lo que me persigue
duermes al fin (eso espero).
Y sutilmente
como quien camina de puntas
levanto mis ropas
cojo mis pocas pertenencias
una bolsa de paja que contiene
el oro soñado
el azul de una mirada
un par de manos hacedoras
y un corazón nuevo
salgo a buscar lo no encontrado
salgo a buscar lo verdadero
escapo.
Acaso así
obtenga la mirada que tiña
de azul esta mañana grisácea
acaso, así
escapando encuentre al fin
el país de lo esperado
y tus milagrosas manos
37. > Ir al ÍNDICE 44
y mi bolsa de paja
hallen la suerte de verterse.
Esperando están
el oro soñado
el azul de una mirada
un par de manos hacedoras
y un corazón nuevo.
Mientras en derredor
todos duermen.
Mientras pueda
saldré caminando despacio
saldré casi desnuda
sólo porto una bolsa de paja
es todo lo que tengo
todo.
Escapo silenciosa
para ser
al fin y al cabo para ser
la hora del parto está cerca
escapo, escapo.
38. > Ir al ÍNDICE 45
LIBRE
Tengo varias cosas en las manos
pero también en los ojos
más aún en las entrañas.
Voy pesando mi propio camino
el recuento sagrado de todas las cosas
y sin querer miro el espejo difuso, raro
donde aparece el pasado, todo junto.
Pasan en un instante frente a mis ojos
escena tras escena
sí pudiera amasarlas en mis manos
tendría de un lado lágrimas y del otro vida.
Luego sigue
el presente -aún más difícil-
ahí veo a una mujer hermosa, plena
llena de esperanza
rica para dar
sus ojos son tristes
su mirada como un mar en calma
su piel suave
sus pasos firmes
ella está frente a la puerta de la vida
debe pasar, morir y vivir al mismo tiempo.
Cuando vi el amanecer hoy
supe que sí lo lograría.
Debo tomar la copa amarga de la muerte
que trae vida y esperanza.
39. > Ir al ÍNDICE 46
En un rincón el oso con piel de tigre
mira, trata, mide y perece al mismo tiempo.
Dentro de mi corazón
una luz divina guía el cambio.
Hace poco que lo conozco
hace mucho que está ahí
descubrí con cabal asombro
cómo relame sus maldades
cómo busca atraparme
bajo sus formas inicuas
basado en el calor de su hermoso pelaje
saca las uñas, afila los dientes
esgrime con lujuria
la causa y razón de su grandeza.
Pero clamé
cuando vi el amanecer hoy
supe que sí lo lograría
Y mirando el espejo difuso, raro
pude vislumbrar el futuro apacible
de las canas y el cansancio
que soportan los años
trasladados en paciencia y esperanza.
Anhelo mujer
ver tus ojos profundos
bañados en miel
verte a plenitud
libre del captor de tu alma
40. > Ir al ÍNDICE 47
de la soledad y el miedo
y de cada tristeza que vaga perdida
en el mundo del anhelo
libre de ti y de mí.
Libre para vivir
después de seguir tu muerte
después de morir
por fin.
Libre para amarte
cuando vi el amanecer hoy
supe que sí lo lograría.
41. > Ir al ÍNDICE 48
LLEGÓ MI AMADO
Pensando estoy
¿cómo será encontrarte?
¡a totalidad encontrarte!
pensando estoy
¿cómo será amarte?
¡al fin amarte!
Pensando en lo que pienso
muero
lentamente y no me quejo
muero
al quehacer y a lo esperado.
Muero de amor por ti y muero.
Llegaste, como llega la brisa
apacible marcándolo todo
con sello indeleble.
Sólo fue un día cualquiera
que apenas recuerdo
y lo marcaste todo
con tu huella sin color.
Desde entonces
he tratado de buscar soluciones
he bajado todos mis sueños
para meterte en mí y no lo contrario.
Desesperado quehacer.
Y cuando el oso de presa me perseguía
42. > Ir al ÍNDICE 49
ardía tu presencia como cerco de fuego
y cuando cautiva lo buscaba
tu dolor asomaba pausado y fiero.
De caminar caminos y correr carreras
de pararme a la vereda levantando preguntas
hoy estoy, conquistada
a la fuerza y a la mala pero conquistada
como quien derroca una ciudad sitiada
como quien va destruyendo cada muro
hasta llegar al meollo del hueso y del corazón.
Así estoy frente a tu inimaginable belleza
como vencida de tantas glorias
descubriendo la cumbre al bordear el alba
a punto simplemente de ser poseída.
Y tu fragancia llega como la aurora
después de la noche oscura
cuando al fin clarea el alba y trae tu presencia.
Y de ayer, nada
y las fieras del campo
desdentadas
como si nunca hubiese pasado por aquí
la densa oscuridad y la nada
es que llegó mi amado
y yo su novia, su dulce niña.
La recámara está lista
arde mi pecho
gime mi vientre
43. > Ir al ÍNDICE 50
mi lecho aguarda dispuesto.
Habitaré a tu abrigo, Amado mío
44. > Ir al ÍNDICE 51
MIS PIES
Todo el tiempo que use mis pies
debo saber que sólo será
para ir abriendo surcos
abriendo brechas entre el cielo y tú.
Caminaré
sin morar en esta tierra
sin volver atrás
sin pisar el mismo lodo.
Y conozco tu mirada
la sobria dirección de tus engaños
¡huele mal!
Y sigo caminando
siempre sin mirar atrás
en mi ruta no hay recodos
tampoco hay estaciones
no se detiene el viento mientras gira
ni deja de andar el sol por una nube.
No me detendré.
Seguiré abriendo surcos
entre el cielo y tú.
Mientras camino
a veces mis pies se duelen
otras, quiero correr
45. > Ir al ÍNDICE 52
y tenderme en la arena infinita de tu ser
finalmente cedo, quito, pongo
y subo a tu morada para quedarme contigo
Porque no se detiene el día
y no cesa la lluvia cuando riega
no me detendré
porque abierto está
el río entre el cielo y tú.
Todo el tiempo que use mis pies.
46. > Ir al ÍNDICE 53
CUAL TAPIZ
Fueron arduos los caminos
desplegados en constantes claroscuro
fueron vastos los sueños
que componían mares para buscar estrellas
y mudas poblaban mi piel cual emisarias
que vagaban en pos de lo perdido.
Sino caduco, vigente y sin embargo
necesario para al fin llegar.
Cuando tronó su voz
emergieron los torrentes de mil aguas
para quedar desnuda y despoblada
por entero descubierta
la absurda curvatura del yo
y el eje desgastado de mi piel.
La verdad saturada
simple como la lluvia
hace brotar la hierba de la tierra.
Como mudar escamas marchitas
y volver de la muerte
para recobrar la vida.
Aprendida la lección
encuentro silenciosa cada razón perdida
se fecunda la entrega
y mis pasos van regando este sendero.
Carente de cita, vencida
47. > Ir al ÍNDICE 54
he llegado al lugar deseado
crece la tarea en mi pecho
iluminándolo todo
aunque no brilla igual ilumina.
Forjada bajo el dosel de tu arco
me cubriste cual tapiz
para vivir, amándote.
48. > Ir al ÍNDICE 55
MUDANZA
Aquí, al borde del camino, pienso
en todo lo que significa este lugar
un mundo inhóspito, impensado
una respuesta pronta, exacta
la escuela precisa a cada paso.
Aquí, sentada, instalaron con derecho
y sin uso de mi voluntad
el perfecto capullo en rededor tejido
para mudar sin ninguna iniciativa
criterios caducos y engaños.
Porque hubo un tiempo en que amaba
únicamente tus ojos oscuros, bellos
y sin saberlo, moría
cual frágil osadía de codicias absurdas
era como un hueco, lóbrego, vacío
mis plumas grandes y hermosas
desplegaban el rictus pero igual, moría.
Mas ahora el lenguaje del agua cambia
se transforma en pronto río, caudaloso
que prodigioso camina mis venas invisibles
y todo criterio finamente esculpido, cae
también se rinde lo pasado, cae
todo perece perdido, estando aquí
nada tiene referente con nada
la inédita respuesta: estar aquí.
Realidad motora de cada día
49. > Ir al ÍNDICE 56
y el fino arte de mis dedos cede al impulso
no perezco, escribo y vivo.
Mi vestido ágilmente fue cambiado en una noche
quizá de verano azul pero más exactamente
de frío agosto como hoy, que llueve.
He pasado del húmedo adobe y la pared fría
al tibio perfume que cede lentamente a tu paso
aun queda una alforja pequeña de cosas guardadas
que voy cambiando poco a poco, cual viejo trueque.
La plegaria contraria y la sorda morisqueta persisten
cual inútil desvarío, corazón caduco muerto
te cambio por calor radiante, por espera
sin embargo no cambiaría la camiseta morada
ni mi ser azul, esas son mis tareas diarias.
Aquí, junto a todos los que dicen que sonríen
donde todos aman y nadie se entera
donde la ficción es real melodía de mentiras y cizañas.
Aquí, cambiada, vestida
en plena mudanza
lentamente mitigo todo lo viejo y pesado
con tibia y delicada sutileza, moveré mi densa cobija
para ser irradiada por tu luz admirable
para vivir plena de amores
de todo lo nuevo y de sonrisas.
He llegado como quien arriba a su propia morada
mudanza
para vivir sin un lugar
50. > Ir al ÍNDICE 57
bajo el lenguaje del agua prodigiosa
que cambia y se transforma en pronto río caudaloso.
Colmado está mi pecho y camino para tocarte.
51. > Ir al ÍNDICE 58
SIN TI
A veces cuando llueve me llega tu presencia
como si de pronto un ave sobrevolara mi ser
en busca de su nido
llega tu sonrisa cálida
tus amplias manos
tu abrazo dispuesto.
A veces cuando llueve
llueven mis ojos por ti.
Solo a veces,
cuando la añoranza gime su propia canción
y trae tus cantos de ayer, con el aire de hoy
tus tangos y tus valses
pugnando por salir como tus sueños
tu selva y su aroma lejano sobrevuelan mi ser.
Me dejaste colmada de sueños
caminando la esperanza de cumplirlos
uno a uno.
Me dejaste tu estrella, la que no está rota
tu reloj sin tiempo
un pueblo y un destino por extender
por componer mañanas.
Me dejaste tu bitácora de vuelo con mil odiseas
y mamá que como siempre dice que no llora.
52. > Ir al ÍNDICE 59
Sin ti
caminaré bajo el cielo de Abraham
mi discurso de fe.
Al abrigo de tu recuerdo
con la brisa de tus sueños reflejados aquí
iré a la plenitud de la estatura plena
para tomar las armas y asaltar victorias.
Surcando el sendero impalpable
con quehaceres diversos abro trocha
para desarraigar y plantar
como quien toca el lugar esperado,
caminos nuevos.
Por la gracia del D-os de nuestro pueblo
y por ti, papá Samuel.
A veces cuando llueve
llueven mis ojos por ti.
53. > Ir al ÍNDICE 60
POUR MARTHA
Quisiera regresar
en un viaje imprevisto
sin agenda, sin boleto y sin ticket.
Quisiera llegar
al lugar donde yacen los sueños
como si penetrase ayeres
como si extrajera tus pendientes
para plantarlos aquí.
Y mirando mejor en tus ojos hermosos
vuelve en ellos todo lo pasado
quereres plagados de afanes
de sudores y labranzas en nosotras
todo, persiste en tus ojos hermosos
que no cesan de llorar.
Quisiera la fuerza para esculpir
lo mejor en tus manos y que sea gestado
para detenernos juntas a cada paso
sólo para saborear más milagros.
Quisiera que de pronto
te fuere arrancado el telúrico collar
que sujeta tu cuello: combate y tormenta
soledades y nadas, lo de antes.
Hermana, un canto temprano
una espera larga
y aquella escalera roja vestida de verde
como asida a la esperanza.
54. > Ir al ÍNDICE 61
Aun hoy
todo permanece en tus ojos hermosos
cesa de llorar, ven
aunque llueva alrededor, ven.
Hermana, siempre tú la más hermosa.
Quisiera, así, de pronto
extender mis manos y tocarte
que lo caminado sea lavado
que pase lo ido y todo lo vivido
que corra el agua de vida para ti
y discurra lo aprendido, pronto.
Ahora, por pura gracia
vayamos lavadas y cambiadas
la mesa está servida.
Con zapatos nuevos andaremos ayeres
para recomponer y labrar el Pan Nuestro
para conocer la verdad y ser libres.
55. > Ir al ÍNDICE 62
HERMOSA NIÑA DE LOS OJOS GRANDES
Hermosa niña de los ojos grandes
expresivos y hermosos.
Es muy difícil ver asomarse
el dolor y la lluvia incesante
en tus ojos hermosos.
Es muy difícil tratar de hacer algo.
Si pudiera
ay, si yo pudiera...
En un segundo
te pondría en el mejor lugar
ahí donde el día nace despacio
cuando el cielo clarea y todo está en calma
cuando nadie habla, ni los pájaros
ahí te pondría como la otra noche
para que te amanezca el alma y el corazón
de una vez y por entero
para que sepas, creas y pienses
que los momentos son solo eso: momentos
y que lo real está por dentro
por dentro es donde nace la aurora.
Ahí dentro se produce el cambio
sólo anhela
pide, busca
pero en ti y nunca fuera.
En ti está la vida y no la muerte
56. > Ir al ÍNDICE 63
la esperanza y el mañana.
Ahí está mi alegría, niña hermosa.
Si pudiera
ay, si yo pudiera...
Todo está en ti
(ruego se produzca el cambio)
que amanezca mañana, mi hermosa niña
pero que al amanecer tus ojos sonrían como antes
que la lluvia se espante y sepas que lo oscuro discurre
y la luz llega como el día sin presagio
sólo anhela
pide, busca
pero en ti y nunca fuera.
No vuelvas a llegar llena de polvo
en las noches rosadas
no vuelvas a morir cuando te llama la vida.
Tan sólo aprende
descúbrete a ti misma
tan sólo, tan sólo resucita.
Descubrirás la indescifrable fuerza
que vive en el fondo de tus ojos hermosos.
Esperando estoy por ti
hermosa niña de los ojos grandes.
Esperando que amanezca para ti
mi amada niña, mi reina preciosa
compañera y amiga
57. > Ir al ÍNDICE 64
hermana y tesoro
desde mi corazón insondable
tú la vida.
Hermosa niña de los ojos grandes
58. > Ir al ÍNDICE 65
TE AMO
Te amo
cuando te miro ausente
cuando no espero nada
te amo
sin aprobación o recompensa
sin llantos
simplemente, sé que te amo.
No ha sido fácil
no digo eso ha sido un ejercicio constante
un aprender y desaprender
un mirarte, tantas veces, tantas.
Como quien va tiñendo un cielo nuevo
poco a poco
como muriendo y naciendo
al mismo tiempo
simplemente, sé que te amo.
No hay mucha explicación posible
te amo para siempre
te amo.
Cuando extiendo mis manos
cuando te miro en silencio
cuando simplemente estás
cuando especialmente cedo
simplemente, sé que te amo
Sin prisiones, ni posesiones
sin territorios
59. > Ir al ÍNDICE 66
sin conquistas, ni temores.
Te amo
no me debes nada
nada espero
nada pido, ya no hay ilusiones
mis ojos no divagan
con firmeza estoy a tu lado
como una roca tendida bajo el cielo
como quien aguarda en silencio
una caricia divina que lo restaure todo.
Simplemente, sé que te amo
con la única fuerza que poseo
como un torrente
que trasmuta y cambia
que lava y redime
las muchas realidades idas
te amo
cara al sol
con tu nombre y el mío
con nosotros, lo que somos:
uno solo.
Simplemente, sé que te amo.
60. 67
La guerra invisible,
libro de poesía de Meriam Bendayán,
edición digital julio de 2013
editado por
Social Media & Comunicaciones
61. 68
Para que un poeta sea bueno, deberá establecer un puente emotivo-
espiritual entre él y el lector. Esto será suficiente. Será bueno
porque habrá llegado al alma de quien lo lee. Que solo alcance a la
mente no es suficiente, Meriam Bendayán llega. Sus sentires
conmueven, sacuden, despiertan el apetito por pan del cielo,
representado en este caso por sus poemas.
Eugenio Orellana
Presidente ALEC Internacional
Se trata de un canto a la vida llana, es la poética de los actos de la
cotidianidad, se recuenta aquí los gestos comunes a todos los
habitantes del planeta. Los poemas de Meriam Bendayán recorren
las praderas terrenas de la biografía de todo el mundo, pero con
exaltaciones y accidentes que corresponden a sus particulares
anhelos y necesidades respecto del amor y de la confluencia en la
divinidad que es el todo y donde soledad y dolor se extinguen.
¿Será La guerra invisible aquella que libran los ángeles? La lectura de
este poema rio aromado de celeste, me ha persuadido, en efecto, que se
trata de la batalla de querubines y serafines pero de carne y hueso y
armados de vicios y virtudes en pos de la liberación.
Julio Heredia